Cartas sin remitente, Temporada 1: Cartas sin remitente, #1
Por ANDREA SARMIENTO
()
Información de este libro electrónico
Cartas sin remitente el vehículo que le permite a los lectores sentir la experiencia de inmiscuirse en el mundo íntimo y privado de una mujer que está reflexionando acerca de sus experiencias con diferentes conceptos cotidianos de la vida, durante el momento más honesto y sincero que tiene: Ella, sentada en su cama con un cuaderno como espejo y el esfero como el reflejo de su alma.
Relacionado con Cartas sin remitente, Temporada 1
Títulos en esta serie (3)
Cartas sin remitente, Temporada 1: Cartas sin remitente, #1 Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLetters Without Sender: Cartas sin remitente, #1 Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesDuelo a Barbie: Cartas sin remitente, #2 Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificaciones
Libros electrónicos relacionados
Crónica de una Mente Instintiva Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesAtravesando Fronteras: Un Periodista en Busca de Su Lugar en el Mundo Calificación: 3 de 5 estrellas3/5El proyecto soy yo Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesEl trabajo social y su "Síndrome Quijote" Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesVivir no es un arte Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesMujeres fuertes Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesSe vale ser frágil: Cuando la vida pierde peso y gana sentido Calificación: 3 de 5 estrellas3/5Manchas de frío Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesVeneno en la Red Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesIpseidades Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesDESDE EL BORDE Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesRenacer a los 50: La Enfermedad de Parkinson como Punto de Partida Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Sin mí no soy nada: El espejo de las relaciones como práctica espiritual Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesNunca me dejes de responder Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa enfermedad mental como camino Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesVivir con un pie en el freno y otro en el acelerador Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificaciones2050: Yo sí existo Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesSoledad Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesMi Otra Mitad Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesTítere Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesConviviendo con la felicidad Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesUn ruido nuevo Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesVIAJA CONMIGO Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesSoledad En El Diván Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Yo, el acusado Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesDios estaba con Él Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesMi primer amor, un gran error Calificación: 4 de 5 estrellas4/5La derecha al revés Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesTras la Sotana Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesBarrotes que no se ven Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificaciones
Artes escénicas para usted
La muerte de Ivan Ilich Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Fausto: Clásicos de la literatura Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Storytelling: Cómo contar tu historia para que el mundo quiera escucharla Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Guía Práctica de Ejercicios de Técnica para Guitarra Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Los 100 clasicos de la moda: Una guia de articulos que toda mujer con estilo debe poseer Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Biblioteca Studio Ghibli: El viaje de Chihiro Calificación: 4 de 5 estrellas4/5¿Quieres escribir un cuento? Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El Gran Cuaderno de Podcasting: Cómo crear, difundir y monetizar tu podcast Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Teoría de la Música: Niveles 1 - 3 Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El miedo escénico: Orígenes, causas y recursos para afrontarlo con éxito Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Cómo escribir un microrrelato Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Batman, el héroe: La trilogía de Christopher Nolan Calificación: 5 de 5 estrellas5/5El diálogo: El arte de hablar en la página, la escena y la pantalla Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Las 50 leyes del poder en El Padrino Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Oratoria Métodos y ejercicios para aprender el arte de la oratoria Calificación: 5 de 5 estrellas5/5La Celestina Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Napoleón Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa historia de la Gaviota y el Gato que le enseñó a volar Calificación: 3 de 5 estrellas3/5Finanzas para no financieros: El caso colombiano Calificación: 3 de 5 estrellas3/5Don Quijote Calificación: 5 de 5 estrellas5/550 Clásicos que debes leer antes de morir Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesLa Mandrágora Calificación: 0 de 5 estrellas0 calificacionesCada Cosa en Su Lugar Calificación: 4 de 5 estrellas4/5Un actor se prepara Calificación: 5 de 5 estrellas5/550 Cuentos Navideños Clásicos Que Deberías Leer (Golden Deer Classics) Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El Kit del escritor: 50 herramientas imprescindibles Calificación: 3 de 5 estrellas3/5El guión. Story Calificación: 4 de 5 estrellas4/5El secreto del mejor cine: El subtexto en el guion y en la novela Calificación: 5 de 5 estrellas5/5Cómo orquestar una comedia: Los recursos más serios para crear los gags, monólogos y narraciones cómicas más desternillantes Calificación: 5 de 5 estrellas5/5
Categorías relacionadas
Comentarios para Cartas sin remitente, Temporada 1
0 clasificaciones0 comentarios
Vista previa del libro
Cartas sin remitente, Temporada 1 - ANDREA SARMIENTO
Andrea Sarmiento
Personas sentadas en una mesa Descripción generada automáticamenteSobre la autora
Una inexperta escritora que escribe cartas que nunca se envían, y que además sabe que nunca serán
leídas por aquellos a quien se remite la carta.
