Escucha tu corazón. Salva tu vida. Cómo superar la angustia y darle un sentido a nuestras vidas

Por Luz Boscani

***Incluye la obra Sri Sri, Poesía para la superación personal de Gael Rodríguez***
***Miles de personas en todo el mundo vieron sus vidas transformadas***

Un libro para todas aquellas personas que viven una vida limitada por el estrés y no encuentran el camino a la felicidad.

-Una autobiografía reveladora que te acercará a tu leyenda personal-

La autora nos cuenta cómo atravesó diferentes situaciones de angustia, motivadas por el maltrato laboral (mobbing), la baja autoestima, el desamor, el desempleo, el estrés y la pérdida del sentido de la vida.
Pero gracias a emprender un camino espiritual y a su voluntariado en la Fundación Internacional El Arte de Vivir, superó la depresión y convirtió su vida en un milagro, logrando que todos sus sueños se hagan realidad.
La obra nos invita a descubrir la importancia de escuchar nuestro corazón y aquietar la mente. Pasar de una vida vacía y sin sentido a una llena de significado. A hacernos la pregunta: ¿Si hoy fuera mi último día..., haría lo que voy a hacer hoy? Si la respuesta es “no”, si lo que estamos haciendo hoy no nos acerca a donde queremos estar mañana, entonces debemos cambiar de actitud.

Con un estilo dulce y cercano, a través de reflexiones, cuentos breves, poesías y citas de importantes pensadores y maestros, Luz Boscani logra que podamos comprender fácilmente la importancia de encontrarnos a nosotros mismos. Nos ayuda a “despertar” y entender que la vida es demasiado corta. Dejar atrás la queja y el apego para darle lugar a una sonrisa inamovible y una estabilidad emocional que conduce a la alegría perdurable.

Este libro es, por otro lado, una llamada a la celebración del amor. Emociónate con la historia de amor de Luz y Gael. Descubre cómo se conocieron y cómo atravesaron el cambio más importante de sus vidas, habiéndose convertido en la pareja de escritores humanitarios y espirituales que conmueven miles de corazones en todo el mundo.

¡Tú también puedes ser feliz!

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Reseñas:
He leído tus libros y lo que puedo decir de ellos, sobre todo de Escucha tu corazón es que es MARAVILLOSO. Luz, los libros los escribiste tú, pero Dios me los regaló, ya que gracias a tus palabras puedo ver el camino hacia mi leyenda personal.
por Aaron Ortega

Mi querida Luz, amo con intensidad el primer libro donde nos pláticas como cambiaste y encontraste al amor de tu vida! Mil bendiciones para ti y para Gael. Besos desde México!
por Sosher Gava

Simplemente hermoso
por Cliente iTunes
Es un libro con un gran contenido espiritual, te ayuda a comprender lo que es la verdadera felicidad. Realmente te pone a pensar si lo que estás haciendo ahora es lo que te hace feliz. Entiendes que muchas cosas, solo las haces porque la sociedad te ha dicho que así debe ser. Realmente hace que escuches tu corazón y que sigas tu verdadero sueño.

Excelente!
por Oly Moreno
Un libro de un gran contenido para entender lo que eres y puedes ser en la vida.

Escucha tu corazón
por Cliente iTunes
Me parece un libro excepcional, que nos ayuda a superar situaciones personales, a comprender y valorar lo que tenemos a nuestro alrededor, darle significado a las cosas realmente importantes.
La lectura te va adentrando, identificándote con algunas situaciones y a dar un giro a tu vida.

Felicidades!
por José Luis Garces
Muy buen escrito, natural y transparente!

Gracias!!
por Cliente iTunes
Como bien se dice nada es casualidad y este libro llego en un momento clave en mi vida.

