Eres Mi Destino

Por J.D. Revilla

El destino tiene un plan misterioso y caprichoso reservado para aquellos valientes que se atreven a buscar más en la vida. En un caluroso verano, dos jóvenes se encuentran en un centro comercial, cada uno con sus propias aspiraciones y cargando con sus propios demonios internos.

Él es un chico en busca de algo por la mera razón de su existencia y dsfrutarla con alguien que valga la pena. Ella, por otro lado, lleva consigo angustias y desesperanza, luchando contra sus propios temores y decepciones.

A medida que sus vidas se entrelazan, nace un amor juvenil, desafiando las circunstancias y las expectativas que la vida les ha impuesto. Juntos, se embarcan en un camino lleno de desafíos, aventuras y descubrimientos personales. A medida que su relación se desarrolla, se darán cuenta de que han sido elegidos para tomar un camino que los marcará de por vida.

"Eres Mi Destino" es una cautivadora novela que nos sumerge en el poder de la juventud, la búsqueda de identidad y la fuerza transformadora que puede tener una conexión especial en nuestras vidas. Prepárate para embarcarte en un viaje lleno de emociones y descubrimientos mientras estos dos jóvenes se adentran en un amor que cambiará sus vidas para siempre.

• Idioma: Español
• Editorial: J.D. Revilla
• Fecha de lanzamiento: 21 mar 2024
• ISBN: 9798224361496

J.D. Revilla

Jesus David Revilla, better known as J.D. Revilla, is a young writer who takes pride in showcasing what could be a great career within South American literature. Since he was a child, he has always enjoyed being part of what could be a growing community like that of writers around the world. His passion for books and literature has led him to create a small and growing community called "Tu Zona Literaria," where he daily contributes with reviews, opinions, and various sections on his social media, and soon expanding into a blog to share his perspectives on literature with others.  

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Eres Mi Destino

J.D. Revilla

Table of Contents

Title Page

Eres Mi Destino

Eres Mi Destino

OPORTUNIDAD

LOS PRIMEROS PASOS

LA CITA

RASTROS DE SANGRE

REVELACIONES

LA NOCHE MAS LARGA

NO HAY VUELTA ATRÁS

NUEVOS CAMINOS

EL COMIENZO DEL FIN

UNA VEZ MÁS

EPILOGO

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About the Author

Publicado por:

J.D. Revilla

Eres Mi Destino

Copyright 2023 by J.D. Revilla

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Este libro es un trabajo de ficción y algún parecido a personas, vivas o muertas, lugares o eventos son pura coincidencias. Estos personajes son producto de la imaginación del autor y usados ficticiamente.

Dedicatoria

HOY CUMPLO EL SUEÑO de ver publicado mi primer libro. Mientras reviso la maqueta final, no puedo evitar que mi mente regrese a esos momentos en que empezó todo. ¿Quién diría que el tener el corazón roto me habría llevado a escribir esta primera historia? Agradezco, primero, a todos los que estuvieron deseando leer mi primera novela. El camino que deseaba alcanzar para poder publicarla por fin resultó. Esta es la primera de tantas historias que quiero contar. A mis seres queridos, en segundo lugar, por darme la oportunidad y confiar en mí, en darme la pasión e inspiración para escribir. Agradecerles es poco, porque todos fueron fundamentales para la creación de esta novela. A ti, la persona elegida para leer de primera esta novela antes que el resto ya mencionado. Tú me diste una chispa de esperanza y nuevo punto de vista para poder escribir un mejor final a esta historia. Deseo que te guste de principio a fin, y que sonrías a la vida porque tienes mucho futuro aún por recorrer.

Sigan buscando la luz del sol, tal cual los girasoles. ¡No se marchiten, por favor!

-J.D.

Eres Mi Destino

UN DÍA PARA RECORDAR

Para algunas personas , el mejor momento de la vida es entrar en la etapa de la pubescencia. Para mí fue una etapa bonita de altibajos, pero nada que un joven común no haya experimentado. Disfruté lo que pasó en mi pubertad. Cada momento fue valioso para mí, incluso aquellos momentos que me decepcionaron e intentaron hacerme caer y rendir. Podría decir que lo mejor que me ha pasado fue conocer a la chica que marcó mi vida como nadie más lo ha hecho; por lo que ella me transmitió, por su agradable presencia y por lo que ella fue para mí durante muchos años, hasta que un día se derrumbó lo que construimos.

De hecho, esta es una conmovedora historia de amor no correspondido, la vibrante historia de una conexión cargada de potencial sin explotar que se encontró atrapada en las garras de emociones insuperables. Por desgracia, uno no debe culparse a sí mismo ni a su amada; más bien, fue la mano cruel del destino la que conspiró contra nosotros.

