Descubre millones de libros electrónicos, audiolibros y mucho más con una prueba gratuita

Solo $11.99/mes después de la prueba. Puedes cancelar en cualquier momento.

Por mi madre bohemios
Por mi madre bohemios
Por mi madre bohemios
Libro electrónico447 páginas8 horas

Por mi madre bohemios

Calificación: 0 de 5 estrellas

()

Leer la vista previa

Información de este libro electrónico

Esta selección de las entregas publicadas por Proceso se inicia en febrero de 2006 y concluye en mayo de 2009.  Abarca así el último año de  la presidencia de Vicente  Fox, las elecciones de 2006  y  los primeros dos años del  gobierno de Felipe Calderón, hasta llegar a la epidemia de influenza y el llamado o
IdiomaEspañol
EditorialProceso
Fecha de lanzamiento14 sept 2022
ISBN9786078709168
Por mi madre bohemios
Autor

Carlos Monsiváis

Desde muy joven colaboró en suplementos culturales y medios periodísticos mexicanos. Estudió en la Facultad de Economía y en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México, y teología en el Seminario Teológico Presbiteriano de México. Asistió al Centro de Estudios Internacionales de la Universidad de Harvard en 1965. Gran parte de su trabajo lo publicó en periódicos, revistas, suplementos, semanarios y otro tipo de fuentes hemerográficas. Colaboró en diarios mexicanos como Novedades, El Día, Excélsior, Unomásuno, La Jornada, El Universal, Proceso, la revista Siempre!, Fractal, Eros, Personas, Nexos, Letras Libres, Este País, la Revista de la Universidad de México, entre otros. Fue editorialista de varios medios de comunicación.

Lee más de Carlos Monsiváis

Relacionado con Por mi madre bohemios

Libros electrónicos relacionados

Política para usted

Ver más

Artículos relacionados

Categorías relacionadas

Comentarios para Por mi madre bohemios

Calificación: 0 de 5 estrellas
0 calificaciones

0 clasificaciones0 comentarios

¿Qué te pareció?

Toca para calificar

Los comentarios deben tener al menos 10 palabras

    Vista previa del libro

    Por mi madre bohemios - Carlos Monsiváis

    miniport3.jpgLogo%20Ed%20Proceso.psd

    Ediciones Proceso. Coordinador: Juan Guillermo López G.

    Con la colaboración de Isabel del Valle y Audrey Omar Rodríguez

    Diseño y formación: Alejandro Valdés Kuri y Fernando Cisneros Larios

    Ilustración de la portada: El Fisgón

    Por mi madre, bohemios

    Primera edición en Ediciones Proceso: julio 2020

    D.R. © 2020, Comunicación e Información, S.A. de C.V.

    Fresas 13, colonia Del Valle, alcaldía Benito Juárez

    C.P. 03100, Ciudad de México

    D.R. © Carlos Monsiváis

    edicionesproceso@proceso.com.mx

    Queda rigurosamente prohibida, sin autorización escrita de los titulares del copyright, bajo las sanciones establecidas por las leyes, la reproducción total o parcial de esta obra por cualquier medio o procedimiento, comprendidos la reprografía, el tratamiento informático, así como la distribución de ejemplares de la misma mediante alquiler o préstamo públicos.

    Los editores nos declaramos a disposición de los propietarios de los derechos de autor que se hayan omitido.

    ISBN: *****************

    Impreso en México / Printed in Mexico

    Nota del Editor

    Por mi madre, bohemios se publicó todo el tiempo como columna periodística sui generis, es decir, el uso de altas y bajas, de negritas y cursivas, no seguía un criterio estrictamente ortodoxo, sino uno que subrayaba, o pretendía hacerlo, la estulticia, la ignorancia, la pobreza de espíritu, si no la abierta estupidez o la sevicia de los declarantes. En la presente edición se ha intentado, hasta donde ha sido posible, seguir el formato de la columna original, de ahí su peculiar presentación.

    Prólogo

    Ariel Rosales

    El 19 de junio de 2010 los lectores devotos de la columna semanal Por mi madre, bohemios quedamos en la orfandad.

    De hecho, llevábamos algunos meses sumidos en la abstinencia de nuestra Eucaristía, ese alimento sin duda espiritual que, cada semana, nos resucitaba por obra y gracia de las risotadas proferidas durante su lectura en las páginas de Proceso. La catarsis empezaba ahí mismo, pues la columna de Monsiváis contribuía a resistir la tremenda impresión, y a veces la rabia, provocada por los reportajes del semanario acerca de las atrocidades que cometían muchos de los declarantes escarnecidos en la columna. Y sí, a pesar de los informes nada halagüeños sobre su enfermedad, todos pensamos que Carlos pronto se pondría bien y de inmediato oficiaría de nuevo la ceremonia iconoclasta que cada domingo nos redimía a sus fieles creyentes.

