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Quizás Estoy Loco
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Quizás Estoy Loco
Libro electrónico186 páginas2 horas

Quizás Estoy Loco

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Información de este libro electrónico

Indira Killen, naci un 14 de Febrero en el Puerto del Callao perteneciente a Lima- Peru, desde los ocho aos mostro pasin por la lectura y escritura, sus notas ms altas las obtena en artes, historia universal y lengua. Fue a esa edad que escribi su primer cuento titulado En el fondo de su ser, Ella era buena donde describe frustracin de una nia, la cual con su mala conducta trataba de lograr la atencin de los dems, pero en especial de sus padres. Indira se destaco en los deportes, especialmente en Atletismo, luego demostr su talento en Teatro, pudiendo hacer el papel de varn sin problema alguno, tan solo por actuar. Su madre y su hermana mayor Ruth tuvieron que ver mucho en su formacin, su madre era cantante en el coro de la Iglesia y fue as que ella tambin formo parte de este. Su hermana se destaco por sus trabajos de dibujos, pero tambin por escribir poemas, lo cual alent a Indira para iniciarse en los escritos. A los 20 aos formo parte de un grupo de salsa como cantante, pero nunca dejo de escribir uno de sus poemas lo titulo If with your Hands que se lo dedico a su esposo Adam, tambin escribi tres obras teatrales, Who killed Love basada en un autor annimo, Tiempo de Hadas y The Liar that I love. Fue una escritora fantasma, pero ahora ha decidido mostrar su trabajo al resto. Madre de 4 hijos y viviendo en Canada, empez sus trabajos y piensa seguir escribiendo hasta el final de sus das. Demos un vistazo a su trabajo y dejemos que su imaginacin nos envuelva y nos haga parte de sus historias.
IdiomaEspañol
EditorialPalibrio
Fecha de lanzamiento15 ago 2012
ISBN9781463314279
Quizás Estoy Loco
Autor

Indira Killen

Indira Killen, nació un 14 de Febrero en el Puerto del Callao perteneciente a Lima- Peru, desde los ocho años mostro pasión por la lectura y escritura, sus notas más altas las obtenía en artes, historia universal y lengua. Fue a esa edad que escribió su primer cuento titulado “En el fondo de su ser, Ella era buena” donde describe frustración de una niña, la cual con su mala conducta trataba de lograr la atención de los demás, pero en especial de sus padres. Indira se destaco en los deportes, especialmente en Atletismo, luego demostró su talento en Teatro, pudiendo hacer el papel de varón sin problema alguno, tan solo por actuar. Su madre y su hermana mayor Ruth tuvieron que ver mucho en su formación, su madre era cantante en el coro de la Iglesia y fue así que ella también formo parte de este. Su hermana se destaco por sus trabajos de dibujos, pero también por escribir poemas, lo cual alentó a Indira para iniciarse en los escritos. A los 20 años formo parte de un grupo de salsa como cantante, pero nunca dejo de escribir uno de sus poemas lo titulo “If with your Hands” que se lo dedico a su esposo Adam, también escribió tres obras teatrales, “Who killed Love” basada en un autor anónimo, “Tiempo de Hadas” y “The Liar that I love”. Fue una escritora fantasma, pero ahora ha decidido mostrar su trabajo al resto. Madre de 4 hijos y viviendo en Canada, empezó sus trabajos y piensa seguir escribiendo hasta el final de sus días. Demos un vistazo a su trabajo y dejemos que su imaginación nos envuelva y nos haga parte de sus historias.

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    Quizás Estoy Loco - Indira Killen

    Quizás estoy Loco

    Cuando todo esta en tu contra,

    Lo último que debes hacer es rendirte.

    SKU-000503059_TEXT.pdf

    Indira Killen

    Ilustrado por

    Norah A. Holst

    Copyright © 2012 por Indira Killen.

    Todos los derechos reservados. Ninguna parte de este libro puede ser reproducida

    o transmitida de cualquier forma o por cualquier medio, electrónico o mecánico,

    incluyendo fotocopia, grabación, o por cualquier sistema de almacenamiento y

    recuperación, sin permiso escrito del propietario del copyright.