• Idioma: Español
• Editorial: Luz Boscani
• Fecha de lanzamiento: 21 abr 2013
• ISBN: 9781301706396

Luz Boscani

www.luzboscaniygaelrodriguez.comLuz Boscani, born in Buenos Aires, Argentina, known as The Woman of the Treasure of Values, always felt moved to help people overcome their difficulties and achieve happiness. She has a degree in Marketing and had great success in her career, but after a profound change she gave up everything and turned her objectives to service and to selfless help. Today she dedicates her days to writing texts of spiritual self-help, love, personal growth, and well-being.Works like Removing layers of the onion, Become a Better You, and 21 answers reveal how Luz is a pioneer in the implementation of unusual methods as tools of personal growth and self-help. With a completely new approach, the reader is led to the healing of his or her life in a simple and enriching way. Many people say their lives transform after implementing the methods of self-knowledge and divine connection that Luz teaches.Her vision of life, her purity, and her sweetness moves even the most skeptical person. Through her words she manages to convey universal wisdom with clarity and great depth.Gael Rodríguez, known as The Celestial Poet, was born in Madrid, Spain. Mystic poet and writer. After marrying the love of his life, Luz, he retired with her to the top of a mountain, achieving self-realization and profound inspiration.Gael Rodríguez is, probably, the poet who has written the most about personal growth. His verses and essays create an authentic work of self-help. His mission is to offer people an instrument through which they can connect to their heart, find peace, and live in harmony and fullness with life.Ephemeral, The Powerful You, and his Poetic Collection of Personal Growth makes him a contemporary reference of transformational thinking.A fresh look, mystic and defiant, that creates a new poetic wave.Luz and Gael have become a spiritual and humanitarian writer couple that touch hearts around the world, with their more than 45 published titles. The remarkable growth in the Spanish-speaking electronic market has exceeded all expectations. Countries such as Mexico, Spain, Colombia, Chile, Ecuador, Argentina, and the USA lead the ranking of the best sellers.Books in English: Honey Heart, Ephemeral, Sri Sri. Poetry for Self-Improvement, 10 Steps to Create a True Relationship Forever, The Little Great Book of Love, 10 Foolproof Steps to Achieve Professional Success, The Little Great Book of Work and Thoughts to Reach Fullness 301 Selection of Quotes.They tell us: "If you persevere on the way to your heart and spend time studying and cultivating yourself, enhancing your virtues, you will undoubtedly reach true happiness.”Currently, the books of both authors are available in digital format through the most important distribution channels and international electronic bookstores. Among them: Amazon, iTunes, Kobo, Google Play, Sony Readers, etc..........................Luz Boscani, nacida en Buenos Aires, Argentina, conocida como La mujer del tesoro de valores, siempre se sintió movilizada por ayudar a las personas a superar sus dificultades y alcanzar la felicidad. Licenciada en Marketing y con grandes éxitos en su trayectoria profesional, tras un profundo cambio renunció a todo y volcó sus objetivos al servicio y la ayuda desinteresada. Hoy dedica sus días a escribir textos de autoayuda espiritual, amor, superación personal y bienestar.Obras como Quitando capas de la cebolla, Lo mejor de ti, 21 respuestas y Hridaya revelan cómo Luz es precursora en la implementación de métodos innovadores como herramientas de superación personal y autoayuda. Con un enfoque completamente nuevo conduce al lector a la sanación de su vida de una forma sencilla y enriquecedora. Muchas personas vieron sus vidas transformadas tras poner en práctica los métodos de autoconocimiento y conexión divina que Luz imparte.Su visión de la vida, su pureza y dulzura conmueven a la persona más escéptica. Logra, a través de sus palabras, trasmitir sabiduría universal con claridad y una gran profundidad.Gael Rodríguez, conocido como El Poeta Celestial, nació en Madrid, España. Poeta místico y escritor. Tras casarse con el amor de su vida, Luz, se retiró junto a ella a la cima de una montaña, logrando la autorrealización y la más profunda inspiración.Gael Rodríguez es, probablemente, el poeta que más ha escrito sobre superación personal. Sus versos y ensayos crean una auténtica obra de autoayuda. Su misión es ofrecer a las personas un instrumento mediante el cual puedan conectar con su corazón, encontrar la paz y vivir en armonía y plenitud con la vida.Efímero, Tu Yo Poderoso y su Colección poética de superación personal lo convierten en un referente contemporáneo del pensamiento transformacional.Una mirada fresca, mística y desafiante que crea una nueva corriente poética.Luz y Gael se han convertido en la pareja de escritores espirituales y humanitarios que conmueven corazones en todo el mundo, con sus más de 45 títulos publicados.El notable crecimiento en el mercado electrónico de habla hispana ha superado todas las expectativas. Países como México, España, Colombia, Chile, Ecuador, Argentina y EEUU encabezan el ranking de los más vendidos.

