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Un Futuro Aceptable
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Libro electrónico106 páginas1 hora

Un Futuro Aceptable

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Te amo, te amo, te amo. Mil veces más.

Alice Goetz es una simple editora de adquisiciones para una editorial, con un no tan simple Chip de Control Temporal implantado en su cerebro. El debut del libro de Paul Osmund es más importante para el futuro de lo que cualquiera en su línea de tiempo podría imaginar. Alice es responsable de asegurarse que todo ocurra de la manera que debe.

Alice piensa que finalmente ha logrado encontrar la línea que llevará a un futuro aceptable, pero algo inesperado comienza a suceder. Paul se enamora de ella. En cada línea de tiempo que ella encuentra.

El futuro depende de que Alice encuentre la mejor línea de tiempo para que Paul viva, pero todos aquellos trabajando para asegurar un futuro mejor no tiene permitido enamorarse con su sujeto. Alice sabe que debe seguir el camino que lleve a un futuro aceptable, pero perderá a Paul para siempre.

IdiomaEspañol
EditorialL.P. Masters
Fecha de lanzamiento5 dic 2018
ISBN9781547545667
Un Futuro Aceptable

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    Un Futuro Aceptable - L.P. Masters

    Un Futuro Aceptable

    Un Cuento Oscuro

    Por L.P. Masters

    Copyright © 2017 por L.P. Masters

    Publicación independiente

    Spokane, WA 99027

    Portada © 2017 L.P. Masters

    TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS. Este libro contiene material protegido bajo las Leyes y Tratados Internacionales y Federales de Derechos de Autor. Cualquier reimpresión o uso de este material está pohibido. Ninguna parte de este libro puede ser reproducida o transmitida de ninguna manera o por cualquier motivo, electrónico o mecánico, incluyendo fotocopiando, grabando o por medio de algún sistema de almacenamiento de información o búsqueda sin permiso escrito por parte del autor/editor, excepto por el crítico que desea citar breves frases en conexión a la crítica escrita para su inclusión en una revista, periódico, blog o emisión.

    Este es un trabajo de ficción. Cualquier parecido con personas reales, vivas o muertas, es puramente coincidencia.

    Hecho en Estados Unidos de America.

    PRIMERA EDICIÓN EN ESPAÑOL

    Dedicado a mi hermana, Kaylene. Gracias por la idea que me abrió este gran universo, o mejor dicho, a todos estos universos.

    Primera Vez

    Paul Osmund entró a la oficina de Alissandra Goetz por primera vez.

    De nuevo.

    Alice intentó recordar cuantas veces iban ya. Todo lo que podía recordar era que había perdido la cuenta... después de quince mil.

    Puso una sonrisa ensayada. Él le regresó la sonrisa frunciendo el ceño un poco menos de lo normal. Eso era un gran paso. Quizá las cosas irían bien esta vez.

    Hola, señorita Goetz. Soy Paul Osmund, teníamos una cita.

    Alice se inclinó sobre el escritorio para estrechar su mano y luego comenzó a citar las palabras que saltaban a su cabeza, como líneas en un cartel. Quedé muy impresionada con tu novela, Paul, uh, ella alzó la mirada ¿Puedo llamarte Paul?

    Los analistas le dijeron el motivo de esta pregunta. A él le gustaba que le llamaran Paul, pero le gustaba que le preguntaran. Se ofendía si ella sólo se apresuraba a llamarlo por su primer nombre.

    Por supuesto. ¿Debería llamarte Alissandra?

    Alice, por favor. Alice volteó a ver su copia del libro. Éste personaje... Raynes. Es muy intenso, muy profundo.

    La sonrisa de Paul se extendió. Él creó a Raynes basado en él mismo; los analistas comentaron en su cabeza. Ella quería voltear los ojos y decir cállense, ya lo sé, pero en su lugar ella dulcificó su sonrisa.

    Gracias. Dijo Paul.

    Alice continuó felicitando a Paul por su brillante libro. Apenas tenía que prestar atención a lo que decía. Todo lo que debía hacer era citar a los analistas. Algunos días se preguntaba por qué ella siquiera tenía que estar ahí.

    Ella intentó resolver el problema por sí misma cuando todo esto comenzó, pero Paul continuaba rechazándola. Después de un tiempo los analistas ofrecieron su ayuda. Y en alguna parte del camino pasó de ser ellos ayudándola, a ellos simplemente tomando el control.

