El Amor Está En Todos Lados
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Las frecuencias de la Paz Cósmica,
El Movimiento rítmico de las estrellas
A todos los rincones del Universo,
Con el encargo de una Armonía Cósmica
Que llevaban esas sublimes vibraciones,
Justo en los momentos de Paz Plena,
De Amor Pleno, y de Serenidad Infinita,
De que gozaba el Señor Nuestro Dios.
Para dar a luz El Amor al Universo,
Para dar a luz a su Hijo Amado,
La noche en que los astros se alinearon,
Y revelaron una Paz que no existía...
Revelaron el naciente Amor que sería
La pasión derramada en cada rincón,
En cada corazón de los seres humanos.
¡Al fin Dios dio a conocer su máximo don!
¡Al fin el Universo conoció el Amor!
Que éste, al igual que Dios, estaría
En todos los rincones del Universo.
Así, con Dios: El Amor está en todos lados.
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El Amor Está En Todos Lados - Felix Cantu Ortiz
Aclaraciones
1. El significado de algunos textos y prosas
Que aquí se exponen, están muy vinculados,
Estrechamente entre sí, de manera que,
Tales textos pueden ayudarse unos a otros
A complementar su lectura comprensiva
Y a encontrarle un significado lógico
Del tema que se escogió para desarrollar.
2. Hay que aclarar que muchas definiciones
Y explicaciones dadas aquí, con respecto
Al Universo y al Cosmos y sus relaciones
Con ciertos conceptos escritos en La Biblia,
Son básicamente apreciaciones sacadas
De mi intuición, imaginación y mis sentidos,
Conceptuados pues, en mi mente y cabeza,
De manera de encontrarle lógica a las cosas.
3. No se pretende ponerse contra cánones
Ya establecidos por autoridades científicas,
Y mucho menos religiosas. En general hay
Un gran porcentaje de ficción y de ilusiones
Que simulan realidades un poco enredadas.
Siempre es bueno conocer las ideas de otros,
Aunque sea de esta forma, porque pueden
Ayudar a enriquecer mentes más intensas.
4. Se pretende que los escritos, textos y prosas,
Aparezcan como si fueran una serie de poemas,
Que aunque no lo sean, en realidad, se quiere
Darles un pequeño acomodo y corte artístico,
Sólo para continuar la secuencia de poemas,
Que en realidad sí lo son, y escritos por mí
En otros libros exclusivamente de poemas.
5.- Hay textos sacados de libros de formación
Espiritual principalmente para jóvenes,
De donde obtuve información especial
Que yo mismo arreglé y adapté a este librito
Como texto de fácil lectura y aprovechamiento.
6. Este libro no es un documento científico.
7. Este libro no es un documento religioso.
8. Este libro no es un documento filosófico.
9. Este libro no es una guía espiritual.
10. Este libro no es un manual para cambiar
Ideas y pensamientos en las personas.
11. No es la base de ninguna ideología.
12. Los conceptos que se dan de Dios aquí,
Por ningún motivo se pretende fijarlos
En la mente de nadie, ni cambiar la idea
De lo que ya está escrito en los libros
Que ampara la Iglesia y la Fe Católica.
13. No es un libro de crítica, ni de protesta.
Agradecimiento
Para esos seres humanos excepcionales,
Especiales, de calidad y calidez humana;
Para aquéllos, que nos cobijaron con amor,
Que nos dieron cariño y respeto,
Que nos ampararon y nos guiaron;
Nos dieron grandes consejos y enseñanzas,
Predicando con el ejemplo y su experiencia,
Y que formaron parte de muestras vidas…
Los que dejaron huella, dejaron su esencia,
Y, de alguna manera siguen revelándose,
Cada día, en cada lugar, en cada espacio…
Al susurro del viento y de las olas del mar,
En el murmullo del fluir del arroyo,
En los fulgores de cada rayo de luz…
En las chispas alegres de momentos felices,
En el afecto de un amigo o un compañero,
En la sonrisa e inocencia de un niño…
Las palmadas y abrazos de un ser querido,
En un dulce y bello recuerdo sin olvidar
Que sin pretender te dibuja una sonrisa…
Para el corazón, la mente y el sentimiento
No hay barreras, ni existe ausencia física.
Sabes que desde donde estén, contigo están,
A través del sentimiento, y dando su Luz,
Cada vez, y más, con mayor intensidad.