Vista previa del libro

Introducción

Alguna vez te has preguntado: ¿Soy feliz? ¿Hago lo que realmente me apasiona? ¿Me amo y me acepto como soy? ¿Mi pareja es mi amor verdadero? ¿Mi trabajo es el que siempre deseé? ¿La relación con mi familia y mis amigos es sana y armoniosa? ¿Me gusta el entorno en el que me muevo?.

Un día despiertas y profundizas un poco más:

"¿Cuál es el sentido de la vida? ¿Quién soy? ¿Dónde estoy? ¿Cuánto tiempo me voy a quedar? ¿Cuál es mi sentido en el mundo? ¿Qué voy a hacer mientras esté vivo?".

La primera pregunta que me marcó y generó el comienzo del cambio fue cuando leí el libro de Louise Hay. Ella dice: Mírate al espejo por la mañana y pregúntate: Si hoy fuera mi último día, ¿haría lo que voy a hacer hoy?. Mi respuesta fue un ¡no! rotundo. Nada de lo que llenaba mi día era lo que realmente me hacía feliz. Sentí un vacío incomprensible.

En mi corta edad he pasado por numerosas situaciones difíciles. En cada una de ellas he dejado muchas lágrimas, sentimientos y salud. Me han quitado la sonrisa en reiteradas oportunidades, pero también me han llevado a donde estoy ahora y a lo que soy hoy.

Gracias a caer, descubrí que en esta vida no estamos solos, que estamos conectados con la Divinidad y la naturaleza. La Divinidad sabe siempre lo que nos conviene. Pude comprobarlo con mis propios ojos, cuando viví una experiencia de reencuentro con almas de vidas pasadas que me marcó para siempre.

Estoy profundamente agradecida por haber despertado, por haber escuchado a mi corazón. Agradezco todo lo que me pasó, los lugares que conocí y las personas que se cruzaron en mi camino, porque fueron los artífices para que pudiera encontrar la felicidad dentro de mí. Esa que no se va con el tiempo, la que perdura y es eterna. Mi vida se llenó de milagros.

Comencé a escribir porque creía que mi historia ayudaría a las personas a cambiar su visión de la vida y a alcanzar la felicidad. Parecía un objetivo muy grande, pero yo me conformaba con que solo una pudiera conmoverse y acercarse a su corazón.

A todos aquellos que sufren algún tipo de problema siempre les digo: Tranquilos, no están solos.

A lo largo del libro volcaré todo lo que aprendí, la sabiduría y el conocimiento que adquirí para llenar mi vida de significado. Para darle un sentido y sentirme agradecida por la bella oportunidad de estar viva. He recopilado enseñanzas de importantes pensadores y maestros, porque considero que cada punto de vista nos ayuda a crecer y emprender el camino de la dicha.

En determinadas ocasiones coloco la imagen de una figura meditando para que, antes de continuar leyendo, cierres tus ojos unos minutos, permanezcas en silencio y reflexiones sobre su contenido.

También trascribiré algunas letras maravillosas de temas musicales. Mi vida siempre estuvo llena de música, es el arte que acompaña cada momento que vivimos con una vibración especial.

Encontrarás una sección donde describo uno a uno los valores humanos, aquellos que atesoro en lo más profundo de mi Ser y que forman parte de mi personalidad. Es vital cultivarlos, compartirlos y desarrollarlos, ya que la sociedad se encarga de destruirlos día tras día llevándonos al caos y la infelicidad absoluta.

Asimismo, podrás disfrutar de las bellas poesías de Gael Rodríguez, conocido como El Poeta Celestial, aquellas que son la pura expresión de su alma.

