Li Song, mujer china
3/5
()
Información de este libro electrónico
Lee más de Jacqueline Balcells
Makarina, bella de Rapa Nui Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Psiqué, la enamorada de un dios Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Vampi Vamp y el señor Zombi Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Tonko, el kawéskar Calificación: 3 de 5 estrellas3/5Juanita, joven patriota Calificación: 4 de 5 estrellas4/5La isla enamorada Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Quidora, joven mapuche Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificaciones
Relacionado con Li Song, mujer china
Libros electrónicos relacionados
De brujas caprichosas y hadas desencantadas Calificación: 1 de 5 estrellas1/5Estrella y el caleidoscopio Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl Castillo negro en el desierto Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Aventuras de Súper Inti y Analfabruja Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesExtraño caso del Dr Jekyll y Mr Hyde Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La Vida Simplemente Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La Bruja Bella y El Solitario Calificación: 1 de 5 estrellas1/5Adiós a Ruibarbo Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesUn lugar equivocado Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesDónde estás, Constanza Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Ester y Mandrágora 2: De amor y de magia Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl animero del desierto Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Amigos del alma Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesUna manzana con historia Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesFlorencia en su parque de diversiones Calificación: 2 de 5 estrellas2/5Juana y su familia Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl Loco y la triste Calificación: 1 de 5 estrellas1/5Tribrujas Calificación: 1 de 5 estrellas1/5Mi pesadilla favorita Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesPalomita Blanca Calificación: 3 de 5 estrellas3/5Canción de Navidad Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Subterra Calificación: 1 de 5 estrellas1/5Policarpo y el camino del diablo Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Cuero de diablo Calificación: 3 de 5 estrellas3/5Cazadores de eclipses: Bitácora planetaria Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesPara siempre, Noura Calificación: 3 de 5 estrellas3/5Niña Calavera Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Yacay en la isla de la furia Calificación: 5 de 5 estrellas5/5En familia Calificación: 4 de 5 estrellas4/5La espada y el canelo Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificaciones
Historia para niños para usted
Ngen Mapu, el dueño de la tierra Calificación: 4 de 5 estrellas4/5La Cabaña del Tío Tom Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Libro de las maravillas del mundo Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesDiario de Ana Frank Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Los tres mosqueteros Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesCuentos secretos de la historia de Chile Calificación: 4 de 5 estrellas4/5La Reina Margot Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa Cabaña del Tío Tom: Clásicos de la literatura Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El Yugo Zeta: Norte de Coahuila, 2010-2011 Calificación: 4 de 5 estrellas4/521 heroínas afroamericanas extraordinarias: Relatos sobre las mujeres de raza negra más relevantes del siglo XX: Daisy Bates, Maya Angelou y otras personalidades Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl último mohicano Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl camino del guerrero Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl diario de Noelia Calificación: 5 de 5 estrellas5/5MITOLOGÍA HINDÚ: Brahma, Shiva y Vishnú Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesRenace de las sombras Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Hija de las tinieblas. Reclama el trono Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Frida Kahlo: La artista que pintaba con el alma Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Diario de guerra del coronel Mejía Calificación: 5 de 5 estrellas5/5El Arte de la Guerra: Edición completa (con ilustraciones) Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl valle oscuro Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El secreto de la nana Jacinta Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa caída de los reinos Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Finis mundi Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La edad moderna Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La historia de Iqbal Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Chilango y tenochca Calificación: 5 de 5 estrellas5/5El vientre de París Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesY todo arde Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesRobin Hood Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa Antigua Grecia Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificaciones
Categorías relacionadas
Comentarios para Li Song, mujer china
2 clasificaciones0 comentarios
Vista previa del libro
Li Song, mujer china - Jacqueline Balcells
Un día en la vida de...
I.S.B.N. edición impresa: 978-956-12-2939-6.
I.S.B.N. edición digital: 978-956-12-2888-7.
8ª edición: febrero de 2019.
Obras Escogidas
I.S.B.N.: 978-956-12-2940-2.
