Inevitable
()
Información de este libro electrónico
Libia Dennise García Muñoz Ledo
Nació en León, Guanajuato un miércoles de junio, abogada de profesión, ha hecho de la búsqueda por el bien común su bandera y de la política su camino para transformar realidades. Comenzó a escribir cuando era estudiante de secundaria y su mayor orgullo es su familia, quienes son su guía e inspiración. Hoy día combina su pasión por escribir con su responsabilidad como legisladora, esposa y madre de dos pequeños.
Relacionado con Inevitable
Libros electrónicos relacionados
Lo prometido es duda Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEmociones básicas Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa Mujer de Fuego Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesCuaderno esclavo Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesParaísos en el mar Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesJuntos: Una segunda oportunidad para el amor Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La Criatura Surgida Del Mar Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesUn cielo sin Luna. Polos opuestos, 3 Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesClementine Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesYo, Infiel Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLetras a La Luna Y a La Ausencia Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl Amor de mi Vida Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Triángulo imposible Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesRetorno del infierno Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesRelatos de una ilusión Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesMi novia, la tristeza: El recuento biográfico sobre Agustín Lara Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Magia más allá de esta vida Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLecciones que no aprendí Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesTulipanes en invierno Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesTarde de golondrinas Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificaciones31 días de monólogo con el corazón Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLos secretos de Adhara Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEres Mi Destino Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesQuizás dejaré de decir quizás Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesVivencias Del Alma: Cuando El Corazon Esta De Acuerdo Con El Sentimiento Le Dan Trabajo a La Mano Y Expresan Lo Que Realmente Siento Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLas cicatrices que marcaron fueron mi lección Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesAntes de que tiréis mis cosas Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEn tu memoria Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesAmor depredador Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Fragmentos: una colección de relatos Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificaciones
Relatos cortos para usted
El profeta Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Las cosas que perdimos en el fuego Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Colección de Edgar Allan Poe: Clásicos de la literatura Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Vamos a tener sexo juntos - Historias de sexo: Historias eróticas Novela erótica Romance erótico sin censura español Calificación: 3 de 5 estrellas3/5Hechizos de pasión, amor y magia Calificación: 5 de 5 estrellas5/5El psicólogo en casa Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Me encanta el sexo - mujeres hermosas y eroticas calientes: Kinky historias eróticas Calificación: 3 de 5 estrellas3/5El llano en llamas Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Donantes de sueño Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Cuentos de León Tolstoi: Clásicos de la literatura Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesColección de Gustavo Adolfo Bécquer: Clásicos de la literatura Calificación: 5 de 5 estrellas5/5¿Buscando sexo? - novela erótica: Historias de sexo español sin censura erotismo Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El gallo de oro y otros relatos Calificación: 4 de 5 estrellas4/5EL GATO NEGRO Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Cuentos Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Cómo besa: Serie Contrato con un multimillonario, #1 Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El reino de los cielos Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Hombres duros y sexo duro - Romance gay: Historias-gay sin censura español Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Los peligros de fumar en la cama Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Hasta la locura, hasta la muerte Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesCuentos de Canterbury: Clásicos de la literatura Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El señor presidente Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El césped Calificación: 5 de 5 estrellas5/5El Caballero Carmelo y otros cuentos Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Selección de relatos de horror de Edgar Allan Poe Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Los divagantes Calificación: 4 de 5 estrellas4/5La paciencia del agua sobre cada piedra Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La metamorfosis: Clásicos de la literatura Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Relatos de lo inesperado Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El diablo en la botella (Un clásico de terror) ( AtoZ Classics ) Calificación: 5 de 5 estrellas5/5
Comentarios para Inevitable
0 clasificaciones0 comentarios
Vista previa del libro
Inevitable - Libia Dennise García Muñoz Ledo
Copyright © 2017 por Libia Dennise García Muñoz Ledo.
Número de Control de la Biblioteca del Congreso de EE. UU.: 2017905634
ISBN: Tapa Dura 978-1-5065-1990-6
Tapa Blanda 978-1-5065-1991-3
Libro Electrónico 978-1-5065-1989-0
Todos los derechos reservados. Ninguna parte de este libro puede ser reproducida o transmitida de cualquier forma o por cualquier medio, electrónico o mecánico, incluyendo fotocopia, grabación, o por cualquier sistema de almacenamiento y recuperación, sin permiso escrito del propietario del copyright.
Esta es una obra de ficción. Cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia. Todos los personajes, nombres, hechos, organizaciones y diálogos en esta novela son o bien producto de la imaginación del autor o han sido utilizados en esta obra de manera ficticia.
Fecha de revisión: 03/05/2017
Palibrio
1663 Liberty Drive
Suite 200
Bloomington, IN 47403
ÍNDICE
PARTE I
LO QUE IMPORTA
El niño que se convirtió en el hombre de mi vida
Todos los niños son mis niños
Lazo invisible, etéreo
He de confesar que amo a dos hombres
Elisa
PARTE II
LO INEVITABLE
La mujer de mis ayeres
Llegará la noche
Rehaciendo el amor
Amuletos
Lo que les faltó
El efecto de leer
En medio
Réquiem
Duerme amor
Una eternidad pausada [Nuestra máquina del tiempo]
Los que aman [Infinito]
Dualidad
Inmortales
Deseo
Hechizo de medianoche
Visitantes
Duda
Así de fácil
Pero las letras
Él
Esperar
Rayos de una luz que no se ve
La cueva del vampiro
Aniquilación de lo que fue
Colofón
Contracorriente
No amé nunca… [hasta hoy]
El brindis por los dos
Con dedicatoria
De par en par
Para siempre
Premio de Dios
Presagio
Rosa de los vientos
In-confesable
Pregunta
Ella y él
Frontera deseada
Soledad
Encuentro de dos que se ven de lejos
Sueño que soñé
Claroscuro de una noche de revelaciones
Viviendo en la realidad
Vamos a hacer un trato
Caminar descalzo
Partidas
Echarte de menos
PARTE III
LO QUE ELLOS VIVEN
La paloma y su elefante
La tienda de sombras
El espantapájaros de soledades
Abandono de una historia sin final
Itinerante [Circo de las Ilusiones]
Consumación de una frase incompleta
El encantador del tiempo
La otra estación
Heladería
Acto de contrición
Intentos
Monólogo de un poeta
Hasta siempre
Retrospectiva
A mis tres amores,
que aún antes de llegar,
ya eran mi inspiración
Juan Carlos, Mateo y Elisa.