    Desgraciadamente no fue así. Y ahora sus lectores, desvalidos, seguimos lamentando estos 10 años de ausencia. Somos los huérfanos, bohemios o no, de nuestra madre de todas las columnas (aunque debemos tener presente lo que aquí mismo Monsiváis había escrito: Se prohíbe la orfandad por antifamiliar).

    En el prólogo* para una antología semejante a la presente, Lorenzo Meyer expresa así esta sensación que todos experimentamos:

    En lo personal considero, aquí y hoy, Carlos Monsiváis nos es indispensable y que hasta ahora nadie lo ha sustituido. Su sitio como cronista y como fuente inagotable e inapelable de juicios morales contundentes y envueltos en una elegante ironía, en un medio donde la hipocresía, la corrupción y la brutalidad los demanda para mantener la salud mental de la sociedad, sigue vacante. Hace ocho años que Carlos murió y su ausencia se nota, se le sigue echando de menos, y mucho.

    Dos años después resulta inquietante la alusión del doctor Meyer a la salud mental de la sociedad. Si Carlos era quién la resguardaba y ya no lo tenemos, ¿qué vamos a hacer?, ¿qué estamos haciendo?

    Pues a mí no se me ocurre otra cosa que volverlo a leer. Precisamente, esta oportuna antología nos permite hacerlo y con ello, sin necesidad de recurrir a la ouija ni a la resurrección de la carne, podemos invocar a nuestro redentor para tenerlo otra vez entre nosotros. Una justa y agradecible comunión con el noble propósito de curarnos en salud (mental), durante estos tiempos tan convulsos de conferencias mañaneras, polarizaciones políticas y confinamientos interminables.

    Sobre los orígenes y el sentido de la columna ya se ha escrito bastante. El propio Monsiváis se refirió al tema. En la Declaración de principios (y de fines) disfrazada de prólogo que abre la primera antología (él mismo la llama así al dedicarla a los declarantes) de Por mi madre, bohemios,** explica que en 1968 recopiló una serie de frases tremolantes contra los estudiantes y la libertad de expresión para el suplemento La Cultura en México, de la revista Siempre. Quienes pronunciaban dichas frases eran secretarios de Estado, gobernadores, senadores, diputados, empresarios, hombres de pro y columnas de la sociedad.

    Agregaría que lo mismo hizo en su programa dominical de Radio unam, El cine y la crítica, convertido desde 1968 en una dramatización satírica que tomaba el pulso a los acontecimientos políticos y en la que participaban actores y actrices bajo la dirección de Nancy Cárdenas. Sólo que en este caso el fraseo flameante era encarnado por espléndidas imitaciones de los personajes arriba enunciados. Muchas de esas imitaciones corrían por cuenta del propio guionista, Carlos Monsiváis, en su faceta quizás menos conocida, la de actor cómico; aunque ahí haya quedado para la historia su aparición como Santa Claus borracho en Los caifanes (1967). Porque no me perdí ninguna de las emisiones, estoy en posición de afirmar que la esencia de Por mi madre Bohemios ya estaba ahí, en ese programa prodigioso que para entonces no tenía nada de cine ni de crítica.

    Antes de que cobrara forma, lo que ocurrió hasta 1972 según el propio Carlos, este florilegio de frases disparatadas y demagógicas mostraba cierto paralelismo con otra columna legendaria, Perlas Japonesas del escritor y periodista Raúl Prieto, quien la firmaba como Nikito Nipongo. En ella recopilaba barbaridades idiomáticas provenientes de diversas fuentes, siendo los políticos y los curas una de sus clientelas más recurrente. Además, su intención era igualmente satírica. A la distancia, Raúl Prieto confluye de alguna manera con Monsiváis y se presenta como una singular figura cultural, que hasta cierto punto ha pasado inadvertida (murió en 2003).

    La sección, como también se refiere a ella su creador, adquirió el perfil definitivo en gran medida por el título, tomado del memorable poema de ´El brindis del bohemio´, de Guillermo Aguirre y Fierro, un gran residuo de la cultura del arrebato (muy superior desde luego a la cultura de la gravedad moralizadora).

