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Compra 200 CHISTES REDUCIDOS A LA MÍNIMA EXPRESIÓN de Berto Pedrosa y llévate gratis 100 REGLAS PARA AUMENTAR TU PRODUCTIVIDAD de Sofía Cassano

200 Chistes reducidos a la mínima expresión

Berto Pedrosa

Este volumen incluye 100 Chistes reducidos a la mínima expresión & 100 Chistes reducidos a la mínima expresión, Volumen II

—Que dice padre que vayas y que dejes de jugar con el cochino.
—Dile que acabamos este set y voy.

—Escucha cariño, es nuestra canción.
—¿Eso no es la marcha fúnebre?
—Vengo del futuro.

Equilicuá, el pato equilibrista.

—Papá, ¿soy adoptado?
—¿Tú crees que te habríamos elegido a ti?

—De esta remolacha se saca un azúcar buenísimo.
—Sí, es la caña.

La canción de Guns N' Roses favorita de los cocineros italianos es: “Ñoc ñoc ñoquis on Heaven's door”.

En realidad el Titanic lo protagonizaron Timon y Pumba... Giraron el timón a la derecha... Y PUMBA

—¿Estás más gordo?
—Es por exigencias del guión, estoy rodando una película en la que interpreto a tu madre.

Si madrugas 4 fines de semana seguidos te convalidan 2o de panadero.

—¿Cuantos gordos hacen falta para pelear?
—Dos, a lo sumo.

—Quiero ingresar en los X-men.
—¿Cual es tu poder?
—Soy más soso que morder una alpargata.
—¡De acuerdo! ¡De ahora en adelante serás sosezno!

¿Los niños del Magreb hacen los debereberes?

—Mi madre tiene un quiste del tamaño de una cuchara.
—¿Sopera?
—En cuanto pueda.

—Aquí tiene su pedido, ¿le hago albarán?
—Sí, por favor.
—TE HE ECHADO DE MENOS , TODO ESTE TIEMPO

—Mira el gato que me he comprado.
—¿Persa?
—Un kilo más o menos, es pequeño aún.

Y así hasta 200. :) Y además un regalito. (Además del regalazo).

+

100 REGLAS PARA AUMENTAR TU PRODUCTIVIDAD

Sofía Cassano

Descubre de la mano de Sofía Cassano 100 reglas heurísticas que te ayudarán a aumentar tu productividad hasta límites insospechados. Y de paso te echarás unas risas con su estilo fresco y desenfadado.

¡De regalo!

IdiomaEspañol
EditorialPROMeBOOK
Fecha de lanzamiento21 oct 2015
ISBN9781311353702
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    200 CHISTES REDUCIDOS A LA MÍNIMA EXPRESIÓN

    Berto Pedrosa


    Sin título:Users:jkvelez:Documents:Escritor:amazon:Pack ahorra al comprar 2:Pack ahorra al comprar 2 - 010:200 minima.jpg

    ¿Preparad@ para reír de lo lindo? ¡Vamos allá!


    —Oiga, le he pedido 1 kilo y sólo me ha puesto 700 gramos.

    —Es que hace mucho que no venías y te he echado de menos.


    —Mamá ¿me puedo poner un piercing?

    —Claro, hijo. ¿Dónde?

    —En la nariz.

    —JAJAJAJAJAJAAJAJA.

    —Pero mamá…

    —JOJOJO.

    —Joder, mamá.

    —JAJAJA. Ayyyy. Qué bueno. ¡Pero serás idiota, Voldemort!


    Scooby Doo le enseña a los niños que los verdaderos monstruos son personas.


    —Buenas tardes, vengo a hacerme un tatuaje.

    —¿De qué?

    —De tres tristes tigres tragando trigo.

    —¿Dónde?

    —En un trigal.


    —Mira hija, esta lata trae tu nombre.

    —Pero qué dices, abuela, ahí pone Pepsi...

    —Y así te llamas, ¿no?

    —Me llamo BETSY, abuela. ¡BETSY!


    —Tengo ganas de aplaudirte...

    —¿En la cara?

    —Y con dos ladrillos.


    —Papá, ¿qué es un pasivo?

    —Es un hombre al que le gusta que otro hombre le meta la polla por el culo.

    —Ah, vale. ¿Y patrimonio neto?


    Dios pensando maldades antes de hacer el mundo.

    Creo que le voy a poner el punto G a los hombres en el ano. Cómo me voy a divertir, joder.