Gracias Señor, Dios Todopoderoso y Eterno
Por el tiempo que nos permitiste tenerlos.
Con todo el Amor, el Cariño, el Respeto,
La Admiración y el Agradecimiento,
Porque sé que están Allá donde están.
Gracias por todo lo que ellos nos dieron.
Sé que algún día nos reencontraremos,
Sé que sólo se nos adelantaron en el viaje,
Y alegres, allá prepararán nuestra llegada.
Para mi hijo Renatito y mi nieto Renatito.
Índice
Aclaraciones
Agradecimiento
A Dios no supo amar
Aires de mis amores
Alma desamparada
Alma y cuerpo
Alucinación
Amarás a Dios…
Amigo poeta
Amor a primera vista
Asalto
Aura
Autodestrucción
Big Bang 1
Big Bang 2
Brevedad de la vida
Breve meditación sobre la Fe
Carácter, Carrera para la vida
Carta de un fantasma
Clemencia
Comportamiento de las especies
Conceptos celestiales
Conjeturas y sospechas
Cosmos cambiante
Cualidades de Dios
De la brevedad de la vida
Desaparición de los dinosaurios
Desarrollo de las especies
Desvelados
Dilema de Pascal
Dilema sobre un aborto
Dime qué es…
Dime qué es el amor
Dios está en todos lados
Dios me transformó
Dios, otra descripción
Doble naturaleza
Dos lados de la vida
El Amor está en todos lados
El Amor Eterno
El escritor del Diablo
El hombre
El invento de la moral
El miedo: La sal de la vida
El ojo artificioso 1
El ojo artificioso 2
El pensamiento
El poder interior
El reino de Dios
El tiempo vuela…
En coma
¿En dónde quedó la magia?
En el nombre de Dios
En la espera de la muerte
En torno a cinco sentidos
Espíritu de luz
Espíritu: El Vacío Universal
Espíritu Santo
Evolución de la Conciencia
Evolución dentro del Todo
Evoluciones Masa-Energía
Extinción de una especie
Faltaba alguien
Fe
Fiesta de Fin de Año
Geometría del sonido
Guerreros del Señor
Había una vez un lago
Hacia dónde va el hombre
He aprendido…
Historia singular
Hombre
Hombre y Dios
Hombre y no animal
Humanidad en riesgo
Impaciencias
Inquietudes del hombre
Juana la de Nicanor
Judas y Jesucristo
La casa de mi abuela
La casa de mis papás
Ladrones de la Paz
La Esencia Divina
La deuda espiritual
La esfera
La mejor cualidad del hombre
La música del Cielo
La nave
La Oración
La transición
La vejez
La vida en la Tierra
Lo desconocido
Lo mejor está por venir
Los planetas místicos
Los súper héroes
Madre Naturaleza
Magia de la vieja amistad
Marginados
Más Allá
Matar
Melancolía
Mente y Ciencia
Mi manera de ver la vida
Miseria humana
Mis experiencias ante El Covid
Morir
Motivos
Motivos de vivir
Muerte
Nobleza Humana
Nostalgia
Nos traspasa
Número Áurico
Objetivo: aquí o allá
¿Ojos mal diseñados?
Padre Nuestro que estás en los Cielos 1
Padre Nuestro que estás en los Cielos 2
Padre Nuestro que estás en los Cielos 3
Pasión
¡Parece que envejecí!
Paz del Cosmos
Perdón…
Presencias de antaño
Presunción humana
Prisionero de amor
¿Quién no quiere ser feliz?
¿Quién realmente soy?
Quiero estar a tu lado
Regresar a casa
Reparando almas de adultos
Rojo púrpura
Sabio, poeta y genio
Santidad
Señor Jesucristo…
Seres vibracionales
Soberbio, orgulloso y rencoroso
Sólo quiero verte
Soneto 1
Soneto 2
Soneto 3
Soneto 4
Soneto 5
Soneto 6
Soneto 7
Tejer y destejer 1
Tejer y destejer 2
Todo acaba en nada
Tren sin retorno
Último día del año
Una herencia para nadie
Un dulce sueño
Un escritor muy singular
Universo juguetón
Un poco de la vida
Un recorrido con el Padre Tiempo
Un secreto oculto
Vacío en el alma
Verdad Universal
Verdades y misterios
Vibraciones de Amor
Vida del Cosmos
Vida germinal
Vida mortal y Vida eterna
Visión de La Sultana del Norte
¿Ya te felicitaste…
Acerca del Autor
Otras Obras del Autor
Mi México querido...
