Sobresalto
Por James Lawless
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Jolt (título original en inglés), preseleccionada para el Premio Willesden, se publicó por primera vez en inglés en la colección New Short Stories1 (Willesden Herald 2007)
Copyright ©James Lawless 2018
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Sobresalto - James Lawless
De pie sobre una suave toalla de algodón, se deja acariciar, a modo de calentador de aire, por el aire nocturno, mira a través de las persianas abiertas del porche y oye las olas rompiendo en la costa, mecidas por el hechizador canto del muecín que resuena por encima de los minaretes y las cúpulas bulbosas de las mezquitas. Hacia el oeste se divisa la puesta de sol que semeja un gigantesco globo. Mira atrás, a su mujer dormida, con la cabeza medio cubierta por la sábana, de la que sobresale una manga de su camisón blanco, dejando al descubierto un brazo, como si estuviera desmembrada. Escucha su respiración, ahora suave, en armonía con las olas, no ruidosa como a veces.
¿Ya han pasado dieciséis o diecisiete años desde que se conocieron en el festival literario de Galway? A él le encantan los libros, a ella los pubs donde se canta en directo y hay buen rollo. A ella le gustaba dar la impresión de ser un poco bohemia, con sus jerseys anchos y sus vaqueros, o con sus faldas vaqueras para salir de marcha
en vez de su almidonado uniforme de enfermera. Le compró la Antología de Poesía Irlandesa publicada por Faber y Faber (Faber Book of Irish Verse), la leyó en voz alta, y ella le dijo que recitaba maravillosamente. Consideraba a Yeats muy inspirador y por eso captaba el patetismo de los poemas en lo que ella llamaba su meloso acento dublinés
. Ella era apasionada y muy expresiva en sus encuentros sexuales. Ah, ¿ahora es enfermera?
dijo Flaherty en el banco, "pueden dejarte fuera de combate en treinta segundos. Ahora tiene una ligera hinchazón en los nudillos – usa jabón para quitarse los anillos antes de acostarse.
No tuvieron luna de miel, después de la boda volvieron a Dublín. Ella era enfermera en el hospital materno-infantil de Coombe; él trabajaba en un banco de Phibsboro. Destinaban todos sus ahorros y esfuerzos a la construcción del nuevo bungalow en los 2000 m2 de terreno que Michael, con gran perspicacia, había comprado años atrás en Meath.
Dos años después de casarse tuvieron una niña, Niamh, el tesoro de su vida. Se convirtió en una joven muy alta (con las piernas tan largas como Michael) y llevaba trenzas oscuras (tenía el pelo de su madre). Durante las vacaciones de Semana Santa de su primer año en la escuela secundaria, Niamh hizo una excursión a Belfast con su escuela. Una bomba explotó en un pub cuando el autobús donde viajaban subía por la Grosvenor Road, hizo añicos el parabrisas, el autobús perdió el control y se precipitó sobre un colegial, atropellándolo, antes de detenerse en la acera. Cuando ingresaron en el hospital Royal Victoria se certificó la muerte de Niamh y otras dos chicas que estaban