San Cafeto

Por Yimih Carballo

La vida de los personajes que desarrollan la obra está enlazada en la narración a través del espacio, tiempo, valores, costumbres y conflictos.

Roberto García, inmigrante y empresario que inicia una nueva vida con muchas esperanzas, pasando por diversos acontecimientos sentimentales y enfrentando un proceso penal por presunta p

• Idioma: Español
• Editorial: ibukku, LLC
• Fecha de lanzamiento: 7 ago 2021
• ISBN: 9781640869530

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SAN CAFETO

Narraciones cortas como un trago de licor potente, sirviendo en copa de pequeño formato e ingiriendo hasta el final en modo fondo blanco.

Yimih Carballo

Artista

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Publicado por Ibukku

www.ibukku.com

Diseño y diagramación: Yimih Carballo

Copyright © 2021 Yimih Carballo

ISBN eBook: 978-1-64086-953-0

ÍNDICE

Propósito

Prólogo

Condominio

San Cafeto

Amistad

Relación

Aha (Café – Bar)

Memorias I

Mokaná

Peluditos

Memorias II

Los Villas

Paseo

Sorpresa

Adultos mayores

Crónicas

Obras

Epilogo

A mi Ubeny por su motivación,

a Rochy y Jay quienes me nutren con amor hasta el fin.

Propósito:

Relatos cortos de eventos inspirados en nuestro entorno sociocultural recreando a los lectores; los personajes que aparecen son invención, producto del imaginario y ambientados en situaciones enriquecidas para la historia.

Prólogo:

La vida de los personajes que desarrollan la obra está enlazada en la narración a través del espacio, tiempo, valores, costumbres y conflictos.

Roberto García, inmigrante y empresario que inicia una nueva vida con muchas esperanzas, pasando por diversos acontecimientos sentimentales y enfrentando un proceso penal por presunta participación en el delito de lavado de activos que pudo llevarlo a un final trágico.

Natalia González, profesional en bienes raíces (inmobiliaria), carácter frentero y querida por quienes la conocen, pasa por varias relaciones con hombres, compartiendo momentos personales en la búsqueda de una pareja. La historia de amor comenzó siendo estudiante con un compañero de quien se enamoró, a esta historia le continúan otras. Sus fieles compañeros son su perro y gato.

Los Villas, clan familiar poderoso, proveniente de migrante y nativa que surge económicamente con la minería y actividades comerciales ilícitas. Luego con su poderío económico incurren en la política manejando burocracia y contratación Estatal.

Rosa Rossi, veterinaria con gran atractivo físico que se destaca por su sólida labor benéfica con animales y adultos mayores en su región; presta servicio voluntario, recauda fondos y concientizando sobre la importancia de ayudar.

Las amigas Eugenia Torres y Lucrecia Martí, cómplices y divertidas a las que les gusta pasarla bien.

Condominio

Lunes en la madrugada, el vigilante del Edificio Savia escucha un fuerte golpe, al mirar las cámaras de seguridad observa en una de ellas el cuerpo tirado de un hombre en el pavimento exterior que comunica a la zona verde, seguramente se había lanzado de un piso alto.

Saliendo del elevador al lobby donde tengo mi apartamento, encuentro un grupo de residentes reunidos, por curiosidad me acerco a conocer la razón de aglomerarse, cuando escucho a una dama decir a otra que el occiso vivía en el edificio.

Intrigado quise saber cuáles fueron los motivos que llevaron al individuo a tomar esa fatal decisión de quitarse la vida e inicié por acercarme a recepción e indagar al vigilante - portero.

Buenos días – saludo uniendo mis manos con los dedos.

- Señor Nicolás, buenos días – responde amable el vigilante.

¿Usted conocía al señor que se suicidó?

- ¡Claro! Era conocido, el señor se llamaba Roberto García, de nacionalidad occidental, vivía en el apartamento # 701, comerciante y muy educado; llegó a vivir al edificio hace aproximadamente un año por intermedio de doña Natalia.

Como había entrado en confianza hice otra pregunta.

¿Quién es doña Natalia?

- ¡Ah! – señala indicando con el dedo -, es la señora con más estatura que está en ese grupo, ella vive aquí y es propietaria del apartamento donde vivía el difunto.

Al mirar hacia el grupo que indico, recordé que al salir al lobby era la señora que estaba hablando.

Gracias por la información – muevo la cabeza en señal de agradecimiento.

- Siempre a la orden.

Ahora estoy decidido a averiguar detalles de la muerte y vida de Roberto García un hombre como muchos de nosotros. Camino al parqueadero a buscar el automóvil, debo ir al supermercado a comprar frutas y vegetales.

Sentado en el trono, forma como llamo el sofá por comodidad y ubicación en mi lugar favorito del apartamento con vistas a la cordillera mostrando una naturaleza exuberante como si supiera la necesidad del ser humano en compenetrarse con ella.