    Al final de este poema –que más que leído casi todos los mexicanos lo hemos declamado, escuchado y/o presenciado su declamación–, el bohemio calla y… ¿Qué flota en el ambiente? Dejo la respuesta a Oswaldo Zavala, quien ha hecho una espléndida interpretación crítica de Por mi madre Bohemios***:

    "Un poema de amor y de amargura: espacio donde los improvisados bohemios –políticos, activistas, empresarios, miembros del clero, burócratas y algún presidente desorientado– callan a favor de un texto que cada semana selecciona lo mejor de sus declaraciones públicas (nacidas acaso del ´dolor y la ternura´, añadiría Monsiváis) que individualmente redefinen la noción de ´buen gusto´ y que solo conocen los límites de su propio desenfado, de su estudiado cinismo, de su involuntario humor. Ésta podría ser una de las mejores maneras de definir la columna Por mi madre, bohemios, que desde hace cuatro décadas reconfigura las prácticas discursivas del poder y sus voceros."

    Después de que Monsiváis le expropió esa línea celebérrima al poema de Aguirre y Fierro, se ha dicho certeramente que transitó –con igual gloria y fortuna– del Tesoro del Declamador al Tesoro del Declarador. Y como ya había brindado el bohemio puro, sólo faltaba el arribo de un nuevo personaje, un alter ego singularísimo que habría de vivir dentro del espacio de un paréntesis: La R. Así, un simple recurso periodístico usado tradicionalmente para hacer aclaraciones dentro de un artículo (por parte de lo que antes se llamaba mesa de redacción), se convierte en herramienta sarcástica de una eficacia inexorable. La R. interpela al declarante en una suerte de performance, observa Oswaldo Zavala, y yo encuentro en ello lo mismo que me provocaba la risa desbordante al escuchar el teatro radiofónico de El cine y la crítica. Pero su actuación va más allá del ingenio y la ocurrencia: ella también encarna la lógica y la razón cartesiana, e incluso, si es necesario, hace suyas las ideologías, o las replica, y hasta es capaz de representar todo tipo de emociones.

    La R., sin duda, es la primerísima actriz de esta puesta en escena periodística. Pero también hay un actor secundario que cumple, digamos, el papel de actor de carácter. Se trata del moderado sic, adverbio latino que significa así, de este modo, también utilizado en las redacciones para denotar literalidad (sí, lector, no te extrañes ni escandalices, de este modo está escrito); se halla dentro de un paréntesis y aparece inmediatamente después de una falta de ortografía, una expresión mal escrita o incluso un severo disparate, aunque en manos de Monsiváis se vuelve un recurso de apoyo a La R., y en ocasiones llega a adoptar cierto protagonismo, principalmente ante una enorme barrabasada emitida por el declarante; es entonces cuando se llama Sicazo, o Sic de sics, pero igualmente tiene atributos ,sic con laureles, o bien es adjetivado, "sic pleonástico, sic transparente".

    Y también en el reparto de la sección está el subtítulo original, antes de que sufriera todo tipo de mutaciones: Para documentar nuestro optimismo. Ya es una expresión legendaria y se volvió frase habitual para la comunicación entre la clase informada. Pero quizás por esa razón y sobre todo durante su última etapa, Monsiváis le confiere múltiples variantes, siempre con relación al contexto que se estaba viviendo y a lo que expresaban los declarantes de la entrega correspondiente. Así, para las elecciones presidenciales de 2006 la voz se convierte en Para cuñadizar nuestro optimismo, Para defraudar nuestro optimismo o Para ilegalizar nuestro optimismo.

    Los créditos finales también están integrados a la armazón satírica. Consisten en un enunciado que, con nombres y apellidos, da cuenta de los responsables del montaje de esta gran farsa. Un ejemplo: Voto de conciencia a favor del inconsciente: CM. Y seguido, Selección de textos: JV, Jenaro Villamil, quien en la última etapa de la sección, realizaba una investigación periodística semanal que establecía el archivo inmediato y funcional para los propósitos de Por mi madre, bohemios; en realidad, toda la estructura y eficacia humorística dependía del material recopilado. Hay ejemplos penetrantes con este original reparto: Sólo si no tengo adversarios habrá quien vote sinceramente por mí: CM. Selección de textos: JV. Comentarios: La R. (La Redacción). Y en las últimas entregas, las iniciales JV se incorporaron a esa suerte de oráculo–colofón que significaba el reconocimiento de la coautoría: Apoyo incondicional a todo aquel que no lo requiera: CM y JM. Y en el colmo de la ironía sintética: No comment: CM y JM.

    Esta selección de las entregas publicadas por Proceso se inicia en febrero de 2006 y concluye en mayo de 2009. Abarca así el último año de la presidencia de Vicente Fox, las elecciones de 2006 y los primeros dos años del gobierno de Felipe Calderón, hasta llegar a la epidemia de influenza y el llamado oficial a la población para permanecer en sus hogares, hecho que Por mi madre, bohemios califica como La masificación del Castillo de la Pureza.

