AMIGOS ENTRAÑABLES HASTA EL MAS ALLA: Novela

Por Javier Duhart

FUE COMO PERDER UN HERMANO, DE HECHO ESO FUE RENE Y YO NOS CONSIDERÁBAMOS COMO HERMANOS, NOS CONOCIMOS A LA EDAD DE 6 AÑOS Y DESDE ENTONCES TRANSCURRIERON NUESTRAS VIDAS SIN QUE NUESTRAS AMISTADES SE PERDIERAN A PESAR DE QUE NOS SEPARAMOS GEOGRÁFICAMENTE SIEMPRE PODEMOS CONFIRMAR QUE NUESTRO CARIÑO SE MANTUVO INTACTO EN NUESTRAS LEJANAS CERCANÍAS EN NUESTROS SILENCIOS Y ELOCUENCIAS Y EN LOS CONTACTOS FINALES POR LOS MEDIOS ELECTRÓNICOS Y EN MÚLTIPLES EVENTOS CULTURA, EN LOS QUE COINCIDIMOS TUVIMOS OPORTUNIDAD DE SENTIR NUESTRO GRAN AFECTO

• Idioma: Español
• Editorial: Palibrio
• Fecha de lanzamiento: 6 feb 2024
• ISBN: 9781506551999

Javier Duhart

ARQUITECTO DE PROFESIÓN, ESCRITOR POR CONTAGIO, PINTOR POR AÑADIDURA Y POETA, ESTOS CALIFICATIVOS SON LO PRIMERO QUE SE PUEDE DECIR DEL ESCRITOR JAVIER DUHART QUIEN EN EFECTO HACE SUS ESTUDIOS EN LA U.N.A.M. DE DONDE OBTIENE SU LICENCIATURA DE LA FACULTAD DE ARQUITECTURA... EL CONTACTO CON AMIGOS ESCRITORES DE LA TALLA DE JOSE AGUSTÍN Y DE RENE AVILES FABILA DESDE MUY JOVEN, LE HAN CONTAGIADO EL AMOR POR LAS LETRAS. MANTENIENDO A LA INQUIETUD QUE SIEMPRE TUVO POR ESCRIBIR INICIANDO SU CARRERA DE ESCRITOR EN EL AÑO DE 2005. -"SIEMPRE SUPE QUE TENÍA LA CHISPA PARA CONTAR HISTORIAS PORQUE NO DECIRLO" -DECLARA EL PROPIO AUTOR- ESTO ME HA LLEGADO COMO UN PLUS, UN PREMIO POR ALGO QUE HICE BIEN, LAS LETRAS ME SATISFACEN POR COMPLETO, ESCRIBO A DIARIO. A LA FECHA CUENTA YA CON 23 LIBROS PUBLICADOS: SUEÑO DE VIDA, NIÑA DE TIJUANA, NOVELA QUE SE ESTA PREPARANDO PARA HACERSE PELÍCULA. ROGELIO Y OTILIA, EL BASTÓN, LA HUIDA, EL ESTUDIO, LOS MUCHACHOS DE ATLIXCO I LOS MUCHACHOS DE ATLIXCO II, LOS MUCHACHOS DE ATLIXCO III. AÑOS DE JUVENTUD, CUENTOS QUE CUENTO, QUE TE CUENTO, DOSIS DE GOZOS Y LAMENTOS (POESÍA) PARTE 1, POESÍA 2, POEMAS CON ALMA SENCILLA (TOMO,1,2,3,4,5,6,7,8,9) SIMPLES PALABRAS QUE ENCANTAN,

Vista previa del libro

Amigos

Entrañables

Hasta El

Mas Alla

Novela

JAVIER DUHART

Copyright © 2024 por Javier Duhart.

Número de Control de la Biblioteca del Congreso de EE. UU.: 2023923597

Todos los derechos reservados. Ninguna parte de este libro puede ser reproducida o transmitida de cualquier forma o por cualquier medio, electrónico o mecánico, incluyendo fotocopia, grabación, o por cualquier sistema de almacenamiento y recuperación, sin permiso escrito del propietario del copyright.

