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Lazos Invisibles
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Libro electrónico230 páginas3 horas

Lazos Invisibles

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Información de este libro electrónico

Lazos Invisibles, que se crean con todo amigo de verdad, es una narracin con un desenlace imprevisto ocurrido durante la toma del Palacio de Justicia en Bogot - Colombia, en 1985. Pretende aumentar la conciencia individual para ayudar a crear un verdadero respeto hacia lo femenino, valindose de una pareja singular que comparte experiencias tan variadas como las relaciones ntimas, la infidelidad de pareja, el aborto, la educacin sexual de los nios, la alfabetizacin, el conocimiento de uno mismo, los ideales por un mundo mejor, los fanatismos religiosos que impiden el conocimiento interior y la realizacin individual, el servicio militar obligatorio y los movimientos insurgentes.
IdiomaEspañol
EditorialPalibrio
Fecha de lanzamiento14 nov 2014
ISBN9781463393908
Lazos Invisibles
Autor

Juan Adrián Karca

Periodista, escritor e ingeniero, con seudónimo Juan Adrián Karca. Es creador de la Fundación Amigos de Verdad, cuyo propósito es dar impulso a un “programa de responsabilidad individual” que busca sensibilizar hacia un mundo armónico, ético, lúdico y organizado, de seres libres caracterizados por el contenido de la sigla PEPISA: “Participativos, Entusiastas, Productivos, Inteligentes, Sanos y Amorosos”. Dedicado a la investigación de la mente y la conciencia. Escribe en www.concienciaahora.com, es autor del libro “Autoestima y Educación sexual” colaboró con el diario “El Tiempo” en columna titulada “Con los menores”. Ofrece conferencias y asesoramiento sobre paz, mente, conciencia y mejoramiento humano.

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    Lazos Invisibles - Juan Adrián Karca

    Lazos invisibles

    Juan Adrián Karca

    Copyright © 2014 por Juan Adrián Karca.

    jak@concienciaahora.com

    Todos los derechos reservados. Ninguna parte de este libro puede ser reproducida o transmitida de cualquier forma o por cualquier medio, electrónico o mecánico, incluyendo fotocopia, grabación, o por cualquier sistema de almacenamiento y recuperación, sin permiso escrito del propietario del copyright.

    Esta es una obra de ficción. Cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia. Todos los personajes, nombres, hechos, organizaciones y diálogos en esta novela son o bien producto de la imaginación del autor o han sido utilizados en esta obra de manera ficticia.

    Fecha de revisión: 05/11/2014

    Palibrio

    1663 Liberty Drive

    Suite 200

    Bloomington, IN 47403

    ÍNDICE

    Dedicatoria

    Nota Aclaratoria

    Protagonistas Y Sus Relaciones

    Introducción

    Juan Adrián Karca (2007)

    1    Camila Ferreiro

    2    El Primer Encuentro Con Guillermo

    3    Los Tres Mundos

    4    El Segundo Encuentro Con Guillermo

    5    La Alfabetización Y El Servicio Militar

    6    Influencias Del Hogar En La Vida Futura

    7    Pensamiento Y Religión

    8    Seguridad Y Libertad

    9    El Amor Es Nuestro Destino

    10    Un Camino De La Felicidad

    11    Vida Traicionada

    12    Tania, La Guerrillera

    13    Educación Sexual Honrada

    14    El Abandono De Los Viejos

    15    El Dr. Alejandro Guerrero

    16    El Respeto Por Los Niños

    17    La Pasión Por El Ajedrez

    18    Los Cuentos

    19    Culpa Y Responsabilidad

    20    La Desaparición De Los Alumnos

    21    El Reencuentro De Guillermo Con El Cura Bernardo

    22    ¿Locuras O Ideales?

    23    El Encuentro De Camila Con Mauricio

    24    El Incendio Del Castillo

    25    Masculino Y Femenino

    Epílogo

    Dos bellas plantas, cual palmeras que crecen independientes y cercanas, cruzándose y acariciándose con sus hojas, adornan la cocina de mi casa recordándome cómo han de compartir amantes o amigos de verdad.