Espero que puedas leer este libro con calma, adquirir sabiduría, acercarte un poquito más a tu corazón y ser más feliz cada día.

Luz Boscani

Mi historia

"Las ataduras no se encuentran afuera.

Están en la mente, en la conciencia".

Sri Sri Ravi Shankar

Desde niña siempre tuve muchas normas y reglas que cumplir. No podía hacer esto o aquello, debía hablar de una manera, actuar de otra. La diplomacia y ser correcta me han conducido a llevarme siempre bien con todas las personas que me rodeaban y en cualquier ambiente. Nunca pude ser yo cien por ciento, siempre bloqueaba algún sentimiento. Lo hacía para ser aceptada por los demás y "encajar".

El "deber ser" era muy importante para mí. Esto no era particularmente porque mi familia me lo imponía. Todo lo contrario, ellos eran muy permisivos. La sociedad era el problema.

Dicen que hasta los tres años los niños son completamente espontáneos, libres, sinceros y felices. Que no tienen ninguna preocupación y son completamente transparentes. Se manejan con libertad y no tienen miedo al ridículo. No les importa el qué dirán ni ninguna regla social.

De adulta comprendí que gran parte del problema de la sociedad es no poder ser libre y natural. Para ser más específica, a partir de esa edad le añadimos a nuestra alma una capa encima de la otra hasta cubrirla por completo con una coraza, que luego es difícil de quitar. Así nos endurecemos y comenzamos a pertenecer a un mundo de personas a las que me gusta llamar en mente, en vez de personas en corazón.

El camino de la mente al corazón parece ser corto, apenas unos centímetros de distancia, sin embargo es el más arduo y extenso.

Mi historia es acerca de cómo quitar capa tras capa para que reluciera mi Ser, quien soy realmente. Fue entonces cuando mi vida se abrió como la flor más hermosa.

Me gustaría regalarte este capítulo de El Principito. ¡Espero lo disfrutes!

–Vete a ver las rosas; comprenderás que la tuya es única en el mundo. Volverás a decirme adiós y yo te regalaré un secreto. –El Principito se fue a ver las rosas a las que dijo–:

–No son nada, ni en nada se parecen a mi rosa. Nadie las ha domesticado ni ustedes han domesticado a nadie. Son como el zorro era antes, que en nada se diferenciaba de otros cien mil zorros. Pero yo le hice mi amigo y ahora es único en el mundo. –Las rosas se sentían molestas oyendo al principito, que continuó diciéndoles–:

–Son muy bellas, pero están vacías y nadie daría la vida por ustedes. Cualquiera que las vea podrá creer indudablemente que mí rosa es igual que cualquiera de ustedes. Pero ella se sabe más importante que todas, porque yo la he regado, porque ha sido a ella a la que abrigué con el fanal, porque yo le maté los gusanos (salvo dos o tres que se hicieron mariposas) y es a ella a la que yo he oído quejarse, alabarse y algunas veces hasta callarse. Porque es mi rosa, en fin.

Y volvió con el zorro:

–Adiós –le dijo.

–Adiós –dijo el zorro–. He aquí mi secreto, que no puede ser más simple: solo con el corazón se puede ver bien; lo esencial es invisible para los ojos.

–Lo esencial es invisible para los ojos –repitió el Principito para acordarse.

Lo que hace más importante a tu rosa, es el tiempo que tú has perdido con ella.

–Es el tiempo que yo he perdido con ella... –repitió el Principito para recordarlo.

–Los hombres han olvidado esta verdad –dijo el zorro–, pero tú no debes olvidarla. Eres responsable para siempre de lo que has domesticado. Tú eres responsable de tu rosa...

–Yo soy responsable de mi rosa... –repitió el Principito a fin de recordarlo…….

El Principito. - Capítulo XXI

Tal como nos enseña el zorro, lo más importante en la vida, por lo que realmente vale la pena vivir, es invisible a los ojos. Solo podemos verlo y apreciarlo con el corazón. Sin embargo, desde que nacemos sumergimos nuestra vida en cualquier distracción mundana.

