Alejandro Magno: Una guía fascinante sobre el rey que conquistó el Imperio persa y Babilonia, incluyendo su impacto en la antigua Grecia y Roma

Por Captivating History

¿Sabía usted que Alejandro Magno apenas tenía treinta años cuando conquistó toda Asia Menor?

Alejandro de Macedonia solo tenía treinta y tres años cuando murió, dejando tras de sí un imperio de dimensiones impresionantes, que abarcaba docenas de diferentes grupos de personas, religiones, culturas, costumbres y, por supuesto, problemas. Naturalmente, Alejandro es una figura muy conocida, pero ¿hasta qué punto lo conocemos realmente? ¿Cuánto de su fascinante historia es cierto y cuánto es mera leyenda?

Historiadores de renombre han intentado, durante siglos, descifrar la vida de Alejandro y responder a todas las preguntas candentes anteriores. Lamentablemente, el lector común sabe muy poco del verdadero Alejandro, pero todo eso está a punto de cambiar con este pequeño y práctico volumen.

Hojeando este libro, descubrirá la verdadera historia de Alejandro, uno de los conquistadores más influyentes, capaces y alabados de la historia antigua. Descubrirá por qué tantos otros grandes políticos, generales y futuros conquistadores vieron en este joven macedonio la inspiración necesaria para alcanzar las estrellas.

¿Y qué más hay en este tomo para usted? Pues, entre otras cosas, descubrirá lo siguiente:

• La vida temprana de Alejandro, cómo creció y qué le influyó
• El extraño parecido de la política antigua con la nuestra en los tiempos modernos
• Las motivaciones de Alejandro y sus hombres
• La fascinante vida privada de un individuo tan público
• Los defectos y debilidades de Alejandro que, en última instancia, aquejan a todos los individuos
• La composición del ejército macedonio
• La creación de un imperio multiétnico y la difusión de los ideales y cultura de Alejandro
• Los numerosos amigos y enemigos del rey macedonio, con sus propias y fascinantes historias
• Las numerosas leyendas que surgieron de los acontecimientos históricos
• La cuestión de la sucesión y el paso de una época dorada pasada
• El legado de una figura adorada y denostada por millones de personas
• Y mucho más.

¡Adquiera este libro ahora para saber más sobre Alejandro Magno!

• Idioma: Español
• Editorial: Captivating History
• Fecha de lanzamiento: 30 ago 2021
• ISBN: 9798201395490

Vista previa del libro

© Copyright 2021

Todos los derechos reservados. Ninguna parte de este libro puede ser reproducida de ninguna forma sin el permiso escrito del autor. Los revisores pueden citar breves pasajes en las reseñas.

Descargo de responsabilidad: Ninguna parte de esta publicación puede ser reproducida o transmitida de ninguna forma o por ningún medio, mecánico o electrónico, incluyendo fotocopias o grabaciones, o por ningún sistema de almacenamiento y recuperación de información, o transmitida por correo electrónico sin permiso escrito del editor.

Si bien se ha hecho todo lo posible por verificar la información proporcionada en esta publicación, ni el autor ni el editor asumen responsabilidad alguna por los errores, omisiones o interpretaciones contrarias al tema aquí tratado.

Este libro es solo para fines de entretenimiento. Las opiniones expresadas son únicamente las del autor y no deben tomarse como instrucciones u órdenes de expertos. El lector es responsable de sus propias acciones.

La adhesión a todas las leyes y regulaciones aplicables, incluyendo las leyes internacionales, federales, estatales y locales que rigen la concesión de licencias profesionales, las prácticas comerciales, la publicidad y todos los demás aspectos de la realización de negocios en los EE. UU., Canadá, Reino Unido o cualquier otra jurisdicción es responsabilidad exclusiva del comprador o del lector.

Ni el autor ni el editor asumen responsabilidad alguna en nombre del comprador o lector de estos materiales. Cualquier desaire percibido de cualquier individuo u organización es puramente involuntario.

