Descubre millones de libros electrónicos, audiolibros y mucho más con una prueba gratuita

Solo $11.99/mes después de la prueba. Puedes cancelar en cualquier momento.

La beata Guadalupe Ortiz de Landázuri y su gran familia
La beata Guadalupe Ortiz de Landázuri y su gran familia
La beata Guadalupe Ortiz de Landázuri y su gran familia
Libro electrónico99 páginas1 hora

La beata Guadalupe Ortiz de Landázuri y su gran familia

Calificación: 0 de 5 estrellas

()

Leer la vista previa

Información de este libro electrónico

Mujer de excepcional inteligencia, generosidad y valor, doctora en Química cum laude y premio Juan de la Cierva.

Guadalupe Ortiz de Landázuri, de padre artillero y madre aristocrática, fue una mujer «fuera de serie»: brillante científica —doctora en Química cum laude y premio Juan de la Cierva—, en una época en que pocas mujeres cursaban estudios superiores, y que pasó por el mundo, España y México, haciendo el bien.

IdiomaEspañol
EditorialCaligrama
Fecha de lanzamiento21 may 2021
ISBN9788418787737
La beata Guadalupe Ortiz de Landázuri y su gran familia
Autor

María Luz Gómez

María Luz Gómez es una anciana paralítica que entretiene sus forzados ocios escribiendo en el ordenador historias que juzga interesantes y desea compartir. Es madrileña y en Madrid vivió toda su vida. Estudió en el colegio del Sagrado Corazón. Después, idiomas y pintura. Empezó la carrera de Filosofía y Letras, que no terminó por su pronta boda con un médico. Su matrimonio fue feliz y dio muchos frutos: siete hijos. Nunca trabajó, sino en su casa. Cuidó de hijos y nietos. A sus queridos padres no pudo dedicarles la atención que merecían por falta de tiempo. En cambio, más adelante pudo cuidar de su suegra y dos tías de su marido que solo la tenían a ella. Hoy es viuda y necesita cuidadoras. Tiene diez nietos -uno adoptado, etíope- y cinco bisnietos. Su numerosa familia y su fe cristiana la hacen seguir feliz.

Lee más de María Luz Gómez

Relacionado con La beata Guadalupe Ortiz de Landázuri y su gran familia

Libros electrónicos relacionados

Biografías religiosas para usted

Ver más

Artículos relacionados

Categorías relacionadas

Comentarios para La beata Guadalupe Ortiz de Landázuri y su gran familia

Calificación: 0 de 5 estrellas
0 calificaciones

0 clasificaciones0 comentarios

¿Qué te pareció?

Toca para calificar

Los comentarios deben tener al menos 10 palabras

    Vista previa del libro

    La beata Guadalupe Ortiz de Landázuri y su gran familia - María Luz Gómez

    La-beata-Guadalupe-Ortizcubiertav14.pdf_1400.jpg

    La beata Guadalupe

    Ortiz de Landázuri

    y su gran familia

    María Luz Gómez

    La beata Guadalupe Ortiz de Landázuri y su gran familia

    Primera edición: 2021

    ISBN: 9788418787225

    ISBN eBook: 9788418787737

    © del texto:

    María Luz Gómez

    © del diseño de esta edición:

    Penguin Random House Grupo Editorial

    (Caligrama, 2021

    www.caligramaeditorial.com

    info@caligramaeditorial.com)

    Impreso en España – Printed in Spain

    Quedan prohibidos, dentro de los límites establecidos en la ley y bajo los apercibimientos legalmente previstos, la reproducción total o parcial de esta obra por cualquier medio o procedimiento, ya sea electrónico o mecánico, el tratamiento informático, el alquiler o cualquier otra forma de cesión de la obra sin la autorización previa y por escrito de los titulares del copyright. Diríjase a info@caligramaeditorial.com si necesita fotocopiar o escanear algún fragmento de esta obra.

    Prólogo

    Esta vez deseo escribir sobre la llamada universal a la santidad. El sed perfectos como vuestro Padre Celestial es Perfecto, dirigido por Jesús a todo aquel que quiera ser su discípulo, estuvo bastante olvidado durante siglos por el común de los cristianos; la mayoría lo consideraba reservado para aquellos que, abandonando el mundo, optaban por seguir los consejos evangélicos en la vida consagrada.