A Dios no supo amar
¿Dime de qué te puede servir
Querer con todo el corazón,
Si un día se frustra aquella ilusión
Que la muerte viene a mutilar
Y al alma vacía la viene a dejar,
Si esa alma a Dios no supo amar?
¿Para qué aquella nube pudiera servir,
La que escarcha en forma de cristales,
El agua en gotas que a tus jardines llena,
Y a tus rosas fragantes ha de alimentar,
Si sedienta tu alma se habrá de quedar,
Si vives entre la inmundicia y promiscuidad?
¿Qué pudiera en los días deleitarte
Que no fuera lo que Dios pudiera darte?
¿Pero de qué te serviría ese estandarte,
Que con lo que Dios ha de proporcionarte,
No compartirías ni en uno solo de tus días
Lo que Él te da y con ello engrandecerte?
¿De qué te sirve el banquete recién horneado
Servido en finas vajillas de la China,
Con tintes de oros y platas decoradas,
Que resplandecen con la luz de la luna,
Si afuera de las puertas de tu hogar,
A un hambriento tu pan le has de negar?
Aires de mis amores
Ya ni los hombres, ni sus hijos,
Saben que es nuestra la Naturaleza,
Que a toda alma llena de nobleza,
Enseñándoles a la vieja usanza.
No hay a quién interese un instante,
Pararse en un camposanto, y respirar
El aroma de jazmines dominante,
Mientras desempolvaras las lápidas
De las viejas tumbas de tus padres.
Ponerles flores ya sería mucho pedir,
Sentarse un rato y con ellos platicar,
Contarles de tu historia los logros,
Tus ideales, tus deseos, tus fracasos,
Y someterse a sus secretos regaños.
Llorar allí un poco por su ausencia,
Diciéndoles cuánto los has amado.
El alma descansa y se engrandece,
Cuando intercambias tus emociones
Con esos muertitos que son muy tuyos.
¿Quién se detiene a ver el sol, la lluvia,
O la Primavera que pasa desapercibida;
El Verano que a los colores da cabida,
La mariposa que liba miel en un botón,
Junto al lago sereno de aguas de cristal,
Que se abastece de la hermosa cascada
Puesta como marco en la bella montaña?
¿Qué pasa entonces con lo esencial?
Es que se me está borrando de la mente,
Los antiguos hábitos tendré que recordar:
Ansío los rumores del viento al pasar.
En plenilunio, oír a un grillito cantar,
La esencia húmeda del bosque, respirar,
Los recuerdos clásicos antiguos, imaginar…
La humanidad de antes inhalaba estos aires,
Estos aires míos, de mis antepasados,
Que han recolectado los últimos suspiros
De todo el que por esta Tierra ha pasado.
Estos aires, que dieron a mis ancestros
El primer respiro, y traen las esencias
Del olor de las fragancias de las flores;
Aires que me llegan al fondo del alma,
Que huelo y aspiro con todas mis ansias,
Con el anhelo de mi alma y corazón:
Porque no me traigan inquietudes,
Porque me traigan sólo calma y reposo,
Porque me traigan paz, y siempre paz,
Esa amada paz que tanto añoro.
Alma desamparada
"¿Decidme hijo mío,
Dónde quedó el sueño que soñaste,
Dónde quedó aquella ilusión,
Dónde quedó aquella felicidad
Que mucho buscaste...?
¿Dónde están ahora…?".
En este momento no sé lo que siento,
Confuso y aturdido estoy viviendo,
Quiero estar triste, pero a la vez alegre,
Siento mucha vida a través de mis venas,
Pero siento muerte en el pensamiento.
Me muero por querer a alguien amar,
Y me muero por estar siempre contigo,
Y en este estado de que muero y no muero,
Me muero por querer saber lo que espero.
Pero resulta que también así vivir quiero.
Me angustio por no poder encontrar,
Y sin poder absolutamente nada entender,
No encuentro nada de lo que busco,
Ni encuentro nada de lo que quiero.
Pero lo que busco, lo quiero y lo deseo.
No sé qué es lo que me pasa,
¿Melancolía, tristeza, angustia, alegría?