    De esta forma, a través del coro multifacético pero bastante funesto de declarantes –cuya primera voz es sin duda la del presidente Calderón–, con su oportuna réplica paródica y la más de las veces despiadada, podemos seguir el rastro a lo que ha sucedido durante este arduo período de nuestra historia inmediata. No se trata de una crónica en sentido estricto, ni siquiera al estilo habitual del maestro de este género (el propio Monsiváis). Es más bien una especie de anticrónica, frente a la cual el lector –muchas veces apelando a su memoria para completar el escenario– se siente como parte del público que asiste a una feroz puesta en escena donde la voz cantante la llevan quienes declaran, pero el papel más importante corre a cargo del apuntador.

    He aquí un brevísimo pero esclarecedor ejemplo del drama que contemplamos: el presidente Calderón inicia su intervención declarando: Yo, honestamente… Y de golpe aparece el fatídico paréntesis: "(sic pleonástico). Casi está dicho todo, pues el discurso ha quedado tambaleante y lo que venga después sólo interesará si prosigue acompañado de más paréntesis agudamente esclarecedores. Otro ejemplo breve de esta técnica dramática: en un momento culminante de la historia legislativa de este país, la aprobación de la Ley Televisa, para justificar su voto a favor, el diputado de la oposición, Pablo Gómez, declara: … pero de repente uno comete errores. Implacable irrumpe el paréntesis: (¿Qué tan frecuente es de repente?)".

    Y uno de los protagonistas favoritos de Por mi madre, bohemios, Carlos Abascal, el secretario de Gobernación de Fox, consagrado en la sección por haber dicho El pobre es un aborto de la vida, también recibe varios y certeros apuntalamientos, como el siguiente: al referirse a la filtración de una conversación privada, declara: … no viene al caso aclarar lo que le dijo uno al otro y el otro al uno; más vale ser absolutamente responsables de las conversaciones. Y entonces irrumpe el paréntesis, terminante: (¿Pero quién es el responsable: el uno o el otro, o el uno o el otrouno o el unotro? Dígalo por favor.) Este es, en síntesis, el espectáculo que ha montado Monsiváis para nosotros. Y también es por eso que, ante el cinismo y la arrogancia obtusa de los declarantes (Un buen cínico necesita algo más que la prepotencia), La R. muchas veces convoca a hacer la ola como homenaje. Y los espectadores, gustosos, la hacemos.

    Entre las varias circunstancias sobresalientes que podemos revivir a través de este montaje se encuentra el controvertido, por decir lo menos, proceso electoral que llevó a la presidencia a Felipe Calderón. Respecto a las campañas se presentan momentos decisivos, como cuando Roberto Madrazo, candidato por el pri, confiesa: Mi lucha es precisamente para que él (amlo) no gané la elección, que le vale este comentario de La R.: A ver si ya en 2012 lucha por su propio triunfo. Y también se nos hace ver cómo el nocaut contra el priista se lo propina su propio expublicista, Carlos Alazraki: "Es la estupidez más grande (el poner en los promocionales sólo el nombre de Roberto). México necesita un Madrazo, punto… (En síntesis aprueba La R. México necesita que le recuerden su vocación de punching bag).".

    Y cuando el 16 de marzo de 2006, López Obrador, con todo respeto (el respeto es una moneda negociable), le dice al presidente Fox: Deje de estar gritando como chachalaca, no se meta…, La R. le hace el siguiente comentario al candidato del prd: Mejor concéntrese en el examen de las encuestas y déjele a sus adversarios el ejercicio de la intolerancia y el mal gusto. Digo, es un decir. (Además qué le hemos hecho, ¿por qué nos quiere quitar a nuestro declarante?).

    Por su parte el candidato Felipe Calderón se envalentona en vísperas del debate y, entre muchas ocurrencias programadas, afirma: López Obrador dice que no le han quitado ni una pluma a su gallo. Díganle cuando esté aquí, el próximo domingo, que se enfrente a mi gallo, a ver cuál es gallina. Ante lo cual, La R. comenta: La época del aprendizaje de estos albures ocurre entre los 10 y los 14 años de edad. Ya después es mercadotecnia electoral.