Gracias Maico Barocio
por ser mi cómplice
en este sueño.
PARTE I
LO QUE IMPORTA
El niño que se convirtió en
el hombre de mi vida
Intenté ponerles nombres ficticios a los personajes de esta historia, pero luego me rehusé a hacerlo. Tengo el derecho porque no solo soy yo la que la escribirá, sino que soy también la que la ha vivido todos estos años.
Así que por esta ocasión me perdonarán mis lectores, pero voy a narrar una historia que me pertenece completa y que comenzó cuando era una niña que estaba por terminar la secundaria, aquella con el cabello corto y la misma sonrisa de aquí no pasa nada que conservo aún. Tenía la mirada confiada y mis manos desde entonces eran frías. El destino quiso que la historia de mi amor fuera mucho mejor que cualquiera de esas historias que escribo aquí mismo, ninguna de ellas podría igualar lo que he vivido por tantos años. Parece como si Dios me retara, como si me dijera A ver, crees que tus relatos son buenos, espera a que vivas el que estoy escribiendo para ti
.
Lo conocí una tarde de fin de semana, en un lugar de retiro, allá lejos de todo y de todos. Sus ojos llenos de lágrimas se toparon con los míos que también lloraban. Éramos dos niños que intentaban entender el mundo, que querían solucionar problemas que estaban fuera de su alcance, éramos dos almas solitarias que desde el primer momento se llamaron. Fuimos como dos imanes que una vez juntos no pudieron separarse.
Una carta lo inició todo. Sus pasos se acercaron hacia mí, él estiró su mano y yo tomé esa hoja de cuaderno doblada. La quise guardar entre mis piernas. Mis mejillas se pusieron rojas porque todas a mi alrededor me observaban, a los 14 años uno suele ser muy competitiva cuando de varones se trata, y la situación se vuelve aún peor cuando en nuestra escuela no estábamos acostumbradas a ver niños, así que ellas seguro pensaban en qué podía tener yo, con mis dientes chuecos y mis piernas flacas como para que él se fijara en mí. Y tenían razón, él me vio brillar cuando yo no tenía luz, se enamoró de mi cuando yo no sabía que quería hacer con mi vida, me observó con sus ojos cálidos, me vio despintada y despeinada y, aún así, en las líneas de esa carta escribía que yo le parecía linda.
El cielo nos regaló tres días que marcarían el resto de mi vida. No hubo entre nosotros nada más que la convivencia de dos que se intuyen permanentes, pero que no saben qué pasará con el futuro. Nos regalamos un abrazo al partir y con eso tuvimos para anclarnos por muchos años a ese momento que, inexplicablemente lo iluminaba todo.
Despedirme de él aquella tarde de domingo en San Miguel de Allende fue el primer dolor de mi corazón, llegué a casa más sola de lo que me fui. En ese retiro exorcicé muchos fantasmas que me atormentaban, perdoné a quienes sin saberlo me habían lastimado, me acerqué a Dios, pero esa noche ya en mi cama me dormí triste porque había conocido a alguien especial y sentía que no lo vería más. Viendo al cielo lo extrañé como nunca había extrañado a nadie.
No fue la única noche que me hizo falta, pero encontramos la manera de seguir unidos, las letras fueron la fuerza que nos mantuvo uno al lado del otro. Los tiempos eran distintos y había que esperar a depositar la carta en el correo postal, que viajara hasta su destino y una vez en las manos del otro, al abrirla, esperar que volaran las letras como mariposas. Una carta en particular recuerdo en la que me escribió que, si me sentía sola, levantara la vista hacia el cielo y esas estrellas iban a recordarme que él estaría siempre conmigo. Así lo hice noche tras noche y las estrellas de pronto se convirtieron en mis cómplices y compañeras.
La vida pasó, los años transcurrieron y nos volvimos otros, ya no éramos niños que jugaban a quererse a la distancia, ahora éramos adultos que tomaban decisiones con sus vidas. Ambos encontramos el camino que nos llevó más cerca de lo que queríamos ser, atrás habían quedado los miedos al futuro, la incertidumbre de no saber que profesión elegir y poco a poco, se alejaron las dudas, pero con ellas también se fueron nuestras letras, ya no hubo más cartas y es curioso pero, aunque pasé algún tiempo sin saber de él, nunca lo sentí lejano, estuvo ahí aún cuando ni yo misma lo veía.
Ambos vivimos nuestras vidas, amamos, nos amaron, nos caímos y nos levantamos, pero a menudo recordaba aquellas cartas, aquellos que fuimos, recordaba lo que significó tener