Esta es una obra de ficción. Cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia. Todos los personajes, nombres, hechos, organizaciones y diálogos en esta novela son o bien producto de la imaginación del autor o han sido utilizados en esta obra de manera ficticia.

Fecha de revisión: 01/02/2024

Palibrio

1663 Liberty Drive

Suite 200

Bloomington, IN 47403

851928

ÍNDICE

Prologo

Lo sé

Amigos Intelectuales

Personajes

Rosario

CAPITULOS

Capitulo I

Capitulo II

Capitulo III

Capitulo IV

Capitulo V

Capitulo VI

Capitulo VII

Capitulo VIII

Capitulo IX

Capitulo X

Capitulo XI

Capitulo XII

Capitulo XIII

Capitulo XIV

Capitulo XV

Capitulo XVI

Capitulo XVII

Algunas obras publicadas:

PROLOGO

Comenzaré diciendo que los protagonistas somos mis dos grandes amigos René Avilés Favila y José Agustín Ramírez dos reconocidos escritores y yo por añadidura que soy el que va escribir la novela. Debo decir que novela es la historia que se cuenta, que es producto de la imaginacion del autor; o sea es mentira; mientras que la historia es verdad, es la narrativa de hechos y circunstancias que realmente sucedieron. O están sucediendo. En esta novela hay historia y hay ficción por lo tanto es una novela– histórica una vez dicho lo cual, importantes somos tres: desde luego José Agustín, como el que más destacó en la literatura. Como he dicho hubo temporadas en las que circulaban como arroz libros de José, me atrevería a decir que no había casa en la que faltara un libro de José Agustín, que se aupó en la cima del estrellato literario de México.Y podría decirse que, en todos los países de habla hispana, claro con todo el tiempo para escribir y todo ese talento que tiene, se colocó en los primeros lugares entre los más destacados escritores. Mientras René Avilés y yo Javier Duhart en Arquitectura. René hizo una brillante carrera, aunque siempre siguió escribiendo, yo no pensé que algún día escribiría. Amaba mi profesión y me dedique por completo a ella sin pensar que algún día me pondría a escribir y me lleno de entusiasmo hacerlo por lo que desde que me editaron mi primera novela, no he dejado de escribir y hoy por hoy me han editado 23 libros entre novelas cuentos y poesía. Bien pues somos los tres protagonistas. Espero que esta les agrade, tanto como me gustó a mi escribir esta historia.

RENE

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PARA RENE AVILES FABILA

UN ESPACIO DE RECUERDO

CON GRAN AFECTO

ADMIRACION Y RESPETO.

AMIGO ENTRAÑABLES

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Javier Duhart René Avilés

Lo sé: sé que se ha ido, sé que se fue,

pero el terco cariño que le tengo desde niño no se va,

quiere que René regrese,

tomar una copa con él

reír de sus ocurrencias,

disfrutar su culta conversa

que tanto nos compartió,

darle un abrazo fraterno

y sentir nuestro afecto intacto.

(Tomate esta botella conmigo y en el

último trago nos vamos)

AMIGOS INTELECTUALES

RENE AVILES - JOSE AGUSTIN

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JAVIER DUHART RENE AVILES

PERSONAJES

SILVIA Y CONSUELO NOVIAS ALIMENTICIA.

LOLA, CARLA Y LUPE NOVIAS ALIMENTICIA TAMBIEN.

DON RAMON (DON RA) PADRE DE NOVIAS ALIMENTICIAS

MIGUEL Y FELICIA ACOMPAÑANTES DE AVENTURAS.

FELIPE Y JULIAN SOLDADOS DE APOYO BAJO MANDO DE CAPITAN EULOGIO

DON GREGORIO PADRE DE ANA LA ESPOSA DE JAVO

DR. LUZ ENDIABLADO PERSONAJE CAUSANTE DEL DESORDEN DE PUEBLO BELLO.

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ROSARIO

Compañera amiga

Inteligente, amorosa

Reedita los libros de René

las obras completas

muy pronto vendrán.

Organiza homenajes presentaciones

reconociendo el trabajo literario y

periodista de René, así como en la

docencia donde entregó su corazón

Querida Rosario...

En tu interior, en tu mente,

Con frecuencia lo encuentras

Todo el amor que te tuvo

No lo diluye su ausencia

Basta acercarse a

sus libros para que intenso

lo sientas.