    (Jak)

    Yo no tengo ningún interés en salvar a nadie. En realidad, nadie necesita ser salvado. Todo el mundo está perfectamente bien tal como está. Todas las personas son lo que han elegido ser. ¿Y quién soy yo para interferir? Lo máximo que puedo hacer es explicar lo que me ha ocurrido a mí: contar mi historia. Tal vez alguien tenga una percepción y encuentre un rumbo a raíz de esta historia. Quizás le abra la puerta. Pero yo no estoy haciendo nada, simplemente estoy compartiendo mi experiencia.

    (OSHO)

    DEDICATORIA

    A todo hombre y mujer que aún cree que es mejor compartir la vida y ser un amigo de verdad de sí mismo, de su pareja y de todo cuanto le rodea, en lugar de dedicarla a destruir lo que le incomoda o a querer cambiar a los demás, pensando que así lograría algo positivo con su actuar.

    También a todas las mujeres y a todos los hombres que, sin importar su género, pueden creer que en ellos hay una capacidad inmensa para vivir dichosos a pesar de las diversas circunstancias que la vida ofrece, y están dispuestos a permitir que en el mundo de afuera se manifieste esa faceta femenina de sensibilidad, receptividad y amorosidad que todos traemos desde la cuna.

    Particularmente a Bruno Bettelheim, Elizabeth Badinter, George Orwell, Jaime Balmes, René Descartes, Ronald Hubbard, Teilhard de Chardin y Wilheim Reich, cuyas ideas me ayudaron a darle forma a esta historia; a la vez, quiero hacerles un reconocimiento a todos los escritores que me han transmitido sus verdades a través de sus libros, y a las personas que me han permitido conocer sus universos interiores, de donde me he nutrido para comprender mejor el mío y así convertirme en un amigo de verdad de la vida entera.

    NOTA ACLARATORIA

    Todos los personajes y sucesos de esta historia son producto de una combinación entre la observación de la realidad y el uso de la imaginación, las que se funden de manera coherente para tejer una narración que atrape al lector en la historia, dejándole un mensaje que lo lleve a descubrir al amigo de verdad que hay en su interior y a despertar los lazos invisibles que lo unen con todo lo demás.

    J. A. Karca

    PROTAGONISTAS Y SUS RELACIONES

    INTRODUCCIÓN

    Siempre he creído que todos tenemos un adentro y un afuera; sea que se trate de una piedra, una planta, un animal o una persona. El adentro es eso invisible y desconocido que le permite ser a cada cosa lo que es y no algo diferente. En una piedra ese algo invisible es totalmente inconsciente, como si estuviera dormido; en la planta ese algo invisible ya se encuentra un poco despierto, en el animal mucho más, y en el humano puede estar tan despierto que no solo se da cuenta del mundo exterior sino también de su mundo interior.

    En el exterior todos somos diferentes pero guardamos muchas similitudes internas que nos permiten crear unos lazos invisibles capaces de volvernos amigos de verdad unos con otros.

    Aunque los lazos de amistad que podemos establecer con animales, plantas o cosas son menos evidentes que los que disfrutamos entre humanos, también se pueden desarrollar. Para eso primero es necesario aprender a ser amigo de verdad de uno mismo y de las personas del entorno.

    Como introducción a la historia de unos buenos amigos de verdad que narro en este libro, quiero compartir lo que significa para mí ser un amigo de verdad.

    ¿QUE ES UN AMIGO DE VERDAD?

    Es alguien que siente afecto por ti, respeta tu espacio y está dispuesto a mantener una comunicación de doble vía contigo.

    Te permite ser como eres: No evalúa por ti, no juzga por ti, no invalida lo que eres ni te presiona a cambiar nada. Cuando ve algo que considera que podrías mejorar o que te convendría cambiar, simplemente te hace preguntas para ayudarte a evaluar la situación por ti mismo.

    Se alegra con tu presencia, le agradan tus triunfos y, cuando observa algo apreciable en ti, te manifiesta el agrado que eso le produce.

    No te critica ni condena ni se queja, pero tampoco acepta tus desvalorizaciones o maltratos; cuando estos ocurren, te comprende, alejándose silenciosamente de tu espacio mientras eres capaz de recobrar la serenidad. Más tarde te ayuda a que evalúes la situación, sin imponerte nada.