    Por supuesto que hay mucho más joyas declarativas durante la campaña, pero es privilegio de los lectores el disfrutarlas directamente, sin intermediarios. Al final, pontificó La R.: El pueblo votó/Hildebrando ganó. Y durante el posterior conflicto electoral, Por mi madre, bohemios registró, replicó y contra replicó, todas las declaraciones que valieron la pena, incluso las de Juan Carlos Ugalde, consejero presidente del ife, como la siguiente: A pesar de los cuestionamientos que surgieron a partir del 3 de julio, dos de cada tres mexicanos creen que nuestro instituto hizo bien su labor. El comentario de La R. apela, al igual que el declarante, a la fe: Si usted hace bien la encuesta, los resultados serán distintos: 60 de cada dos mexicanos le reza diario al ife.

    También representando papeles protagónicos, desfilan declarantes que han transitado lisa y llanamente a la actual 4T; entre ellos destacan: Victor Flores, haciendo loas que no olas a Calderón; Germán Martínez, entre otras cosas defendiendo fogosamente al Secretario de Gobernación, Camilo Mouriño, sospechoso de tráfico de influencias; Manuel Espino, autonombrándose hocicón sin ser desmentido por La R., además de ser descrito como el Lucas Alamán del siglo xxi (todo un elogio) y Napoleón Gómez Urrutia. A este último, luego de registrar la declaración sobre su salida del país, en junio de 2006, se le describe así: "Napoleón Gómez Urrutia. Dirigente (sic) sindical (se retira el sic) minero (doble sic)".

    Abandono el muestrario, que sólo ha tenido la intención de abrir un poco el apetito para el banquete completo. Aconsejo concentrar la atención en los declarantes eclesiásticos, como es el caso del cardenal Norberto Rivera, introducido con un "OJO: NO COMMENT, en mayúsculas, al consignar esta sublime revelación: Yo pienso que somos mucho mejores de lo que dicen los medios y un poquito más malos de lo que pensamos nosotros. Y también sus bienpensantes feligreses están representados, con toda literalidad, al condenar el aborto y la homosexualidad, aunque siempre considerando el apotegma de la sacra R: Acéptese que hay textos que se expresan como Dios les da a entender".

    Y por último, una plegaria militante: Y perdónanos nuestras declaraciones así como nosotros perdonamos a los prostitutos y prostitutas que las registran.

    *El regreso de la Doctora Ilustración (Ph. D.). Prólogo de Lorenzo Meyer. Malpaso Ediciones, 2018.

    **Por mi madre, Bohemios. La Jornada Ediciones, 1993.

    ***Para desestabilizar nuestro optimismo: ´Por mi madre, bohemios´ y la exterioridad discursiva de Carlos Monsiváis. Oswaldo Zavala. En La conciencia imposible. Ensayos sobre Carlos Monsiváis. Fondo Editorial Tierra Adentro. Conaculta, 2009.

    Cabezal%20Por%20mi%20madre%20Gris.jpg

    2006

    DE LA SABIDURÍA DE…

    (SECCIÓN CASI PERMANENTE)

    Un día que mi primo dijo: pinche güey, mi tía le iba a dar un golpe y en eso que se abre la tierra... ¡Lástima!, era mi primo consentido.

    "Vivimos en un mundo cada vez más difícil, en el que los ataques del exterior hacia la familia son constantes y esto lo vemos a través del lenguaje. Me acuerdo cuando éramos chicos: las malas palabras eran pecado. (Y eso que no se escuchaban conversaciones como las de Mario Marín y Kamel Nacif Borge, la R. empresarial.) Ahora las decimos con una naturalidad, al grado de que quien no las dice ya no es gracioso. (Quién sabe, comenta la R., el otro día dije ‘Qué pendejo soy, me cae’, y nadie se rio.) A lo mejor la primera vez que oímos a Enrique Guzmán o a Polo Polo, o a cualquiera de esos, nos habrá escandalizado terriblemente, pero después casi es pan nuestro de cada día. (¡Carajo! de la R. que ya no sabe cómo incluirse en la nueva decencia.)

    "–¿Por qué no incluir otras uniones, como las de homosexuales, en el diagnóstico para la familia?

    –No tenemos por qué asustarnos por situaciones de este tipo. Si tú me preguntas desde cuándo existen en la humanidad (esas relaciones), pues desde Alejandro Magno; no me digas que no las practicaban, por favor. Eso es algo muy cierto, pero yo como DIF nacional sólo puedo trabajar con aquello que la ley reconoce. Aquí el problema no es si existe. ¡Claro que existe! Pero en la ley no se reconoce. (Ella se refiere a la homosexualidad, que desde el siglo xix, y en función de la influencia del Código Napoleónico, no es ilegal. Por tanto, quién lo dijera, es legal.)

    Señora Ana Rosa Payán, directora nacional del

    dif

    , La Jornada, 13 de febrero de 2006.

    Ese día la lógica amaneció con un fuerte dolor de cabeza. Al mediodía vivía una neuralgia terminal; en la noche, aferrada a un silogismo, la lógica expiró no sin aclarar que no dejaba herederos. 

