Yo te bendigo vida
Por Carlos Monsiváis
()
Información de este libro electrónico
Carlos Monsiváis
Desde muy joven colaboró en suplementos culturales y medios periodísticos mexicanos. Estudió en la Facultad de Economía y en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México, y teología en el Seminario Teológico Presbiteriano de México. Asistió al Centro de Estudios Internacionales de la Universidad de Harvard en 1965. Gran parte de su trabajo lo publicó en periódicos, revistas, suplementos, semanarios y otro tipo de fuentes hemerográficas. Colaboró en diarios mexicanos como Novedades, El Día, Excélsior, Unomásuno, La Jornada, El Universal, Proceso, la revista Siempre!, Fractal, Eros, Personas, Nexos, Letras Libres, Este País, la Revista de la Universidad de México, entre otros. Fue editorialista de varios medios de comunicación.
Lee más de Carlos Monsiváis
Misógino feminista Calificación: 3 de 5 estrellas3/5Los rituales del caos Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Días de guardar Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Historia general de México.: Versión 2000 Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Escribir por ejemplo: De los inventores de la tradición Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Entrada libre: Crónicas de la sociedad que se organiza Calificación: 5 de 5 estrellas5/5El 68, la tradición de la resistencia Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Amor perdido Calificación: 4 de 5 estrellas4/5No sin nosotros: Los días del terremoto. 1985-2005 Calificación: 3 de 5 estrellas3/5El consultorio de la Doctora Ilustración (Ph. D.) Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Maravillas que son, sombras que fueron: La fotografía en México Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesNuevo catecismo para indios remisos Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Salvador Novo: Lo marginal en el centro Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Los intelectuales y el poder: Las enconadas polémicas de finales del siglo XX. Octavio Paz, Carlos Monsiváis, Héctor Aguilar Camín, Enrique Krauze ( Y algunos otros) Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesPrincipados y potestades Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Por mi madre bohemios Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa vida en México (1976-2010) Tomo III: Fox/Calderón Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesCarlos Monsiváis: Material de lectura, núm. 144. Narrativa. Nueva época Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa patria como oficio: Una antología general Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesAproximaciones y reintegros Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa vida en México (1976-2010) Tomo I: Echeverría/López Portillo/De la Madrid Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesDe la literatura a la cultura (... y viceversa). De los sesentas en adelante, su propia generación. Volumen II Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesDe la literatura a la cultura (... y viceversa). Del virreinato a los contemporáneos. Volumen I Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificaciones
Relacionado con Yo te bendigo vida
Libros electrónicos relacionados
Entorno arreolino: Siete voces alrededor de Juan José Arreola Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Agustín Yáñez: El génesis musical de Al filo del agua Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl libro que la vida no me dejó escribir: Una antología general Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Como apreciar a Alfonso Reyes Calificación: 3 de 5 estrellas3/5Se llevaron el cañón para Bachimba Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesCon tinta sangre del corazón Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesNovelas históricas Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEnsayos sobre el México contemporáneo Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesAnacrónicas Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesOtros raros Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl gran solitario de Palacio Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa élite gobernante en San Luis Potosí, 1997-2009 Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesMéxico en una nuez y otras nueces Calificación: 4 de 5 estrellas4/570 Años En México Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Algunas memorias de mis tiempos Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl Machete, 16: Revista de cultura política Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesYo te conozco Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesVenganza de la colonia Dificultades políticas durante los primeros años de la República Mexicana Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesPoesía Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesTodos somos iguales frente a las tentaciones: Una antología general Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesGenio y figura de Alfonso Reyes Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl agua envenenada Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesCómo el fútbol explica el mundo: Una síntesis detallada del libro de Franklin Foer en sólo 25 páginas Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesCuentos de soldados y civiles Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa palabra sagrada. Antología Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Tijuana en 120 palabras Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Jinetes de Tlatelolco. Marcelino García Barragán y otros retratos del Ejército Mexicano Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa Pesadilla Jarocha: Memorias De Panchito Viveros 1812-1829 Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesJalisco 1810-1910: Anecdotario del pasado desde el presente Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificaciones
Crítica literaria para usted
Albert Camus: Del ciclo de lo absurdo a la rebeldía Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Cien años de soledad de Gabriel García Márquez (Guía de lectura): Resumen y análisis completo Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El Alquimista de Paulo Coelho (Guía de lectura): Resumen y análisis completo Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El amor en los tiempos del cólera de Gabriel García Márquez (Guía de lectura): Resumen y análisis completo Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Breve historia de la literatura universal Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEnsayo sobre la ceguera de José Saramago (Guía de lectura): Resumen y análisis completo Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Dragon Ball Cultura Volumen 1: Origen Calificación: 1 de 5 estrellas1/5La insoportable levedad del ser de Milan Kundera (Guía de lectura): Resumen y análisis completo Calificación: 5 de 5 estrellas5/5García Márquez en 90 minutos Calificación: 5 de 5 estrellas5/5¿Qué leen los que no leen?: El poder inmaterial de la lectura, la tradición literaria y el placer de leer Calificación: 5 de 5 estrellas5/5El banquete o del amor Calificación: 5 de 5 estrellas5/5El secreto de los Buendía: Sobre Cien años de soledad Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Borges en 90 minutos Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Laboratorio lector: Para entender la lectura Calificación: 5 de 5 estrellas5/5El universo de los superhéroes: Historia, cine, música, series y videojuegos Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Un cuarto propio Calificación: 5 de 5 estrellas5/5El evangelio de Tomás: Controversias sobre la infancia de Jesús Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Gabriel García Márquez. Nuevas lecturas Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa utilidad de leer: Ensayos escogidos Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Magia universal Calificación: 5 de 5 estrellas5/5El poder del mito Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La muerte: Siete visiones, una realidad Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Una introducción a la teoría literaria Calificación: 4 de 5 estrellas4/550 Clásicos que debes leer antes de morir Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesSiete ensayos de interpretación de la realidad peruana Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Manipulación: Guía para el Dominio de la Manipulación Usando Técnicas de PNL, Persuasión y Control Mental Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Cuentos para Demián: Los cuentos que contaba mi analista Calificación: 5 de 5 estrellas5/5El síndrome del lector Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Manual de escritura Calificación: 4 de 5 estrellas4/5
Comentarios para Yo te bendigo vida
0 clasificaciones0 comentarios
Vista previa del libro
Yo te bendigo vida - Carlos Monsiváis
Índice de contenido
Portada
Portadillas
Página Legal
Dedicatoria
Nota preliminar
I LOS AÑOS PRIMEROS. LA FORMACIÓN y LA VOCACIÓN
II JACONA Y MAZATLÁN
III VIAJE DE UN LARGO DÍA HACIA EL AMANECER
IV LA VIDA LITERARIA Y LA REVISTA MODERNA
V ATMÓSFERAS
VI NERVO EN PARÍS
VII EL MODERNISMO
VIII NERVO DIPLOMÁTICO
IX NERVO NARRADOR SÁCIATE AHORA CARNE
X LAS PASIONES INTERNAS Y EXTERNAS
XII ESTE LIBRO EN QUE LATEN LAS ORGÍAS
XIII EL AGUA QUE CORRE BAJO LA TIERRA
XIV EL FINAL: VIDA, NADA ME DEBES
EPÍLOGO QUE REPARA UNA GRAN OMISIÓN ANTOLÓGICA
portasolapaportadillaEdiciones Proceso. Coordinador: Juan Guillermo López G.
Edición y corrección: Audrey Omar Rodríguez, Isabel del Valle
Diseño y formación: Alejandro Valdés Kuri, Fernando Cisneros Larios
Yo te bendigo vida
Amado Nervo: Crónica de vida y obra
Primera edición: 2002
Primera edición en Ediciones Proceso: septiembre 2019
D.R. © 2019, Comunicación e Información, S.A. de C.V.
Fresas 13, colonia Del Valle, delegación Benito Juárez
C.P. 03100, Ciudad de México
D.R. © Carlos Monsiváis
edicionesproceso@proceso.com.mx
Queda rigurosamente prohibida, sin autorización escrita de los titulares del copyright, bajo las sanciones establecidas por las leyes, la reproducción total o parcial de esta obra por cualquier medio o procedimiento, comprendidos la reprografía, el tratamiento informático, así como la distribución de ejemplares de la misma mediante alquiler o préstamo públicos.