Para aquellos que crean que exagero al escribir esta historia, asegúrense de leer bien esto, porque puede servirles para un futuro no muy lejano; Para cuando su mujer los deje por conseguirse a un hombre mejor que ustedes, para cuando esas parejitas juveniles que existen hoy en día que consiguen tener relaciones sexuales en menos de una semana de salir y dejan preñada a la pobre chica que pensó que no le iba a pasar nada, y para aquellos que no tienen esperanzas de conseguir a la pareja de sus sueños. Si, les servirá a todos ustedes que creen que todo saldrá bien, a pesar de las peleas, a pesar de los berrinches, a pesar de llorar de alegría, porque incluso en medio de peleas fervientes, arrebatos tempestuosos, júbilo lloroso y orgullo inquebrantable en la otra persona, la desgracia puede sobrevenirnos, y quizás incluso peor.

El amor, dicen, es una fuerza esquiva que va y viene, pero siempre permanece más cerca de nosotros. Su presencia puede ser tan sutil como un aroma masculino, hábilmente disimulada para mezclarse entre la multitud de miradas en un espacio compartido. Tal vez, el amor reside dentro de los confines de nuestra propia esfera profesional, discretamente oculto como el objeto de nuestro afecto. O tal vez, se entrelaza dentro del tapiz de nuestros círculos sociales, tan cerca que no reconocemos su idoneidad para nosotros. Fue durante ese verano rebosante de exuberancia juvenil, donde encontré una multitud de experiencias que agregaron vitalidad a mi existencia, convirtiéndome en la persona que soy hoy.

Eran las tres de la tarde de un sábado, me encontré paseando junto a mis amigos en camino al centro comercial como lo hacíamos cada mes. Un grupo muy unido de cuatro, nuestro vínculo era inquebrantable ya que nunca dejamos de encontrarnos sin falta. Con frecuencia, nuestros pasatiempos elegidos consistían en disfrutar de alguna película en el cine, o simplemente reunirnos en la feria de comida y disfrutar de una tarde relajante entre amigos, como lo hicimos en esta ocasión en particular.  Nos sentamos en una mesa que estaba alejada de la mayor parte de la feria. Y ahí estábamos los cuatro amigos que llevarán su amistad hasta la eternidad a este paso. El trío que forjó el jardín de infantes éramos: Antonio, David y yo, a mi izquierda se encontraba Marcos quien se agregó poco tiempo después que lo conocimos hace menos de seis años en una fiesta. Era una amistad muy bonita, que perdurará por mucho tiempo, nos sentíamos como hermanos que se apoyaban en todo, en las buenas y en las malas siempre estábamos ahí para cada uno.

Y este encuentro fue el más espontáneo donde todos disfrutamos estar juntos, contar chistes y contarnos historias después de meses sin vernos. Fue lo mejor que me pudo haber pasado hasta ese momento. Cuando todos estuvimos satisfechos de vernos las caras, empezamos a charlar un rato sobre nosotros mismos para informarnos sobre nuestras vidas.

Luego de reír tanto por el humor negro que caracterizaba a David, Marcos con cierta satisfacción dijo:

—¡Qué bueno volver a verlos! He estado muy ocupado en la universidad y he estado deseando volver a tener una conferencia de este tipo durante mucho tiempo. Pensé que me estaba volviendo loco después de leer tantos libros de medicina.

—Yo también he deseado mucho esto, han sido... ¿seis meses? —respondí —. Luego de estas vacaciones me tocará ingresar a la universidad, pero quisiera pasar bien estos días con ustedes, ya que estamos desocupados la mayoría de nosotros.

—Fueron siete largos meses ¡parecieron eternos! Pero, en fin, David y tú entrarán a la universidad pronto, ¿no?

—Sí, aunque yo aún no me decido por cual carrera tomar. Ni siquiera sé a cuál universidad ir.

—Deberías inscribirte conmigo en la Universidad Independiente, ahí iré a estudiar Diseño Gráfico, pero tú podrías optar por estudiar Leyes, o hasta Contaduría, te gusta tener la mente ocupada.

—Gracias David, pero yo paso, está muy lejos de mi casa, y podría tener mejores opciones, no me gustan las universidades caras.

Antonio intervino:

—Todos tendremos una vida exitosa, así estudiemos o trabajemos, en mi caso, nunca fui el mejor en esto de estudiar, pero trabajar en la pequeña empresa de mi papá me ayudará para conseguir experiencia.

—Esto no es una competencia —David refutó — no importa si uno es exitoso o no, esto se trata de saber disfrutar de la vida. El conocimiento se gana en la calle, la teoría se olvida, pero la práctica no.

Marcos tomó la audaz decisión de alterar el tema, dirigiendo su mirada perspicaz hacia mí, considerándome como nuevo tema propuesto:

—Y tú, ¿aún sigues soltero? —dijo con tono burlesco—. Deja de ser tímido y afronta el día a día, hay muchas mujeres en las calles de esta ciudad, puedes conseguírtela cuando menos lo esperes, solo debes dejarte llevar por el destino.

