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Dias De Silencio
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Libro electrónico109 páginas1 hora

Dias De Silencio

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Das de Silencio se escribi en el ao 2002 y sta es la primera vez que su autor, Luis Felipe Zermeo Bautista, da a conocer el primer libro de la serie de novelas de Ciencia Ficcin llamada Khelltec Saga, donde se refleja un futuro que, despus de ser devastado por guerras religiosas, deja un mundo cansado de la espiritualidad y donde las corporaciones cumplen cualquier deseo a sus clientes a cambio de conseguir la esencia misma de la vida el alma humana.

Novela Das de Silencio
Autor. Luis Felipe Zermeo Bautista
IdiomaEspañol
EditorialPalibrio
Fecha de lanzamiento27 dic 2012
ISBN9781463346508
Dias De Silencio

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    Dias De Silencio - Luis Felipe Zermeño Bautista

    DIAS DE SILENCIO

    LUIS FELIPE ZERMEÑO BAUTISTA

    Copyright © 2003, 2013 por Luis Felipe Zermeño Bautista.

    Número de Control de la Biblioteca del Congreso de EE. UU.:    2012923995

    ISBN:                      Tapa Dura                                           978-1-4633-4652-2

                                    Tapa Blanda                                       978-1-4633-4651-5

                                     Libro Electrónico                                978-1-4633-4650-8

    Todos los derechos reservados. Ninguna parte de este libro puede ser reproducida o transmitida de cualquier forma o por cualquier medio, electrónico o mecánico, incluyendo fotocopia, grabación, o por cualquier sistema de almacenamiento y recuperación, sin permiso escrito del propietario del copyright.

    Esta es una obra de ficción. Los nombres, personajes, lugares e incidentes son producto de la imaginación del autor o son usados de manera ficticia, y cualquier parecido con personas reales, vivas o muertas, acontecimientos, o lugares es pura coincidencia.

    Para realizar pedidos de este libro, contacte con:

    Palibrio

    1663 Liberty Drive

    Suite 200

    Bloomington, IN 47403

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    Desde otro país al +1.812.671.9757

    Fax: 01.812.355.1576

    ventas@palibrio.com

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    ÍNDICE

    Introducción

    Capítulo 1:   La Pregunta

    Capítulo 2:   Los Hombres De Fe

    Capítulo 3:   Adentro De Khelltec

    Capítulo 4:   Mercy Y Doncan

    Capítulo 5:   Los Únicos

    Epílogo:       Hacer Lo Correcto

    Dedicado a mis padres

    Por enseñarme a hacer lo correcto.

    Agradezco a mi Corrector de estilo el Lic. Edgar Iván Guerrero Cortes porque le ha dado coherencia a mis escritos y a mi Diseñador de portadas el Lic. Oscar Omar López Carranza que me ha seguido en cada loca aventura que he emprendido.

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    INTRODUCCIÓN

    Bienvenidos al futuro de la raza humana; el planeta es gobernado por corporaciones, no hay guerras, no hay gobiernos, no hay hambre …sólo comercio.

    Y el producto más apreciado es la esencia misma de la vida, la única posesión que tiene el humano desde que se concibe en el vientre de la madre hasta la eternidad… El alma humana.

    Lo que fueran naciones, reinos o dominios ahora son ahora sectores desde que la Guerra de Fe, como fue llamada hace más de treinta años acabara con todo vestigio de los sistemas de gobierno; cada sector es autosuficiente y posee una población estable de acuerdo a sus recursos.

    Uno de los sectores con más desarrollo, es el que mantiene la Corporación Khelltec; el sector del mismo nombre es conocido también como la capital del mundo puesto que la corporación es la de mayor influencia en todo el planeta, llevando sus productos a cada hogar; además de mantener la nueva tecnología a disposición de todo el público, la ciudad posee la Biblioteca Mundial y la Torre de Luz.

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    CAPÍTULO 1

    LA PREGUNTA

    1

    La luz del sol empezaba a iluminar cada rincón del sector de Khelltec, los edificios activaban sus sistemas de energía solar abriéndose como capullos de flor en primavera; la actividad de las calles, tanto en el piso como en los niveles superiores, donde los transportes recorrían sus rutas preestablecidas por el sistema gravitacional, iba en aumento y aunque la ciudad (nunca) duerme, el ritmo de vida en el día se incrementaba momento a momento.