9ª edición: febrero de 2019.
Editora General: Camila Domínguez Ureta.
Editora asistente: Camila Bralic Muñoz.
Director de Arte: Juan Manuel Neira Lorca.
Diseñadora: Mirela Tomicic Petric.
© 1992 por Jacqueline Marty Aboitiz y Ana María Güiraldes Camerati.
Inscripción Nº 82.280. Santiago de Chile.
© 2013 de la presente edición por Empresa Editora Zig-Zag, S.A.
Empresa Editora Zig-Zag, S.A.
Inscripción Nº 234.451. Santiago de Chile.
Derechos exclusivos de edición reservados
por Empresa Editora Zig-Zag, S.A.
Los Conquistadores 1700. Piso 10. Providencia.
Teléfono (56–2) 2810 7400.
E-mail: contacto@zigzag.cl / www.zigzag.cl
Santiago de Chile.
Diagramación digital: ebooks Patagonia
www.ebookspatagonia.com
info@ebookspatagonia.com
El presente libro no puede ser reproducido ni en todo ni en parte, ni archivado ni transmitido por ningún medio mecánico, ni electrónico, de grabación, CD-Rom, fotocopia, microfilmación u otra forma de reproducción, sin la autorización escrita de su editor.
Shandong, 650.
Dinastía Tang
El árbol bajo el cual Li Song estaba sentada era viejo. Sus hojas susurraban a la luz de la luna, y a la luz del sol habrían podido contar muchas historias de lo ocurrido junto a esa ventana, donde uno de sus antepasados lo había plantado.
Un verano, cuando sus flores daban paso a cientos de frutos redondos y fragantes, Li Song había llegado a esa casa. Y durante dos años encontró paz y consuelo bajo las hojas brillantes del añoso naranjo.
Ahora ella tenía diecinueve años, pero sus ojos cansados y tristes en nada recordaban a la muchacha llena de vida, que había bajado del palanquín el día de su matrimonio. La boca de rictus amargos ya no sonreía, ni a la vista de la primavera que llegaba con sus flores, ni con los trinos que llenaban el jardín de aquella casa grande y lujosa.
Su suegra la había recibido con fría amabilidad. Era una mujer obesa, y bajo sus varias capas de grasa anidaba un corazón duro, que se debatía entre dos sentimientos: los celos por esa muchachita que le quitaba el amor de su hijo y la ambición de una gran prole de varones que aseguraran la continuidad de su familia. Luego del nacimiento de Liu Wan, su vientre se había secado y ese hijo se había transformado en su único sol y su única esperanza.
Li Song pensó que con el correr del tiempo ella lograría demostrarle que su llegada había sido fructífera, y que la Venerable Madre terminaría queriéndola. Por ello hizo caso omiso de los comentarios poco cariñosos de esta y se esmeró en servirla lo mejor posible, sometiéndose a sus cambios de humor y a sus caprichos. Siempre cuidaba que el té estuviera a punto cuando su suegra lo deseaba, y más de una vez sus manos dieron interminables masajes al grueso cuello y a las anchas espaldas de la mujer. También untaba con aceites aromáticos sus deformados pies, mientras ponía a su alcance un platillo lleno de semillas de calabaza y frutas secas. La Venerable Ama solo agradecía con un suspiro cansado y miraba con insistencia el vientre liso de su nuera.
–¿Nada aún? –le preguntaba mes a mes.
–Ya vendrá, madre, ya vendrá –respondía Li Song, sin atreverse a levantar la cabeza. Y luego de hacer reverencias, se iba hacia sus habitaciones, con su cuerpo rígido como un bambú y el rostro acongojado.
–Ten paciencia, mi hilo de agua –le decía Liu Wan, en las noches, cuando al fin podían estar solos–. Ya verás que nuestro hijo llegará pronto y todo cambiará.
Luego su esposo la acariciaba con ternura, hasta arrancarle una sonrisa y después