Volteo hacia atrás y quiero regresar,
Pero mi alma me impulsa hacia adelante,
Y como alma triunfante, acá quiere estar…
Soñando a veces quiero desaparecer,
Y a veces soñando me quiero recrear,
Quiero intentar encontrar la felicidad,
Lo que siempre he estado buscando.
¿Será eso lo que mi alma está reclamando?
Es claro que unos toman y otros dan,
Unos apenas vienen y otros ya se van,
Y yo, así como soy, no sé ni donde estoy.
Yo ni siquiera sé, si vengo o si voy,
Pero en la espera en silencio aquí estoy.
No sé por qué todo me hace llorar,
Sólo sé que nadie me lo puede explicar,
Sólo aquél al que le lloro y le imploro,
Con un grito amargo, triste y lastimero.
Que me defina esta ambigua situación...
Porque por saberlo me muero...
Y por no saberlo, también muero...
Alma y cuerpo
En un combate de vida o muerte,
De esos que conmueven al ser humano,
Siempre se presenta esta disyuntiva:
¿Ha de ser el alma un noble corcel
Que el cuerpo, a manera de jinete cruel,
Fustigue sin descanso, y lo canse,
Y lo agote, hasta quitarle la fuerza?
¿O bien, el alma ha de ser el jinete
Que refrene con brida y rienda corta
Al desobediente potrillo de su cuerpo?
¿Ha de empujarte el pecado instintivo
Como si fueras un buque sin timón,
Hacia la decadencia y la perdición?
¿O bien gobernarás con mano vigorosa
El navío en medio de la tempestad
Sin escuchar los cantos de las sirenas?.
Alucinación
Psicólogos expertos dicen y aseguran,
Que bajo ciertas circunstancias de presión
De vibración, o de sedantes acumulados,
En muchos casos, de inmovilidad corporal,
Hormonas son creadas por ciertos órganos,
Y más, por glándulas de interna secreción,
Y al ser generadas las dichas sustancias,
Seguidamente pasan al torrente sanguíneo.
Directas en el mismo cerebro pueden causar
Que cambie su estado de actividad normal,
Que alucine, esto es, que el cuerpo sea capaz
De desdoblarse y mil extrañas cosas hacer,
Que no realizaría en condiciones normales,
Como ver cosas que no existen a la visión,
Familiares muertos, o Ángeles, o Demonios,
O que el alma se transporte a otros lugares,
Que la persona esté a la vez en dos partes;
Que pueda levitar, o que pueda cosas mover,
O inclusive que platique con personas,
Que murieron ya hace mucho tiempo,
Y que el enfermo quizás no conocía.
Puede suceder que adivinen el futuro,
Y sepan el pensamiento de los demás.
Está claro que con una simple fiebre,
Hay sueños que lo llevan a uno a lugares
Extraordinarios, bellos, o tal vez horribles,
Dependiendo de lo que hay en tu cabeza,
O de qué en ese momento sufre tu cuerpo;
Tales archivos, aunque estén muy ocultos,
Resurgen en situaciones corporales así,
Provocando sueños dulces, o terribles,
O visiones de cosas nunca antes vistas,
Que te cobijan en un oleaje de angustias,
De miedos ocultos y de desesperación
De lo que ya deseas salir, pero sin voluntad,
Ni te das cuenta que las tienes presentes,
Pues por tu mismo estado aletargado,
Mas, sin quererlo ni pensarlo, dices cosas
Que después no recuerdas lo que dijiste.
Llegas a hablar con gente que desconoces,
O que hablas tú y ellos en otras lenguas
Que son para ti totalmente desconocidas.
Hubo historias de gente en la antigüedad,
Que con una simple fiebre que tenían,
A la par, por las alucinaciones provocadas
Ya sean por los ataques de visiones
O por facilidades para hablar atrocidades
En su lengua, o en lenguas desconocidas,
Fueron condenados a la hoguera,
Juzgados por los que los observaban
Pues debido a la sarta de cosas que decían,
Concluían que estas personas eran poseídos,
Que tenían pactos con diablos del Averno,
Y que todo lo que hablaban era dirigido
A los diablos más infames y despiadados
Del infierno, que estaban poseyéndolos.
Unos dicen que pueden soñar despiertos,
Sí, si enfocas la mirada en un punto fijo:
Los pensamientos viajan a otros tiempos,
Los pensamientos viajan a otros mundos.
Esto es meditación y oración efectiva.
