Todo inicia desde casa: el poder mágico del orden. atrévete a dar un giro a tu vida, mejora tu vida y tu bienestar. descubre el arte japonés de la organización libro de desarrollo personal

Por EMILY W. STONE

 

Como personas que somos, tenemos la necesidad de vivir en espacios que sean propios: sitios donde puedas descansar, meditar, pasar un tiempo de calidad contigo mismo, hacer reuniones privadas con amigos o simplemente pasar un fin de semana viendo una película con palomitas y helado.

 

La importancia de tener un orden radica en que te va a permitir obtener un sentido de responsabilidad, de eficiencia, de productividad y de organización. Además, te dará calma, bienestar, serenidad y confianza. Lo mejor: podrás ser más feliz con mucho menos esfuerzo ¿Crees que vale la pana aprender a ser ordenado? Definitivamente sí.

 

La cultura oriental tiene mucha disciplina hacia ser ordenados, seguramente habrás notado o escuchado que sus calles son extremadamente limpias, que les gusta mucho tener su casa limpia y ordenada, y aunque muchos de ellos viven en espacios reducidos logran tener un orden en su casa. Cuando puedes aprender a tener orden en tu casa podrás sacarlo a otros espacios, y sin duda tus niveles de estrés podrán verse disminuidos, pues cuando llegas a un espacio limpio como un hotel te genera esa calma y mucho tiene que ver con el orden.

 

¡Compralo ya!

• Idioma: Español
• Editorial: EMILY W. STONE
• Fecha de lanzamiento: 2 ene 2021
• ISBN: 9781393506256

Vista previa del libro

TABLA DE CONTENIDO

TEMA 1: INTRODUCCIÓN

TEMA 2: CAUSAS QUE HACE QUE UNA PERSONA NO PUEDA SER ORDENADA

TEMA 3: LA RELEVANCIA DE TENER ORDEN

TEMA 4: CÓMO PUEDO SER MÁS ORGANIZADO

TEMA 5: CÓMO PODER ORDENAR CON UN ESPACIO LIMITADO

TEMA 6. CÓMO PRIORIZAR PARA TENER ORDEN

TEMA 7. CÓMO EL ORDEN PUEDE GENERAR BIENESTAR Y FELICIDAD

TEMA 8. HABLEMOS DE LA MAGIA QUE PROVOCA EL ORDEN

TEMA 9. CÓMO NO CAER EN EL EFECTO DEL REBOTE DEL ORDEN 

TEMA 10. CONCLUSIONES

1.  INTRODUCCIÓN

Como personas que somos, tenemos la necesidad de vivir en espacios que sean propios: sitios donde puedas descansar, meditar, pasar un tiempo de calidad contigo mismo, hacer reuniones privadas con amigos o simplemente pasar un fin de semana viendo una película con palomitas y helado.

¿En qué piensas cuando te describo esto? En tu casa. Ese nido familiar puedes verlo como un refugio en tu día a día lleno de estrés o para simplemente descansar.

Pero, recuerda que ese no es el único sitio donde te desenvuelves, cualquier lugar donde pases una buena cantidad de tiempo durante la semana (en la oficina, en la escuela o universidad; e incluso yendo a cursos, son lugares que forman parte de tu rutina diaria.

¿Por qué te estoy mencionando esto? Porque uno de los pilares fundamentales para que te sientas bien en esos lugares o para que mantengas un buen rendimiento, es el orden.

La palabra orden tiene muchos significados; sin embargo, aquí usaré el concepto más común y el que probablemente llegó a tu mente apenas leíste la palabra.

Ordenar, en pocas palabras, es la secuencia en la cual colocas las cosas, las personas o ideas en un espacio y lugar específico. Un ejemplo puede ser, en el orden que están las letras del alfabeto. Para que no te quedes con la intriga, desglosaré los otros sentidos de esta palabra, puede que te parezcan muy interesantes.

El segundo concepto de esta palabra es el orden natural. En algún momento de nuestras vidas, sobre todo en el colegio, vimos una asignatura llamada biología o ciencias naturales.

La definición de orden natural fue postulada por los filósofos griegos en la Antigüedad. Explicaron que, según las leyes impuestas por la propia naturaleza, tienes tendencia a un fin.

Si imaginaste a Platón como uno de los pensadores que intervinieron en este concepto, estás en lo correcto.

De hecho, Platón distinguía entre tres órdenes. En uno de ellos, el caos era quien reinaba el caos, donde la materia, que estaba formada por átomos, se movía sin un objetivo preciso, es decir, el vacío.

Un orden inmutable, que está formado por el mundo de las ideas: universales y eternas, y el último es el orden material: la copia del mundo de las ideas, lo que se materializa, que puedes tocar, tangible, contundente y engañoso.

El discípulo de Platón, Aristóteles, le agrega otra noción a la palabra orden, las ideas de jerarquía y finalidad. Es decir, lo que va primero y lo que va después.

Luego, el filósofo y teólogo católico, Santo Tomás, hablaba del orden como relación, pero no una relación cualquiera, las cosas distintas deben colocarse en lugares distintos y las que son semejantes en el mismo lugar.

Este filósofo usaba el concepto de orden para llegar a un mismo punto a través de distintos puntos de partida. Por supuesto, por ser católico y teólogo, está orientada hacia un único fin, que es Dios, considerado como el último fin de todo lo que se creó en la humanidad.