Orgulloso de ti RENÉ está

donde se encuentre.

CAPITULO I

Reflexiones, de los protagonistas, sobre lo sucedido en este año 2022 Dolorosos acontecimientos por la desaparición de amigos entrañables. Hermano mayor, mi único hijo y la sorpresiva desaparición de María Elen la madre de mis dos hijos. Tania y Ulises. Javo va de medio interno en una correccional para menores. Es guiado y protegido por un líder estudiantil que lo convierte en boxeador. Los primeros recuerdos de aventuras que corrieron y sus novias alimenticias. Primer contacto con el Más Allá.

Este año 2016 está por terminar en unos días. Ha sido un buen año; como es natural con cosas positivas y algunas no tan buenas y acontecimientos verdaderamente dolorosos, la muerte de mi mejor amigo. —Más adelante narraré este suceso—. Pero en realidad no puedo quejarme. Cumplo ya 14 años de tener una enfermedad de las que se dicen degenerativas, de las que son progresivas y mortales, la verdad no sé cuál será el desenlace de esto que padezco, ni quiero saberlo, vivo pendiente, de los descubrimientos en la ciencia, en la medicina, con la esperanza de que al fin encuentren la cura de mi padecimiento, mientras tanto hago caso a mi médico que ha podido controlar bien los síntomas y ha logrado retrasar el avance del mal, cosa que ha asombrado a propios y extraños, al grado de dudar el propio médico, si su diagnóstico fue acertado.

Mi padecimiento es la enfermedad de Parkinson: por lo que me han hecho cualquier cantidad de pruebas y aún hay dudas, pero me siguen medicando. Yo obedezco las indicaciones y tomo las medicinas tal como se me indica.

Finalmente no puedo hace nada más, y como he comprobado que seguir las indicaciones del médico y tomar con exactitud las medicinas que me receta, es lo que me ha valido para estar bien, por lo menos en apariencia; hay veces que ya me quiero dejar caer, pero el orgullo me levanta y sigo adelante, aunque por dentro me esté llevando la chingada; luego pasa un tiempo y recupero la tranquilidad, la alegría de vivir.; vuelvo a mis actividades, escribo la novela que esté haciendo los poemas que se atraviesan, pinto el óleo que este en turno, canto alguna nueva canción y estoy con ella en el estudio de grabación, me reúno con los amigos para jugar dominó, platicamos, hacemos fiestas, nos emborrachamos, todo el cuerpo y componemos al mundo.

Ya mencionaba al principio el acontecimiento doloroso y sorpresivo que me llegó como una puñalada en el alma. En efecto la muerte de René Avilés Fabíla.

Fue como perder a un hermano, de hecho eso fue, René y yo nos consideramos como hermanos, nos conocimos a la edad de 6 años y desde entonces transcurrieron nuestras vidas sin que nuestra amistad se perdiera, a pesar de que nos separamos geográficamente con frecuencia nos reuníamos y siempre pudimos confirmar que nuestro cariño se mantuvo intacto, en nuestras lejanas cercanías, en nuestros silencios y elocuencias en los contactos finales por los medios electrónicos y en múltiples eventos culturales en los que coincidimos tuvimos oportunidad de hacernos sentir nuestro mutuo cariño. A la fecha, después de 20 días del deceso de mi amigo, no puedo aceptar que no volveré a verlo, ha sido muy difícil irme confortando, mi mujer y algunos amigos mutuos, (de René y míos) hacen lo que pueden por superar este luto que a que sí o no llevo sin poder evitar. Pero sé que la vida debe seguir y me esfuerzo por actuar como si todo fuera bien. Aunque tengo muy presente aquel 9 de oct. 2016, Cuando supe del fallecimiento de mi amigo. Había sonado el teléfono repetidas veces. Hasta que contestó mi mujer, vi la cara que puso al escuchar lo que le decían. En ese instante supe que mi amigo había muerto. Nadie me lo dijo, yo lo sabía. Yolanda me paso el auricular, escuché la voz de Rosario la esposa de René: – Javo… René ha muerto– No atiné a contestar me había quedado paralizado de pies a cabeza. . – Me escuchas, me escuchas –y repitió la terrible noticia–Estamos en el velatorio de Félix Cuevas –Yolanda me arrebató el teléfono y contestó a Rosario –Estamos contigo querida, salimos para allá. Llegamos a encontrarnos con Rosario rodeada de reporteros que la asediaban con preguntas de todo tipo. Desde cómo fue que se conocieron ella y René hasta como había sido la relación con un hombre tan controversial y talentoso, que como fueron sus últimos días que si sufrió mucho.

