Bebés Nutridos Con Amor: 100 Recetas para alimentar saludablemente a bebés de 6 a 12 meses

Por Annie Pestano

Desde los primeros alimentos hasta las comidas familiares, descubre 100 recetas de superalimentos aptas para niños.

Prepara a tu pequeño para una vida de alimentación sana. Esta colección de sabrosas recetas de papillas ricas en nutrientes está diseñada para atraer a tu hijo y ampliar su paladar en cada etapa de su desarrollo. Con el Libro de recetas de superalimentos para bebés, te asegurarás de que cada bocado les ayude a crecer felices y fuertes mientras aprenden a amar los superalimentos nutritivos.

Este libro de cocina de alimentos para bebés incluye:

• Conceptos básicos de la alimentación infantil-Aprenda todo sobre qué son los superalimentos, cuáles son los mejores para su bebé, cómo almacenar los alimentos infantiles para reducir el desperdicio y mucho más.
• Estrategias para el éxito-Descubra consejos para hacer que los bebés prueben nuevos alimentos, introducir alérgenos comunes y comenzar con el destete dirigido por el bebé.
• Recetas fáciles de consultar-Encuentre fácilmente los alimentos perfectos para su pequeño utilizando recetas desglosadas por etapas y tipos de ingredientes.

Enseñe a su pequeño a amar la comida sana con este libro de cocina para bebés centrado en los superalimentos.

• Idioma: Español
• Editorial: Annie Pestano
• Fecha de lanzamiento: 15 sept 2023
• ISBN: 9798223546757