    "–El arribo de gente como usted, a quien se identifica como conservadora, ¿no es para frenar leyes o iniciativas antinatalistas o a favor de uniones entre personas del mismo sexo? ¿Para frenar, pues, los avances de aquellos que ubican como gente de izquierda?

    –Mucho se agota cuando los involucras. Yo estoy realmente segura y convencida de que cualquier persona de esa tendencia, que ya tiene hoy un hijo y tú le dices: ‘Mátalo y no estorba’... ¿Por qué vamos a matar a un hijo que está en el seno, que no se puede defender, y no matas al que está caminando? Oyes, si no quieres tener más hijos, bueno, ten al que está en tu seno, que tiene derecho a nacer, y al que está caminando, allá a tu lado, pégale un tiro. No hay nadie que en sus cinco sentidos haga eso, por supuesto. (Ni nadie que, por respeto a la lógica difunta, pretenda comparar la despenalización del aborto con la cacería de hijos ambulantes, la R.)

    Señora Ana Rosa Payán, en entrevista con Alma E. Muñoz, La Jornada, 13 de febrero de 2006.

    BUSCAR CHAMBA NO ESTÁ CAÑÓN, ES LO MÁS FÁCIL Y RECOMPENSANTE DEL MUNDO, LO QUE PASA ES QUE EL DECLARANTE NO LE HACE CASO A LAS OFERTAS DE SU GOBIERNO. (LA DEMOCRACIA ES DEL TAMAÑO DE CHAMBATEL)

    "–Pero sí le gustaría que ganara Calderón, ¿no?

    "–Bueno, es de mi partido político, pues sí, pero no quiere decir que le eche porras ni ando viendo a ver qué hace o qué no hace, o como dicen por ahí que andamos conjuntando spots y comerciales del mismo partido; no hay tal, no hay tal, y la gente está pudiendo observar eso... Ciertamente (Calderón) es el candidato de mi partido, mal haría en ser chaquetero y decir que no lo conozco...

    "–¿Y no le preocupa que si gana López Obrador le vaya a cancelar la pensión de expresidente?

    "–No, no. Mira, te voy a decir una cosa... yo sí necesito mi pensión porque yo no he robado, yo sí la necesito, de eso vivo, de eso vivo, yo no he robado, y sí, a mí sí, la pensión sí me sirve, porque además no le dejan trabajar a un presidente o a un expresidente por tiempo determinado, pero bueno...

    "–¿Usted podría ser el primer ex presidente que realmente necesita la pensión de expresidente para vivir?

    –No puedo afirmar eso, salvo que yo sí la necesito, porque regresar ahorita a buscar chamba está cañón, y no porque no haya chamba, porque ya a los... yo tengo ya... ¿cuántos años?, 66, 64 años, imagínate que me ponga a buscar chamba ahorita, además no se vale. (Y critican el programa de seguro de los adultos mayores en el DF, la añosa R.)

    POR FAVOR, NO INTERPRETE LO QUE VIENE COMO UN PROYECTO DE AMENAZAS NADA VELADAS

    "–Quiero escribir, quiero dar conferencias, quiero seguir con Vamos México, con la señora Marta, trabajando por los niños con cáncer, por los niños indígenas, trabajando por apoyar y por servir, porque eso sí ha sido mi motor interno, eso es lo que me llena, me da realización personal...

    "–¿Usted se podría ver, entender hoy, sin su esposa, sin Marta Sahagún?

    "–No, no, ya la relación es formidable, es una comprensión más allá de cualquier dificultad o diferencia, es seguir compartiendo planes, y conste que por ahí decía Séneca, aquel que deja de tener planes, deja de ser joven. (Por eso Zapata hizo el Plan de Ayutla. Pésimo chiste revanchista de la R. no contra el declarante sino contra Séneca...)

    "–Entonces, no, no, mi vida está atada con ella. Afortunadamente, y repito, nos entendemos de maravilla, no hemos tenido un solo momento en que nos recriminemos algo. (¿Hace cuánto no se ven? La puntual R.)

    "–¿A poco no han tenido ningún pleito?

    "–No, ni siquiera para decirle que los frijoles están quemados (qué estoicismo, comenta la R., ahora ya nos explicamos todo).

    "–¿Han tenido alguna discusión?

    –Me los como los frijoles quemados.

    Presidente Vicente Fox, primer pensionable de la nación. Entrevista con Joaquín López Dóriga, Radio Fórmula, 13 de febrero de 2006.