    Dos años. Bueno, casi. Veinte meses llevaba atrapada en esta oficina. Esto no era un trabajo de ir y venir. Era éste mismo momento una, y otra, y otra...

    Y otra vez.

    Estaba por estallar. Consultó su chip de memoria para recordarse a sí misma cuántas veces realmente iban. Ciento dieciséis mil rebobinaciones.

    Por supuesto, tanto el adelanto como las regalías son negociables, continuó ella. Queremos asegurarnos que seas feliz, Paul, y cuidarte bien. ¿Qué dices?

    Él mordió su labio inferior y el estómago de Alice se hizo en nudos que llegaron hasta su garganta. Podía sentir el calor en sus mejillas. Ella había visto cada expresión en su rostro antes. Podía leerlo tan fácil como podía leer su libro.

    Bueno, no lo sé. Aprecio tu interés en mi libro, Alice, pero no creo estar listo para –

    Maldición, murmuró ella.

    ¿Disculpa?

    Alice entrecerró sus ojos. Maldición, dijo de nuevo, más alto. ¡Y maldito seas! Todo este circo no es más que –

    ¿Circo?

    Los analistas se volvían locos en la cabeza de Alice.

    Sí. Alice se levantó de su escritorio y señaló a la puerta. Vete.

    Las cejas de Paul se juntaron. Ella leyó su mirada. Indignación. Amargura. ¿Cómo podía alguien hablarle de esa manera? Estaba a punto de decírselo, pero ella no dejaría que dijera una palabra. ¡Vete! ¡Ahora!

    Paul respiró profundamente, su pecho expandiéndose, sus ojos azules agrandándose, listo para comenzar a gritar, y luego se congeló en esa posición.

    Alice gruñó. No había dado el comando de detener el tiempo. Debió ser Robertson. Ella presionó sus manos en sus ojos y se volvió a desplomar en su silla. ¡Ni siquiera puedo tener una pelea!

    Esto no es un holograma o un programa de simulación, la voz profunda de Robertson resonó detrás de ella. Aunque no completamos cada línea del tiempo, Paul aún existe en cada universo alternativo que exploramos. Tu trabajo es encontrar al Paul que aceptará el contrato. Estas formando la vida de un hombre aquí, Alissandra, cambiando el curso de la historia para mejor.

    Alice miró rápidamente por entre sus dedos a su aprobador, Robertson, reclinarse sobre su escritorio. Él tendría la última palabra en este escenario. Alice había querido darse por vencida hace meses porque sabía que Paul nunca aceptaría el contrato editorial con la Imprenta Lutrisk. La mayoría de los trabajos literarios eran producidos por Inteligencia Artificial estos días. Los editores tenían suficiente literatura producida por IA para alimentar la necesidad de lectura de la galaxia, pero trabajo creado por humanos era raro. Tenía un valor intrínsecamente alto.

    De acuerdo con Robertson, estaban jugando un juego de dos caras. Paul sería influyente en el futuro, no sólo con la publicación de su novela y varias subsecuentes, pero por sus charlas públicas también. La Imprenta Lutrisk aparentemente jugaría un rol en la publicación más importante del futuro, pero si no conseguían el trato con el libro de Paul, se irían a la bancarrota antes de que la gran publicación tomara lugar.

    Alice tomó un respiro profundo y volvió a ver a Paul, quién se encontraba congelado en el tiempo, su boca estaba abierta en un grito, su cara llena de rabia. Ella sacudió su cabeza. Cancela el proyecto, Robertson. Nunca llegará a nada.

    "Confía en los analistas. Este es su trabajo. Hay una línea de tiempo en la que Paul elegirá a Lutrisk. El Más Oscuro lo ha visto. Tu trabajo es encontrar esa línea y traerla al Consciente Universal."

    Alice tenía una vaga idea de a lo que se refería Robertson. Ella había pasado por un curso intensivo cuando Robertson le ofreció este empleo hace tanto tiempo atrás. Aparentemente había millones de universos alternativos, pero sólo había uno de ellos del que todos estaban conscientes. Su nombre era el Consciente Universal.

    El grupo que había contratado a Alice para adquirir el libro de Paul se llamaban los Oscuros, y ellos mejoraban las cosas al traer las mejores piezas de la historia desde otras líneas de tiempo e incorporándolas al Consciente Universal. El Más Oscuro era el único de los Oscuros

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