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Tabla de contenido

INTRODUCCIÓN

CAPÍTULO UNO: SUPERALIMENTOS PARA TU SUPER HIJO

CAPÍTULO DOS: ETAPA 1: 6 MESES

Puré de manzana

Puré de plátano y aguacate

Puré de remolacha asada

Puré de arándano

Puré de brócoli y coliflor

Puré de zanahoria

Puré de chirivía

Puré de guisantes verdes

Puré de calabaza butternut

Puré de espinacas y peras

Puré de yogur de frutas y verduras

Puré de boniato

Avena casera para bebes

Porrig multicereales

Cereal de desayuno con arroz integral y quinoa

CAPÍTULO TRES: ETAPA 2: 6 A 8 MESES

Puré de granada-plátano-bayas

Puré de kale salteado y calabaza de verano

Puré de hortalizas de raíz asada

Puré de crema de cereza y coco

Smoothie de melocotón y nata

El primer batido verde del bebé

Manzanas al horno con peras y canela

Caldo de huesos en cocción lenta

Puré de patatas y chirivías

Remolachas asadas con naranja y jengibre

Calabaza butternut asada con hinojo y jengibre

Guisantes de primavera con menta

Puré de coliflor asado al curry

Patatas dulces batidas con coco

Carne molida salteada y verduras

Cena de pollo asado en una sartén

Nice crema de mango y plátano

Puré de pastel de calabaza

CAPÍTULO CUATRO: ETAPA 3: 9 A 12 MESES

Avena multigranos de manzana y canela

Avena fácil durante la noche

Guacamole de guisantes y menta

La sopa de lentejas de mi mamá

Sopa de fideos de pescado blanco y ramen

Risotto de pollo del cheater

Risotto de espinacas-pesto y pollo

Arroz y frijoles en una olla

Arroz frito con sésamo y jengibre

Lentejas rojas con quinoa

Farro caliente con calabacín

Quinua primavera

Bolognesa rápida

Potpie de pollo clásico

Cuscús con pavo molido especializado

Derretimiento de yogur de moras casero

Pudín de chocolate y aguacate

CAPÍTULO CINCO: ETAPA 4: 10 MESES EN ADELANTE

Hummus de frijoles negros y calabaza

Galletas de desayuno de pie de manzana

Muffins veganos de calabacín

Muffins de manzana y espinacas

Muffins de chocolate y aguacate

Barritas de avena y plátano al horno

Pancake de patata dulce

Quiche fácil de espinacas y queso

Gazpacho fácil

Sopa de muchas verduras

Ratatouille fácil sobre polenta

Albóndigas con vegetales ocultos

Mejores dedos de pescado empanados

Nuggets de pollo y coliflor

Deslizantes de frijoles negros

Helados de arándanos y crema

CAPÍTULO SEIS: COMIDAS CON LOS DEDOS

Muffins de especias de calabaza más saludables

Mezcla para pancakes mejor que en caja

Frittatas de verduras arcoiris

Salsa de fresa con chips de pita

Bocadillos de brócoli con queso y frijoles blancos

Muffins de calabacín y cheddar para el almuerzo

Buñuelos de maíz al estilo de la calle

Buñuelos de calabacín, zanahoria y parmesano

Buñuelos crujientes de quinoa

Mejor falafel al horno

Pastel de espaguetis de la abuela

Nuggets de salmón

Albóndigas de pollo con jengibre

Empanadas de carne de atajo

Bolas energéticas de mantequilla de girasol

Bolas energéticas de zanahoria

Bocadillos de brownie llenos de proteínas

CAPÍTULO SIETE: COMIDAS PARA NIÑOS PEQUEÑOS

Granola casera

Pastelitos de gloria de la mañana

Muffins de mantequilla de cacahuete y jalea

Quiche sin corteza de espinacas y quinoa

Macarrones y queso de coliflor

Arroz con pollo

Orzo de una bote con garbanzos

Weeknight curry verde tailandés con pollo

Frijoles negros, boniato y chile de pavo

Stromboli de tomate y espinacas

Estofado de ternera clásico

Pasta con pesto de col riz y aguacate

Ziti al horno de verduras asadas

Cacerola de brócoli con queso, pollo y arroz

Pimientos rellenos de quinoa y salchicha

Albóndigas al pesto con salsa de tomate entre semana

Salmón al horno pergamino

CONVERSIONES DE MEDIDAS

INTRODUCCIÓN

Recuerdo vívidamente estar sentada en el parque con mis nuevas mamás amigas, nuestros bebés acostados en cobijas a la sombra de los árboles, mientras discutíamos los consejos que nuestros respectivos pediatras nos habían dado para comenzar a alimentar a nuestros bebés con alimentos sólidos. Fue algo así: Mi médico dijo que podía empezar a los cuatro meses.

El mío dijo que debería esperar hasta las seis. Mi mamá me dijo que comenzara con cereal de arroz. Mi médico dijo que está bien comenzar con una verdura, pero no sé cuál es la mejor. ¿Alguien ha oído hablar del destete dirigido por bebés?

Allí estábamos, nuevas mamás desesperadas por dirección y todas con el mismo deseo: iniciar a nuestros bebés con la comida más nutritiva posible.

Las recetas de las siguientes páginas son exactamente eso: son superalimentos (y no del tipo que requiere ingredientes sofisticados o viajes adicionales al supermercado, porque ¿qué padre primerizo tiene tiempo para eso?). En cambio, las recetas presentadas a lo largo de este libro tienen un gran poder nutricional y están hechas con alimentos que puede encontrar en su supermercado habitual.

Después de ese día en el parque, me sumergí en educarme sobre la comida para bebés y descubrí que la ciencia detrás de la alimentación de bebés y niños pequeños está en constante evolución. Desde el nacimiento de mi primer hijo en 2012, la Academia Estadounidense de Pediatría ha cambiado la edad recomendada para que los bebés comiencen a comer sólidos, la Academia Estadounidense de Alergia, Asma e Inmunología ha implementado nuevas pautas para la introducción de alimentos altamente alérgicos, y el destete dirigido por bebés ha ganado popularidad.

Como padre y cuidador principal, debe, por supuesto, seguir los consejos de su pediatra, pero a veces necesitará escuchar sus instintos, porque nadie conoce a su bebé mejor que usted. Como madre de cuatro hijos, puedo decir con certeza que cada niño es diferente en cuanto a su preparación y preferencias por la comida. Cada uno de mis hijos comenzó con alimentos sólidos en diferentes momentos y gravitó hacia diferentes alimentos, ¡y no había nada que yo pudiera hacer para cambiarlo!

Hace ocho años, comencé una escuela de cocina de alimentos para bebés en el área de la ciudad de Nueva York para educar a los padres sobre cómo preparar los alimentos más nutritivos para bebés y niños pequeños de una manera accesible, no intimidante y divertida. Recuerdo en una clase, mirar alrededor de la sala a los cuidadores de todo el mundo:

Francia, Argentina, Corea del Sur, Estados Unidos: cortan verduras y se ríen de las historias de sus hijos varios hábitos alimenticios exigentes. Esa es la belleza de la comida y la paternidad: nos conectan universalmente como una sola familia humana. Todos estamos en el mismo barco tratando de hacer lo mejor posible, especialmente cuando se trata de alimentar a nuestros hijos.

Al igual que en esas clases, las recetas que comparto aquí son las que espero que hagas una y otra vez, las compartas con amigos y las utilices para ayudarte a vincularte con tu bebé mientras toma sus primeros bocados. No encontrará recetas que requieran horas de tiempo práctico o que requieran ingredientes inaccesibles (¡aunque creo que descubrirá mi amor por las semillas de chía!). Las recetas de este libro le brindarán a su bebé los alimentos esenciales más nutritivos para nutrirlo y ayudarlo a crecer.