    A LA POLÍTICA LE SUCEDE ALGO MÁS TERRIBLE Y DEVASTADOR QUE LOS ESCÁNDALOS (ESOS NOMÁS LES PASAN A LOS POLÍTICOS, MI PRECIOSO, DIJO GOLLUM). NOS REFERIMOS A LAS METÁFORAS Y LOS SÍMILES.

    Vamos a curar a la Ciudad de México de la fiebre amarilla que tanto daño le ha hecho; vamos a curar a la ciudad, y la medicina para curar la fiebre amarilla es la gente.

    Señor Roberto Madrazo, candidato del

    pri

    en campaña. (Una advertencia al declarante: la gente suele ser un placebo, pero hay metáforas que son más crueles que las pandemias.) Nota de Emiliano Ruiz y Érika Hernández, Reforma, 13 de febrero de 2006.

    SI HAY ELEMENTOS PROBATORIOS QUE ACUSEN AL DECLARANTE POR COMPLICIDAD INEXPLICABLE, SE LE DEVOLVERÁN SUS VOTOS A LAS CLIENTELAS PRIISTAS DEL EDOMEX (PERO NO LOS HABRÁ)

    "Lo que tenía que hacer lo he hecho en términos de la información que tenía; si hubiera algún elemento adicional, actuaría, pero en este momento no he conocido más allá de notas periodísticas... Si hay elementos probatorios que le inculpen por un enriquecimiento inexplicable, la procuraduría está de puertas abiertas (Sic de pruebas cerradas) para recibir cualquier elemento adicional."

    Señor Enrique Peña Nieto, al descartar reabrir la investigación de la Contraloría mexiquense sobre la fortuna de Arturo Montiel. Nota de Enrique I. Gómez, Reforma, 14 de febrero de 2006.

    LA VIDA DA A MANOS LLENAS Y QUITA A GOLPES DE COMISIONES ESPECIALES DEL CONGRESO (VIDA, TODO ME DEBES; VIDA, DÉJAME EN PAZ)

    –Como todos los seres humanos, la vida es así, tristezas y alegrías; aciertos, desaciertos. Simple y sencillamente, hay que tener siempre una actitud positiva ante la vida, lo que hace la diferencia ante cualquier circunstancia es la actitud.

    Señora Marta Sahagún de Fox, al responder si le ha afectado el escándalo de sus hijos. Nota de Aracely Melo, Milenio, 15 de febrero de 2006.

    NO COMMENT (PERO DE PLANA ENTERA)

    –En lo económico no apoyo más que a las Simichicas (...) a las mujeres sí, a los políticos no.

    Señor Víctor González Torres, el Doctor Simi. Nota de Jorge Octavio Ochoa, El Universal, 12 de febrero de 2006.

    YO SÉ BIEN QUE ESTÁN AFUERA PERO EL DÍA QUE YO ME MUERA A LO MEJOR ENTRARÁN. DIRÁN QUE NO ME QUISIERON PORQUE SON UNOS CULEROS (PERDÓN, LECTOR, PERO ESE LENGUAJE VA CON EL PUESTO) Y ASÍ SE VAN A QUEDAR

    –Yo sé que habrá celos, va a haber envidia, pero por mi parte los exhorto a todos a la unidad, y quede quien quede, bienvenido. Sé que tienen que demostrar el apoyo a quienes han trabajado y no me aparto de quienes tengan su corazoncito, adelante, y quien tenga mayoría es el que va a ser. (Con dinero y con más dinero la canción prosigue.)

    Señor Víctor Flores, renovado líder a medias del Congreso del Trabajo, antes de su reelección a la mitad. Nota de Emiliano Ruiz y Daniel Pensamiento, Reforma, 15 de febrero de 2006.

    DEL PARADIGMA DEL LENGUAJE EMPRESARIAL, DIRECTO, CONCISO, PRÓSPERO Y UN TANTO REACIO A LA AMPLIACIÓN DEL VOCABULARIO

    "–(kn) Y me habló hoy el gobernador y me dijo: ‘Muy bien, chingue a su madre, aquí a esta hija de puta le parto la madre. ¿Eh?’

    "–(Hg) Kamel, eso es muy bueno.

    "–(kn) N’ombre. Pero los pinches periodistas en todos los pinches periódicos me sacan que soy hambreador, que lo de Tarrant, que esto, que lo otro, que la chingada.

    "–(Hg) Pero, te acuerdas, yo te digo, haces sopas populares. ¿Te acuerdas o no?

    "–(kn) Sopas su chingada madre, que se mueran de hambre.

    "–(Hg) ¿Pero te acuerdas o no te acuerdas? Eso no cuesta ni un chip a dar a comer cada día a 10 mil cabrones, 20 mil cabrones, con tu nombre, para compensar ese.