Con este método practicado sutilmente,
Se puede llegar a la Contemplación,
E inclusive, hasta a la Transfiguración.
Amarás a Dios…
¿Cómo persuadirme de siempre amarte
Pues todo alrededor de ti se destila,
Si eres Tú mi tiempo en presente,
Y el futuro que mi alma anhela...?
Eres luz, eres soplo, eres torrente,
Eres trueno, eres rayo, y eres mar;
Eres agua, tierra, viento y fuego,
Que me limpia con su flama ardiente.
¿Cómo persuadirme de comprenderte,
Para amarte con toda mi alma,
Con esencia, presencia y potencia,
Y con todo mi corazón, venerarte...?
Estás aquí, allá, y en todas partes,
No puedo verte, pero puedo sentirte,
Ni puedo olerte, ni oírte, ni gustarte,
Mas, pareces de mí, una parte.
No puedo esconderme de tu mirada,
Ni puedo negar tu protección sagrada,
Y aunque no sepa a dónde te fuiste,
Muchos sabios conocen tu escondite.
¿A dónde ver para ver Las Alturas?
¿A dónde ver para ver a Los Cielos?
¿Es como dicen, que estás en Los Cielos?
Para mí, que son puras imposturas.
Sólo Jesucristo habló con Verdad:
"No buscarás a Dios en el cielo,
En el firmamento de la inmensidad,
Se esconde detrás de tu propio velo".
Y amarlo en mí, significa descubrirlo,
Sentir su Necesario Principio Creador,
En todo este Universo manifestado,
Desde el firmamento hasta mi interior.
Y para amar a Dios, he de comenzar,
A sentir y amar ese Principio Creador,
Sentir el ritmo de su Sagrada Condición,
Con el fuego que inflama a mi corazón.
El amor está latente en todo lo creado,
Visible, invisible, orgánico e inorgánico,
Hemos de amar este Principio Creador
Para después amar a todo lo demás.
Amigo poeta
¿Quién podrá ser ése,
Que la gente ni se imagina,
Que al que anda triste anima,
Y al desconsolado lo encamina?
¿Quién es ése en su templanza
Que por su afán y don de amistad,
Nos regala en estos días bonanza
Regocijo, seguridad y remembranza?
¿No es ése uno que hace poemas
Que son tan breves y concisos,
Que en sus versos lanza temas
Tan variados pero muy precisos?
Ése es un amigo muy especial
Que sin pensar el día nos alegra
Con sus ideas y buenos mensajes
Y cambia a colores las almas negras.
Por sus letras yo me desvivo,
Su cantar no hago más que escribir,
Con afán y esmero busco su poesía,
Que renueva mi corazón día a día...
Ése es el Autor de mi novela,
Ése es una estrella allá en el cielo,
Ése es la palabra que consuela,
Ése nos da la palabra con esmero.
Ése que nadie sabe que existe,
Es el que a mi alma y cuerpo da vida
Aunque su novela nadie lee, Él presiente
Que un día los corazones le den cabida.
No te alejes, quiero tenerte cerca,
Sigue escribiendo como lo haces, amado poeta
Esos hermosos temas que nadie toca,
Esas alegrías que el pasado evoca.
Que tu pluma siga estampando el poema,
Que tu mente siga pensando el dilema,
Que me mantenga siempre anhelante,
Esa Felicidad que sacia al Caballero Andante.
Quizás yo sea menos que un espíritu
En las páginas de tu libro escrito,
Pero tu alma sin conocerte ya he visto…
Es la misma de la que me has provisto.
¡Quién fuera lector para leer tus escritos!
¡Quién pudiera vivir el tiempo en tu siglo!
¡Quién apreciara tu narración e iniciativa,
De temas que ya nadie tiene previstos!
¡Que Dios santifique tu vocación!
¡Que Dios ilumine tu noble corazón!
¡Que Dios te dé mucha inspiración!
¡Y que tu alma tenga buena intención!
Y por parte de nosotros dos...
¡Te damos nuestra bendición...!
Amor a primera vista
Tengo entusiasmo, ¡Qué felicidad siento…!
Por verlos en estos agradables momentos.
Una ilusión siento, que ya se hizo realidad,
Sin ni siquiera existir antes como verdad.