    Para pedidos de copias adicionales de este libro, por favor contacte con:

    Palibrio

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    Bloomington, IN 47403

    Llamadas desde los EE.UU. 877.407.5847

    Llamadas internacionales +1.812.671.9757

    Fax: +1.812.355.1576

    ventas@palibrio.com

    366403

    Tabla de Contenido

    Introducción

    Capitulo I

    Bienvenidos a mi Vida

    Capitulo II

    La Familia es lo Primero

    Capitulo III

    Recuerdos de mi infancia

    Capitulo IV

    Muerte de Santini

    Capitulo V

    Segunda Visita al Doctor Miller

    Capitulo VI

    En busca de un Milagro

    Capitulo VII

    Miro Horvath

    Capitulo VIII

    Regresando en el Tiempo

    Capitulo IX

    Oren y los niños Judíos

    Capitulo X

    El dinero no lo es todo

    Capitulo XI

    Juicio y veredicto

    Dedicatoria

    Este libro es dedicado a mi buen amigo Jesus, quien siempre me ha ayudado en el transcurso de mi vida. Gracias a este amigo incondicional pude hacer posible muchos de mis sueños.

    A mis amores: Mi esposo Adam, mis hijos Norah Ailis, Karlo Jonathan, Gabriel Adam y Faith. Quienes complementan mi existencia.

    A mi Madre Hilda por tenerme presente en sus oraciones y nunca dejar de creer en mí. Y finalmente a mis hermanos Iván y Jorge, quienes con sus palabras de aliento me incentivaron para esforzarme en lograr mis metas.

    Nunca renuncies a tus sueños, porque cuando menos lo esperes, se pueden volver realidad.

    Introducción

    Era Diciembre del 2006 cuando lo vi por primera vez. Yo regresaba a casa después de dejar a mi hijo Karlo en la escuela y me encontré con aquel extraño quien venía caminando por la misma acera. Su sonrisa y su manera tan espontánea con la que me saludó, hicieron que le respondiera el saludo con el mismo entusiasmo.

    El se detuvo para intercambiar palabra conmigo y algo en la expresión de sus ojos, tocó lo profundo de mi ser y me impulsó a conversar con él.

    Esa mañana hablamos acerca de mi país y mi familia, él por su parte me contó sus experiencias, sueños de juventud y sobre la Segunda Guerra Mundial. Aquel día no entendí todo loque me dijo, incluso llegue a pensar que estaba un poco loco. Pero con el paso de los días, empecé a disfrutar conversar con el anciano de hermosos ojos azules y soñadores.

    Yo recién había llegado a Canadá y él se convirtió en mi primer y único amigo. Sus consejos y palabras alentadoras llegaban siempre cuando más las necesitaba. Fue así que pronto establecimos una amistad que duró por casi dos años, hasta que lamentablemente por terceros terminó.

    Nunca olvidaré la última conversación que tuvimos. Ese día en particular su rostro reflejaba tristeza, pero en lo profundo de su mirada había un intenso amor. Los que el tanto amaba lo traicionaron y lo llevaron a juicio, con la intención de declararlo mentalmente incapacitado. La ambición por el dinero, destruyó lo que para este anciano era lo más valioso, Su familia.

    A pesar de todo el daño que le hicieron, él no guardaba rencor, ni albergaba odio en su corazón. Mirándome a los ojos me dijo: Amo a mi familia aún si ellos me odian, los amo como Dios me ama a mí. Sus palabras me llenaron de nostalgia, inmediatamente lo abracé y le di un beso. Lamento mucho que haya perdido todo, le dije.

    El me respondió calmadamente: Sólo perdí dinero, pero ahora soy un hombre realmente rico.

    Aquel anciano poseía una Fe increíble que muchos, inclusive yo misma quisiéramos poder tener. Una clase de amor por los demás, que es muy difícil de encontrar en estos tiempos. Por esta razón decidí escribir este libro, para darle el final que mereció tener.

    Espero que a través de su historia podamos rescatar nuestros valores morales y recobrar la compasión por los demás seres humanos. Nunca olvidemos que siempre tendremos que enfrentar las consecuencias de nuestras acciones y que serán ellas las que determinaran nuestro mañana.

    Escrito por:

    Indira Killen.

