Nací para servir

Por Bladimir Landa Martínez

Nací para servir, relata una historia de vida que te enseña que el valor de la honradez fue la cualidad recibida aunada a obligaciones de servir, responsabilidad adquirida al quedar huérfano encaminado bajo órdenes militares de su padre, este tema relacionado con sucesos políticos, sociales y culturales en la región totonaca de Veracruz, México.

• Idioma: Español
• Editorial: ibukku, LLC
• Fecha de lanzamiento: 28 nov 2022
• ISBN: 9781685742584

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NACÍ PARA

SERVIR

Bladimir Landa Martínez

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Publicado por Ibukku, LLC

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Diseño y maquetación: Índigo Estudio Gráfico

Copyright © 2022 Bladimir Landa Martínez

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ISBN Paperback: 978-1-68574-257-7

ISBN eBook: 978-1-68574-258-4

Para mi madre Adelaida que está en el cielo.

A mis hijos Nancy Georgina y Aldrin que son mi inspiración

A mi columna vertebral, Irma, mi esposa

Dedicado a mis hermanos Aida, Efraín (EPD) Damaris (EPD), Ema, Evangelina, Orlando, Eleutaro, Melesio.

AGRADECIMIENTO

Conocer la Historia de nuestros pueblos se extingue con el pasar de los años, pocos somos quienes nos interesan saber ¿qué sucedió, como nació, como construyeron, de dónde venimos, quienes somos, porque es así, quienes fueron? Y nunca terminaríamos de cuestionarnos acerca de nuestras raíces culturales, sociales, políticas. Hoy en día existe una aficionada población esposada a la tecnología que excluye interés con lo antes mencionado. Decidí escribir esta Historia de vida y darles a conocer algunos eventos ocurridos a través del tiempo en la vida de este pequeño territorio Veracruzano. Personas altruistas aportaron experiencias propias, otras donaron información y fotografías. Quiero agradecer a mis amigos como familiares que me animaron a realizar este trabajo, en especial al Dr. Osvaldo Romero Melgarejo, cuando aquella tarde visitó mi hogar para animarme a escribir y después de una larga conversación me dije ¿ porqué no?. Realicé entrevistas, me narraron lo que vivieron, algunos hoy ya no están, pero orgullosos hijos los recordarán, esas narraciones quedarán plasmadas y el mundo entero las conocerá.

Entre ellos: Delfino Hernández García, Adelaida Martínez García, Willibaldo Cortés Gonzáles, Imelda Morales, Francisco Paredes Cuevas, Antonio Iturbide Albino, Eleuterio Morales Mora, Roberto Cruz Sangabriel, Cornelio Palomino Eulogio, Silveria Marciano Domínguez, Gilberto Gómez Mateos, Luis Méndez Gaona, Nicolás Cruz Romero, Gilberto Landa Hernández.

INTRODUCCIÓN

La presente va dirigida a todas aquellas personas que tienen esa oportunidad para ocupar un espacio en la vida pública, cualquier nivel de gobierno llámese municipal, estatal o federal, ya sea en los poderes ejecutivo, legislativo o judicial, pero también al ser humano que no ha descubierto la importancia de los valores. La honradez es tema principal, gira entorno a eventos vividos por un personaje real del municipio de Yecuatla, Veracruz. México. Esta cualidad tan valiosa hoy en día pero escasa, opuesta al fenómeno de moda…Corrupción.

Sinónimo de rectitud, necesaria para que nuestro país logre esa trayectoria hacia el verdadero ejercicio de la función pública, hombres como Melesio Landa Cervantes, deberían cultivarse diariamente. Nací para Servir, detalla la conducta de un pequeño, hijo de un militar revolucionario obligado para realizar doble labor, ser padre y madre al morir su esposa, nacido sobre los inicios de la Revolución Mexicana de 1910, educado con principios en servir a una sociedad. Al pasar el tiempo crea un excelente hijo empeñado en hacer el bien. Este proceso cronológico alterna la biografía con sucesos políticos, sociales y culturales que describen las costumbres municipales, avalados en fotografías, fechas y documentos, la gestión desde inicio hasta el final lo que hoy es una sorprendente obra de ingeniería, la construcción de la carretera Jalapa-Naolinco-Misantla-Yecuatla, fue la inspiración del protagonista que conocerás.