    Nada dura eternamente, todo se desvanece.

    Andrés. 8 años. Se le borró el tatuaje del bollycao.


    —¿Qué haces para relajarte en tu tiempo libre?

    —Observar a la gente.

    —¿En serio? A mí me relaja cantar en la ducha.

    —Lo sé.


    El día que descubra la cura para la incontinencia urinaria, mearé famoso.


    No puedo hablar mucho de ello pero estoy trabajando desde hace un mes en el Pentágono. Ya casi me salen los cinco lados iguales.


    —Hija, te busca José.

    —¿Qué José?

    —El que te la metió y luego se fue, JAJAJAJA.

    —¡Joder, mamá!

    —Ay hija, desde que te violaron no se te puede hacer una broma.


    —¿Sabes de algún lugar bonito para besarnos?

    —Los genitales.


    —Te quiero.

    —:O

    —¡Te quiero!

    —:O

    —¡TE QUIERO!

    —:O

    —¡MALDITA MUÑECA INCHABLE! ¡TE ODIO!


    — Abuela, ¿qué haces de pie tanto tiempo en la cocina?

    — El médico me dijo que tengo que cuidar el azúcar.


    Escena en CSI:

    —¿Qué es todo este desorden, jefe?

    —Me estoy mudando.

    —Ahora entiendo, todo en caja. ¿Ya han aparecido pruebas del asesinato?

    —En realidad fue un suicidio.

    —Mmm. Concuerda.

    —No, se cortó las venas.


    —Las reglas se hicieron para romperse.

    —¡Joder, abuelo! ¡Para! ¡Van a echarnos de la papelería!


    —Mi hija tiene un gusano enorme en el estómago.

    —¿La solitaria?

    —No, la otra.


    Los osos polares ¿se atraen?


    —Maestro, quiero aprender la Técnica del Tigre.

    —Bien, joven Wang. Junta las manos y repite: Tú.

    —Tú.

    —Loquequiere.

    —Loquequiere.

    —Quemecoma...


    —¡Me mordió un testigo de Jehová!

    —¡TE LLEVARÉ AL HOSPITAL!

    —Quiero hablarte sobre un amigo...

    —¡RESISTE!

    —Su nombre es Jesucristo.

    —NOOOOO.


    —Mi hijo va a clase de flamenco.

    —¿Y cómo lo lleva? ¿Le va bien?  

    —Lo que más le está costando es meter la cabeza bajo el agua.


    —Cariño, ¿dónde pondrías tú este cuadro de mi madre?

    —En el contenedor azul.


    —Paso mucho miedo. En mi casa hay ruidos extraños y siento que alguien está a mi lado, respirándome en el oído. Pero intentaré aguantarlo.

    —Ese es el espíritu.


    —Mamá, tengo hambre. Fríeme algo y tráeme un Nestea.

    —¿Qué te frío?

    —Nestea.


    —Uno de vosotros me traicionará.

    —No me judas.

    —Joder, Pedro. Ya está bien con las indirectas.


    —Jódete, cabrón; yo tengo todas las vocales y tú no.

    —Espera, toca huevos. Murciélago tiene todas las vocales, pero tú, Batman, tú tienes una puta vocal.

    —¿Y ESTO?

    —Tampoco, polla tiene dos.


    —Yo por las noches me hago cuatrocientos abdominales, ¿y tú?

    —Dormir.

    —Joder. ¿Tantos?


    —Puta dislexia, ahora no sé si te saluda o te la suda.

    —Puede que me la sude que no me salude.


    A cierta edad es normal que se caiga el pelo. Lo más importante es no ponerse nervioso y mantener la calva.


    —Molino.

    —¿Donde?

    —¡Molino!

    —Yo no veo ningún molino.

    —Es igual, ya moliné.

    —Joder con el puto chino...


    —Oye cari, ayer en Whatsapp a las 3 y media de la mañana aparecías en línea. ¿Con quién hablabas?

    —Con nadie, le daría sin querer mientras follaba.


    Lo bueno de cenar All-Bran es que cuando se acaba puedes seguir comiéndote la caja, que sabe igual.


    —Mi novia pincha.

    —¿Es Dj?

    —No, italiana.


    —¿Qué desea el señor?

    —Estoy mirando la carta.

    —¿Le traigo la del restaurante?

    —Mejor, este dos de bastos no me dice nada.


    —Hola, venía a por

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