En la arquitectura Griega (sí, aún estamos viajando en el tiempo), lo órdenes son los estilos que se les daban a las columna. En algún momento habrás visto construcciones de esa época como El Partenón. A estas columnas se les daban ciertas características distintivas con respecto al formato (órdenes jónico, dórico y corintio. El Partenón, como un dato interesante, es la máxima expresión del orden dórico.

Como te expliqué antes, el orden está relacionado también con la falta de paz y de seguridad en tu convivencia. Si vives en una sociedad desordenada no es una garantía que puedas ejercer todos tus derechos, es conocido como orden social.

Este orden va a coordinar los actos sociales, colectivos e individuales de todos los miembros de la comunidad donde vives, y de ti. ¿Para qué? Para garantizarte paz, equilibrio y armonía.

También, y de la mano con este, está el orden público. Todos conocemos sobre él, pero no está de más explicarlo. Básicamente es un conjunto de reglas de comportamiento que buscan mantener el orden social, es decir, este orden está por encima del orden social y es quien te da las pautas de comportamiento sobre lo que debes o no hacer en público.

El mejor ejemplo para entenderlo cuando sabes que puedes ir con todo el derecho a un parque a pasar el rato, caminar y respirar aire puro; pero, no puedes plantarte a rociar con veneno los espacios del parque (banquetas, árboles, barandales) porque atentan contra la vida de otras personas. Tú puedes hacer lo que quieras y asistir a donde quieras, mientras no dañes al otro, es una norma básica de convivencia.

Existe otro tipo de orden, el orden jurídico, que son un conjunto de normas de determinada sección del ordenamiento jurídico.

¿Qué es el ordenamiento jurídico? Es un conjunto de normas en un orden jerárquico y que las dicta una voluntad estatal, garantizando que la convivencia de todos sea equilibrada y  pacífica.

También existe un tipo de orden para los informáticos. Para los conocedores de la materia (y para los que no conocemos tanto), lo órdenes son instrucciones que una instancia comanda a otra para que esta se ejecute. Por ejemplo, un orden es tan sencillo como la interacción de un usuario con su computadora de escrito o laptop: el usuario selecciona de un menú, una opción o hace clic con un ícono que puede ver en la pantalla; luego, el procesador del sistema recibe la orden de activarlo, ejecutar el programa o hacer otro tipo de acción que el usurario le indique. Es decir, todos estamos constantemente en este mundo de los órdenes informáticos.

A nivel interno de la computadora también pasa eso: el procesador extiende sus órdenes a las distintas partes o componentes del sistema para que se comporten  de una forma determinada. Aquí, por ejemplo, el procesador de tu computadora da la orden al monitor de apagarse cuando le das al botón de apagar, las cornetas para reproducir música o la impresora para que te de una copia de la imagen que puedes ver en la pantalla. Todas estas órdenes ocurren de forma rápida, permanente y en la mayoría de los casos, de forma simultánea.

De esta manera es que te das cuenta que todos los componentes de tu computadora están interconectados entre sí a efectos de dar y recibir órdenes para su correcto funcionamiento.

El orden es visto en el mundo que vivimos ahora, como un valor que aprendemos en nuestros hogares. ¿Recuerdas cuando mamá y papá te pedían que levantaras los juguetes y acomodaras la cama? Te estaban enseñando a mantener orden dentro de tu espacio, en este caso, la habitación.

¿Qué es ser ordenado? Te preguntarás.

Según David Isaacs, una persona ordenada Se comporta de acuerdo a unas normas lógicas, necesarias para el logro de algún objetivo deseado y previsto, en la organización de las cosas, en la distribución del tiempo y en la realización de las actividades, por iniciativa propia, sin que sea necesario recordárselo. Aquí él dice que no es únicamente, mantener un orden en el espacio, sino en los proyectos y metas que te propongas, para alcanzar todo lo que deseas.

Sé que hay personas que son ordenadas por naturaleza, e incluso se exceden hasta el punto de ser obsesivos compulsivos (necesitan tener un orden meticuloso en todo porque, de lo contrario, pueden colapsar y sentirse bastante mal). Otras, por el contrario, deben aprender a adquirir ese valor. Si eres de los últimos, quiero que sepas que, aprender a ser ordenado es sencillo, pero requiere que tengas compromiso y practiques todos los días, hasta que sea un hábito.

Mantener orden es un valor que vas a evidenciar el trabajo, en los estudios, así como en todas las actividades que hagas en tu rutina diaria.

La importancia de tener un orden radica en que te va a permitir obtener un sentido de responsabilidad, de eficiencia, de productividad y de organización. Además, te dará calma, bienestar, serenidad y confianza. Lo mejor: podrás ser más feliz con mucho menos esfuerzo ¿Crees que vale la pana aprender a ser ordenado? Definitivamente sí.

Mi deber aquí es, ayudarte a tener un orden y que veas todos los beneficios que tiene. Lo primero que debes hacer es tener el orden como una de tus prioridades.

En ocasiones, sientes que tu vida está cuesta arriba y que todo  está fuera de lugar, incluyéndote a ti. Las cosas se tornan cada vez más difíciles y, de momento, te ataca el estrés y la ansiedad; te sientes frustrado e inestable, ¿qué está pasando realmente?

Esta es una sensación por la cual pasamos muchos seres humanos (por