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Mazo y el León
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Mazo y el León
Libro electrónico32 páginas22 minutos

Mazo y el León

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Información de este libro electrónico

Para aprobar su instrucción como hechicero, Mazo debe dirigir a un león a punto de morir de hambre por un corredor de una jaula a otra. Después, tiene que sobrevivir a otro hechicero que le odia y a la diosa de la Luna, que le ama.

¿Cansado de varitas mágicas y de «recetas» con ojo de tritón?

Si los ingredientes contienen realmente el poder, efectuamos un experimento de química.

Quizá los verdaderos magos imponen su voluntad en el mundo sin trampas.

A principios del Neolítico, las escuelas de hechicería enseñaban una potente magia interior. Los cánticos y los adornos podrían engañar a los cazadores primitivos y a los encorvados agricultores, pero no al rey de las bestias. En el fondo, tu fuerza interior proviene del dios o la diosa a la que sirves.

En La Reina Luna, un cuento corto para niños pequeños, una hija de leñadores pobres camina hasta una ciudad para ver a la Reina Luna, encontrándose con el rechazo de sus orgullosos habitantes.

Sin embargo, cuando se aleja de los vanidosos y poderosos, conoce a una muchacha en un carruaje que insiste en que intercambien sus ropas, y nunca vuelve a ver a su madre ni a su hermano pequeño.

Mazo y el León se publicó por primera vez en BARDIC RUNES IX en 1994.

Es un cuento corto histórico fantástico que incluye dos regalos:

1. La Reina Luna: un cuento corto escrito para un libro infantil ilustrado.

2. Mazo y el León ~ La Reina Luna entre bastidores: un artículo inédito del autor.

Desplaza el ratón y descarga ahora Mazo y el León.

IdiomaEspañol
Fecha de lanzamiento22 nov 2016
ISBN9781633393776
Mazo y el León

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    Mazo y el León - Richard Stooker

    Mazo y el León ~ La Reina Luna

    Richard Stooker

    Mazo y el León

    Mientras meditaba antes de la aurora durante la mañana de su última prueba, Mazo se enamoró de una diosa, con lo que destruyó toda esperanza de riqueza y poder por parte de su familia, aunque sobreviviera a ese día.

    Al igual que su enemigo Charco y otros ocho hechiceros que se entrenaban en el templo de Turram, concentró su mente y sus emociones para intentar abrir sus centros de energía. Durante meses, se habían purificado practicando el ayuno, sudando en cabañas llenas de vapor y bebiendo pociones mágicas. Ahora esperaban una señal a su favor de Pennrune, dios del fuego, las montañas y del templo de Turram.

    Sin embargo, una intensa luz plateada inundó su visión interna. El increíble resplandor provenía de una pequeña figura femenina.

    —Samaal —llamó ella.

    Su corazón se abrió lleno de asombro, temor y un amor devoto.

    Solo el padre y la madre de Mazo, y Loraa, la diosa de la Luna, conocían su nombre secreto.

    Loraa, regente de los sueños, las mareas y la sangre. La más débil y la más fuerte. La hija pequeña que mantenía la paz entre el padre Sol, la madre Tierra y el hijo mayor Muerte. Loraa había escogido a Mazo como su siervo.

    Le reveló que Pennrune deseaba que Charco sucediera al gran hechicero del templo de Turram. Además, le dijo que no podría intervenir para ayudarle si fracasaba en su prueba final. Si conseguía sobrevivir, ahora lo sabía, se enfrentaría a una vida de pobreza. Ningún siervo de Loraa debía vender su magia a un opulento emperador.

    Había trabajado duro por nada a cambio durante diez años, pensó con amargura y también con orgullo.

    El puré de arroz se endureció como grumos pétreos en su estómago mientras se acercaba a los leones, que dormían.

    Las jaulas donde

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