    Capitulo I

    Bienvenidos a mi Vida

    Es extraño como se desenvuelve cada suceso en la vida. Una vez fui un personaje amado, respetado y considerado muy buen amigo para muchos. Pero lamentablemente todo ha cambiado ahora. Puedo notar en sus rostros un signo de interrogación al mirarme, como si se preguntaran si acaso estoy perdiendo mi sano juicio.

    Se la pasan observándome insistentemente, tratando de descubrir mis pensamientos. Pero al no poder, prefieren dedicarse a hablar a mis espaldas. Pobre viejo loco. Eso dicen de mí.

    Es verdad, ya soy viejo, pero pobre…? definitivamente eso no, soy ridículamente rico. Empecé mi fortuna aún siendo joven. Tal vez usted piense que soy afortunado.

    Sinceramente, a veces me pregunto porque para muchas personas, ser afortunado; tiene que estar relacionado con lo material. Sin embargo, aún sigo sin obtener la respuesta. A veces creo que hubiese sido mejor no haber logrado tanto en esta vida. La gente suele adquirir un comportamiento inusual frente al dinero.

    A mi parecer, el dinero debiera ser sólo una herramienta para construir un mejor futuro para uno mismo y para los suyos. Pero no debería hacerte sentir superior o mejor que al resto de las personas.

    Aquellos que viven para el dinero, viven sin alma y sin felicidad. Una vez un amigo me dijo que yo había tenido buena suerte. No sé si usted cree en la suerte, pero yo no; ni en la buena, ni en la mala. Las cosas surgen de acuerdo como tú te esfuerces para lograr algo. Casi todo depende de ti mismo, de las decisiones que tomes, de la fe que pongas en cada sueño. Debes de tener la mente muy clara para no cometer dos errores que la mayoría ha venido cometiendo.

    Cuáles son esos errores? La negación y la duda.

    El negarte a creer en un mejor mañana te llevará a una existencia monótona y sin sabor a nada. El dudar que puedes lograr tus sueños, hará que ellos nunca se realicen.

    Por eso es muy importante no dejar tus sueños, debes de mantenerte firme en tus propósitos y estar seguro de cada decisión que tomes. Hoy por ejemplo, daré a conocer una de mis más importantes decisiones, aunque esto suene egoísta, lo hago por mi propio bien.

    Desde la ventana de mi auto veo las letras que resaltan el nombre de mi compañía, la cual por cierto es resultado de mi esfuerzo y dedicación. Al ingresar, camino lentamente por el pasillo y voy sintiendo las miradas de mis empleados,aquellos que una vez me sonreían muy amablemente, ahora me miran con recelo. Quisiera gritarles y decirles que no tengo un pelo de tonto, que sé lo que vienen diciendo de mí; pero me muerdo la lengua.

    Me detengo a la entrada de mi oficina por un momento para recobrar mi compostura. Cuando de pronto, noto la presencia de mi secretaria que viene con mi agenda para el día de hoy. Le doy una sonrisa y la hago sonrojar. Ella también forma parte de los comentarios mal intencionados que se hacen de mi persona, es la razón por la que no me mira a la cara y esquiva mi mirada. No soy ningún estúpido y ella lo sabe bien.

    Tomando mi agenda abro la puerta de mi oficina e ingreso en ella, deslizo a un lado las cortinas de la gran ventana de vidrio y me siento cómodamente en mi sillón.

    Desde aquí observo a mis empleados cruzar por mi oficina. Ahora soy yo quien los mira incesantemente, ahora es mi turno de seguir cada una de sus acciones.

    Empiezo a revisar mi agenda y veo que esta cargada de citas, las cuales no atenderé. Designé hoy a alguien más para que se haga cargo de ellas. Mi teléfono está sonando, pero no estoy de humor para responder a ninguna llamada. Mi vida ha venido siendo lo mismo durante los últimos veinte años y es hora de hacer algunos cambios.

    Sentado a solas en mi oficina; pienso en mis pasadas experiencias, sufrimientos, éxitos logrados y en esta situación actual que me tiene deprimido. Es por esta razon que ahora más que nunca, necesito controlar mis emociones antes de terminar dándome por vencido.

