AUTOESTIMA: Una Guía Paso a Paso Para Construir una Autoestima Inquebrantable Para Fortalecer la Confianza en sí Mismo y Lograr el Éxito Personal

Por DEAN KEATING

¿Quieres sentirte más seguro de ti mismo y lograr el éxito personal?

¿Te gustaría tener una autoestima inquebrantable que te permita superar tus límites y vivir la vida que deseas?

¿Estás cansado de sentirte inseguro y quieres aprender a construir una confianza más fuerte en ti mismo?

¡Entonces este es el libro para ti!

Este libro te ofrece la solución perfecta para aumentar tu autoestima y lograr el éxito personal. Gracias a su estructura simple y fácil de seguir, podrás descubrir cómo construir una autoestima inquebrantable paso a paso. Le proporcionará las herramientas y técnicas que necesita para superar sus límites y alcanzar sus objetivos con confianza y determinación. Aprenderás a manejar tus emociones, comunicarte de manera efectiva, superar tus miedos y convertirte en la mejor versión de ti mismo.

 Con ejercicios prácticos y consejos fáciles de seguir, aprenderá a:

Empujando tus límites y convirtiéndote en la mejor versión de ti mismo

Maneja tus emociones y construye relaciones sanas y duraderas

Comunicarse con los demás de manera efectiva y asertiva

Maneja tus miedos y alcanza tus metas con mayor confianza y determinación

Desarrolla una actitud positiva de ti mismo y aumenta tu autoestima

Lograr la felicidad y el éxito personal a través de la construcción de una autoestima fuerte e inquebrantable.

Este libro es imprescindible para cualquier persona que quiera mejorar su autoestima y lograr la felicidad y el éxito personal. Puedes convertirte en la mejor versión de ti mismo y vivir la vida que deseas.

No espere, comience su viaje hacia una autoestima fuerte e inquebrantable ahora

• Idioma: Español
• Editorial: Publishdrive
• Fecha de lanzamiento: 8 oct 2023
• ISBN: 9798890084163

Vista previa del libro

Introducción

Este libro NO es teoría. No es una mezcolanza de estudios científicos destinados a ayudar a resolver su problema con las soluciones correctas basadas en la teoría. No es una colección gratuita de especulaciones sobre métodos y consejos que podrían explicar su situación, que pueden haber funcionado para otras personas. Esta información no se ofrece con la esperanza de que de alguna manera, de alguna manera, podría funcionar para usted.

En cambio, todo lo que leerías en este libro funciona porque viene directamente de mi vida. He vivido cada lección que comparto en este libro. De hecho, cada percepción, cada pepita de conocimiento y cada revelación que comparto en este libro es posible solo a través de mi experiencia duramente ganada. Todo lo que leíste en este libro lo aprendí de primera mano.

No fue un proceso fácil. Definitivamente no intenté escribir todo esto desde el principio. Simplemente estaba viviendo mi vida. Sin embargo, debido a las cosas que he aprendido y los resultados que he logrado, me siento obligado a escribir este libro. Si lo que he descubierto me ha ayudado a cambiar mi vida, estoy seguro de que también puede ayudarte a cambiar tu vida.

Me costó mucho tener confianza durante los primeros 26 años de mi vida. Cuando tenía 3 años, mis padres me dejaron al cuidado de mis abuelos, mientras que mi padre consiguió un trabajo en una compañía petrolera del Medio Oriente. No volví a vivir con mis padres hasta que cumplí 11 años. Esos 8 años de extrañar a mis padres realmente me golpearon duro. De alguna manera, de alguna manera, creía que la razón por la que me habían dejado era porque había hecho algo mal. Me culpé a mí mismo. Caminé con una tremenda carga de culpa. Siempre me culpo automáticamente si algo malo sucede en mi vida.

Bueno, mis padres regresaron a los Estados Unidos para siempre. Simplemente no era lo mismo; Pensé que estaba viviendo con extraños. No estamos de acuerdo. De hecho, se volvió tan difícil que incluso me escapé un par de veces. Decir que la relación fue tensa y vergonzosa es poner suavidad, muy suavemente. Albergaba un resentimiento bajo pero ardiente contra mis padres. Peor aún, me culpé a mí mismo.

Cada vez que algo malo sucedía en mi vida o cuando las cosas no salían como esperaba, siempre me culpaba a mí mismo primero. De hecho, me culparía a mí mismo y me negaría a pensar que otras personas u otras situaciones podrían haber contribuido a la situación. Siempre dependió de mí. Esta culpa y odio a sí mismo eran instintivos. Seguí diciéndome a mí mismo: No mereces ser elegido para el equipo de baloncesto porque apestas, o No te devolvió la llamada, ¿por qué querría salir con un perdedor como tú? y así sucesivamente.

Tenía esta cinta de audio mental que seguía reproduciendo y el tema era el mismo: soy un perdedor y no merezco nada. A pesar de que obtuve buenas calificaciones y terminé la universidad y la escuela de posgrado, todos mis logros fueron agridulces, siempre dudé de mí mismo. Cuando obtuve el puntaje más alto en una sección de la escuela de posgrado (¡gané a más de 250 personas!) Me dije a mí mismo que tenía suerte. Rechacé ese resultado.