Introducción

Tener un vasto y extenso imperio con diversos grupos de personas bajo el control de uno tiene muchas ventajas, una tierra tan grande que los invasores se negarían a atacarla por la sencilla razón de que sería demasiado caro y difícil, por no mencionar que sería mortal. Sin embargo, ese tamaño tiene un precio. La administración de un país enorme es un problema incluso en la actualidad, con gigantes territoriales multiétnicos como los Estados Unidos de América, Rusia, Canadá e India que se enfrentan constantemente a diversos problemas que amenazan su estabilidad. Y, por supuesto, este problema no es nuevo. Hace apenas siglo y medio, el Reino Unido poseía una décima parte del mundo conocido. Era posiblemente el mayor imperio de la historia de la humanidad, y bastaron unas pocas generaciones para que la mayoría de esas tierras se perdieran, ya fuera por la diplomacia o por la guerra. Los imperios marítimos francés y español sufrieron un destino similar, al igual que imperios un poco más antiguos, como Austria-Hungría y los otomanos. Naturalmente, todos ellos seguirían el ejemplo de "el imperio", el de los romanos, y de hecho, se pueden trazar muchos paralelismos entre los fracasos de la antigua Roma y los de enormes países multiétnicos actuales.

Pero incluso Roma tuvo un predecesor. En un momento dado, apareció en Europa un hombre que había decidido conquistar todo Oriente Medio arrebatando el poder a los persas y estableciendo una enorme base de poder para sus parientes. Un hombre que sería la combinación no tan perfecta de un astuto general militar y un mocoso furioso. Un hombre que hizo tanto durante su vida que, incluso hoy, se escriben historias y se cantan canciones sobre su grandeza. Y era, en efecto, grande, hasta el punto de que dicha grandeza se convirtió en su sobrenombre. Ese hombre era, por supuesto, Alejandro de Macedonia.

La vida y las hazañas de Alejandro son fascinantes. Pocas figuras europeas han tenido una experiencia tan rica en lo que respecta a la lucha, la conquista, el asedio y la matanza, y pocas la obtendrían después de su muerte. Y como suele ocurrir con los grandes conquistadores, Alejandro seguiría siendo una figura controvertida. Pocos se ponen de acuerdo sobre los atributos (y defectos) que podemos atribuir al antiguo rey macedonio, pero la mayoría estará de acuerdo con lo básico: el heredero del trono macedonio fue un individuo excepcional, digno de ser investigado.

Pero, ¿qué clase de hombre era Alejandro? ¿Aspiraba a lo que los historiadores sugieren, a una idea de griego y a una identidad nacional única, o había algo más? ¿Cuál era su visión del mundo? ¿Cómo trataba a sus aliados, tanto a los actuales como a los anteriores? ¿Y el trato a sus enemigos? Si estas son solo algunas de las preguntas que puede tener sobre Alejandro, está de suerte. Este libro le servirá de cautivadora guía en la vida de uno de los conquistadores más conocidos de Europa, siguiendo su vida desde el momento en que llegó a este mundo hasta el momento en que lo dejó. Y aunque se trata de una historia contada y recontada mil veces antes, tanto durante la antigüedad como en nuestros tiempos modernos, definitivamente vale la pena volver a contarla mil y una veces más.

01 alex

Estatua de Alejandro Magno, alrededor del siglo III a. C., Museo de Arqueología de Estambul, Turquía[i]

Capítulo 1 - Los primeros días: La infancia de Alejandro y las tierras del Mediterráneo y Oriente Medio durante el reinado de Filipo II

El nacimiento y el linaje de Alejandro

Antes de continuar con la historia de Alejandro, debemos abordar el sistema de datación utilizado en este libro. Todo lo que ocurrió desde el nacimiento de Alejandro hasta la caída del último de los estados sucesores de su imperio ocurrió antes del supuesto nacimiento de Jesucristo, es decir, lo que hoy llamamos la Era Común. Teniendo esto en cuenta, los años mencionados en este libro irán hacia atrás. En otras palabras, el año 356 vendrá después del año 357, no antes. Además, como todos son anteriores a la Era Común, no utilizaremos el acrónimo a.e.c., ya que estará implícito.

El futuro conquistador y genio militar de Macedonia nació probablemente hacia el año 356 en la entonces capital de Pella. Sus padres eran, como es lógico, miembros de la realeza. Por cierto, ambos tendrían un enorme efecto en el desarrollo del joven Alejandro, aunque de formas totalmente diferentes.