    Un transporte de considerable tamaño de color blanco con líneas azules, con el símbolo inconfundible de la corporación Khelltec se detuvo en un bloque de departamentos por encima de los 70 niveles.

    —Este es el lugar, 340-DG —informó un agente a sus subalternos y sin decir nada más, dos personajes bajaron del transporte por un puerto de vehículos hacia el interior del edificio, sus armaduras plateadas, con adornos en azul y dorado contrastaban con los largos pasillos de color gris; sus fuertes pisadas y su marcha creaba un eco que se escuchaba en todo el piso.

    Las dos figuras que dominaban el lúgubre corredor, eran llamados por muchos como los ángeles de la pregunta definitiva.

    —Prepara el receptor de almas —dijo uno de los agentes mientras se detenían enfrente de una puerta y tocaban. Al poco tiempo una mujer de aspecto lamentable les habría, llevaba el pelo cortado en mechones, más de un morete se le veía en el rostro a causa de los golpes.

    —¿Son de Khelltec? —preguntó ella temerosa.

    —Usted nos llamó y estamos dispuestos a ayudarla, su solicitud está registrada y ha sido aceptada por Khelltec Corp. –anunció uno de ellos con un tono reverencial y cortés.

    —Sí, yo los llamé, pero no estoy segura de… —les dijo la mujer retirándose un poco por el miedo que le daban aquéllos de las armaduras brillantes y con sus cascos de superficie lisa como el espejo que ocultaban cualquier expresión de su rostro.

    —Conoce la ley —dijo el otro con un tono tranquilizador, viendo que ella se retiraba paso a paso hacia el interior su lamentable departamento.

    —Usted tendrá todo lo que ha solicitado, con garantía de Khelltec Corp. —anunció el primero con un tono amable.

    —La casa en las zonas de la costa, será una mujer atractiva, tendrá los hijos que usted quiera —argumentó el otro tratando de que ella no les cerrara la puerta.

    —¿Una mujer atractiva? —preguntó ella mientras volvía al umbral de la puerta, su voz denotaba interés y su mano se la llevó a la cara tratando de recordar su juventud perdida por el paso del tiempo y el maltrato de sus últimos años.

    —Todo lo que usted ha deseado se cumplirá… Pero para que tenga todo eso, debe desearlo con sinceridad —y el agente le extendió la mano en señal de amistad.

    —Sea sincera con usted —le aconsejó el otro.

    Y ella pronunció las palabras —Yo doy mi alma a Khelltec Corp. por todo lo que he deseado.

    El agente o guardia como comúnmente era llamado activó el aparato llamado receptor de almas. Una luz azulada se introdujo en el cilindro metálico mientras decía con tono paternal. —Bienvenida a la familia de clientes de la Corporación Khelltec, acompáñenos, una vida nueva la espera.

    La tomó suavemente del hombro y la llevó por el pasillo, la mujer volteó hacia uno de los guardias y le preguntó con tono infantil. —¿Tendré hijos?… yo no puedo por…

    El agente se quitó el casco con suavidad revelándole un rostro sereno y que radiaba amabilidad, la tomó de la mano y le susurró. —Los tendrá, Khelltec Corp. le dará una nueva matriz fértil y los permisos de población… No se preocupe, ahora tiene a Khelltec y le proporcionará todo lo que ha soñado. —Ella vio al otro guardia y por primera vez supo en su vida que todo iba a estar bien. Las tres personas se alejaron hacia la salida del edificio desconociendo que un joven los veía desde el otro extremo.

    El joven se asomó al pasillo mientras veía cómo se alejaban los dos agentes de la corporación con una nueva clienta satisfecha por su cambio de vida.

    —Otra alma perdida… la tercera del edificio en este día —pensó, recordando que apenas el sol iba iluminando la ciudad, ya que había volteado a ver la luz en una ventana que se encontraba al final del corredor, dejando que empapara de claridad todo su ser y revelara su físico.

    El muchacho era de complexión media, cabello rojizo y llevaba como ropa un traje deportivo de color azul. Se veía prácticamente como cualquier muchacho de su edad excepto que no era normal, su mirada delataba su naturaleza

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