A pesar de estar conectada a un mundo superfluo y cubrir mi Ser con deseos, puedo afirmar con mucha alegría que he disfrutado de una familia increíblemente cariñosa, que me ayudó a reencontrarme. El amor, era el ingrediente secreto que siempre estaba presente en mi casa. Gracias a él me convertí en una mujer muy dulce, algo por lo cual estoy profundamente agradecida.

Mis padres no me hicieron faltar nada y no solo eso, sino que tenía demasiadas cosas. Quizás por ser la más pequeña de cuatro hermanos.

A menos que sea perfecto, de una altura normal, delgado, bonito, inteligente, etcétera, es muy difícil que un adolescente no desarrolle un complejo. Mi nariz es grande, soy gordo, demasiado alto, demasiado bajo… y muchos otros más. Asimismo, es muy triste cómo los medios de comunicación y la sociedad entera, se esfuerzan día a día para hacernos creer que si no somos bonitos, no tendremos ningún tipo de éxito en la vida. Cuando la realidad es que el éxito y la felicidad no dependen de una condición externa. No depende de ser físicamente de una manera o de poseer la mayor cantidad de bienes. Es, pues, en la comparación con el resto de nuestros compañeros y con la educación que los medios de comunicación propician, cuando comenzamos a desarrollar un complejo. Yo no fui la excepción a la regla.

Durante muchos años viví anestesiada, con una especie de venda en los ojos, sobre lo que debía ser la belleza. Aceptaba que cualquier persona pudiera herir mis sentimientos. Por supuesto, porque me sentía inferior. Sin embargo, tenía una gran autoestima y fortaleza como persona. Adoraba mi forma de ser.

Te contaré algo muy interesante que aprendí acerca de los complejos físicos cuando iba a terapia. Por mencionar un ejemplo, supongamos que una persona sufre por tener una nariz grande. Mi psicólogo me explicaba que, muchas veces, las personas acomplejadas suelen ponerse un par de lentes determinados y ver la vida a través de su complejo; es decir, que piensan que la gente solo les ve la nariz grande y no pueden ver nada más. Como si fueran una nariz caminando por la calle.

Pero lo cierto es que somos una persona de nariz grande o pequeña, gordo o flaco, alto o bajo que tiene una personalidad que está compuesta por muchas características como por ejemplo, ser simpático, inteligente, seductor o bondadoso. Del mismo modo, entre otras cosas, tenemos ojos, boca, piernas, brazos y pelo.

Sufrimos toda la vida por un complejo físico, cuando en realidad el resto de las personas hasta puede que nunca lo noten. O si lo observan, quizás no les molesta o no les interese, porque reconocen en nosotros muchas otras cualidades interesantes. Repito, no somos solo nuestro complejo. El ser humano tiene una gran cantidad de virtudes que lo hacen maravilloso y lleno de vida, como para estar sufriendo por un defecto físico.

Sí, lo expreso entre comillas, porque, ¿qué es un defecto físico? Nada más ni nada menos que compararse con el otro. Pero claro, me comparo con las narices de otras personas que supuestamente son perfectas y proporcionadas, no me comparo con aquellas que quizás la tengan peor que yo. Me mido con estándares muy altos. Esto es porque la mente siempre busca lo complicado y lo necesario para causarnos un estrés muy grande. Le gusta salir ganadora.

Al parecer, sería más fácil vivir aceptando el supuesto complejo y listo, ¿no es así? Pues bien, soy así, en la vida me tocó ser una persona con nariz grande, pero estoy agradecido porque debido a ello soy diferente a los demás y me destaco, logrando que las personas no se olviden de mí. Qué feo sería si todos tuviéramos cara de angelitos, ¿verdad? ¡Qué lindo es ser diferente! Conozco personas cuyo complejo físico lo toman con humor, haciendo siempre chistes al respecto y no lo padecen en absoluto. De hecho, lo convirtieron en una virtud.