Los editores nos declaramos a disposición de los propietarios de los derechos de autor que se hayan omitido.
ISBN: 978-607-7876-93-9
Impreso en México / Printed in Mexico
A
Hilda Trujillo
Víctor Acuña
Armando Colina
Gerardo Estrada
NOTA PRELIMINAR
La fama literaria de Amado Nervo, como la de casi todos los poetas de crédito institucional, se cifra por lo común en las todavía amplísimas resonancias de su nombre, en su caso tan a prueba del olvido. Pero, de muy distintos modos, la obra persiste en la memoria colectiva y en la cultura popular, por haber sido tan determinante en la sensibilidad de una época. Gracias a su arraigo, Nervo resiste la (sucesiva) pérdida del aprecio histórico por la poesía modernista, la poesía rimada, el temperamento devocional, la filosofía de la vida
, la cultura del siglo xix , los versos que reaparecen siempre en donde no se lee. Y el prestigio se justifica porque, en una selección cuidadosa, son numerosos los textos de Nervo sostenidos por el oído literario perfecto, pasión que identifica creencias y comportamientos, y la destreza que sobrevive muy bien a las caídas en el facilismo.
En septiembre de 1919, en Bogotá, en el Homenaje a Amado Nervo
, Carlos Pellicer celebra la vida fuerte y prolífica en la fiesta concéntrica del mundo
, y se apropia del idioma del autor de En paz
. Las líneas pellicerianas bien podrían servirme de epígrafe:
Vida
¡generosa y magnífica!
Alégrate más, alégrate,
el poeta es ya tuyo.
El hijo del Ensueño y de la Esfinge
llegó a tu corazón. Sobre el planeta
cruza la escuadra aérea
de las palomas de la paz.
Epílogo de la nota preliminar
Estas páginas intentan ser, a la vez, una crónica y una mínima antología. Casi todas las citas de Nervo provienen de los dos tomos de Obras completas, Editorial Aguilar, 1952, edición, estudios y notas de Francisco González Guerrero (prosas) y Alfonso Méndez Plancarte (poesía).
004Amado Nervo • ca. 1870 / Col. Familia Padilla Nervo
nayaritTepic, Nayarit / ca. 1910
I
LOS AÑOS PRIMEROS. LA FORMACIÓN y LA VOCACIÓN
¡Qué suerte llamarse Amado Nervo!
El 21 de agosto de 1906, en respuesta a la solicitud de datos biográficos que le hace el profesor Librado Acevedo, Nervo es conciso:
Desgraciadamente pocos puedo proporcionarle, porque mi vida ha sido muy poco interesante. Como los pueblos felices y las mujeres honradas, yo no tengo historia: Nací en Tepic (hoy capital del territorio del mismo nombre) el 27 de agosto de 1870. Soy descendiente de una vieja familia española que se estableció en San Blas a principios del siglo pasado. Hice mi instrucción primaria en las modestas escuelas de mi ciudad natal; muerto mi padre cuando yo tenía nueve años, mi madre me envió a un colegio de Padres Romanos, al de Jacona, en Michoacán, que entonces gozaba de cierta fama. En este colegio y después en el seminario de Zamora, Michoacán, hice mis estudios preparatorios, empezando, naturalmente, por el latín...
Una característica de los cronistas infatigables es el cúmulo de versiones, sobre un acontecimiento o una etapa, que van integrando a lo largo de su carrera. Nervo, presionado por el periodismo, evoca con regularidad sus primeros años en Tepic:
Mi nombre de bautizo fue José Amado Nervo Ordaz, pero desde pequeño mi madre sólo me decía Amado
, así que crecí siendo el Amado de mi dulce madre. Mi padre tenía un almacén, El Puerto de San Francisco, desde donde se relacionaba con las familias tepiqueñas de la época. (Artículo en El Estado de Jalisco.)
