Reclutamiento: Servicio militar obligatorio y sus impactos globales

Por Fouad Sabry

¿Qué es el servicio militar obligatorio?

El servicio militar obligatorio es el alistamiento de personas por mandato estatal en un servicio nacional, principalmente un servicio militar. El servicio militar obligatorio se remonta a la antigüedad y continúa en algunos países hasta el día de hoy con varios nombres. El moderno sistema de reclutamiento nacional casi universal para hombres jóvenes se remonta a la Revolución Francesa en la década de 1790, donde se convirtió en la base de un ejército muy grande y poderoso. Posteriormente, la mayoría de las naciones europeas copiaron el sistema en tiempos de paz, de modo que los hombres de cierta edad servirían de 1 a 8 años en servicio activo y luego serían transferidos a la fuerza de reserva.

Cómo se beneficiará

(I) Insights y validaciones sobre los siguientes temas:

Capítulo 1: Servicio militar obligatorio

Capítulo 2: Soldado

Capítulo 3: Objetor de conciencia

Capítulo 4: Sistema de servicio selectivo

Capítulo 5: Servicio militar obligatorio en Australia

Capítulo 6: Servicio militar

Capítulo 7: Servicio militar obligatorio en los Estados Unidos

Capítulo 8: Servicio militar obligatorio en Alemania

Capítulo 9: Servicio militar obligatorio en Grecia

Capítulo 10: Reservista

(II) Responder las principales preguntas del público sobre el servicio militar obligatorio.

Para quién es este libro

Profesionales, estudiantes de pregrado y posgrado, entusiastas, aficionados, y aquellos que quieran ir más allá del conocimiento o información básica para cualquier tipo de Conscripción.

 

• Idioma: Español
• Editorial: Mil Millones De Conocimientos [Spanish]
• Fecha de lanzamiento: 19 jun 2024

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Capítulo 1: Conscripción

En los Estados Unidos, el término reclutamiento se refiere al alistamiento obligatorio por el estado de personas en un servicio nacional, más comúnmente un deber militar. En otros países, se utiliza el término borrador. El servicio militar obligatorio ha existido desde la antigüedad, y en ciertas naciones todavía se practica hasta el día de hoy bajo una variedad de títulos diferentes. Fue durante la Revolución Francesa en la década de 1790 cuando se estableció el actual sistema de reclutamiento nacional casi universal para los hombres jóvenes. Este sistema sirvió de base para un ejército que era sumamente vasto y poderoso. En tiempos de paz, la mayoría de las naciones europeas finalmente adoptaron el sistema, que estipulaba que los hombres de una edad específica servirían entre uno y ocho años de servicio activo antes de pasar a la fuerza de reserva.

El servicio militar obligatorio es controvertido por una serie de razones, incluida la objeción de conciencia a los compromisos militares por motivos religiosos o filosóficos; la objeción política, por ejemplo, al servicio de un gobierno que no le gusta o a una guerra impopular; el sexismo, en el sentido de que históricamente los hombres han sido objeto del reclutamiento en la mayoría de los casos; y la objeción ideológica, por ejemplo, a una supuesta violación de los derechos individuales. Es posible que las personas que son reclutadas eviten servir a su país, en algunos casos, huyendo del país y buscando asilo en otra nación. Algunos sistemas de selección están diseñados para adaptarse a estas actitudes, ofreciendo tareas alternativas fuera de las tareas de operaciones de combate o incluso fuera de las fuerzas armadas. Por ejemplo, el siviilipalvelus (servicio civil alternativo) de Finlandia y el Zivildienst (servicio comunitario obligatorio) de Austria, Alemania y Suiza son ejemplos de estos sistemas de selección. Hay una serie de naciones que obligan a los soldados varones a servir no sólo en las fuerzas armadas sino también en organizaciones paramilitares. Estas agencias se dedican a proporcionar únicamente servicios nacionales similares a los de la policía, como tropas internas, guardias fronterizos o responsabilidades de rescate no relacionadas con el combate, como la defensa civil.

Muchos estados han dejado de utilizar la práctica de reclutar a sus ciudadanos a partir del año 2023 y, en cambio, confían en tropas profesionales compuestas por voluntarios. Por otra parte, la capacidad de contar con un acuerdo de esa índole depende de un cierto grado de previsibilidad con respecto a las necesidades de la guerra, así como a la cantidad de hostilidades que se están produciendo. A pesar de que muchos Estados han eliminado el servicio militar obligatorio, mantienen la autoridad para restablecerlo en tiempos de crisis o conflicto.