No miren, René no sufrió ni madres, unos días antes agarramos la jarra como debe ser con unos amigos, él estaba crudísimo, se metió a la sauna y ahí se acabó de deshidratar, le dio un infarto y murió. Así que no sufrió, fue un infarto fulminante yo creo que él se fue como quiso y en pleno triunfo; la literatura le estaba sonriendo escribía como nunca y su obra publicada se reconoce ahora con todo el valor literario que se está reconociendo por escritores y críticos de los buenos, sus libros se

están reeditando y están por salir de la editorial las obras completas, así que ustedes me dirán. Y por si fuera poco se han venido, sucediendo homenajes y premios desde la entrega de Cedulas Reales de Puebla y de Atlixco, hasta la Medalla de las Artes, fue muy reconocido como periodista y también como Maestro Emérito de la UAM. – Contestó Rosario dando por terminada la plática con los reporteros y vino con nosotros que habíamos estado esperando para dar nuestras condolencias. Los reporteros todavía soltaron una retahíla de preguntas a puros gritos, pero la firme Rosario ya no le contesto a nadie.

Vino con nosotros y nos abrazamos sin decir nada. Recordé una metáfora que René decía. El sentimiento, no necesita la palabra para expresarse …

A ustedes los quería mucho – Oí a mis espaldas una voz femenina que resulto ser la de Iris la hermana de René.

Hola Iris – le dije y la abracé en silencio. La verdad yo no podía, y nunca pude dar el pésame, solo daba o recibía el abrazo. Ella seguro notó mi dolor, se separó y dijo claro y fuerte – No estemos tristes; René no lo permitiría, mejor vámonos a emborrachar a la cantina más cercana y hablemos de mi hermano, pero recordándolo en sus gracejadas en los momentos en que era más gozoso, encantador, que nunca se clavó en el sufrimiento por nada y por nadie…

La idea se aceptó y se ejecutaría de inmediato, dado que se le habían dado llaves de la sala del velatorio donde nos encontramos. Había poca gente y sería cuestión de pedirles que desalojaran mientras nosotros teníamos que salir por unas horas a cumplir con algunas diligencias que estaban pendientes. cerrarían con llave y se abriría temprano al día siguiente. Ya dispuestos a desalojar el salón, llegaron otros reporteros y algunos escritores más o menos importantes y Rosario pospuso el retiro. Yolanda y yo si salimos por piernas, pero antes de salir voltee a ver el ataúd donde descansaba el cuerpo de mi gran amigo, que tenía su tapa abierta y permitía verlo, la gente empezó a pasar en correcta formación a verlo por última vez; yo no quise verlo, no me haría nada bien, preferí recordarlo en vida, riendo de sus maldades, de sus chistes, riendo de los demás o a costa de ellos.

Ya camino a casa la de Atlixco le comenté a Yolanda: – Que bueno que finalmente no fuimos a la cantina, sabes, a René no le gustaba quedarse solo. Llegamos al hogar y nos fuimos a la cama sin tomar ningún alimento, no teníamos apetito para nada. Después de pasar varias horas dando vueltas en la cama sin poder conciliar el sueño, me levante y fui al baño; serían la 3:30 de la madrugada, me senté en el WC y como requiero algo de tiempo para surrancho esperé pacientemente, todavía pensando en René; de pronto sonó la puerta de cristal templado, que separa la zona de la regadera como el resto del baño, como si alguien quisiera abrirla. Pero si aquí no hay nadie, no hay corrientes de aire, ¿Como podría moverse esa pesada puerta? me pregunté un tanto asustado y me quedé observando la puerta que volvió a rechinar, pero esta vez también se movió, dejando una rendija por la cual podía asomarse al interior de la regadera. Me acerque con cautela, y con miedo, un frio como de muerte se hizo presente en el baño y un halo de luz de la luna penetró por el domo del plafón mientras se escuchó el aullido de un lobo a lo lejos, quien me hizo consciente de que vivo en campo abierto. Haciendo acopio de valor, dije en voz alta: – ¿Eres tú René? Por respuesta volvió a rechinar la puerta… Entonces definitivamente entre en pánico.

