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Ezequiel Mora contra las libélulas: Aventuras y riesgo, #7
Ezequiel Mora contra las libélulas: Aventuras y riesgo, #7
Ezequiel Mora contra las libélulas: Aventuras y riesgo, #7
Libro electrónico191 páginas3 horas

Ezequiel Mora contra las libélulas: Aventuras y riesgo, #7

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Esta novela es la continuación de la sexta novela de E Mora un regreso gris, mientras aquella el riesgo extremo era una convicción, en esta el peligro lo constituye las libélulas, por muy inocentes, se convierten en una madeja de situaciones y emociones que te van a cautivar por el resto de tu eternidad. 

IdiomaEspañol
Fecha de lanzamiento13 jun 2024
ISBN9798227038180
Ezequiel Mora contra las libélulas: Aventuras y riesgo, #7
Autor

Xyan Xoce

Ezequiel Mora, un avispado y suertudo chico nacido en un pueblo de la costa norte del oriente de la isla de Cuba. Es solo el comienzo de una larga y agitada vida que llena de aventuras y riesgos que le llevan a convertirse en un reconocido personaje en las Antillas. Su autor, bajo el seudónimo de Xyan Xoce, entremezcla los sucesos acaecidos en su propia vida con hechos ficticios para regalarnos una bella y rica amalgama de costumbrismo y cubanía, además de brindar un paseo histórico y real por las diferentes e interesantes facetas políticas y sociales, que lo han hecho destacar en muchísimos aspectos y esto te hará vibrar de emoción.

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    Ezequiel Mora contra las libélulas - Xyan Xoce

    Ezequiel Mora

    Contra las Libélulas.

    XYAN XOCE

    Libélula

    ¿Qué es una libélula?

    Libélula es una chica    guapa.

    Comentario

    Esta novela es la continuación de la sexta novela de Ezequiel Mora, son las aventuras de una muchacha, muy bella que vive en la ciudad de Manzanillo, en esta novela Ezequiel Mora pasa de ser el protagonista de una novela, a un personaje secundario, ya que en la novela anterior el quedo entre los amasijos de hierro de un auto, después de tener un accidente del tránsito al final de la novela. En esta historia se cuenta de como salió del accidente, de como un amigo llego a tiempo para cambiarle la vida. Esta novela es de aventura, también para entretener.

    Tabla de contenidos

    Comentario

    Tabla de contenidos

    LA CHICA DE MANZANILLO

    Ezequiel vuelve a escena

    LA RUSA LLEGA A LA HABANA

    PIRATAS EN EL CARIBE

    LA CHICA DE MANZANILLO

    Una noche en la ciudad de Manzanillo, por el malecón va caminando con unos pasos suaves, una muchacha, con un ritmo en la cintura muy musical, mueve el cuerpo melódicamente, es muy bella, el color de piel  morena, una cintura estrecha, con un ancho de cadera, muy abundante en sus sentaderas, de pechos pequeños, con pelo largo negro, lo lleva en forma de trenzas, camina sonriente, mirando para ambos lados, observando a todas las personas que le dicen piropos, ella le sonríe a todos  los hombres, que sentados sobre el muro, todas esas personas no dejan de mirarla. Como pantalón trae uno tan corto, que esta cortado al borde de las nalgas. Como blusa un tope, un tipo de blusa que no lleva tirantes, bien ajustado al cuerpo. Continua el caminar,  mirando con una sonrisa a todos según camina por el malecón, lleva un tipo de zapato de goma, con suela gorda.

    Esta chica se llama María de los Ángeles Concepción Mora, pero todos la llaman ¨Libélula¨ ¿por que se gano este nombre? Ella lleva un tatuaje en la paleta derecha, muy cerca del hombro, de una Libélula, de un tamaño que resalta mucho, casi siempre trae esa parte del cuerpo al desnudo, usando mucho lo que trae en este día, como blusa, el color favorito de ella es el amarillo en las blusas, azul en los pantalones, preferente de algodón, muy pocas veces de otro tipo. La muchacha viste de esta forma casi siempre, cuando esta buscando trabajo, la hora favorita para realizar esta caminata, es a las ocho de la noche, nunca pasada las ocho y treinta. Si ud quiere verla, solo tiene que sentarse en el malecón a esperar que ella pase, cuando no pasa es porque ya se encuentra trabajando.

