Aventuras de Súper Inti y Analfabruja
Por Teresa Calderón
()
Información de este libro electrónico
En una tarde de lluvia intensa a Kalinin y Serena no les queda otra que entretenerse leyendo un buen libro en casa. Lo que no se esperan es que esa lectura los hará adentrarse en la misión más importante que jamás hayan vivido: salvar el Boque del Lenguaje Encantado.
SOBRE LA AUTORA
Teresa Calderón Esta poeta y narradora chilena nació en La Serena en 1955 y es hija del Premio Nacional Alfonso Calderón. Estudió Pedagogía en Castellano en la Universidad Católica y más tarde Licenciatura en Estética en la misma universidad. El primer poemario de Teresa, titulado Causas perdidas, fue publicado en 1984; desde entonces ha publicado una amplia variedad de cuentos, poemas, novelas y antologías que la han posicionado como una de las escrituras más importantes a nivel nacional. Además de dedicarse a la docencia escolar y universitaria y dictar talleres literarios, ha publicado exitosos libros para niños como la trilogía Aventuras de Súper Inti y Analfabruja, Súper Inti y el misterio del espejo y Súper Inti y Serena atrapados en un portal.
Lee más de Teresa Calderón
Antología de poesía chilena Vol. II: La generación NN o la voz de los 80 Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Antología de poesía chilena Vol. III: La generación post 87: otra vuelta de tuerca Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesAmiga Mía Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificaciones
Relacionado con Aventuras de Súper Inti y Analfabruja
Libros electrónicos relacionados
La hora extraña Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Días de sol y niebla Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl mundo de Ben Lighthart Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La Vida Simplemente Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Giraversos Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesMujercitas Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Bajo las lilas Calificación: 4 de 5 estrellas4/5La Bruja Bella y El Solitario Calificación: 1 de 5 estrellas1/5Cuentos mágicos del sur del mundo Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Amigos del alma Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl jardín secreto Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesAdiós a Ruibarbo Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesSigamos leyendo cuentos Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLos secretos de Hafiz Mustafá Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Estrella y el caleidoscopio Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesMargot Duhalde: Mi vida y obra Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl fabricante de risas Calificación: 1 de 5 estrellas1/5Cuentos chinos y de sus vecinos Calificación: 3 de 5 estrellas3/5Un lugar equivocado Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesHistoria de un oso Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Agencia Mysterium: El extraño caso de la señora Toupette Calificación: 1 de 5 estrellas1/5El Loco y la triste Calificación: 1 de 5 estrellas1/5Cuentos de los reinos inquietos Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Cuentos inquietantes Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesColas de Colibrí Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesAbuelita Opalina Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Cuentos de siempre para niños de hoy Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesVampi Vamp y el señor Zombi Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El absurdo Oxi Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Cuentos ecológicos Calificación: 3 de 5 estrellas3/5
Ficción general para usted
La milla verde (The Green Mile) Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La Divina Comedia Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La Ilíada Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Meditaciones Calificación: 4 de 5 estrellas4/5La Iliada: Clásicos de la literatura Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Arsène Lupin. Caballero y ladrón Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Rebelión en la Granja (Traducido) Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Crimen y castigo Calificación: 4 de 5 estrellas4/5¿Cómo habla un líder?: Manual de oratoria para persuadir audiencias Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La Ilíada y La Odisea Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Esposa por contrato Calificación: 3 de 5 estrellas3/5El libro de los espiritus Calificación: 4 de 5 estrellas4/5EL PARAÍSO PERDIDO - Ilustrado Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El mercader de Venecia Calificación: 4 de 5 estrellas4/5La riqueza de las naciones Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Crítica de la razón pura Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Poemas de amor Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Leviatán - Espanol Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Orgullo y Prejuicio Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Las 95 tesis Calificación: 5 de 5 estrellas5/5100 cartas suicidas Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Cuentos para pensar Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Mañana y tarde Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Las Confesiones de San Agustín: El desaparecido - El fogonero Calificación: 1 de 5 estrellas1/5Mitología Inca: El pilar del mundo Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Fortuna Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Diario de un seductor Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El verano en que mi madre tuvo los ojos verdes Calificación: 5 de 5 estrellas5/5El concepto de la angustia Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La llamada de Cthulhu Calificación: 4 de 5 estrellas4/5
Categorías relacionadas
Comentarios para Aventuras de Súper Inti y Analfabruja
0 clasificaciones0 comentarios
Vista previa del libro
Aventuras de Súper Inti y Analfabruja - Teresa Calderón
Fin
Los sueños de Kalinin
—Anoche soñé con la Analfabruja. Se calzaba sus zapatones dorados y hacía chocar los tacones tres veces hasta que saltaban chispas.
—Mala señal —dijo la mamá con voz preocupada cuando Kalinin habló a la hora del desayuno.
Kalinin, «el niño terrible», había dicho una vez el abuelo Ponchito, porque cada vez que soñaba con la Analfabruja, algo muy malo ocurría en los días siguientes.
Cuando Kalinin soñó que escapaba de la Analfabruja, de la Cordillera se desprendió un alud de barro que se deslizó por todas las calles de la ciudad, empantanando a los autos y a las bicicletas.
Antes de que hubieran transcurrido seis meses, volvió a contar a la hora del desayuno que durante toda la noche la Analfabruja lo había sometido a la tortura de quitarle uno a uno los pelos de la cabeza con una pinza de pico de cuervo negro.
A continuación de tan mal sueño vino una seguidilla de temblores en la zona central. Estos culminaron con un terremoto grado máximo que borró del mapa un pueblo completo al interior del valle, en las cercanías de la Cordillera de los Andes.
Por eso, era comprensible que cuando Kalinin dijera: «anoche soñé con la Analfabruja», todos lo hicieran callar.
—Ya, niños, tómense rápido el desayuno, que se hace tarde y no me gusta que lleguen atrasados al colegio —dijo la mamá mientras corría de un lado para otro en la cocina.
Eso era típico de la mamá; detestaba a la gente que no respeta los horarios, porque ella había vivido en otros países donde llegar tarde a un compromiso era una falta grave de respeto y una muestra de terrible irresponsabilidad.
Pero ese era el problema de la mamá, no de ella ni de su hermano, pensaba Serena. En los inviernos de tan temprano que llegaban al colegio tenían que esperar tiritando de frío a que abrieran las puertas para poder entrar. La última vez, Kalinin le había preguntado a la mamá si llegar al colegio tan adelantado no sería acaso una falta a la responsabilidad tan grave como llegar tarde. La mamá lo miró echando chispas por los ojos, pero no le dijo nada.
—Y pónganse impermeable y botas, porque esta lluvia se está poniendo feroz.
Sin embargo, el colegio no aparecía en los planes de ese día, porque se desató el aguacero más impresionante de los últimos inviernos. Y no era invierno; estaba comenzando la primavera.
Los papás estuvieron de acuerdo en que los niños se quedaran en la casa. A Kalinin, su mamá le pidió que para no perder el tiempo escribiera una composición sobre cualquiera de sus temas favoritos:
—Pero, por favor, hijito —le rogó—, no quiero saber nada de esos superhéroes de