Ya eres una súper madre: has dominado la lactancia materna, has mezclado fórmula a las 2 am, te has bombeado en lugares que nunca hubieras imaginado. Ahora es el momento para el próximo capítulo de la vida alimentaria de su hijo. ¡Traiga la comida para bebés superalimento!

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CAPÍTULO UNO

SUPERALIMENTOS PARA TU SUPER HIJO

Alimentar a su hijo con superalimentos ricos en nutrientes es un poderoso primer paso en su viaje de alimentación saludable.

Pero consideremos cómo quieres empezar. ¿Seguirá la ruta del destete dirigida por el bebé o se inclinará más hacia los purés? Tal vez te encuentres en algún punto intermedio y quieras probar una combinación de ambos métodos.

Independientemente de lo que decida que es mejor para su hijo, este capítulo cubre ambos enfoques para que pueda comenzar con confianza.

¿Qué es la comida para bebés?

Si la idea de la comida para bebés evoca imágenes en su mente de calabaza aguada en pequeños frascos de vidrio, estoy aquí para cambiar esa imagen. He tenido tantos padres que me han dicho que su hijo odia las verduras, y si las cosas compradas en la tienda son su única exposición, tendría que estar de acuerdo. ¡Lo he probado y quería escupirlo también! A decir verdad, la comida para bebés envasada no sabe cómo la fruta o verdura en su etiqueta. Compare las cosas compradas en la tienda con un puré de calabaza casero o un cubo de calabaza asada y encontrará que son completamente diferentes; el sabor y el color de las versiones caseras y frescas son brillantes, dulces y vibrantes. Un puré de camote debe saber a camote y un puré de brócoli debe saber a brócoli. Los alimentos para bebés son alimentos reales preparados específicamente para bebés, y cada fruta o verdura debe tener una oportunidad justa y de lucha. La comida para bebés hecha con superalimentos no solo es más saludable que las cosas envasadas, sino que también sabe mejor.

¿Qué son los superalimentos?

Sin duda, ha visto la palabra superalimento en la etiqueta de un producto o ha leído acerca de los superalimentos como un tema de salud de moda. La verdad es que no existe una definición clara de lo que hace que un alimento sea digno del estatus de superalimento. En cambio, el término se usa para alimentos que son excepcionalmente altos en nutrientes y brindan cantidades superiores al promedio de vitaminas y minerales esenciales, proteínas, fibra, grasas saludables y antioxidantes. Tomemos como ejemplo las espinacas (un superalimento). En comparación con partes iguales de lechuga iceberg (que no es un superalimento), la espinaca contiene el doble de vitaminas A, B, C y B12 y el doble de potasio, proteína, calcio, hierro y niacina. Lo mismo es cierto si compara el arroz blanco (no es un superalimento) con el arroz integral (un superalimento): el arroz integral contiene más fibra, proteína, manganeso, ácido fólico, selenio y magnesio.

Una advertencia importante es que cuando se trata de frutas y verduras, todas y cada una de ellas ofrecen beneficios para la salud, ¡superalimentos o no! Observo felizmente a mis hijos masticar rodajas de pepino (que no es un superalimento) y pedir lechuga iceberg crujiente en sus sándwiches, porque les gusta y porque una dieta saludable y completa es siempre el objetivo.

Aun así, siempre estoy buscando formas de mejorar la nutrición de mi familia, y ahí es donde los superalimentos realmente pueden brillar. En casa, sirvo los superalimentos arroz integral y farro en lugar de arroz blanco.

Debido a que los bebés comen cantidades tan pequeñas, darles superalimentos asegura que obtengan las cucharadas más ricas en nutrientes. De hecho, los superalimentos de este libro se seleccionaron por lo bien que se prestan para servir a los bebés y porque a la mayoría de los bebés les gustan sus perfiles de sabor y texturas. Las recetas para niños pequeños también proporcionan superalimentos que incluso los comedores quisquillosos pueden dejar atrás. También se beneficiará, porque la incorporación de más superalimentos en las comidas aumenta la nutrición de toda la familia.

SÚPER CONSEJOS DE COMPRA

Comprar superalimentos no tiene por qué ser costoso ni complicado. Planifica tu menú antes de ir a la tienda, luego sigue estas estrategias inteligentes para hacer las compras más saludables dentro de tu presupuesto.

LEA LAS ETIQUETAS. Olvídese de las declaraciones de propiedades saludables en la etiqueta frontal; para ver la imagen completa, lea el panel de nutrición completo en la parte