¡Hazte presente! – grité, esperé unos segundos… ¡Me estas asustando! sé que eres tú, si no puedes aparecer, hazme una señal, dime que puedo hacer por ti. Fue entonces que ya no tuve duda de que era mi amigo el que trataba de hacer contacto, porque se abrió la llave de la regadera, rápido se calentó al grado de empañar el espejo frente a los lavabos y la propia puerta de cristal templado y me quedé pasmado cuando sobre al espejo empañado se dibujaban palabras. Javo: solo es una despedida, no podré volver, hay una fuerza succionadora que acarrea los espíritus a un conducto por el espacio cuyo destino no se sabe, cada espíritu tiene su meta ya calificada por un comité que se la imprime a cada alma ya liberada del cuerpo, ahora mismo estoy siendo succionado, no tengo ni puta idea cual será mi destino, por este conducto al que llaman Túnel del destino final.

Vaya que interesante, esta es la primera noticia que nos dice algo de lo que sucede después de morir. – Dije temblando de miedo. René lo notó.

No tienes por qué temer, – Escribió sobre el espejo, relájate, soy yo tu amigo y estoy de paso, tengo que irme, más bien me requiere esta fuerza de succión que ya...

No pudo completar lo que quería decirme, se fue retirando, quizá por esa fuerza de succión de que habló. Solo dejó una raya en el vapor del espejo. Me vi calmado, sin el temor que me asalto apenas hace unos minutos cuando, por primera vez hice contacto con alguien que está en el Más allá. Creo que lo que me dio tranquilidad es que ese que me visitó del otro mundo fue mi amigo René. Entonces decidí investigar lo más que pudiera este tipo de fenómenos extra sensoriales, regresé a la cama donde mi mujer despertaba.

–¿Qué haces Javo? es muy temprano, te oí hablando solo, ¿tuviste pesadilla? – me preguntó, un tanto preocupada.

–No, es que hice contacto con Renecito.

–¿Qué? no, no empieces con cosas raras, mejor recuerda a tu amigo en sus mejores momentos, con toda esa simpatía que tenía en sus charlas.

Claro nunca lo olvidaré…– le dije a Yolanda mi mujer, y se me vino a la memoria la imagen de mi amigo, riendo a carcajadas por alguna travesura de las muchas que cometía a diario en contra de quien se le paraba en frente o con quien tenía algo que ver.

Un té de tila para dormir bien – dijo mi mujer entregándome una taza humeante, que había ido a preparar, mientras yo recordaba las andanzas y aventuras que pasamos René y yo y precisamente, comenzaron a llegar recuerdos de nuestros asuntos que incluso quedarían sin resolverse por la desaparición de mi amigo.

–Tomé el milagroso te para dormir bien, pero no logré conciliar el sueño, solo estuve dormitando… El recuerdo de las andanzas con mi gran amigo, se repitieron una tras otra como, una interesante película de acción.

– Ahora recordaba la vez que fuimos a una cita con una nueva amiga de René…

Ya se tardó, ¿No te habrá dejado por otro más hombre que tú?...

– Pues no lo sé – contestó algo pensativo.

Entonces yo empecé a recordar aquella historia en la que nos vimos envueltos.

Nosotros visitábamos a varias amiga o novias y solíamos llegar a hora de comer. Ya sea para almuerzo, comida, o cena.

– De entre aquellas fieles amigas que nos procuraban el alimento que engullíamos con singular alegría. Se contaba con Silvia y Consuelo; René me las presentó, Dos guapas hermanas con diferentes atributos que nos encantan a los hombres, Consuelo contaba con un trasero sensacional, aunque sus bustos pequeños adornaban suficiente su pecho Silvia en cambio contaba con bustos muy generosos y bien plantados, pero carecía de un trasero mejor.