NACÍ PARA SERVIR

Maximino Landa Acosta, El Teniente Coronel, incorporado a las órdenes de los Generales Ceferino Rodríguez y Roberto Cejudo de las fuerzas Revolucionarias Mexicanas, éste último nacido en 1890, originario de Saltillo Coahuila, quien egresó por la escuela de aspirantes del Ejército Mexicano generación 1909, se adhirió a Félix Díaz en 1916 y fue ascendido a General de Brigada al mando de la 4ª División del Golfo, operando en el Estado de Veracruz, para 1919 aparentemente decidió rendirse a Venustiano Carranza, al descubrirse planos de sublevación ahora a favor de Álvaro Obregón fue aprendido y encarcelado, años después liberado, decidió quedarse para ser vecino en el municipio de Jalapa Veracruz.

Maximino, suscrita acta natalicia mencionaba 1874, originario del municipio Las Vigas, en el Estado de Veracruz, México. Teniente Coronel miembro activo revolucionario, allí vivía modestamente acompañado con su extensa familia, aunque construía ideas para emprender una nueva etapa distanciada a labores militares corriendo grave peligro cotidiano que amenazaba cada encomienda de superiores, imperaba la lealtad, trabajo, honestidad, antes del año 1900 y posterior a esta fecha haber pertenecido al movimiento de Francisco I. Madero.

Maximino Landa Acosta

Al ver perder familiares en su mayoría causada a raíz del movimiento, sin más pensar había tomado la decisión huir en un día cuando llegara la madrugada extremadamente fría idónea para no ser descubierto, el momento se presentó y colocó avíos, silla de montar nueva al animal, sobre una piedra que servía de base para impulsarse, montó. Precavido, del anca de su hermoso caballo colgaban víveres, también una bestia mular halada con reata de ixtle, suficiente ropa, armas y lo esencial por si acaso habría necesidad dormir en el trayecto, neblina demasiada espesa dificultaba su cabalgata lenta y segura del terreno difícil, caía llovizna fría resbalando sobre una manga de hule que cubría la espalda, miraba la vieja brújula colgada a su cuello indicando la sierra de Chiconquiaco, otro municipio del Estado, según compañeros, poseía prosperidad, tranquilidad, fama de tierras bastante fértiles para proyectos agrícolas, ganaderos, subastadas en precios del alcance económico, pues su natal municipio, existía paso de grupos revolucionarios, que transitaban de Veracruz hacia la capital del país aprovechando para reclutar personal por las buenas o las malas así participando como guerrillas, las cuales en constantes ocasiones emigraban de un estado a otro, motivo muchos ya no regresaban al lugar natal, pues morían en esas batallas.

Hizo parada en La Vaquería, encontró un amigo del grupo al cual pertenecía quien le dio alojamiento por unas cuantas semanas. Desde allí miraba la tierra prometida habiendo considerado la seguridad, después de haber recopilado datos por la historia de este lugar, aparte creía allí se encontraba la mina de oro de la que tanto se mencionaba en 1831, y que nadie descubrió porque los nativos Yecuatlecos reservaban comentarios en su lengua totonaca y pocos entendían, decidió comprar parcelas al interior por estrategia evitando zona poblada, específicamente la localidad Los Capulines, lindero con Santa Rita, perteneciente al Municipio de Yecuatla, Veracruz., nombre en náhuatl cuyo significado es lugar de tres culebras, que significa lugar originario del nacimiento de tres ríos, el Viera, Parapeto y Riviera del río Yecuatla o Coyol, un territorio muy rico en agua, silvicultura, praderas, igual manera único poseedor de tres climas, frio sobre linderos con Chiconquiaco, templado en colindancia de Misantla y una franja cálida en dirección por la costa de Colipa, eran las características que Maximino descubrió en un hermoso territorio, posteriormente sería llamado Paraíso de la Tierra así lo denominó Don Antonio M.Quirasco, ex gobernador de la entidad. A pesar de haber encontrado ese lugar perfecto de acuerdo a información recabada le habían proporcionado sus papás suponían cuando Fray Alonso de Santiago en 1534, marcaban arroyo Iztacapan del río Colipa servía de límite Yecuatla tocando Misantla, Mazatetlan (piedra del venado) al poniente Juchique de Ferrer Coyotetlan o piedra del coyote encontrándose en el camino Yecuatla – Colipa, cerro de Ixcatepec nombrado por habitantes de Chiconquiaco, cómo cerro de Los Algodones, del municipio de Misantla se encontraba entre Colipa y un viejo poblado llamado Cihuacotlan ya desaparecido al pie de Juchique de Ferrer, Quitlacuayan fue lindero entre Yecuatla y Colipa. Huehuetepec cerro Viejo o del tambor otro lindero entre Yecuatla y Colipa en la falda del cerro de San Pedro, municipio de Misantla. Arroyo Pajarito o denominado Naranjal lindero compartido entre Yecuatla y Chiconquiaco y que reclamaba esté último municipio. Macuilquilitlan entre Chiconquiaco- Misantla- Yecuatla, al noroeste del rancho Santa Rita frente a la sierra del Algodón y Plan Grande, ambas sierras limitan unas profundas barrancas donde recorre el río Palchán. Aun no era libre seguía perteneciendo a las fuerzas encaminadas a una revolución exigida por el pueblo Mexicano, había sido localizado y estaba a la orden en cuanto notificaran lista de asistencia.