En el caso de la familia Nervo lo típico es también lo considerado clásico
por la tradición de clases medias de provincia: seis hermanos (Francisco, Luis, Rodolfo, Ángela, Elvira y Concha), dos hermanas adoptivas (Virginia y Catalina Cadenne), un colegio particular manejado por dos solteronas muy devotas, la Parroquia que es el centro de las vidas, un maestro de música ciego... Pueblo feliz
, el Tepic de la década de 1870 apenas tiene historia, y bien se le pueden atribuir los rasgos inventariados de la Suave Patria
: comercio y agricultura no muy prósperos, naranjos en flor, golondrinas, cenzontles, rosales, profusión de macetas, un mercado donde se congregan aquellos rumores a punto de ser pequeña historia
, templos donde no cabe ni un alma el día del santo del pueblo... y las cuatro o cinco familias que son el centro (y a veces los alrededores) de la Buena Sociedad lugareña. Y la plaza, el territorio donde podíamos correr, escondernos, jugar
, y en donde el costumbrismo se vuelve desfiladero providencial. Anota Nervo: El agua al amanecer... Las noches eran profundas. En las épocas de agua, los cocuyos iluminaban con sus alas de oro y verde
. Y también, desde dentro de las casas es posible adivinar si las personas que pasan van descalzas, si llevan huaraches o zapatos. De todo esto, y de lo imprecisable se nutre la vocación tempranera de Nervo:
Empecé a escribir siendo muy niño, y en cierta ocasión, una hermana mía encontró mis versos, hechos a hurtadillas, y los leyó en el comedor a toda la familia reunida. Yo escapé a un rincón. Mi padre frunció el ceño. Y eso fue todo. Un poco más de rigidez y escapo para siempre. Hoy sería, quizá, un hombre práctico. Habría amasado una fortuna con el dinero de los demás, y mi honorabilidad y mi seriedad me abrirían todos los caminos. Pero mi padre sólo frunció el ceño... Por lo demás, mi madre escribía también versos, y también a hurtadillas. Su sexo y sus grandes dolores la salvaron a tiempo, y murió sin saber si tendría talento: ahora lo habrá descubierto con una sonrisa piadosa. (Madrid, 1907.)
Nervo a veces no es tan exacto y, digamos, declara fallecido a su padre cuando él tenía nueve años de edad (tenía trece). En cambio, como documenta Lourdes C. Pacheco Ladrón de Guevara, en su excelente antología del Nervo entusiasta de su pueblo natal (Tepic de Nervo, Cecan, Col. Rescate, 2001), es puntual en sus descripciones:
Al final del barrio del Santuario se encontraban dos construcciones: el santuario de Nuestra Señora de Guadalupe, por el que se conocía el barrio, y el hospital civil, que antes se llamaba de San José. El templo no tenía atrio, sino cementerio. Lo teníamos que cruzar para llegar a la pequeña capilla de Guadalupe de una sola nave. El hospital tenía altas ventanas y desde fuera veíamos los corredores de arquería, frescos y ventilados. Por un costado se hallaba la puerta por donde sacaban a los muertos.
En el caso de Nervo, de ninguna manera excepcional, es primordial la recuperación literaria de su niñez. Así no sepa categóricamente que Infancia es destino
, sí percibe el influjo de los años del comienzo. Ser niño en la provincia mexicana de la segunda mitad del siglo xix y en el espacio de las clases medias, es la creencia perdurable que es un repertorio de gestos y actos de sinceridad, que es el aprendizaje de la dicha a través de la represión y el pintoresquismo. En las reconsideraciones de la provincia, ésta suele ser el paraíso perdido, el tiempo donde la felicidad parece inevitable porque lo otro es asumir sin mediación alguna lo que se vive:
La casa donde vivíamos, como otras del centro de Tepic, tenía una tapia enjalbegada con un tejadillo de tejas rojas. A la mitad de la pared del frente había un zaguán de madera para que pasara una carreta. Al lado derecho estaba el postigo, puerta más pequeña para que la gente pasara una por una. Dentro se encontraba un corral pequeño donde mi madre tenía geranios, amapolas, un árbol de limón y diversas plantas que usaba en la cocina. Al