A la distancia escucho el sonido de las Caravanas, aves habitantes de los pastizales contiguo al edificio, no les doy importancia por estar concentrado leyendo noticias.

Me gustan estos momentos, puedo pensar y considerar con atención que debo hacer en mi diario vivir, meditaré el tema.

Agarro el teléfono celular y llamo al Edificio Savia, pidiendo hablar personalmente con el Sr. Marcos administrador y residente del edificio, referente al daño en el sifón del lavaplatos en mi apartamento # 808; este daño es excusa perfecta para indagar sobre el suceso. La asistente responde la llamada informando que podían atender después de las 2:00 pm.

Oficina administrativa, abro la puerta – ruido de bisagras.

Marcos, ¿buenas tardes, como estas?

- Nico, bien gracias. ¿En qué puedo sdislogo balaervirte?

Necesito el favor de solucionar el problema de goteo, en el sifón del lavamanos.

- Bueno, lo podemos reparar después del medio día, ahora los empleados encargados de mantenimiento están ocupados solucionando un daño en el salón social.

Te agradezco – levanto el dedo pulgar en señal de bien y aprovecho el momento para preguntar por el Sr. García.

Me tiene consternado lo sucedido esta madrugada con nuestro vecino, una persona joven todavía con mucho por vivir. ¿Imagino que usted, siendo administrador en algunas ocasiones converso con él?

- Si, conversábamos muy frecuente, éramos vecinos de apartamento, buena persona y algunos viernes compartíamos en un café bar, ubicado por el parque de San Cafeto - pueblo -, escuchando música, tomando vino y conversando sobre las ultimas noticias de la región – hizo pausa esperando que yo hablara.

Me hubiera gustado haberlo conocido – jadeo al respirar.

Usted tiene conocimiento de mi información personal por el contrato que hicimos de renta, así que debe saber que soy pensionado y tengo como hobby el arte, estoy interesado en hacer una serie de pinturas iniciando con la vida del Sr. Roberto. ¿Usted podría colaborarme?

- Si es para una buena obra puede contar conmigo y con otras personas que lo conocían, puedo contactarlo también con la Sra. Natalia, ella lo conocía como nadie.

Le agradecería mucho ese favor.

- Ella ahora debe encontrarse trabajando en su inmobiliaria de Serena del Valle - ciudad capital del departamento ubicada a una hora de San Cafeto -, cuando regrese hablo con ella para que te atienda – ruido de puerta al abrir -, llegaron posibles nuevos inquilinos a los que estoy esperando – pausa -, voy a mostrarles un apartamento.

Marcos escribe en un papel unos nombres y al lado sus números telefónicos.

- Aquí tienes información de sus amigos puedes llamarlos diciendo que yo te autorice – dice con la mano en el pecho.

Gracias, espero tu aviso para hablar con Natalia.

- Seguro te avisaré.

Salgo de la oficina a esperar los de mantenimiento en el apartamento.

Din, don, din don… - sonido de celular, miro la pantalla reconociendo el número que me llama.

Aló, Marcos – contestó.

- Nico, puedes llamar a Natalia ahora en la noche.

Gracias nuevamente por tu colaboración - respondo.

- No te preocupes.

Te invito cuando desees a tomarnos un café en el pueblo.

- Claro, acepto.

Es un compromiso, buenas noches.

- Igual, buenas noches y descansa.

Entro al baño a ducharme, al salir me dirijo a la habitación a ponerme en pijama, recostado cómodamente en la cama, procedo a tomar el celular y hacer la llamada sugerida a esta hora por Marcos.

Ring, ring… - sonido al repicar o sonar la línea celular que estoy marcando.

- ¡Aló!

Buenas noches, Sra. Natalia soy Nicolás Uribe, el Sr. Marcos me dio su número celular.

- Buenas noches, - ruido de platos – espere un momento – silencio –, sí me informó, está interesado en hacer una obra referente a Roberto, puedo colaborar, siempre y cuando no perjudiquen a nadie.

Me agradaría pudiéramos conversar personalmente, donde usted desee referente al Sr. Roberto García.

- Podemos reunirnos mañana a las 8:00 am en la tienda del edificio.

Estaré ahí. ¡Bendiciones!

- Bendiciones.

Tomo el papel con el listado de contactos facilitado por Mario, incluyendo el nombre y número celular del oficial de policía encargado de investigar la muerte; inicié la labor propuesta llamando dos hombres residentes del pueblo, el dueño del café bar donde asistía, otro excompañero de seminarios en la Cámara de Comercio y una dama en otra ciudad; visitaré al policía en la comisaría mañana en la tarde.

Las tres llamadas fueron positivas acordamos reunión esta semana, el excompañero miércoles en su almacén dedicado a ventas de bicicletas, el jueves en la noche en el café – bar con su dueño y viernes en la tarde con la dama en Mokaná, ciudad turística de la costa, debo comprar pasaje aéreo y hacer reservación en hotel