    El trabajo consiste en acompañar hombres, preferente que no vivan en el pueblo, este trabajo es muy provechoso, que le deja una buena cantidad de dinero, que la tiene sin carencias, la casa de la chica, esta cerca del poblado pesquero de la cooperativa ¨ Andrés Lujan¨ Una casa muy buena en la construcción, también en el interior esta completa con todo lo necesario, vive sola.

    Los padres están fuera del país, quedando ella al cuidado de la abuela, que cuando falleció, dejo sola a la muchacha, a la casa ella no lleva a nadie, ni amigos ni conocidos, cuando trabaja se hospeda en el hotel de un pueblo cercano. En el barrio donde esta la casa, ella mantiene una buena conducta, entre los vecinos, la vivienda la mayoría de los días permanece cerrada, en pocas ocasiones se le ve a ella por la morada, en ese barrio la conocen por María la Mora, por el apellido y el color de la piel, para conocer el nombre que usa para trabajar hay que ir a la zona del malecón. María es una muchacha muy inteligente, se cree ella, vende el cuerpo por unas monedas para vivir bien, gracias al cuerpo, la naturaleza la ayudo mucho, en educación termino el bachillerato, como no pudo estudiar lo que ella quería, dejo los estudios dedicándose a este trabajo, la muchacha le gusta estar a la altura de la moda actual, leyendo revistas de modas extranjeras.

    María de los Ángeles, ya esta llegando a una cafetería bar que hay al final del malecón, al acercarse se detuvo a unos cinco metros de la entrada, esta observando todo el lugar. La cafetería es una armazón de madera, de postes con barandas, con techo de guano, con una entrada, termina al borde del mar, en el interior varias mesas con sillas, a la derecha después de pasar una fila de mesas, un largo mostrador que sirve de cantina, detrás un hombre que atiende a todos los que entran al local. Donde termina la barra, una bitrola, que en esos momentos esta tocando una canción muy suave, donde comienza el mostrador una nevera de dos puertas, varias banquetas en el frente, más dos muchachas que atienden en el salón, al fondo se ve toda la bahía. María entra en el local, echando una ojeada por todo el salón, se detiene frente a la barra.

    –Nero... Un trancola...

    Camina por entre las mesas, sentándose en la última. Esa mesa era la preferida de ella, desde allí ve todo el que entra, a la espalda el mar, sentadas en las mesas varias personas. Las mesas de madera de cuatro taburetes. Cada una de esas sillas es de madera y cuero de chivo. Se acomoda  hecha para detrás, apoyando la espalda en uno de los troncos, que hace de baranda, ve venir hacia ella al hombre con la bebida solicitada, esta bebida es: En un vaso largo, le hecha dos piedras de hielo, una línea de ron blanco, completándolo con refresco de cola, forrado el vaso con una servilleta, sobre un platillo, mira al hombre.

    –¿Algo mas necesita?...  –No gracias...

    El cantinero se retiro para la barra, a ella el trago no se los traen las meseras, Nero se lo trae personalmente, cada ves que ella lo pide, el hombre se lo trae, ahí estuvo hasta la hora del cierre, cerca de la media noche, se tomo esa noche cuatro vasos. Cuando termina el último trago, al ver que no había llegado al que esta esperando, se levanta camina hacia el mostrador, espero a que llegara el amigo, le entrega diez dólares americanos.

    –Quédate con el cambio. –Gracias...

    Ella sale caminando por el malecón, retorna por el mismo camino que ha venido, dobla por una esquina, entra en una calle que la lleva al parque, lo atraviesa mira un reloj en el campanario de la iglesia, son las doce y cuarenta, entra en otra calle, dobla en la esquina a la izquierda, hasta la mediación de la cuadra, se para frente a una puerta. Coge en un orificio una llave, la introduce en el llavín, gira la perilla, abre la puerta, pone la llave en el lugar donde la había cogido, cerrando la puerta detrás de ella. Camina por una acera hasta una de las casas, que hay en ese patio. En ese patio hay tres casas diferentes, la muchacha ha entrado en la casa del centro. Atraviesa la sala, sube por una escalera, entra en uno de los dos cuartos, que hay en ese piso, quitándose la ropa, la fue acomodando en distintas perchas, hasta quedar en blúmer, camina por el cuarto, hasta entrar en el cuarto de baño, se da una ducha, con agua caliente, al terminar sale envuelta en una toalla, acomoda la toalla sobre una silla, se acuesta en la cama sin ropa, se hecha por arriba del cuerpo una sabana, estira la mano, apagando una lámpara. El cuarto queda oscuro, se queda dormida.