Para comprar víveres y comercializar productos que él mismo sembraba o practicar trueque, tendría necesidad en dirigirse al municipio más cercano conocido como. lugar de las siete llúvias Chiconquiaco, justo al interior de una tienda abarrotera conoció a Paulina Cervantes Mora, aquella muchacha perteneciente a familias nobles, piel blanca, ojos claros, rostro atractivo, sobre la banqueta del negocio casi por retirarse miraba en dirección a ella, indeciso nada perdía y tomó la decisión retornar para percatarse e investigar quien era esa hermosa mujer que compraba panela, pareciera estaba inconsciente no le importó el dueño del negocio ni los clientes que en ese momento colgaban morrales repletos de mercancías, recargados sobre un inmenso mostrador del antiguo negocio, se aproximó y pidió pagaría la cuenta, cuando esa mujer reaccionó haciendo un gesto sorpresivo, inmediatamente manifestó soy el Teniente Coronel Maximino’’, señorita ¿Cuál es su nombre?., extendía la mano inclinándose, casi por la fuerza encontraba respuesta soy Paulina y no acepto a desconocidos interfieran en mis asuntos, con el permiso de usted señor, de un monedero sacó dinero y pagó, antes de cruzar la puerta escuchó al hombre decir, ¡estaré presente en el baile de la fiesta patronal en ocho días, ¡simulando no haber escuchado… se alejó, mientras el regresaba a cuestionar ese comerciante, pronto le dieron todos los detalles, también los ascendentes participaban como voluntarios revolucionarios. Todo individuo al interior del servicio armado, obtenía posibilidades para alcanzar algún lugar político del gobierno federal, puesto los militares asumían mayor acceso en las funciones públicas, razón por la cual pretendían sumarse al movimiento social y destituir al dictador encomendados alcanzar esas oportunidades, esa fue la entrada que hábilmente Maximino caviló, serviría como una fortaleza aproximarse a la hermosa mujer vecina del municipio situado a más de 1500 metros sobre el nivel del mar, la familia conservaba fama de mucho respeto e influencias. Maximino regresando al rancho con rostro de alegría, montado en su caballo negro en medio del bosque miraba desorientado las puntas de los enormes arboles, pensaba y planeaba aproximarse a Paulina, no existían posibilidades claras, solo presentarse en el popular baile de gala. Aquella noche 29 de Junio el católico lugar celebraba a San Pedro, mientras un hombre vestido de negro, zapatos relucientes, perfectamente bien afeitado, abordó al recinto, cientos de personas convivían la fiesta patronal, en mente el plan sería identificar la persona organizadora del baile, tarea realmente muy fácil, al llegar compró una bebida alcohólica, caminó hacia el apartado. Paulina se encontraba sentada rodeada de familiares, cuando lo miró, quedó impresionada de la gallardía y vanidad de aquel hombre irreconocible a la vez cómo había logrado localizarla, simulada, invertía la mirada para otro lado mientras tanto Maximino botella en mano buscó al principal familiar diciendo:

¡Señores buenas noches!

¡A sus órdenes!… Soy el Teniente Coronel Maximino!

¡Esta botella la invita el patrocinador del baile y yo, un revolucionario como muchos de ustedes, entregado a la pátria… los aplausos, vivas, acto seguido escucharon alguien dijo ¡Teniente siéntese con nosotros a festejar! Esa era la intención. No dudando observó rápidamente, acomodarse cerca de Paulina, esa investidura facilitó rápidamente ingresar al círculo social de la muchacha, después de unas horas exhortó amablemente bailar con ella, accedió una y otra vez, intercambiaron comentarios personales, mientras el alcohol hacía efecto en las conversaciones cruzadas entre los integrantes familiares que sin percatarse no la dejaba ni un instante hasta el término del convivio.

A partir de ahí diariamente visitaba aquel domicilio para contarles hazañas, como anhelos mientras revelaba la intención a su futura novia, quien meses posteriores solicitar permiso ante progenitores, evitando así problemas y ser aceptado, cada vez