    La aspiración a la santidad se consideraba algo demasiado exigente para los laicos.¡Comparar la perfección humana con la Divina!. Ya nadie podría decirse a sí mismo: pues Señor ¡no estoy tan mal al lado de los ejemplares que se ven por ahí!. Los seglares solían limitarse a practicar una versión rebajada del Evangelio.

    Y Dios quiso recordar en el siglo 20 por medio de su Obra (inspirada a San Josemaría Escrivá de Balaguer), que no es preciso abandonar el mundo para ser santo. Lo único que se necesita es querer, en palabras de Santo Tomás de Aquino. Y La Unidad de vida y la filiación divina, en las del Fundador del Opus Dei. Esto es: no tener una doble vida en la que una pequeña parte se dedica a Dios (la Misa Dominical y poco más), y el resto (mi trabajo, mi descanso, mis diversiones, gustos y caprichos…) me pertenece en exclusiva. Sino una única vida, en la que todo sea santo y lleno de Dios. Con la fuerza y la alegría de ser su hijo, identificado con Cristo por el bautismo.

    Santos son todos aquellos que están en el Cielo, aunque no estén en los altares. Porque cumplieron (muy a menudo sin hacerse notar con hechos extraordinarios, que raras veces suelen presentarse) la Voluntad de Dios, poniendo amor en todo lo pequeño y ordinario que compuso su vida. Santificando su trabajo, santificándose en él y haciéndolo santificador. Así alcanzaron la Gloria y ayudaron a otros a alcanzarla, con su ejemplo, palabra, oración y cruz; ya que esta, de una u otra forma, nunca falta en la vida. La Santa Madre Iglesia celebra su fiesta común el día 1º de Noviembre: festividad de todos los santos .

    Los que están en los altares tienen su fiesta propia, celebrada casi siempre el día de su muerte (dies natalis, nacimiento al Cielo), porque Dios quiere resellar su santidad y proponerlos como modelos a imitar.

    Cuando al morir una persona se considera que su vida ha sido modélica, la Iglesia no tarda demasiado en abrir el proceso de canonización. El primer paso se basa en el testimonio de los que la conocieron. Y si este es unánime en que ha practicado virtudes heroicas, es declarada Venerable y propuesta a la imitación de cuantos la trataron o han oído hablar de ella..

    Para el segundo paso, la Beatificación, se precisa que el Señor haya realizado por su intercesión un milagro patente: por ejemplo, una curación repentina y humanamente inexplicable. Los Beatos son nombrados patronos de aquellos cuya profesión o circunstancias son similares a las suyas; a los que se invita a imitarlos y a recurrir a su poderosa mediación.

    El tercero y último paso es la canonización, en que la persona es declarada Santa de altar. Para ello es preciso un mínimo de dos hechos milagrosos. Los Santos canonizados, son propuestos al común de los fieles como intercesores y modelos.

    En este libro pretendo hablar de la correspondencia a la gracia de una mujer fuera de serie: Guadalupe Órtiz de Landázuri, recientemente beatificada por la Iglesia Católica. Y diré algo también sobre su hermano Eduardo y su cuñada Laura, que están actualmente en proceso de canonización. Pero si menciono en el título a su gran familia, no es sólo por ellos y su padre mártir; es porque considero unida a su familia de sangre, la espiritual: el Opus Dei.

    Creo que lo fundamental de mi relato corresponde a la realidad. Pero para completar la historia, he dejado correr mi imaginación en cosas desconocidas para mí, referentes a sus padres, hermanos, escenas y conversaciones. Si este libro llega a manos de familiares y amigos de los protagonistas, les pido disculpas por cuanto resulte novelado y no corresponda a la realidad.

    Capítulo I

    El amor de Manuel Ortiz de Landázuri y Eulogia Fernandez Heredia proyecta formar una familia cristiana y feliz, comprometiéndose hasta que la muerte los separe

    Manuel Ortiz de Landázuri, de familia castrense, cursaba la carrera militar de Artillería en la Academia de Segovia, con auténtica vocación de defensor de la Patria. El día en que juró bandera fue para él inolvidable. La besó con unción y cantó el himno de Artillería con voz vibrante y emocionada:

    Artillero, artillero, marchemos siempre unidos, siempre unidos...

    Acudieron a la Jura los familiares y amigos de los juramentados, y el festivo día terminó con una cena- baile, en la que fue presentada a Manuel la mujer de su vida: Eulogia Fernandez Heredia, de familia aristocrática. Era hija de la condesa de Torrealta y hermana de un compañero de Manuel, que se la presentó por deseo

    ¿Disfrutas la vista previa?
    Página 1 de 1