    Libélula durmió un solo sueño, despierta a las ocho, se estira mira el techo, abandona la cama entra al baño, después que sale, tarareando una canción baja la escalera, entra en la pequeña cocina, preparándose el desayuno, camina con el plato en una mano,  el vaso en la otra, hasta la mesa en el comedor, se sienta ya se dispone a darle una mordida al pan, cuando suena el timbre. Se levanta camina hacia la puerta de entrada, salió al patio se dirige hacia la puerta de la calle, la abre. Allí parado esta Nero.

    –Buenos días... ¿Puedo pasar?... -ella se aparta no le responde al saludo, dejándolo pasar, cierra la puerta-.  –¿Estas son horas de venir por acá?... -el hombre sonriéndole-. –Te traigo buenas noticias... –Estoy... Desayunando... Si quieres te preparo algo. –No... No hace falta... Ya desayuné...

    Caminaron hasta el comedor, los dos se sientan, Libélula desayunando, Nero se sirve un vaso de jugo, mientras se toma el jugo, le fue hablando de la noticia, que le trae esta mirando a la muchacha.

    –Anoche... Unos minutos después que te fuiste... Se apareció ese amigo tuyo... El colombiano. –¿Quién?... ¡Arturo Cisneros!

    –Ese mismo... Llego cuando casi estábamos cerrando. Me pregunto por ti.  –¿Que te dijo? –Después de tomarse una cerveza, ¿Me hace falta conseguir a Libélula? Esto me lo dijo muy serio, le dije que primero tenía que localizarte -la muchacha lo escucha mientras desayuna.

    –El hombre me dio veinte dólares, diciéndome que te encontrara, que te diera un mensaje. –¿Qué mensaje? –Dice el señor... Que recojas ropas para quince días... Que te llegues a Bayamo, después tienen que ir para la Habana, que sabes el motivo de ese viaje. Solo me dijo eso, ¡ah!... Se me olvidaba, Que te montes en la guagua de las cuatro de la tarde de hoy, si no puedes ir... En esa guagua... Que alquiles un auto de alquiler, que te espera en el hotel de la salida para Santiago, si vas en auto el lo paga allá.

    María recoge lo que esta sobre la mesa, lo lleva para la cocina sin decir nada, Nero termina de tomarse el jugo,  esta mirando a la muchacha que esta de espalda, fregando lo que esta allí.

    –Hace falta que te llegues a casa del viejo Armando, le dices que necesito que me lleve para Bayamo, que me recoja en la vivienda de la cooperativa, a las cuatro, también me hace falta, que me cuides aquella vivienda, me le des vuelta a esta también -se voltea quedando de frente-, ¿puedo contar contigo?  –Lo otro que tengo que decirte, es que me dijo que me dieras veinte dólares, porque el esta de paso y no podía dármelo, si te localizaba... Entonces me ganaría otros veinte dólares. –Te voy a dar... Esos veinte dólares mas otros cien... Para que me respondas por las dos casas. ¿Estas de acuerdo? –Okey... Ud pagas... Yo cuido -María sube al cuarto, al rato baja con una maleta y la cartera, saca el dinero se lo entrega a Nero-.  –Te dejo cuidando mis propiedades.

    Mientras le entrega una copias de las llaves, le dijo eso, más otras orientaciones, que el amigo debía conocer, salen de la vivienda cerrándola, se paran en la calle, ella le estuvo dando otras orientaciones, María camina por la calle hacia la otra morada, Nero camino por la calle en sentido contrario, hacia la casa de Armando, a cumplir el encargo de la amiga.