Otro aspecto que aprendí fue que la belleza se encuentra en el interior de uno mismo y luego se refleja en el exterior. Continuando con el ejemplo, si esa persona un día operara su nariz para que le quedara perfectamente proporcionada con su rostro, sería muy feliz, pero al cabo de pocos días seguramente encontraría otro defecto: ¡Oh!, qué bonita nariz, pero mira mi dedo pequeño, está torcido. O si no: Qué bella nariz, pero fíjate el pelo, me estoy quedando pelado. Y si decidiera hacerse una cirugía para arreglar su dedo pequeño torcido, luego más tarde diría: Todo bien, pero mira que gordo estoy.

Esto ocurre porque no nos sentimos bien con nosotros mismos y lo adjudicamos a un aspecto físico. Ponemos nuestro problema en el exterior cuando en realidad este yace en el interior. Nos vamos a encontrar infinitos defectos de por vida, si no profundizamos en esta idea. Las personas que interiorizan y se aman y aceptan tal cual como son, suelen ser las más exitosas y felices independientemente de que físicamente no parezcan ser el prototipo de hombre o mujer modelo. Esto se te puedo afirmar rotundamente. Además, ¿has visto que muchas veces las personas más bellas tienen baja autoestima? Bueno, es por la misma razón.

Por otro lado, este cuerpo que tenemos en algún momento nos va a abandonar. Y a medida que transcurra el tiempo miraremos hacia atrás y nos daremos cuenta de que no éramos tan feos como pensábamos, ni tan gordos, ni tan flacos. Y en ese momento de madurez, cuando añoremos volver a tener esa cara, será imposible. La nostalgia se apoderará de nosotros. Mi pregunta es: ¿No es mejor ser feliz aquí y ahora con este cuerpo y esta cara?. Porque el tiempo no vuelve atrás. ¡La vida es ahora!

Cuando pude entender esto y amigarme conmigo misma, con mi complejo, agradecer que estoy viva y tengo miles de cualidades hermosas, recién en ese momento, sentí un profundo alivio y pensé: Si a alguien no le gusto, que no me mire y listo. Tampoco podemos ir buscando por la vida gustarle a todo el mundo. Como dice la frase: Sobre gustos no hay nada escrito. Algún hombre pensará que soy fea y otro que soy bonita, pero ninguno de los dos afectará mi vida ni mi comportamiento, porque lo más importante es que yo me quiero y me acepto viéndome hermosa.

Espero, de corazón, que estos dos conceptos que aprendí, te puedan ayudar para dejar de sufrir por tu aspecto físico.

Siempre me sentí diferente y con muchos valores. En ocasiones he llegado a pensar que pertenecía a otra época, que no me sentía identificada con esta sociedad y con su forma de hacer las cosas. No me gustaba mucho ir a bailar, estudiaba demasiado, a los once años le pedía a mi madre que me pusiera límites a la hora de salir a jugar, me gustaban mucho la caballerosidad de los hombres, los vestidos de la época antigua, entre otras cosas. Luego de grande encontré la explicación a estas emociones.

Pero la vida continuaba, y había que adaptarse porque de lo contrario quedabas fuera del círculo de amigos y fuera del sistema. Entonces estudié, fui a la universidad y me esforcé mucho por obtener las mejores notas. Tuve relaciones largas y duraderas, conseguí un trabajo, salí con mis amigas, asistí a reuniones familiares, me compré ropa, zapatos y todo lo necesario para sentirme bella y siempre tuve una gran sonrisa en mi cara. Al parecer, la vida me sonreía.

Sin embargo, ninguno de los hombres con los que salí sentí que fueran mi príncipe azul, la ropa más costosa y hermosa que tenía no lograba hacerme feliz por mucho tiempo, y luego, no sé cómo, salía de compras y siempre me generaba nuevas necesidades. A pesar de haber conseguido una licenciatura en Comercialización y sentir que realmente me apasionaba, muchas veces me despertaba para ir a trabajar y no tenía ganas de ir.

Detalles como estos no los veía con claridad como ahora. Realmente sentía que mi vida era la mejor que podía tener, que tenía todo, pero siempre por algún motivo me faltaba algo. La queja pasó a ser un compañero importante para mí.