Tenía este increíble certificado colgado en la pared, lo cual es bastante raro. Muy pocas personas tienen este resultado porque muy pocas personas superan a una clase de ese tamaño. El tema era muy complicado y muy difícil. Sin embargo, descarté todo como suerte estúpida. Tal vez estaban demasiado ocupados para estudiar, tal vez estaban demasiado ocupados con otras cosas.

Seguí encontrando razones alternativas para privarme de una sensación de logro y logro. Seguí saboteándome a mí mismo. Nunca me he permitido celebrar mi valor único como persona y mi capacidad de ofrecer felicidad a los demás. Nunca celebré mis éxitos. Me conformé con trabajos que pagaban mucho menos de lo que valía y para lo que estaba entrenado. Estaba saliendo con personas que me daban por sentado. Estaba perfectamente feliz de estar en otra cara en la multitud totalmente olvidable. He caído en relaciones en las que he sido descuidado, descuidado, dado por sentado, lo que sea.

A pesar de todo, tuve la actitud de que merecía exactamente lo que la vida me ofrecía. Después de todo, era lo mejor que podía esperar ya que no valía mucho a mis ojos. Las cosas podrían haber continuado de esta manera si no fuera por el hecho de que mi autoestima casi inexistente estaba corroyendo el resto de mi vida. Fue este factor tóxico el que hizo que todo lo demás fuera más amargo, doloroso, frustrante e inútil. Cuanto más pensaba que no valía nada, más luchaba en todas las áreas de mi vida. Estamos hablando de mi apariencia, los trabajos que tenía, mis perspectivas de carrera, estatus social, incluso el tamaño del lugar donde vivía y el tipo de automóvil que conducía, todo estaba envenenado por esto, pero me negué a verlo.

Mis relaciones empeoraron cada vez más

Cada nueva relación ha llevado a la humillación y peores compromisos. Llegué al punto en que sentí que si me defendía, mi pareja se iría automáticamente. No habrá discusión; Se levantaba y salía de mi vida. Sentí que tenía que mantener todo dentro; Sentí que cualquier opinión que pudiera tener, cualquier cosa que sintiera que merecía, tenía que mantenerla dentro porque no quería apagar a nadie. No podía permitirme ese riesgo.

Mis trabajos se han convertido en humillaciones diarias. Quiero decir, esperaba ser el perdedor, el tipo en la parte inferior de la pila, pero la gente en el trabajo estaba, en mi cara, disfrutando del hecho de que yo era el tipo en la parte inferior. Lo convertirían en un gran problema. Me señalaron a la cara que yo era el tipo en la parte inferior y que no iba a ninguna parte. Todo esto sucedió a pesar del hecho de que obtuve mejores calificaciones que estas personas. Todo esto sucedió a pesar del hecho de que asistí a una escuela mucho mejor que ellos. Nada de eso importaba. Todo lo que sabían era que yo era el tipo en la parte inferior, y tenían derecho a patearme cuando estaba abajo. La peor parte de todo esto es que sentí que me lo merecía. Sentí que no podía hacerlo mejor.

Mientras tomaba café solo en el comedor de la empresa, todo se derrumbó sobre mí como un castillo de naipes. Me hice una pregunta muy simple; Resultó ser la clave para mí que cambió mi vida. Me pregunté: ¿Es eso todo lo que la vida tiene para ofrecer? Estaba mirando el fondo de mi taza de café vacía y pude ver las gotas de café girando lentamente alrededor de la taza de café mientras la movía. Seguí haciéndome esa pregunta mientras miraba el fondo casi vacío de mi taza.

Estuve allí, dando los mejores años de mi vida a una compañía que ni siquiera me trataba como si fuera, y mucho menos importaba. Estaba en relaciones devastadas por la inseguridad y la codependencia. Nunca tuve tiempo de explorar pasatiempos e intereses que me importaban. Sentí que estaba viviendo mi vida para otras personas, tratando de impresionar a las personas que no me gustaban particularmente. Estaba perdiendo la mayor parte de mi tiempo asegurándome de que todos los demás estuvieran felices. En el fondo, me sentía miserable. En el fondo, estaba llorando, roto, abatido y solo. ¡Ya basta!

Este libro repasa la información que aprendí de primera mano. Mientras luchaba por armar una vida para mí, en mis términos y necesidades, en otras palabras, una vida que valiera la pena vivir, todo se redujo a construir mi confianza en mí misma.

Una vez que gané confianza en mí mismo, pude cambiar mi vida. Es completamente blanco y negro de cómo viví mi vida. Ahora, todas mis relaciones son satisfactorias y gratificantes en muchos niveles. Estoy rodeado solo de personas que me respetan y aprecian mi valor. Ahora estoy haciendo un trabajo que encuentro satisfactorio, gratificante y personalmente importante y significativo. Cada día es un día de descubrimiento y victoria. Sobre todo, ya no me veo como el tipo que tiene la suerte de tener migajas al final del día.

Ya no me veo como el tipo en el fondo de la pila que merece estar allí. En cambio, soy el tipo que hace que las cosas sucedan en mi vida en lugar del que está indefenso mientras la vida se desarrolla preguntándose: ¿Qué pasó? En resumen, pasé de ser una víctima