El baile más cálido del mundo

Por Violet Pollux

-A veces, el mejor regalo que puedes dar es recibir -explicó Óliver Muñoz-. Estar dispuesto a recibir algo, a aceptar lo que otros te ofrecen. Usualmente no te abres, no hablas sobre ti mismo. Y hoy lo hiciste, me regalaste eso.

-Bueno, solo…

-¿Cómo decirlo? -el moreno interrumpió las palabras de Mateo Gutiérrez, su interlocutor-. Generalmente intento regalarte mi amistad, regalarte mi confianza, y siento que casi nunca las aceptas. A veces pienso que es porque no la quieres, porque no quieres ser mi amigo, pero sigues ahí, no te vas. Es como si no aceptaras un regalo, pero tampoco te vas para que no te lo vuelvan a ofrecer. Y ahora estás aquí conmigo y, no sé, veo que solo te tomas tu tiempo.

-¿Para qué?

-Para querer. Para dejarte querer.

Mateo sonrió. Típicas palabras dulces y mágicas de El chico de las flores.

-Oh, ¿entonces es eso lo que me estás haciendo? ¿Me estás "queriendo"?

Óliver rompió en risas, negando con la cabeza.

-Lo haces sonar ridículo.

-¡Es que ya suena así, aunque no lo veas de esa forma!

-Pues supongo que… ¿sí? Es decir, en el fondo, la amistad es eso, ¿verdad? Amor. Y supongo que es eso lo que estamos desarrollando. Por el otro. Aunque no nos demos cuenta.

• Idioma: Español
• Editorial: Violet Pollux
• Fecha de lanzamiento: 8 feb 2021
• ISBN: 9781393768609

Violet Pollux

Violet Pollux. Poeta, escritore, músico, o simplemente artista. Sube videos a YouTube compartiendo el arte que hace con todo el mundo, y sueña con ser activista LGBTQA+ algún día. Ama los libros de romance, más que todo los de temáticas queer, los poemarios, además de la música que se haga sentir y el arte que llegue al alma. Autore de las sagas They Ship Us, El Chico de las Sopas de Letras, No me dejes ir, novelas como El show debe continuar, novelettes como El blog secreto del chico perdido, Ocho palabras al cielo y numerosos poemarios. Estudiante de Medicina y Educación Mención Dificultades de Aprendizaje. Puedes enterarte de sus novedades y leer material gratis en su blog: vpollux.wordpress.com, y, en caso de cualquier pregunta, puedes escribirle a su correo: [e-mail] ¡También estás invitadx a unirte a su lista de correo para estar al tanto de sus nuevas obras en violetpollux.blogspot.com, y a seguirle en sus redes sociales (es @VioletPollux en todos lados), además de comprar otros títulos de su autoría para apoyarle!

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Violet Pollux

El baile más cálido del mundo

Una colección de relatos

Copyright © 2021 by Violet Pollux

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First edition

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Contents

Sobre El baile más cálido del mundo

Prólogo

Capítulo uno

Capítulo dos

Capítulo tres

About the Author

Also by Violet Pollux

Sobre El baile más cálido del mundo

La colección de relatos nombrada El baile más cálido del mundo está compuesta por fragmentos del libro "Tu piel contra la mía", que está disponible en tu tienda digital de preferencia, además de en físico.

El contenido de esta colección, en comparación con el libro original, es, respectivamente:

Prólogo: Capítulo 1

Capítulo uno: Capítulo cuatro

Capítulo dos: Capítulo catorce

Capítulo tres: Capítulo dieciséis hasta el Capítulo diecinueve

Si te llama la atención el libro, puedes comprarlo en tu tienda digital de preferencia. Si quieres apoyarme de forma más directa, podrías hacerlo mediante PayPal. ¡Lo apreciaría muchísimo más de lo que imaginas!

Prólogo

Mi mejor amigo, Óliver Muñoz, estaba llorando desconsoladamente en su camilla en Santo Domingo, la clínica en la que estaba hospitalizado. Los doctores estaban debatiendo si debían darle de alta o no, porque no era seguro que se fuera a su residencia, donde vivía solo… aunque, bueno, más que llorar por eso, lo hacía por el accidente del que milagrosamente había logrado escapar con vida. Había ocurrido en su trabajo, él había sido el único sobreviviente, y lo que sentía como consecuencia de ello era inexplicable. Apenas me llamaron para notificarme del evento, salí corriendo desde Nueva Esperanza, sitio donde yo vivía y trabajaba, hasta Ciudad Dorada, donde vivía y trabajaba mi amigo, y me quedé todo el rato en la clínica en la que estaba internado mientras lo estabilizaban y le hacían unas cuantas pruebas básicas.

Lo conocí en la Universidad de Palo Alto, nombrada en honor a la ciudad en la que quedaba, y fue mi compañero de algunas asignaturas, debido a que estudiábamos la misma carrera. Con el tiempo nos volvimos mejores amigos, e incluso me invitó a vivir en su casa con su madre. Ella me recibió con brazos más que abiertos; estaba muy feliz de que Óliver y yo nos hubiéramos encontrado mutuamente, porque decía