Curiosa insaciable.
Inquieta como ella sola.
Ha buscado mil maneras de evadirse de lo convencional y de hacer lo que quiere, siempre.
Esto la ha llevado a vivir en tres países fuera de Colombia, a explorar profesionalmente el mundo del
emprendimiento y el corporativo.
Más allá de los libros, las Universidades y las empresas en las que ha estado. La han formado su familia,
sus mascotas, sus amigos, sus compañeros de trabajo, sus parejas y sus viajes.
Tan necia es, que ahora tiene el descaro de publicar un libro en medio de su infinita ignorancia e
inmadurez en el mundo de la literatura.
En sus momentos más lúcidos y serios, ejerce su carrera de mercadeo y publicidad en una central de
medios en Bogotá.
A Pita y Brown. Mi muro de contención contra avalanchas y patrocinadores oficiales de mis locuras. A Rosi, Juli y Anita que me hicieron creer que eso que escribía, valía la pena compartirlo.
Agradecimientos
Gracias a Camila que me levantó de la silla y a Margarita que me enseñó los pasos en esta gozadera que es escribir. También a todas las mujeres que han tenido la valentía de pararse en la pista y animarnos
a bailar con ellas.
(...) pues es entonces cuando comienza la libertad mental o, mejor dicho, la posibilidad de que, con el paso del tiempo, la mente pueda gozar de la libertad para escribir lo que se le antoje.
Virginia Woolf
TABLE OF CONTENT
Sobre la autora..............................4
CAPÍTULO 1..............................11
Prólogo.................................11
CAPITULO 2..............................18
Tortuosa y linda incertidumbre...............18
CAPITULO - 3.............................26
Dejé de huirle a la soledad..................26
CAPÍTULO - 4.............................40
Despedida al cuerpo soñado................40
CAPÍTULO 5..............................45
Ella....................................45
CAPÍTULO 6..............................59
CAPÍTULO 7..............................61
Haciendo negocios con el dinero.............61
CAPÍTULO 8..............................70
A todas las Andreas que soy................70
CAPÍTULO 9..............................79
Para qué una película si tengo mi vida para entretenerme.......79
CAPÍTULO 10.............................88
Enfrentando monstruos con mi hija...........88
CAPÍTULO 11............................107
Carta de mi mejor amiga..................107
CAPÍTULO 12............................118
A las avemarías ajenas que les ganaron el cielo a muchos.......118
CAPÍTULO 13............................130
Bendito Mr. Finger.......................130
CAPÍTULO 14............................142
Carta al viejo Rey........................142
CAPÍTULO 15............................158
Analogía entre el fútbol y el amor...........158
CAPÍTULO 16............................178
Diatriba a Hawái de Maluma...............178
CAPÍTULO 17............................190
No estoy dispuesta.......................190
CAPÍTULO 1
Prólogo
El prólogo es muy importante
—Me dice el editor. Entro en pánico porque ni siquiera sé qué es un prólogo. ¿Y eso con qué se come? ¿Pa´qué sirve? Investigo. Entiendo que es algo que escribe alguien más de mi libro. Sirve como introducción y para poner un fragmento en la contraportada, así la gente se antoja de leerlo. Vuelvo a entrar en pánico. No sé a quién decirle. Me da pena ¿Quién se va a exponer a escribir acerca de esto?
