Citas de San Agustín

Por San Agustín

¡Descubre la sabiduría intemporal de San Agustín a través de sus citas más inspiradoras! En "Citas de San Agustín", explorarás las palabras de uno de los pensadores más influyentes de la historia de la filosofía y la teología. Este libro te sumergirá en las profundas reflexiones y la espiritualidad de San Agustín, ofreciéndote una visión única de su pensamiento.

Las citas cuidadosamente seleccionadas abarcan una amplia gama de temas, desde la fe y la moral hasta el amor y la verdad. Cada cita te invita a la contemplación y la reflexión, brindándote inspiración y orientación en tu propio viaje espiritual.

"Citas de San Agustín" es una colección que te conmoverá y te hará pensar. Ya seas un erudito en busca de una recopilación valiosa o alguien interesado en explorar la filosofía y la teología de San Agustín por primera vez, este libro te cautivará con su profundidad y claridad. Sumérgete en el pensamiento de uno de los grandes maestros y descubre la eterna relevancia de sus palabras.

• Idioma: Español
• Editorial: Cervantes Digital
• Fecha de lanzamiento: 5 feb 2023
• ISBN: 9791222061597

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CITAS DE SAN AGUSTÍN

En este tiempo, la Iglesia es como una era, en la que se hallan a la vez la paja y el trigo. Que nadie tenga la pretensión de eliminar toda la paja antes que llegue la hora de aventar. Que nadie abandone la era antes de esta hora, aunque sea con el pretexto de evitar el daño que le pueden hacer los pecadores... Si uno mira la era desde lejos, uno diría que no hay en ella más que paja. Hay que revolverla con la mano y soplar con la boca para echar fuera el tamo y descubrir el grano. Si no es así, el grano no se ve. Y a veces aun a los mismos granos les sucede algo de este género: se encuentran separados unos de otros y sin contacto entre sí, y puede incluso llegar a pensar cada uno que está enteramente solo". (SAN AGUSTÍN, Enarr. Ps. 25,5: PL 36,190-191)

Los pobres a quienes damos limosna, ¿qué son, sino nuestros portaequipajes, que nos ayudan a traspasar nuestros bienes de la tierra al cielo? Los entregas a tu portaequipajes y lleva al cielo lo que le das. «¿Cómo -dices- lo lleva al cielo? Estoy viendo que los consume en comida». Así es precisamente como los traslada, comiéndolos en vez de conservarlos. ¿O es que te has olvidado de las palabras del Señor? Venid, benditos de mi Padre,