La Virgen de Lourdes

Por María Luz Gómez

¿Por qué miles de peregrinos siguen acudiendo al milagroso manantial de Lourdes?

La interesante y milagrosa historia de las apariciones de la Inmaculada Concepción a Santa Bernardita no necesita explicación para los creyentes. Y no existe para los que no creen. Pero hay quien se interroga sobre ella.

• Idioma: Español
• Editorial: Caligrama
• Fecha de lanzamiento: 2 oct 2020
• ISBN: 9788418310584

María Luz Gómez

María Luz Gómez es una anciana paralítica que entretiene sus forzados ocios escribiendo en el ordenador historias que juzga interesantes y desea compartir. Es madrileña y en Madrid vivió toda su vida. Estudió en el colegio del Sagrado Corazón. Después, idiomas y pintura. Empezó la carrera de Filosofía y Letras, que no terminó por su pronta boda con un médico. Su matrimonio fue feliz y dio muchos frutos: siete hijos. Nunca trabajó, sino en su casa. Cuidó de hijos y nietos. A sus queridos padres no pudo dedicarles la atención que merecían por falta de tiempo. En cambio, más adelante pudo cuidar de su suegra y dos tías de su marido que solo la tenían a ella. Hoy es viuda y necesita cuidadoras. Tiene diez nietos -uno adoptado, etíope- y cinco bisnietos. Su numerosa familia y su fe cristiana la hacen seguir feliz.

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La Virgen de Lourdes

María Luz Gómez

La Virgen de Lourdes

Primera edición: 2020

ISBN: 9788418310072

ISBN eBook: 9788418310584

© del texto:

María Luz Gómez

© del diseño de esta edición:

Penguin Random House Grupo Editorial

(Caligrama, 2020

www.caligramaeditorial.com

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© de la imagen de cubierta:

María Luz Gómez

Impreso en España – Printed in Spain

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Prólogo

En este libro me propongo relatar la vida de Santa Bernardita, receptora de las apariciones de la Santísima Virgen en Lourdes bajo su advocación de Inmaculada Concepción.

Cinco años hacía que el Papa SanPío X había proclamado aquel dogma, cuando Bernardita vio a la Señora en una gruta de los riscos de Massabielle.

Sé que esta historia es bien conocida por multitud de personas, tanto creyentes como descreídas. Y aunque para las primeras sobra toda explicación y para las segundas no la hay posible, intento el reto de que alguien más se cuestione sobre ella.

Hay quien se pregunta el porqué la única Virgen María tiene tantas y tan diferentes advocaciones. Todas son distintos retratos de nuestra Madre a cual más bello; y son debidos a sus múltiples apariciones, que han añadido a su nombre el del lugar en que se apareció, o algún rasgo significativo de su presencia.

Capítulo I

Qué es para Iglesia Católica un dogma de fe.

Declaraciones dogmáticas. La Maternidad Divina.

La Inmaculada Concepción. Las apariciones.

La familia Soubirous. Bernardita.

Todo lo que voy a comentar sobre estas cuestiones es algo bien sabido por la mayoría de los católicos; pero deseo referirme a ello por si algún lector no lo es, o aunque lo sea no lo tiene muy claro. Un dogma de fe es algo que, definido por los apóstoles o sus sucesores (el Papa y los Obispos en comunión con él) como revelado por Dios, hemos de creer todos los católicos.

Jesucristo dio a Pedro las llaves del Reino y con ellas el poder de atar y desatar. Su Reino en la tierra es la Iglesia de la que lo nombró Cabeza, con la misión de apacentar a sus ovejas con su Divina Palabra.

Antes de desperdigarse por el mundo para predicar el Evangelio o Buena Nueva (¿puede haberla mejor que la venida de Dios al mundo, haciéndose uno de nosotros para mostrarnos su Amor compartiendo nuestra vida, enseñándonos a vivirla y salvarnos?), los apóstoles formularon en el Credo las verdades fundamentales de la fe cristiana; que poco a poco, con el correr del tiempo, se fueron explicitando más.

Pero desde un principio hubo entre los cristianos dudas y discusiones sobre distintos temas. Y mientras la Iglesia por medio del Papa, Vicario (o representante) de Cristo, no declaraba explícitamente lo que era verdad revelada, y por lo tanto dogma de fe que todo cristiano estaba obligado a creer, cada cual podía opinar lo que mejor le pareciese. Pero una vez que el Sumo Pontífice inspirado por el Espíritu Santo, declaraba la verdad dogmática, el que no la creyera se hacía culpable de herejía. Roma locuta, questio finita, se decía. Si Roma ha hablado, se acabó la cuestión.

De las cosas más discutidas han sido los privilegios conque el Señor adornó a María, Hija predilecta de Dios Padre, Madre de Dios Hijo y Esposa de Dios Espíritu Santo (más que ella, sólo Dios), en previsión de los méritos de su Hijo. No se entiende el porqué , puesto que convenía y Dios podía hacerlo, se dudase el que lo hiciera.

Los más controvertidos fueron la Maternidad Divina y la Inmaculada Concepción.

Ya era dogma de fe que las dos naturalezas de Cristo, divina y humana, siempre estuvieron fundidas en una única Persona Divina. Y en el Concilio de Éfeso celebrado en el siglo IV, se declaró dogma de fe que la Virgen María era verdadera Madre de Dios, puesto que las madres lo son de la persona. Toda la ciudad, dice la