Ilkum fue el nombre del sistema de reclutamiento que fue utilizado por el Imperio Babilónico durante la época de Hammurabi (1791-1750 a. C.). Las personas que estaban calificadas para el programa estaban obligadas a servir en el ejército real durante tiempos de conflicto internacional. En cambio, se vieron obligados a dar trabajo para otras tareas del Estado para que el Estado pudiera seguir funcionando en tiempos de paz. A las personas que estaban sujetas a este servicio se les otorgaba el derecho a poseer tierras a cambio de su servicio. Posiblemente, este derecho no se refería a la propiedad de la tierra en general, sino más bien a la tierra particular que era proporcionada por el Estado.

Las leyes del feudalismo que estaban vigentes en el continente europeo, los campesinos estaban obligados a adherirse a un sistema que fue impuesto por los terratenientes durante todo el período medieval, las personas que son hombres libres, plebeyos y nobles y tienen entre 15 y 60 años y viven en áreas rurales o ubicaciones urbanas, eran llamados a hacer el servicio militar siempre que fuera necesario hacerlo por el monarca o el señor local,  transportando las armas y armaduras de acuerdo con su nivel de ingresos disponibles.

Las levas luchaban como soldados de infantería en la batalla, sargentos y hombres de armas bajo los superiores locales nombrados por el rey o el señor local, como el arrière-ban en Francia.

Arrière-ban denotaba una leva general, una situación en la que el rey de Francia (o el condestable y los mariscales) emitía un llamamiento a las armas a todos los varones sanos que vivían en el Reino de Francia y que tenían entre 15 y 60 años.

Los hombres eran convocados por el alguacil (o el sénéchal en el sur).

Los alguaciles eran administradores militares y políticos que eran nombrados por el rey para supervisar y gobernar una determinada región dentro de una provincia de acuerdo con las directivas e instrucciones del rey.

Los individuos que eran convocados de esta manera eran convocados por el lugarteniente, que era el representante del rey y el gobernador militar sobre toda una provincia que incluía una serie de bailías, castellanías y senescalties.

Todos los hombres, desde los nobles más ricos hasta los plebeyos más pobres, eran convocados bajo el arrière-ban y se suponía que debían presentarse ante el rey o sus funcionarios.

Algunos autores contemporáneos afirman que las únicas personas a las que se les permitía servir en el ejército en Europa eran los nobles menores terratenientes. Estos thegns eran la nobleza terrateniente de la época, y se les obligaba a servir durante un número predeterminado de días cada año mientras estaban armados con sus propias armaduras y armas. Es una fantasía ridícula considerar al fyrd como un predecesor de un ejército nacional moderno que está compuesto por todos los rangos de la sociedad, según el historiador David Sturdy, quien ha aconsejado no hacer tal comparación:

La extraña idea de que los campesinos y los pequeños agricultores se unieron para formar un ejército nacional o fyrd es una creencia antigua persistente que fue concebida por los anticuarios a finales del siglo XVIII o principios del XIX para justificar el servicio militar obligatorio universal.

De acuerdo con una sentencia emitida por el Shogun en 1393, los prestamistas en el Japón feudal estaban exentos del pago de impuestos religiosos o militares, un pago anual de impuestos a cambio de.

La Guerra de Ōnin debilitó al shogun y se impusieron de nuevo gravámenes a los prestamistas.

La gente común estaba sujeta a este señorío excesivo, que era arbitrario e impredecible.

A pesar de que los prestamistas no estaban en una mala posición financiera, varios señores los explotaron para obtener ganancias financieras.

Los gravámenes se volvieron esenciales para la existencia continua del señor supremo como clase gobernante, lo que permitía al gobernante imponer gravámenes a su propia discreción.

El impuesto tansen sobre las tierras agrícolas era uno de estos cargos, y se utilizaba para cubrir los gastos ceremoniales.

Para financiar la reconstrucción del Gran Santuario de Ise, se impuso un impuesto Yakubu takumai sobre todas las tierras, Además, se impuso un impuesto munabechisen sobre todas y cada una de las casas.

En ese momento, los plebeyos de Kioto pudieron obtener tierras mediante el uso de la usura, y en el año 1422, el shogun amenazó con reclamar las tierras de aquellos plebeyos que no habían pagado sus impuestos.

