Relatos Ocultos

Por Mel Matos

Relatos Ocultos es una recopilación de cuentos cortos escritos por Mel Matos desde la temprana edad de 15 años, incluyendo algunos de los relatos presentados para concursos literarios en países como Venezuela, Argentina y España. Relatos Ocultos se publicó por primera vez como parte del libro "Vladimiro en su Pedestal y Relatos Ocultos" en Argentina, en 2011. Esta es la segunda edición. En esta edición se agregaron algunos relatos que no se encontraban en la primera edición de 2011.

 

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Mel Matos nació en la República Dominicana y emigró con su familia a Venezuela a la edad de 2 años. Su vida profesional se ha centrado en el campo de la auditoría. Trabajando para empresas internacionales en varios lugares, tuvo la oportunidad de visitar varios países (como Venezuela, Chile, Estados Unidos, Australia, entre otros) como parte de sus actividades profesionales. En los últimos años, su carrera se ha centrado en el área de auditoría de sistemas de información y análisis de datos. Sus pasatiempos incluyen practicar varios deportes, baile social latino, pintura, componer y grabar música, entre otros. Mel Matos encuentra fascinantes las culturas asiáticas.

• Idioma: Español
• Editorial: Mel Matos
• Fecha de lanzamiento: 18 ago 2020
• ISBN: 9781393612483

Mel Matos

Mel Matos was born in the Dominican Republic but migrated with his family to Venezuela at the age of 2 years old. His professional life has focused on the auditing field. Working for international firms in various locations, he had the opportunity of visiting multiple countries (such as Venezuela, Chile, USA, Australia, among others) as part of his professional activities. In the latest years, his career has evolved into information systems auditing and data analytics, where he continues his development. His hobbies include practising various sports, Latin social dancing, watercolour painting, composing and recording music, among others. Mel Matos finds Asian cultures fascinating. Vladimir’s Tower was first published in the Spanish language under the title “Vladimiro en su Pedestal y Relatos Ocultos” in Argentina, during 2011. This is the second edition, available both in English and Spanish.  A special edition of “Relatos Ocultos” in Spanish was also published in 2020, this is a compilation of short tales written by Mel Matos since he was 15 years old, including those submitted for literary contests in countries such as Venezuela, Argentina, and Spain.

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RELATOS OCULTOS

RELATOS OCULTOS

Mel Matos

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Dirección General: Mel Matos

Diseño de Portada: Ayumi Hijiya

Todos los derechos reservados. Está prohibida la reproducción total o parcial de este libro, su tratamiento informático, la transmisión de cualquier forma o medio, ya sea electrónico , mecánico, por fotocopia, registro u otros métodos,  sin el permiso expreso por escrito del autor, excepto por el uso de citas breves en una reseña del libro.

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Segunda edición en español

Derechos Reservados © Mel Matos, 2020

Pie de imprenta: publicado independientemente

https://www.facebook.com/MelMatosAuthor/

Tabla de Contenido

Agradecimientos

Prefácio

Sueño en una alcoba oscura

La búsqueda del alma

Añoranzas de Mujer

El viejo que no quería ver más allá

En Soledad

Alguien observa

Siempre ha estado allí

Llanto nocturno

Miradas habituales de los que nunca están

Si me hubieses visto partir

Un único amor

Mañana será otro día

Nuestro Encuentro

Lipograma: Un Árbol

A las siete...tal vez

La mirada en la caja gris

El silencio

El Gran Doctor

El Ascensor

28 Microrelatos

Agradecimientos

Dedicado a mis padres (Melbin y Layla), y mis hermanos (Alex, Christian y Raquel).   A mi hermano perro Ripper. Y a aquellos que silentes me acompañan.

Prefácio

Este pequeño libro es un viaje hacia mi interior. Quizá un intento de ilustrar una evolución en los retazos de mis pensamientos, plasmados en forma de relatos. Hay en ellos una intención de entretener al lector, pero también transmitir ideas que se colaron en mi mente a través de los años. En cada momento de nuestra historia personal hay creencias y corrientes que se apegan a nuestra piel. En ocasiones vamos mudándolas cual serpientes, a medida que nos vamos conociendo a nosotros mismos, o cuando empezamos a tener algo de claridad acerca de los ritmos de este mundo. Un lugar al cual nunca terminamos de entender, pues cada día aprendemos algo, aunque no lo sepamos.

Mel Matos

Sueño en una alcoba oscura

[1]

Estaba yo allí en ese tenebroso lugar de donde salía un fétido olor a almas aturdidas por el encierro, el sudor se resbalaba por mi frente como gotas de agua cayendo de un iceberg que se derrite por el calor sordo de la soledad; cuando de repente un ensordecedor ruido perturbó al silencio e hizo caricias dolorosas en las paredes de mi estómago.

Mi mirada se volcó hacia el rincón de donde provenía un sonido inaguantable. Era el grito de una mujer que lloraba sin consuelo por un amor perdido que jamás volvió. Luego, mi mente se extravió en susurros de la razón. La desesperación se apoderó de mi cuerpo buscando salir de la oscuridad en que me vi envuelto. Mi respiración se volvió frenética, mis nervios crispados me hicieron golpear la puerta negra que me mantenía atrapado en ese laberinto de dolor.

Las horas galopaban sobre el reloj, mientras yo desgastaba mis pensamientos en un vaivén frenético. Paso tras paso, me iba acercando al mismo lugar. En un círculo infinito iba llegando al punto mismo del estancamiento, donde el tiempo se congela, donde la nada se vuelca en un amanecer que es a la vez noche. Aquel lugar donde los calendarios dejan caer sus hojas al igual que los árboles adornando el pavimento humedecido, anunciando la llegada del frío intenso que atacará sin piedad a los huesos desnudos. Un gélido rumor que enfilará contra aquellos que se calientan en el jaloneo de las madrugadas, entre los licores y los sonidos estridentes.  El invierno eterno de la soledad.

Miré hacia abajo y solo un cable roto me hacía recordar detalles minúsculos de un pasado que poco a poco se desvanecía, de reflejos de lluvia en espejos expuestos al sol de un alba naciente. Me esforzaba desesperadamente por recuperar los retazos dispersos de mi memoria, que se escapaban en el aire como fragmentos de un cristal que jamás llegó a unirse. Eran la sombra de un hombre que nunca encontró el camino de vuelta casa, cuando en las noches oscuras cayó presa de unos brazos de mujer. Atrapado por caricias que se entrelazan al cuello y cortan la respiración, cortan el flujo de sangre que es como la ausencia del dinero en tiempos de necesidad.

Salté, pero no logré elevarme más allá de mis propias ideas. Mis pensamientos eran el lastre que me hundía con fuerza. Mi aliento inquieto,  no cesaba de latir, al igual que