    –(kn) Que chinguen a su madre.

    Empresario Kamel Nacif (

    kn

    ) en diálogo muy focalizado lingüísticamente con su amigo Hubert Guez (H

    g

    ) a propósito de la detención de la periodista Lydia Cacho, y del apoyo logístico que recibió del gobernador de Puebla, Mario Marín. Nota de Blanche Petrich, La Jornada, 16 de febrero de 2006.

    ESTA FRASE REVELA EL ÁNIMO POLÍTICO DE LA TEMPORADA. YA NO HAY BANDAZOS, SINO VISIÓN PLURAL POLÍTICA

    Ricardo Pascoe declaró así en el programa radiofónico de Nino Canún:

    Mira Nino, la decisión de sumarme al equipo de Felipe Calderón no es una incongruencia a mis principios izquierdistas, sino una muestra de la visión plural política que poseo... pero no me afiliaré al pan.

    Señor Ricardo Pascoe, en el programa radiofónico de Nino Canún. Marzo de 2006. El señor Pascoe ha convocado a la izquierda inteligente a votar por Calderón y es también dirigente del Partido Alternativa Socialdemócrata y Campesina. Reforma, 7 de marzo de 2006.

    POR SI HICIERA FALTA, OTRA PRUEBA DE LO OBVIO: ACCIÓN NACIONAL NO ES DERECHISTA, ES EL PARTIDO DE LA IZQUIERDA INTELIGENTE (ESE REEMPLAZO DEL VOTO ÚTIL)

    Qué bueno que los maestros de bioética del pan localizan con rapidez a su enemigo, el confuso, confundido y confundidor Artículo Tercero.

    "En nuestro país, con el pretexto (sic a modo) de que la educación oficial debe ser laica por mandato constitucional (artículo tercero) para la inmensa mayoría de los maestros, se la ha interpretado como una educación carente de valores morales, pues éstos se han confundido con los valores religiosos. (Así que el Estado, además de robarle la sintaxis al declarante, carece de valores morales. Pues no es que la R. lo presione, ¿pero qué hace usted todavía en un Estado tan inmoral, señor alcalde de Guadalajara?) Por un lastimoso error de semántica se ha confundido al término laico que simplemente es la persona que no es clérigo (¿No le podrían regalar al declarante un diccionario más reciente que el que usa, digamos uno del siglo xix? La dadivosa R.), quien a su vez es una persona que no ha recibido las órdenes sagradas, con el término religioso, que si bien es un sinónimo de clérigo, tiene también la acepción de persona devota en el cumplimiento de sus deberes religiosos. (Ajá, ya lo vislumbramos. Bien usado, laico es sinónimo de mocho. La R.) Así, cuando se han referido a la educación laica, quieren decir aquella que no enseña la religión, con lo cual han dado a la acepción laica un contenido que originalmente no tiene, pues un laico puede ser una persona rigurosamente atea o devotamente religiosa (como esto no viene de una improvisación sino de un texto publicado, la R. primero implora por la luz que la ilumine en el anochecer de la sintaxis y luego grita ¡Eureka!: bien comprendido, el laicismo de la reforma liberal es la misa de cuerpo presente de la República). Lo más triste de todo es que esto no es de hoy. Llevamos seis generaciones de habitantes de la nación mexicana, que han sido despojados de la enseñanza humanística por decreto gubernamental. (¡Qué país tan analfabeta! Por eso la Izquierda Inteligente" retendrá al pan en el poder.)

    Presbítero Dr. Javier Núñez García, del Centro de Estudios e Investigación de Bioética, libro de texto de uso obligatorio en el curso del ayuntamiento de Guadalajara del PAN, febrero de 2006.

    ¡A París, madres latinas! ¡A París, más guerrilleros! (Con tanta sed demográfica da pena ver tanto vientre desocupado)

    "En México se acepta que había, de acuerdo con el Inegi en 1992, alrededor de 23 millones de mujeres en edad reproductiva (de buena crianza), de las cuales una tercera parte usaba algún método anticonceptivo... Aquí nos interesa señalar el uso del dispositivo intrauterino por ser abortivo (sic de laboratorio). Es el segundo método anticonceptivo elegido entre 30% de las mujeres en edad reproductiva, aunque en la decisión y el porcentaje influyen factores como la edad, paternidad satisfecha y riesgos advertidos (sic de duda sobre el sentido de paternidad satisfecha. ¿Habrá un padre que se resigne a sólo sostener cinco hijos?), lo que nos ha llevado

    ¿Disfrutas la vista previa?
    Página 1 de 1