A partir de las décadas de 820 y 830, el califa abasí al-Mu'tasim estableció el cuerpo de soldados-esclavos turcos, también conocidos como ghulams o mamelucos. Este fue el comienzo del uso generalizado del sistema de esclavos militares en el Medio Oriente. Las tropas turcas rápidamente llegaron a dominar el gobierno, estableciendo un patrón en todo el mundo islámico de una clase militar gobernante que con frecuencia estaba dividida por etnia, cultura e incluso religión por la mayoría de la población. Este paradigma alcanzó su apogeo en los mamelucos de Egipto y el cuerpo de jenízaros del Imperio Otomano, ambas instituciones que duraron hasta principios del siglo XIX.

A mediados del siglo XIV, Murad I, el sultán del Imperio Otomano, cultivó un ejército personal que le era leal, con un ejército de esclavos llamado Kapıkulu.

El nuevo ejército se construyó reclutando a niños cristianos de territorios que habían sido capturados recientemente, en particular de regiones geográficamente remotas de su reino, en un sistema conocido como devşirme (traducido como reunión o conversión).

Los niños que estaban cautivos eran obligados a convertirse al Islam.

Durante un período de varios años, los sultanes proporcionaron entrenamiento a los jóvenes.

Se enseñaban habilidades guerreras avanzadas a aquellos individuos que demostraban un potencial excepcional en el ámbito de las habilidades de combate, para ser colocados al servicio personal del Sultán, así como para convertirse en miembros de los jenízaros, la rama de élite de los Kapıkulu.

Hubo una serie de comandantes militares notables que sirvieron al Imperio Otomano, además de la mayoría de los administradores y funcionarios imperiales en los niveles más altos del Imperio, como Pargalı İbrahim Pasha y Sokollu Mehmet Paşa, este método se utilizó para reclutarlos.

Fueron los mamelucos de Egipto a lo largo de la Edad Media los que fueron comparables a los jenízaros en términos de su génesis y los medios por los que se desarrollaron. En la mayoría de los casos, los mamelucos eran niños no musulmanes de Irán y Turquía que habían sido secuestrados o comprados como esclavos en las costas de la región de Berbería. Con el fin de preparar a los jóvenes y niños para convertirse en soldados islámicos que sirvieron a los califas musulmanes y a los sultanes ayubíes durante la Edad Media, los egipcios los integraron y los entrenaron durante el transcurso de sus vidas. En Bagdad, alrededor del siglo IX, los primeros mamelucos fueron empleados por los califas abasíes. Evolucionaron hasta convertirse en una poderosa casta militar a lo largo del tiempo. Varias veces lograron hacerse con el poder; por ejemplo, gobernaron Egipto desde el año 1250 hasta el año 1517.

A partir del año 1250, la dinastía Bahri, que tenía sus raíces en los Kipchaks, había estado en control de Egipto. Los esclavos del Cáucaso formaban un cuerpo de tropas de élite y servían en el ejército. Fueron traídos del Cáucaso. La dinastía Burgi se estableció como resultado de su eventual levantamiento en Egipto. Los mamelucos fueron capaces de conquistar con éxito las fortalezas cruzadas cristianas que se encontraban en Tierra Santa gracias a su destreza superior en la lucha, sus enormes ejércitos islámicos y su abrumador número. Cuando se trataba de impedir que el Ilkanato mongol de Persia e Irak entrara en Egipto, los mamelucos fueron la organización de defensa más exitosa.

El servicio militar obligatorio moderno, el alistamiento militar masivo de ciudadanos nacionales (levée en masse), concebido en la época de la Revolución Francesa con el propósito de mejorar la capacidad de la República para defenderse de los asaltos de los monarcas europeos.

Esta ley, que fue aprobada el 5 de septiembre de 1798, recibió su nombre del diputado Jean-Baptiste Jourdan, cuyo primer artículo decía: Cualquier francés es un soldado y se debe a la defensa de la nación. Permitió la creación de la Grande Armée, como Napoleón Bonaparte se refería a la nación como la nación en armas, los ejércitos profesionales europeos, que con frecuencia contaban con apenas unas pocas decenas de miles, fueron derrotados por esto.

A partir del año 1800 y hasta el año 1813, este método se utilizó para reclutar a más de 2,6 millones de hombres en el ejército francés.

A principios del siglo XIX, la cantidad de tiempo que se les debía a los siervos dentro del Imperio Ruso para servir en el ejército se especificaba en 25 años. En 1834, el límite de edad se redujo a veinte años. Cada uno de los reclutas debía tener al menos 17 años de edad y no más de 35 años.

