Chico sensible
Por Violet Pollux
4.5/5
()
Información de este libro electrónico
Arturo Márquez es un contrabajista que está al final de la fila, uno de esos músicos de orquesta que nadie nota porque no resalta con su magnífico talento y sus dotes para interpretar su instrumento, y de alguna forma termina haciéndose amigo de Félix García. Este es un tubista, el único que hay en la sede, y todos saben quién es precisamente por eso: porque es el único y, por ende, uno de los músicos más necesarios en la orquesta.
Hay una audición pronto para subir de categoría, para entrar en una orquesta más avanzada, de más prestigio, y tanto Arturo como Félix se mueren por ser ascendidos. Se esfuerzan, estudian como locos, pero al último momento al tubista lo traicionan los nervios y está por colapsar antes de entrar al salón de la audición.
Y Arturo, como el buen amigo que es, intenta calmarlo. Había empezado a tranquilizarlo hacía unos meses con cosas leves, como palabras de aliento, una palmada en el hombro, uno que otro abrazo… pero esta vez la crisis es mayor, los nervios son más intensos, y lo ve tan mal, tan ansioso, tan a punto del colapso, que decide llevarlo al baño y hacer algo que espera que funcione:
Lo besa.
Sin embargo, las cosas no siempre salen como se quiere, y lo que pasa entre ellos definitivamente no es la excepción a eso…
Violet Pollux
Violet Pollux. Poeta, escritore, músico, o simplemente artista. Sube videos a YouTube compartiendo el arte que hace con todo el mundo, y sueña con ser activista LGBTQA+ algún día. Ama los libros de romance, más que todo los de temáticas queer, los poemarios, además de la música que se haga sentir y el arte que llegue al alma. Autore de las sagas They Ship Us, El Chico de las Sopas de Letras, No me dejes ir, novelas como El show debe continuar, novelettes como El blog secreto del chico perdido, Ocho palabras al cielo y numerosos poemarios. Estudiante de Medicina y Educación Mención Dificultades de Aprendizaje. Puedes enterarte de sus novedades y leer material gratis en su blog: vpollux.wordpress.com, y, en caso de cualquier pregunta, puedes escribirle a su correo: violetpollux@gmail.com ¡También estás invitadx a unirte a su lista de correo para estar al tanto de sus nuevas obras en violetpollux.blogspot.com, y a seguirle en sus redes sociales (es @VioletPollux en todos lados), además de comprar otros títulos de su autoría para apoyarle!
Lee más de Violet Pollux
Eres el único Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Ella: Un poemario Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesFragmentos: una colección de relatos Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesUn hombre excepcional Calificación: 3 de 5 estrellas3/5Concierto de luciérnagas Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl Show Debe Continuar Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El blog secreto del chico perdido Calificación: 3 de 5 estrellas3/5Acuarela de pétalos frágiles Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Dos mitades: Una colección de novelettes Calificación: 5 de 5 estrellas5/5
Autores relacionados
Relacionado con Chico sensible
Libros electrónicos relacionados
Brújula perdida: No me dejes ir, #2 Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El fuego en el que ardo Calificación: 5 de 5 estrellas5/5El Show Debe Continuar Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Más que solo amigos: No me dejes ir Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Vals triste y otros relatos Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa estrella de mis noches Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Unstoppable Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa Eternidad de un Amor Efímero Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Después De La Tormenta Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesTim te Maro y la magia de los corazones rotos Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Clementine Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesCaio y Leo Calificación: 3 de 5 estrellas3/5Noches de luna roja Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La noche Calificación: 5 de 5 estrellas5/5De Vuelta A Casa: No me dejes ir, #3 Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Para extender las alas Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesVerano Inolvidable Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesArreglemos Este Asunto Calificación: 5 de 5 estrellas5/5El Nuevo Mundo Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa Tierra De Las Sonrisas Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl Don encadenado Calificación: 5 de 5 estrellas5/5El Caminante Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Diario de un infortunio. Una historia de amor gay en la enfermedad Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Redención por fuego Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Destino Amor Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLas ramas muertas de Nakahel Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEn la sangre Calificación: 3 de 5 estrellas3/5Sin Palabras Calificación: 3 de 5 estrellas3/5Mi mejor amigo es gay Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Esbozo de mi amante Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificaciones
Amor y romance infantiles para usted
Nina: Segundo secreto Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Siempre fuiste tu Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El Despertar de los Dragones (Reyes y Hechiceros—Libro 1) Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Acelerando en rojo Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesUn beso por error Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Un Rito De Espadas Libro #7 De El Anillo Del Hechicero Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El amor y otros choques de tren Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Una Promesa De Gloria (Libro #5 De El Anillo Del Hechicero) Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Serás Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Never ever getting back together Calificación: 4 de 5 estrellas4/5La Marcha De Los Reyes (Libro #2 De El Anillo Del Hechicero) Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Al final del juego Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesUn Mar De Armaduras (Libro #10 De El Anillo Del Hechicero) Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Latidos Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El asesino de Alfas Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesPalomita Blanca Calificación: 3 de 5 estrellas3/5Belladonna Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesHeima es hogar en islandés Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Una maldición de amor Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesHablemos de amor: (Let's Talk About Love) Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La Senda De Los Héroes (Libro #1 de El Anillo del Hechicero) Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Sin ver atrás Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Prohibido Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Una Subvención De Armas (Libro #8 De El Anillo Del Hechicero) Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Huyendo de ti. Los Bianchi 2 Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Arena Uno: Tratantes De Esclavos (Libro #1 De La Trilogía De Supervivencia) Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Ryan y Avery Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesCuando el cielo se vuelva amarillo Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Obsidian (Saga LUX 1) Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El Despertar Del Valiente (Reyes Y Hechiceros—Libro 2) Calificación: 5 de 5 estrellas5/5
Comentarios para Chico sensible
2 clasificaciones1 comentario
- Calificación: 4 de 5 estrellas4/5
Aug 23, 2020
Me encanto, desearía que hubiese más contenido. Por eso 4 estrellas
Vista previa del libro
Chico sensible - Violet Pollux
Sinopsis
Arturo Márquez es un contrabajista que está al final de la fila, uno de esos músicos de orquesta que nadie nota porque no resalta con su magnífico talento y sus dotes para interpretar su instrumento, y de alguna forma termina haciéndose amigo de Félix García. Este es un tubista, el único que hay en la sede, y todos saben quién es precisamente por eso: porque es el único y, por ende, uno de los músicos más necesarios en la orquesta.