    María llega a la residencia del poblado pesquero, entra en ella, fue directo para el cuarto abre el closet, va sacando la ropa la fue acomodando dentro de una maleta, cuando termino, la cierra dejándola sobre la cama, sale del cuarto,  abandona la residencia, entra en la casa de la vecina, después que la mujer la invito a entrar, en la sala la muchacha le explica del por que tiene que salir fuera de la ciudad, que había dejado a Nero el hijo de Claudia al cuidado de la morada, asi ella dejaba bien cuidada la vivienda, le entrega una cantidad de dinero a la mujer para que le pague las facturas, que le fueran llegando en la ausencia, se despide camina para otra mansión, unas cuadras mas adelante donde almuerza, estuvo esperando a Nero, cuando llego le confirma, el hombre la recoge a la hora que ella quiere en la casa.

    –Nero por las facturas no te preocupes, doña Matilde se encargara...

    El hombre abandono la morada, después de los saludos de despedida. María se dirige para la vivienda, cuando  entra en ella el reloj marca las tres de la tarde. Entra en el cuarto de baño, se da un nuevo baño cuando termina se puso la ropa que llevara en el viaje. A las cuatro de la tarde llega Armando entra al domicilio, después del saludo el hombre recoge la maleta, llevándola para el auto, la muchacha, recorre el interior de la residencia la revisa después que cierra la puerta, le entrego la llave a Matilde que esta parada al lado del auto, para despedirla. Monta en el auto saludando a la mujer, mientras el auto se fue alejando por las calles de Manzanillo. Ella sentada en el asiento trasero, fue leyendo un libro por todo el camino, hasta llegar a la ciudad de Bayamo.

    Arturo Cisneros, vivía en el poblado de Niquero, se ha casado con una cubana que reside en ese pueblo, unos años atrás. Como la mujer tiene casa, este hombre se estableció en el pueblo. Dedicándose a sacar personas clandestinas, para los Estados Unidos vía Jamaica, por la zona de San Ramón. Pero por ahí el negocio se le puso feo, al descubrirle la marina, el cayo donde el mantenía a las personas hasta la recogida, esto le había ocurrido, unos años atrás.  Cuando le desmantelaron el cayo, tuvo que cambiar la ruta para otra provincia, para mantener vivo el negocio. Encontró en la provincia de Pinar del Rio, a un señor que mantenía una ruta por allá, que le fue recomendado por los socios del pueblo de Morón. Este señor nombrado José Cueto, lo acepta, realizando con este señor varios viajes, el negocio lo esta llevando bien, pero de la noche a la mañana, este socio se le desaparece, quedándose sin ruta, al no tener ruta para sacar los paquetes, se ha quedado con un paquete de la zona, sin poder sacarlo, cuando fue por la zona de Ciego de Ávila, le confirman que ese señor ya no esta en el negocio, que ha tenido que abandonar el país, por unos problemas que tuvo. El hombre había dejado a unos primos al frente del negocio. Arturo al ver esa situación, sale del país para hacer contactos con el socio por México, se mantuvo varios meses por allá, al no poder hacer contacto con el asociado, determina regresar, para hacer negocios con los señores de Morón.

    Arturo realiza el viaje de regreso, por Jamaica, allí estuvo varios días, contactando con los amigos, cerrando los tratos que tiene en esa isla, aprovecha  un viaje hacia Cuba se enrola en el barco, quedándose en el cayo de la playita, donde lo usaba para el reembarque, de los paquetes, cerca del poblado de Niquero. Cuando lo dejan en el cayo, desde el lugar se comunico por vía telefónica, con uno de los amigos en San Ramón, para que lo recoja. La llamada la realizo por un teléfono satelital que trajo en el viaje, que le dieron en Jamaica los amigos, para que se mantuviera  en contactó con ellos. Después de darle la ubicación al amigo del lugar exacto, estuvo esperándolo para que lo recogiera, lo que queda de la noche más todo el día siguiente. Cuando cae la noche, llega el amigo lo monta en un barco pesquero. En el viaje de regreso después de charlar varios minutos, el pescador le alcanza una cantina con comida y un pomo con agua. Lo deja en la costa, pasando el pueblo, en el lugar lo recoge otro señor en un auto, llevándolo para Manzanillo, entran en el pueblo a la media noche.

    Cuando llega a la cafetería del malecón, ya Libélula se ha retirado, mandándole con el cantinero un mensaje a la muchacha. Continua viaje en el auto para Bayamo hospedándose en un hotel, en la salida para Santiago de Cuba, cuando llego despacho al amigo, entra en el hotel después de registrarse se acomoda en la habitación, ya es de

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