En aras de satisfacer las necesidades de la nación durante las guerras mundiales, se amplió el rango de edad que era elegible para el servicio militar obligatorio. El Sistema de Servicio Selectivo de los Estados Unidos reclutó por primera vez a hombres para la Primera Guerra Mundial en el rango de edad de 21 a 30 años. Sin embargo, en 1918, los requisitos de elegibilidad se modificaron para incluir a los hombres en el rango de edad de 18 a 45 años. ".

Con motivo de la Gran Guerra Patria, el Ejército Rojo reclutó los servicios de aproximadamente treinta millones de hombres.

Un número significativo de libertarios en los Estados Unidos se oponen a la práctica del servicio militar obligatorio y abogan por la eliminación del Sistema de Servicio Selectivo. Sostienen que el acto de imponer a personas en las fuerzas armadas constituye servidumbre involuntaria.

Es posible argumentar que, teniendo en cuenta la relación costo-beneficio, la práctica del servicio militar obligatorio en tiempos de paz no vale la pena.

Pensaba que era responsabilidad y privilegio de cada ciudadano comprometerse en la defensa de toda la sociedad, y que era un signo de decadencia moral dejar el negocio en manos de profesionales. Jean-Jacques Rousseau abogó ferozmente contra los ejércitos profesionales porque consideraba que era un signo de decadencia moral dejar el negocio a profesionales capacitados. La evolución de la República Romana, que llegó a su fin al mismo tiempo que el ejército romano pasó de ser un ejército reclutado a una fuerza profesional, sirvió como base para su creencia.

Los militares británicos creen que en una fuerza profesional, una compañía que es enviada para el servicio activo en el mantenimiento de la paz corresponde a tres compañías que no están activas en el país. El presupuesto de las fuerzas armadas se utiliza para pagar los salarios de cada individuo. Por otro lado, los voluntarios de una reserva entrenada continuarán trabajando en su empleo civil mientras no estén desplegados actualmente.

Comparativamente, la práctica del servicio militar obligatorio entre la población masculina ha sido omnipresente a lo largo de la historia; Sin embargo, a lo largo de la historia, las mujeres solo han sido reclutadas para unirse a las fuerzas armadas en unos pocos países. De acuerdo con el punto de vista convencional, servir en el ejército es tanto una prueba de la hombría de uno como un rito de paso de la etapa de la niñez a la de la edad adulta. Recientemente, este punto de vista ha sido cuestionado con el argumento de que viola la igualdad de género. Como resultado, varias naciones, en particular las de Europa, han ampliado sus requisitos de servicio militar obligatorio para incluir a las mujeres.

Bolivia y Suecia son dos ejemplos de países que participan activamente en la práctica de reclutar mujeres para servir en las fuerzas armadas. A partir de 1941, las mujeres fueron incluidas en el ámbito del servicio militar obligatorio en el Reino Unido durante la Segunda Guerra Mundial. Sin embargo, debido al hecho de que todas las mujeres que tenían hijos que dependían de ellas estaban exentas del requisito, y un gran número de mujeres eran dejadas en trabajos privados como la enseñanza o la enfermería, el número de mujeres que eran reclutadas era relativamente bajo.

Se consideran objetores de conciencia las personas cuyas opiniones personales son incompatibles con el deber militar o, más comúnmente, con cualquier función en las fuerzas armadas.

Los ciudadanos varones de la República de Austria que tengan entre 17 y 50 años de edad, y los especialistas que tengan entre 65 y 65 años, deben servir en el ejército. Por otro lado, además de la movilización, el servicio militar obligatorio requiere un entrenamiento militar básico en el Bundesheer que dura un período de seis meses y puede ser completado por personas de hasta 35 años. Para aquellos que decidan no participar en este programa, se les exige que realicen servicio comunitario durante un período de nueve meses.

Desde 1994, Bélgica no tiene servicio militar obligatorio. En febrero de 1995, los últimos reclutas fueron dados de baja del servicio activo. Incluso en el año 2019, todavía hay un pequeño porcentaje de residentes belgas que están a favor del concepto de restablecer el servicio militar obligatorio tanto para sus miembros masculinos como femeninos.

En Bulgaria, los varones mayores de 18 años estaban obligados a servir en el ejército hasta el año 2008, cuando se abolió la práctica.

En Camboya no ha habido ningún servicio militar obligatorio desde