Algo así como un hechizo que envolvió,
A nuestros bravos corazones apasionados,
Que dieron con un amor que andaba perdido,
Y que lo encontraron sin haberlo pensado…
Ese hermoso ángel que del Cielo ha bajado,
A mi alma de inmediato ha descubierto.
Y en ese descubrimiento se ha encontrado,
Las sutilezas que siempre había buscado…
Y heme aquí, cumpliendo con mi deber,
De alimentar de amor a este par de almas.
Mientras a su protegido alimenta físicamente,
Para a su vez le genera más y más amor…
Asalto
"Y entre el miedo y la desesperación
De sentirme en el estado en que vivía,
Intentaba rezar lo más rápido que podía,
Muchas veces, y sólo una oración repetía,
De la que más fácilmente me convenía:
Era El Padrenuestro, que de lo rápido
Y de lo despistado por las detonaciones,
No me concentraba en lo que imploraba,
Quizás rezaba partes del final al principio,
O al revés, pero sí recuerdo que decía
Muchas veces: ¡Perdóname Señor…!
.
Me hacía sentirme una sujeto mezquino,
Pues después de no acercarme a Dios
Por mucho tiempo, que ya ni lo buscaba,
Cuando yo pensaba que no lo necesitaría;
Pero ahora sí, ahora mucho lo necesitaba,
Quería implorarle que vivo me dejara...
¿Pero para qué? Si yo ya no merecía vivir
Después de todo lo que yo había hecho.
¿Para qué, entonces, la vida le imploraba?
¿De qué serviría que yo vivo continuara?
Los ojos cerraba, pero deseaba ver la luz.
Instantes después, los disparos callaron,
Incluso hasta de mi imaginación…
¿Sería porque ya se habían acabado,
O sería porque ya no podía escucharlos?
Ya no supe más de mí, ni cuánto tiempo
Duraría en el piso acostado boca abajo.
Yo creo que perdí el conocimiento,
O me dormí y me quedé paralizado.
Luego, después de no sé cuánto tiempo
Desperté del trance de inconsciencia,
Pero insistía en no querer abrir los ojos,
Y a pesar de que no me dolía nada,
Seguía manteniendo los ojos cerrados.
Me refugié en mi mente y sólo decidí
Oír lo que escuchaba a mis alrededores.
De verdad yo sentía un gran placer
Al quedarme estático en esta situación.
Mi alma parecía renovada y liberada,
Sentía algo así como una juventud inusitada,
Una inflamación o hinchazón en mi pecho
Era en todo mi ser, en toda mi esencia…
Sin saber dar explicación a esta experiencia,
Decidí armarme de valor y abrir los ojos.
Entonces pude ver todo lo que sucedía,
Veía y nada comprendía, y nada sentía…
Siento que todo se borró de mi mente,
Seguro recibí una lección por mis acciones,
Seguro fueron graves, según lo recibido,
No lo comprendo, pero lo advierto…
Esta lección ya la hube aprendido,
Aunque quedé un poco confundido,
Y esto hace que me sienta acorralado.
Aún sin ver y sin pensar en nada,
Mi destino queda libre de escoger
La suerte que me deba de tocar.
Manteniendo la boca cerrada
He de aceptar por fin mi destino,
Sin oponer resistencias a nada.
Dejo que Dios de esto se encargue,
Y permito que maneje la maniobra
Para caminar siempre sin zozobra.
Yo sé que si me vuelvo a equivocar
A la Virgen pediré que me socorra,
Mas todo a su tiempo ha de llegar.
El estar a gusto por mi disgusto,
De colores oscuros pintó mi mundo,
Sólo escapando por arte de distracción.
De tal suerte ya aprendí un montón,
E intento darme un par de cachetadas
Por tanto que lo errado quedó errado.
Aura
Luz dorada que envuelve cuerpo y alma,
Refulgencia que le nace a todo hombre
Que se encuentra en oración verdadera
Y pide por los demás cuanto pudiera.
El efecto de tener el aura muy brillante,
Es energía del Señor Santo proveniente,
Que invade todo cuerpo fervientemente,
De una gracia que es difícil de poseer.
Ése es el efecto que de tanto en tanto,
Provoca la oración a Dios, o a un Santo,
Cuando se les pide por otras personas,
Luego el beneficio, para ti viene siendo.
Contrario sucede a personas que no rezan,
Su aura prácticamente no vuelve a brillar,
El Espíritu Santo de esas oscuridades se aleja,
Y la Gracia no