René llego a escoger entre las dos y escogió a Consuelo sin consultarme; René como quien dice sé agandalló, tan ingenioso y simpático como era, fácilmente conquistó a Consuelo que al contrario de Silvia su hermana, esta si escogió bien la retaguardia aunque con poca chichi, pero muy bien puestas y discretas que resultaban más que suficientes y adorna ban con su garbo la delantera de Consuelo, a mí me encantaba y quería que ella lo notara, para ver si se podía cambiar de pareja, pero René no dejo espacio para nada, en un breve tiempo en que mi amigo tuvo que ir a tirar la piedra; Me acerque con Consuelo y de plano le pregunté si estaba a gusto con René. – claro muy a gusto ¿por qué lo preguntas? ¿Acaso no estás bien con mi hermana?...

—Si claro, pero me gustaría estar contigo. Esa es la verdad. – Le dije de plano para sincerarme. Ella entre risas nerviosas me miró asombrada y luego dijo: –"No tengo nada contra los galanes mayores, pero en este caso tú ya estás mayor, yo creí cuando los vi llegar la primera vez, que René había traído a su papá.

–¿Qué te pasa?, somos de la misma edad…

Ja,ja,ja…eres simpático…¡misma...edad!–,

–Creyó que era una ocurrencia mía. Entonces René regresaba y ya no pudimos hablar. Llegó y se sentó junto a Consuelo, quien lo abrazó y me miró por último con complicidad de lo que se acababa de ventilar entre ella y yo. Siguieron las visitas y yo nunca pude apartar ese sentimiento de mí y me dolía hasta que mi amigo besara a Consuelo y la acariciaba de tal forma que me irritaba. Mientras Silvia casi no me pelaba, tenía atenciones para mí y me hablaba con respeto. Pero no me dejaba acercar, me hacía guardar la sana distancia.

Mi reacción no se dejó esperar y fue apenas en la tercera visita que, me levanté del sillón donde luchaba con Silvia por abrazarla, besarla o lo que se pudiera ir haciendo rumbo a una buena cachondeada, pero no progresaba así que me levanté y fui al baño para calmarme, frente del lavamanos, abrí la llave del agua fría, la tomé con ambas manos y la llevé a mi rostro; repetí la operación varias veces, hasta que sentí la presencia de un ser desconocido. quité la toalla que secaba mi rostro y me encontré. Frente al espejo, que siempre franco, me devolvió mi cara tal como la han dejado después de todos los años que he acumulado en mi existir y dije esto, que me salió del alma:

Ya no me reconozco,

el rostro que miro en el espejo

no es el mío ni siquiera

me parezco

No lo puedo aceptar,

no lo quiero es un rostro arrugado viejo

Lleva encriptados en sus rasgos

los secretos de mi vida que

no puedo interpretar.

Solo veo rota mi juventud

El tiempo celoso enemigo

Con el mismo a su favor

Traicionero prepotente

Atacó pausadamente

Y fue haciendo a su labor

Todos estos años ha estado conmigo

Pasó los buenos tiempos junto a mí

Hoy me paga con arrugas y arrebata mi salud,

estoy demacrado, enfermo y soy lento al caminar.

Ha encorvado mi figura,

me disminuyo el vigor,

esto de llegar a viejo no lo puedo soportar

solo hay una escapatoria…

Refugiarse en el amor.

–¡Vaya!

–Pero que estoy Diciendo

–Eso es un poema… dijo sorpresivamente René que se hizo presente junto a mí, pero solo de la cintura para arriba y le pregunte que cual era el objeto de aparecer solo la mitad; –es depende de la situación aparezco la mitad, o solo la cabeza, una mano, o el dedo índice, según se requiera.

–Si ya entiendo. que todo lo que sucede a mi alrededor lo registro y lo tengo bien vigilado. Me recuerda un consejo de mi padre, que, aunque no nos daba muchos consejos este, pareció muy bueno es fácil de recordar y de tenerlo presente siempre y a cada momento y es fundamental pero además consta de solo una palabra la que se nos pide ponerle atención, La palabra es Fíjense ó Fíjate y esta importante palabra todo mundo la repite como loros sin poner atención a