La madre de Alejandro se llamaba Olimpia. Antes de casarse con la realeza macedonia, era la hija mayor de Neoptólemo I, el rey de Epiro. Teniendo en cuenta la importancia que tendría en la formación de las opiniones políticas y personales de Alejandro en el futuro, es fundamental investigar un poco más sus orígenes. Olimpia, que era una mujer griega molosa, no llevaba originalmente ese nombre. De hecho, según autores antiguos como Plutarco, tuvo un total de cuatro nombres. Al principio, se llamaba Polixena. Justo antes de casarse con el padre de Alejandro, cambió su nombre por el de Myrtale y más tarde por el de Olimpia (más adelante veremos las razones de este tercer cambio). En sus últimos años, volvió a cambiar su nombre, esta vez a Estratónice. El cambio de nombre era habitual en el mundo antiguo, sobre todo cuando se trataba de miembros de familias reales. De hecho, podemos ver esa tendencia incluso entre los gobernantes que acabarían heredando el imperio de Alejandro tras su muerte.

El matrimonio de Olimpia con el padre de Alejandro era más que probable que tuviera un interés político. Los griegos molosos del Epiro eran los vecinos más cercanos de Macedonia, y tras la muerte del padre de Olimpia en el año 360, su tío, Arribas, se hizo con el trono. Para asegurar su posición, Arribas firmó un tratado con los macedonios, y ese tratado se aseguró con el matrimonio de Olimpia con el actual gobernante macedonio. Su matrimonio tuvo lugar en el año 358, cuando la princesa de los molosos tenía diecisiete años. Parece una edad bastante temprana para los estándares actuales, pero en los antiguos Balcanes (y en la mayor parte del mundo antiguo, en realidad), la gente se casaba incluso más joven que eso. En todo caso, los diecisiete años se consideraban un poco tarde para casarse.

Los gobernantes griegos molosos eran una dinastía que supuestamente tenía sus raíces en la leyenda, ya que su rey fundador, Neoptólemo (que no debe confundirse con el padre de Olimpia), era hijo del legendario héroe Aquiles. Este supuesto linaje heroico se convertiría en un factor importante en la forma en que Alejandro se veía a sí mismo más adelante, aunque Aquiles no sería ni mucho menos el único individuo mítico o de otro mundo al que invocaría el futuro conquistador del mundo conocido. De hecho, parte de su orgullo provendría de esta supuesta ascendencia heroica, orgullo que la madre de Alejandro seguramente también poseería.

Hasta ahora no hemos mencionado el nombre del padre de Alejandro, pero sus hazañas fueron, para la época, increíblemente impresionantes, y durante un tiempo fue uno de los gobernantes más competentes (si no el más competente) de la antigua Europa. Filipo II nació como tercer hijo del rey Amintas III y de la reina Eurídice I. Amintas era conocido, al menos en la tradición, como el gobernante que consiguió unificar por primera vez a los macedonios en un solo país, ya que las regiones de la Alta y la Baja Macedonia estaban originalmente separadas. En su juventud, Filipo pasó varios años en cautiverio, tanto en Iliria como en Tebas. Su cautiverio en Tebas fue especialmente decisivo, teniendo en cuenta que la ciudad-estado tenía dominio sobre todos los demás estados griegos y, sobre todo, porque había sido alumno del notable general Epaminondas y había estado bajo el cuidado de importantes personajes públicos tebanos como Pelópidas y Pammenes. Gracias a su relación con estos personajes, Filipo adquirió importantes conocimientos militares y diplomáticos, que pondría en práctica ya en el año 359.

En el año 364, Filipo regresó a Macedonia. El país llevaba ya un tiempo agitado. Seis años antes del regreso de Filipo, su padre había muerto y el trono pasó a su hijo mayor, Alejandro II. Sin embargo, Alejandro sería asesinado poco después, en el año 367, y el trono pasó a manos del menor de edad Pérdicas III, aunque el poder real lo ostentaba Ptolomeo de Aloro. Curiosamente, Ptolomeo usurparía el trono, pero permanecería como regente de Pérdicas hasta que el niño alcanzara la mayoría de edad para gobernar por sí mismo. Posteriormente, Pérdicas mataría a Ptolomeo y asumiría el trono, gobernando hasta el año 360. Ese año, Pérdicas perdería la vida en una batalla, fracasando estrepitosamente en su intento de recuperar la Alta Macedonia (en

Comentarios para Alejandro Magno

[Santiago Merino Garcia · Calificación: 5 de 5 estrellas]

Es muy bueno por su sencillez y claridad. Para empezar genial, luego hay que profundizar si te ha gustado.