Hasta hace unos pocos meses usaba los libros como somnífero en las noches. Eso me volvió adicta a la lectura desde que era una adolescente, sin embargo, nunca me ayudó con la ortografía. Escribía en mis diarios, como una niña de tercero de primaria, a mis treinta. Sin tildes ni puntuación. No era necesario porque nadie lo leía. A nivel laboral tampoco tenía lío gracias al auto corrector. Sin embargo, un día le compartí la primera carta de este libro a mi prima. Me dijo: Necesito compartir esta carta ya. Súbelo a algún lado
. Y así arrancó este proyecto.
Siempre había escrito. Tenía diarios desde los doce años, pero nunca me había atrevido a compartir nada. Pero este año pasó algo. No supe que se activó en mí. Una energía muy potente me sentó por horas frente al cuaderno, a escribir lo que sentía, acerca de mi vida y de las anécdotas que había escuchado entre mi familia. Quería escribir y seguir escribiendo. Y así lo hice. Hoy entiendo perfectamente qué pasó y lo que me llevó a escribir de esa forma desaforada.
Virginia Woolf plantea en su ensayo: Una habitación propia, que las mujeres necesitamos tener libertad intelectual para entrar en el mundo de la literatura. Después de una investigación acerca de las mujeres y la literatura, llegó a la conclusión que las mujeres necesitábamos una habitación propia y los recursos suficientes para poder dedicarnos a leer y escribir: La libertad intelectual depende de cuestiones materiales
. En mi caso la habitación propia y el dinero estaban. Y aun así no tenía esa tan anhelada libertad intelectual, por una cuestión material: el aspecto y contextura de mi cuerpo. Había metido mi mente en una jaula con unos barrotes gruesos y pesados que se llamaban: culpa y vergüenza. Todo lo que ella tenía por entregar se perdía entre las preocupaciones de los kilos y las medidas que tenía que perder
. En el cómo, cuándo y qué hacer para modificar este cuerpo que creía imperfecto
.
Ya había mandado a la porra las dietas, las medidas, la pesa y las calorías. No estaba dispuesta a seguir sufriendo cada vez que me sentaba frente a un plato de comida. Sin embargo, las conversaciones internas continuaban: No eres suficiente
, Estás gorda
, Tiene que haber una forma de bajar de peso
, no puedo simplemente no hacer nada con este cuerpo
. Miraba al espejo y no me gustaba lo que veía. Me sentía culpable cada vez que comía algo rico. Pensaba en todo lo que no tenía
debido a este cuerpo que me avergonzaba. Hasta que me encontré con el libro Yo debería ser flaca. Me lo devoré. Ese libro me abrió una puerta que no sabía que existía. Un mundo en donde no había cuerpos perfectos y en donde una mujer podía vivir feliz, sin tener que cumplir con ningún estándar de belleza. Ese extraño lugar me atrapó. Comencé a explorarlo y enamorarme de él.
Enfrenté mis temores. Lloré. Pataleé. Y me liberé. El esfero comenzó a moverse muy rápidamente sobre páginas vacías. Un flujo imparable de sentimientos y vivencias comenzaron a plasmarse en el papel y en ese momento me di cuenta de que, toda mi vida había tenido presas mis ideas, mis sentimientos, mi imaginación y mis historias. Esa libertad intelectual llegó cuando abrí la puerta de esa jaula mental que me había autoimpuesto. Por instinto propio mi mente salió corriendo a escribir todo lo que se había guardado durante tantos años.
Hoy sé que esa era la fuerza potente que sentía. Siempre había estado ahí, esperando a que recorriera el camino de la aceptación y compasión para invertir esa energía en algo que realmente me apasionara. Esa fuerza permeó todas las áreas de mi vida. Cito nuevamente a esta visionaria mujer