Hay una audición pronto para subir de categoría, para entrar en una orquesta más avanzada, de más prestigio, y tanto Arturo como Félix se mueren por ser ascendidos. Se esfuerzan, estudian como locos, pero al último momento al tubista lo traicionan los nervios y está por colapsar antes de entrar al salón de la audición.
Y Arturo, como el buen amigo que es, intenta calmarlo. Había empezado a tranquilizarlo hacía unos meses con cosas leves, como palabras de aliento, una palmada en el hombro, uno que otro abrazo... pero esta vez la crisis es mayor, los nervios son más intensos, y lo ve tan mal, tan ansioso, tan a punto del colapso, que decide llevarlo al baño y hacer algo que espera que funcione:
Lo besa.
Sin embargo, las cosas no siempre salen como se quiere, y lo que pasa entre ellos definitivamente no es la excepción a eso...
Capítulo 1
Lo besé en un intento de ayudarlo con los nervios.
Sus labios eran más toscos que los últimos que había probado, pero a los segundos se relajaron contra los míos y se amoldaron tanto a ellos que hicieron que olvidara todo lo demás.
El resto del mundo.
Todo lo que no fuera él...
Su nombre era Félix García. Tenía la misma edad que yo, quince, y éramos aproximadamente de la misma altura. Su voz era más ronca que la mía, su cabello también era más suave —lo descubrí después—, sus ojos eran mieles, y lo que más nos diferenciaba, al menos en el sitio en el que nos conocimos, era que él tocaba la tuba y yo el contrabajo.
Nunca dudé de sus habilidades con su instrumento, jamás y, de hecho, yo era de los que más lo apoyaba con ello, pero juro que en ese momento me hice mucho más consciente de lo BUENO que era —porque si así movía los labios, bueno... con razón su tuba sonaba TAN asombrosa.
—Todo va a estar bien, Félix —hablé rompiendo el contacto cuando me di cuenta de que no podía estar besándolo para siempre. Es decir, no se trataba exactamente de eso, sino de que, joder, estábamos en el baño. Lo había llevado allí para intentar calmarle los nervios, porque sabía que esa solía ser su mayor debilidad, y en vista de que no se me había ocurrido nada más para hacer en el momento, solo me incliné y lo besé—. Todo va a estar bien, ¿sí? Lo juro.
Sus ojos mieles estaban alertas. Me miraban con atención, como si intentaran descifrarme, y noté que su respiración era irregular, cosa poco común en un instrumentista de viento. Tomó aire un par de veces, y antes de hablar se pasó la lengua por el labio inferior, como queriendo comprobar que en serio lo había besado.
—¿Lo... prometes? —Y ahí estaba de nuevo esa mirada de niño perdido, de persona insegura y nerviosa hasta la médula espinal. Suspiró y asentí—. Es que... no lo sé, Arturo. Tengo miedo de que...
Pegué nuestras frentes con mi mano derecha. Su respiración volvió a hacerse un desastre y lo miré a los ojos con tanta seriedad y calma como pude.
—Vas a salir bien —Mi tono de voz era suave. O, bueno, intentaba que lo fuera—. Tocas asombroso, eres bueno en esto, te sabes todas las partituras, has estudiado todos los días desde que anunciaron que habría audición... Saldrás fenomenal.
Tragó saliva y no apartó su mirada de la mía.
—¿Y... si no pasa? ¿Qué sucederá si...?
—Claro que sucederá. No hay forma de que no lo haga.
Volvió a tragar saliva y dirigió su mirada al suelo. Me permití ser un poco cursi, a pesar de que no era para nada lo usual en mí, y comencé a revolverle el cabello. Noté que se relajó bajo mi tacto, tal como segundos atrás con el beso.
¿Se debía a que se trataba de mí o a que estaba demasiado nervioso y por ello cualquier contacto, por más mínimo que fuera, ya era una grandísima ayuda?
—¿En serio lo crees?
Sonreí.
—Estoy más que seguro.
Nos quedamos en silencio unos minutos. Lo único que se escuchaba eran mis dedos pasar por su pelo y el bullicio típico de orquesta fuera de las paredes del baño. Lo miré tomar aire un par de veces, pero en ningún momento me dijo que me detuviera o que ya no era necesario que siguiera.
—¿Tú