¿Por qué tengo que estudiar tanto? ¿Por qué hay que trabajar y sacrificarse toda la vida? ¿Por qué no tengo el dinero suficiente para comprarme un auto? ¿Por qué no puedo comprarme una casa? ¿Por qué no encuentro al hombre ideal?, etcétera.

Por lo que explicaba anteriormente, y en gran parte gracias a mi complejo adolescente, desarrollé una personalidad muy sensible y sumisa, queriéndole agradar a toda persona que conociera. Pero también me ayudó a ser una persona de carácter fuerte, muy eficiente, perfeccionista, trabajadora y excesivamente profesional. Supongo que fue por esto que he conseguido grandes éxitos en la empresa, los cuales no hace falta nombrar, los atesoro en mi corazón.

En la última empresa donde trabajé casi seis años, tuve como jefa a una mujer que me enseñó mucho de la vida. Resultó ser la persona que más me hizo sufrir, hasta ahora. La persona que me llevó a perder la salud por completo años atrás. La que más me ha maltratado. La mujer más dura y con más personalidades que haya conocido jamás. Con lo cual fue la que más me hizo crecer.

Dicen que se crece a los golpes. Siempre pensé que uno en la vida tiene que superar sus propias barreras y atravesar sus propios muros. Porque si pudiéramos vivir de las experiencias de otros seríamos todos sabios y no cometeríamos errores, ¿no es así?

Durante esa etapa de mi vida nunca entendí por qué alguien podía tratarme con tanto odio sin que yo hubiese hecho nada malo. Esto se debía a que todavía no había leído el libro de Deepak Chopra Sincrodestino, donde explica a través de la física cuántica que ningún hecho en la vida se da por casualidad, que todo es a causa de algo y que nosotros lo atraemos.

Todo lo que nos sucede en esta vida tiene un sentido. Absolutamente todo y cada uno de los movimientos, pensamientos y acciones que realizamos tiene un sentido. Pero, claro, solo podemos verlo mirando hacia atrás y viendo como cada punto se conecta con el otro. Mientras tanto, nos suceden muchas cosas que nos producen una angustia insuperable.

Una de ellas, en la que perdí por primera vez mi salud, fue transcurrido el primer año en dicha compañía.

Mi jefa tenía esa personalidad tan especial que hacía que en muchos momentos me tratara bien y otros tantos realmente muy mal. Y sin importarle nada, lo hacía delante de todos mis compañeros. Esto desencadenó, al cabo de doce meses, la primera somatización en mi cuerpo. Comenzaron a salirme hinchazones parecidos a picaduras de mosquitos en todo el cuerpo. Picaban muchísimo y no podía parar de rascarme, lo que hacía que en cada zona que tocaba se multiplicaran. Sumado a ello, una gran contractura cervical que me provocaba desmayos.

El dermatólogo me dijo que se trataba de Prurito y me medicó con antiestamínicos. Como una niña aplicada tomaba mis remedios pero no cesaba el malestar. Pasé por más de ocho especialistas diferentes en distintas zonas del país, tomé una gran cantidad de medicamentos, me realizaron biopsias y me inyectaron corticoides.

Luego de diez meses no soporté más esta situación, entré en una crisis profunda y opté por ir a un psicólogo, el que mi hermano me recomendó por su excelencia y amplia trayectoria profesional.

Sentada frente a él, con su calvicie y sus anteojos pequeños que denotaban una gran experiencia, llorando desesperada, le dije una frase que jamás olvidaré: Por favor, ayúdeme, estoy muy mal, no aguanto más; quiero ser una mujer más sabia, quiero controlar mis emociones y no quiero que nadie me haga daño….

Él me dijo algo así: Tranquila, Luz, todo lo que te está pasando es producto del estrés que estás viviendo; está todo en tu mente. Cuando te relajes se te van a ir el prurito y todos los malestares. Y remató con una frase que para mí fue muy fuerte: Confía en mí.

Realmente nunca voy a olvidar ese miércoles de diciembre de 2005. Yo no confiaba en mí y por eso me volqué completamente