— ¿Seguro? —Le respondí irónico—Lo dices porque tú atraes siempre la atención de cualquier mujer que se encuentre alrededor, como, por ejemplo, aquellas dos que están a tu espalda en aquella mesa.

Todas las cabezas se giraron anticipando la veracidad de la declaración, y en medio de la conmoción, las dos jóvenes sentadas a tres mesas de distancia fingieron desinterés. Sin embargo, su rubor repentino y el posterior cambio de mirada traicionaron sus verdaderas emociones, dejándolos visiblemente desanimados. David, con un breve comentario, rápidamente puso fin a la discusión.

—No apuremos a lo que puede ser el tema de conversación del año, tal vez del siglo, cuando él consiga a la mujer de sus sueños y nosotros tengamos que tener envidia porque ella sea mucho más bonita que nuestras novias.

Siempre nuestros temas de conversación giraban en torno a nuestra vida amorosa, un tema que parecía cautivar a todos excepto a mí. Curiosamente, encontré consuelo en mi estrecha amistad con las personas importantes de mis compañeros, albergando un deseo de ilustrarlos que los méritos de la soledad era algo bueno a veces, pero llegó un momento en el que sentí la necesidad de que llegara mi momento algún día, y sucedió. La vida como sucede a menudo, nos otorga tanto bendiciones como dificultades, pero en esta ocasión en particular, la fortuna me favoreció. A medida que la tarde se desvanecía, nos cansamos de nuestras bromas ociosas alrededor de la mesa en la bulliciosa feria de comida, lo que nos llevó a embarcarnos en un paseo tranquilo antes de dispersarnos a nuestros respectivos hogares. Nuestras reuniones generalmente se extendían por horas, porque no todos tenemos tiempo de sobra para disfrutar de tardes como esta.

Durante el ligero paseo que dimos en el primer nivel del bullicioso centro comercial, pude observar en la entrada a los estrechos pasillos que el público en general apodaba como Callejones, en medio un grupo de jóvenes absortas en la exhibición de una boutique de ropa cercana, una chica se destacaba como un sorprendente contraste con sus compañeras. Si bien todas eran innegablemente hermosas, pero ella parecía desconectada del resto, aparentemente a la deriva en medio de sus propios pensamientos. Deslumbrado por su mera presencia, sin darme cuenta perdí de vista a mis amigos. Perdí el paso por estar observando a aquella muchacha que con solo verla me fascinó.

Me mantuve a cierta distancia de ellas, con mucha discreción para que no notaran mi presencia y mis ganas de saber de qué estaban conversando durante su observación, contemplé al grupo desde lejos como si fuese un espía que quiere oír conversaciones ajenas que requiere mucho sigilo para esta misión en particular. Las chicas estaban rodeando la pequeña vitrina, casi estorbando la vista para aquellas personas que pasaban también por ahí y que quisieran ver la ropa que estaba en exhibición. Me fui acercando poco a poco para oír más lo que hablaban, pero su conversación giraba en torno a la vitrina que estaban observando, obviamente, pero no todas estaban interesadas en verla, como esa chica.

— Ven, observa ese vestido. Es bonito, ¿no?

—No son de mi agrado, Laura, esta tienda siempre coloca cosas que nunca me agradaron visualmente. —Le respondió la bella muchacha.

Otra del grupo le sorprendió su desinterés, se giró y le respondió:

— ¿Cómo no te va a gustar? ¡Si tú eres de las más coquetas del grupo! Antes disfrutabas de comprar todo tipo de ropa para atraer hombres con tu elegancia.

—Pues, no soy tan coqueta como solía ser.

Al oír eso me sorprendí. Su belleza era demasiado natural e innata como para llamar la atención de los hombres, y siendo lo hermosa que es. No creí que fuese necesario seguir siendo llamativa para la vista del hombre, incluso con lo casual de su vestimenta de ese día jamás pensé que ella podría ser así. Pero es otro punto a favor de ella.

Cuando el colectivo femenino hizo su entrada en la tienda, obligado por mi determinación de seguir a esa chica en particular, yo también me aventuré dentro de sus límites. Oculto entre la bulliciosa multitud que abarrotaba el establecimiento ese día, me abrí paso hábilmente a través de varios departamentos, siguiendo disimuladamente cada uno de sus movimientos, mezclándome perfectamente con cada sección. Logré acercarme lo suficiente, siendo discreto en la distancia.  En la tienda no hubo nada que le llamara la atención, o al menos eso parecía para ellas. Enfrascadas en su búsqueda de prendas a la moda, dedicaron más de un cuarto de hora a examinar las prendas, y algunas