Olga Moreno rompe su silencio tras su separación: “Cuando vi a mi marido con otra se me cayó el mundo encima”
“Aún no sé cómo estoy concediendo esta entrevista. No tengo fuerzas, pero se lo debo a todos los que me han apoyado”
“Antonio David me dice que se quiere separar en septiembre. Yo salí de ‘Supervivientes’ en julio”
ES probablemente el testimonio más esperado y ella lo sabe. “Solo ha faltado que me llamen de los informativos”, dice con sentido del humor. Enmascarando un dolor que ha convertido los últimos meses en los peores de su vida, Olga Moreno (46) se aferra a las bromas y a los chascarrillos para no derrumbarse a la primera de cambio. “¿Estoy guapa? Mira, que ahora estoy en el mercado”, comenta divertida durante una sesión de fotos en la que enciende un cigarro tras otro para aplacar la ansiedad.
Pero la sonrisa que muestra ante el fotógrafo es solo fachada. Solo han pasado unos segundos de entrevista cuando Olga Moreno ya ha derramado la primera lágrima. Según la grabadora, estamos en el segundo 50 de más de dos horas de conversación cuando ya hay que prestarle el primer pañuelo. “Es que no puedo hablar del tema… Creía que hoy estaría más fuerte, pero se ve que no”, dice a modo de disculpa.
Olga Moreno se sienta con SEMANA seis meses después de que Antonio David Flores (47) le comunicase su intención de romper su matrimonio. Lo hace para explicar por qué su separación no está siendo como las demás y poner negro sobre blanco en un asunto, el de su ruptura, que ha dado pie a multitud de especulaciones porque solo dos personas saben la verdad y hasta la fecha callaban. Hoy rompe su silencio para defender a Antonio David como padre y persona, pero para gritar la decepción que este le ha provocado como marido.
En septiembre de 2020 ella misma aseguraba con vehemencia a SEMANA que estarían juntos siempre. Por entonces, un posible affaire entre Antonio David y la periodista Marta Riesco (35) ya sobrevolaba su relación, pero ella se afanaba en desmentirlo en nombre de su marido. “Pongo la mano en el fuego por él”, nos decía entonces. Sin embargo, un año y medio después la infidelidad es un hecho y su discurso ha cambiado. “Me he sentido traicionada”, afirma.
El que sigue a continuación es el testimonio de una mujer rota que, sin embargo, amenaza con recomponerse. No va a bajar los brazos. Su matrimonio ha
