Retorno al Mundo de las Hadas

Por Maria Florinda Loreto Yoris

En algunas culturas y mitologías se describe al ultramundo como un lugar subterráneo, mientras que en otras se representa como un plano espiritual o una dimensión parelela. El ultramundo de las hadas es un lugar mágico y encantado que se caracteriza por sus colores brillantes y su belleza sobrenatural. Luego de Viaje al Mundo de las Hadas, en Retorno al Mundo de las Hadas la autora vuelve a llevar al lector a hacer un recorrido por esas dimensiones paralelas a la nuestra, llenas de magia y encanto, a través de las experiencias vividas por los personajes. . Es una lectura apta para todos, con mensajes enriquecedores e historias llenas de un peculiar realismo, escritas con un lenguaje sencillo y un elevado tono emocional que hará al lector viajar con cada personaje al misterioso ultramundo de las hadas y extraer valiosos aprendizajes.

• Idioma: Español
• Editorial: Maria Florinda Loreto Yoris
• Fecha de lanzamiento: 25 ago 2023
• ISBN: 9798215924082

Maria Florinda Loreto Yoris

María Florinda Loreto Yoris, nacida en Caracas, Venezuela, el 24 de mayo de 1969. Publicista de profesión, comunicadora por vocación. Amante de la lectura y la escritura, durante más de veinte años se ha dedicado al estudio de diversos temas relacionados con el Ocultismo y el Misticismo. Se estrenó en la escritura de relatos con “Revelación de Medianoche” en la obra “MEDIUM, historia de un corazón sensible”, en coautoría con Salvador de Ávila. Ha iniciado la serie; Mundo de Hadas con la antología de cuentos;Viaje al Mundo de las Hadas, así como la serie de fantasía paranormal sobre la misteriosa desaparición de Sarah Whitman. Es creadora del periódico digital ficticio "Disparates News", exclusivo de su blog literario El Sello del Escritor donde, además de publicar relatos propios y de colaboradores, realiza entrevistas a escritores independientes, en español e inglés. Recientemente inició la escritura de no ficción con la serie astrológica "Estrellas y Destino"

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María Florinda Loreto Yoris

Retorno al mundo de las hadas

Autoedición

María Florinda Loreto Yoris

Revisión

Félix Loreto

Maqueta

María Florinda Loreto Yoris

Diseño de portada

María Florinda Loreto Yoris

Foto tomada de Internet

Derechos a quien correspondan

Retorno al mundo de las hadas

El ser humano, en sus primeros años de vida, es dado a las fantasías, lo que lo lleva a viajar a mundos imaginarios y fantásticos, donde reinan hadas que se convierten en hermosas mujeres acompañadas de apuestos caballeros. Lagos, ríos y tormentas complementan los escenarios. Así han llegado a nuestras vidas los libros que nos divirtieron de niños.

Gina y el viajero de la noche

Era el primer viernes del mes de agosto y faltaban diez minutos para la medianoche cuando Gina Alberti, diseñadora y fotógrafa de profesión, vencida por el cansancio que le produjo el arduo trabajo de toda la semana, se recostó en el sofá y se dejó envolver por sus ensoñaciones. Llovía a cántaros aquella noche y el sonido del agua trajo a su mente todas sus interrogantes acerca de los misterios de la tierra y el cielo, de los bosques y los arroyos de las montañas. De pronto, el estruendo producido por una centella abrió de par en par la puerta principal y la ventana del comedor, mientras el viento de tormenta azotaba todo a su paso. La joven despertó sobresaltada y se dirigió hacia la entrada en medio de la oscuridad, sin sospechar que lo que encontraría allá afuera iba a cambiar su vida para siempre.

Debido al torrencial aguacero, Gina escuchaba ruidos extraños. Todavía dentro de la casa, sin cruzar aún la puerta, ella podía oír cómo se confundía el crujir de las paredes con el sonido del motor de la nevera y el gorgoteo del agua de las tuberías. De repente, en medio de aquella sinfonía, el viento de lluvia transportó un olor a musgo que le recordó su infancia en la casa de campo y las historias que le narraba su madre antes de dormir. La chica siempre sintió fascinación por las leyendas, especialmente aquellas en las que intervenían los truenos y centellas. Apenas ella puso la mano en el marco de la puerta, y tras el destello de un relámpago que iluminó todo el jardín de la entrada de la casa, Gina no pudo contener su curiosidad y se aventuró a salir a mojarse bajo la tormenta, sin importarle el riesgo de que un rayo partiera en dos algún árbol o hiciera estallar el cableado de la electricidad.

Gina emprendió una carrera bajo la lluvia, mientras los chasquidos de sus pisadas traían a su memoria un sinfín de anécdotas infantiles. Se percató de que en pleno aguacero se oían susurros que parecían viajar en el viento huracanado. De repente, el jardín pareció dar vueltas y la muchacha tuvo la sensación de que todo a su alrededor se hacía más grande y brillante en medio de la oscuridad. Los relámpagos iluminaban la noche y los destellos se reflejaban en los charcos, cuando los graznidos de una bandada de cuervos llamaron la atención de la joven. Al mirar hacia la profundidad del relampagueante cielo, un rayo plateado con chispas doradas y púrpura casi la cegó. En ese preciso momento, hubo un estallido que estremeció el cielo y la tierra, y Gina gritó despavorida, pero nadie la escuchó.

El entorno se hizo borroso y el ambiente era difuso cuando una niebla blanquecina emergió del suelo envolviéndolo todo. De manera repentina, se esparció un intenso olor a musgo, similar al que había penetrado en su casa unos minutos antes, pero ahora la fragancia venía con notas de sándalo. Los sentidos de Gina se agudizaron y ella comenzó a percibir con más intensidad el golpe del viento feroz en su rostro, los sonidos de la noche y el aroma inconfundible del agua. En medio de aquel espectáculo de sensaciones, a la joven fotógrafa le pareció escuchar en el aire el eco de una voz que la llamaba.

De forma súbita, Gina sintió que los pálpitos de su corazón se habían acelerado y una fuerte vibración la invitó a acercarse al árbol que estaba frente a la entrada de su casa. La muchacha cruzó la calle y, al encontrarse al pie de aquel inmenso roble, fue sorprendida por la figura de un apuesto hombre que emergió de la niebla. Aquel enigmático caballero tenía una mirada intensa y penetrante.