    Allá afuera ellos están aún murmurando, haciéndose preguntas y juzgando mis acciones. Ni siquiera me conocen bien y se toman la libertad de opinar acerca de mi persona.

    Me asomo al pasillo y llamo a mi secretaria, tan pronto como ellos me ven empiezan a correr como ratas, esa clase de roedores que a muchos de nosotros nos causa disgusto y asco.

    Jenny, mi secretaria, se acerca con unos documentos que tengo que firmar, sigue evitando mirarme, podría decirse; que es su conciencia que la tiene intranquila.

    Si se… se… señor, que puedo hacer por Usted? Me pregunta con su voz temblorosa.

    Quisiera responderle, Nada, tú no puedes hacer absolutamente nada, pero en vez de eso, mirándola a los ojos le pregunto. "Dime, tú también piensas que estoy loco verdad? Ella me mira sorprendida, su rostro se pone pálido, pareciera que está a punto de desmayarse.

    Tartamudeando responde: Yo? a…a…a…No…no…, no Señor

    Me levanto y salgo con ella de mi oficina. El personal administrativo finge no haberme visto, levantando mi voz les anuncio que habrá reunión en veinte minutos. Todos voltean a mirarme, se estarán preguntando que es lo que ocurre, pero no tienen ni idea de la sorpresa que se van a llevar.

    Camino hacia el salón de reuniones, ingreso y me siento pacientemente a esperar a que todos estén presentes. Uno a uno, van tomando asiento lentamente, sus miradas esquivan las mías, no pueden verme a la cara y eso me causa risa.

    Finalmente el salón está completo, gerentes, personal administrativo y secretarias están listos para tomar notas. Todos se muestran atentos a mis indicaciones y órdenes. Al parecer tengo su respeto nuevamente, lo cual me tiene sin cuidado. Yo sé que toda esa atención es fingida, ellos realmente ni me consideran, ni me respetan.

    Afortunadamente, yo he sabido mantener mi integridad y lealtad hasta el día de hoy.

    Pobre viejo loco Este ha sido el comentario que ha venido recorriendo la compañía durante todo el año. Cuanto más cuerdo me siento, más loco estoy para todos ellos. Quisiera que alguno se levante y me diga en mi cara que soy un viejo loco, así tendría la oportunidad de demostrarles; que soy más cuerdo que todos ellos juntos.

    Me pongo de pie y les doy la bienvenida, inmediatamente y sin perder más tiempo les informo. Esta compañía ha sido vendida a un grupo de inversionistas Ingleses. En tres meses la nueva corporación tomará cargo de todo, incluyendo la contratación de nuevos empleados. Alguna pregunta? Con mirada irónica espero sus preguntas, pero al parecer no quieren preguntar, tal vez temen oir mi respuesta.

    Bueno si no tienen nada que decir, entonces caballeros, señoritas eso ha sido todo lo que tenía que informarles, que tengan un muy buen día.

    Me retiro del salón de reuniones con una sonrisa y sintiéndome orgulloso de haber tenido el valor de mirarlos a la cara sin remordimientos. Tan pronto como cierro la puerta los escucho murmurar. Obviamente están preocupados por sus puestos de trabajo, porque no más seré yo; quien estará al frente de esta compañía. Este loco, que siempre les disculpaba sus tardanzas, ausencias y fallas, se va para siempre.

    Todos ellos saben que ya no será lo mismo, no escucharán más la frase, Mañana será un mejor día, cualquiera puede cometer un error. Ahora sí, tendrán que esforzarse por mantenerse en esta empresa.

    No piense que soy malo o que estoy tomando venganza, definitivamente no es así. Pero incluso un viejo loco tiene algo de dignidad que lo vuelve fuerte. Yo tengo más que mi dignidad y usted descubrirá lo que es.

    Los días en mi oficina los pasaba entre llamadas y entrevistas constantes. Mi agenda estaba siempre llena de reuniones con personas que trataban de retar a mi inteligencia, gente que estaba lista para sacar provecho de mí, de haber tenido la oportunidad.

    Vendedores, inversionistas y otros, que llegaban a mi oficina y me hablaban de sus familias tratando de impresionarme. Sin embargo, sus palabras sonaban muy falsas como para creerles. Siempre hay gente de este tipo,

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