    Cuando estás alegre, se alegra con tus alegrías; cuando estás aburrido, te motiva para estar alegre; y cuando disgustas o estás triste, te comprende y te permite expresar tus emociones.

    Entre sus metas para lograr una vida más feliz, se encuentra el querer ayudar para que tú también lo logres; sin embargo, no te dice lo que tienes que hacer, pero con sus preguntas, el compartir de sus experiencias o su simple presencia te ayuda a descubrir caminos.

    Cuando se enfada, y con ello te genera carga emocional, es generoso para reconocerlo y emplea la comunicación de dos vías para ayudar a liberarte de ella.

    Pero más que todo lo anterior, un Amigo de Verdad es el espejo donde te puedes mirar, sabiendo que en el fondo ves la misma esencia espiritual que hay en tu propio interior.

    ¡VUELVETE UN AMIGO DE VERAD!

    JUAN ADRIÁN KARCA

    (2007)

    1

    Camila Ferreiro

    «Todos estamos obligados a ayudar para que se siga abriendo paso una mujer nueva que, a pesar de las presiones encontradas, sepa dignificarse y motivar a su compañero; él, de este modo, compartirá con ella la responsabilidad de crear un entorno equilibrado para su desarrollo personal y el de los hijos.

    ¡No más madres a la antigua: mujeres impedidas y frustradas! ¡Que se dé paso a esas mujeres nuevas que, aun con el desorden inicial que genera el disfrute de libertades por largo tiempo reprimidas, traen el espíritu renovador de una sociedad más equilibrada y justa, donde la otra mitad del género humano podrá participar en la construcción de una mejor comunidad!

    ¡Felices aquellos hijos que han gozado de las caricias y del cuidado de una madre dedicada! Pero mucho más dichosos los que pueden lograr la divina suerte de contar también con la ternura de los padres junto con una madre consciente de sus responsabilidades como ser humano.

    ¡Ay de nuestras sociedades si dejaran de engendrar a esas mujeres que, sin perder su feminidad y sentido maternal, y a pesar de las presiones provenientes de un machismo que pretende mantenerlas subyugadas, son capaces de ejercer sus derechos a crear un mundo mejor, hombro a hombro con los hombres, sin someterse a sus caprichos de creerse seres superiores!

    Ojalá desaparezca la mujer resignada que consume su vida como un peón de brega para que un machista irresponsable y cómodo pase insensible ante las labores hogareñas; un hombre que además de brindar sustento material y ejercer una autoridad despótica, pretende que todos a su entorno se sometan a él y que se perpetúe en las generaciones subsiguientes una continuada desvalorización de las mujeres, camuflada tras la retórica del valor irremplazable de sus nobles sacrificios y de la exaltación del don de la maternidad».

    Los anteriores pronunciamientos fueron expresados por mi caro amigo, Guillermo Reinoso, psicosociólogo interesado en la mujer y en la reevaluación del elemento femenino en nuestras sociedades. Quiero compartirlos con aquellas personas que tengan la oportunidad de viajar conmigo a través de las páginas de este libro, donde trataré de narrar acontecimientos y enseñanzas que fueron importantes para mí. También los considero valiosos para hombres y mujeres en estos tiempos de cambio en los que la procreación y el disfrute sexual no están necesariamente vinculados, como ocurría en los tiempos anteriores al descubrimiento de los diferentes métodos anticonceptivos y de las nuevas técnicas de inseminación artificial, que poco a poco irán teniendo mayor aceptación como mecanismos que pueden ayudar a resolver distintas limitaciones de las parejas.

    (Cuenca, 2007)

    Me llamo Camila Ferreiro. Soy una mujer casada, con tres hijos; periodista y amante de la vida y de las cosas bellas. Pertenezco a ese grupo de mujeres nuevas que quiere alcanzar un desarrollo humano a la altura de sus crecientes capacidades. Pienso que la verdadera liberación femenina se encuentra en el exterminio de los complejos, prejuicios y tabúes que impiden el desarrollo de nuestros potenciales máximos, y que el machismo es el verdadero escollo del que debemos liberarnos todos, tanto hombres como mujeres.

    Desde muy pequeña me gustó leer, pues encontraba en los libros amigos difíciles de hallar en la realidad. Aunque la poesía y la novela cautivaron mis primeros intereses, y todavía me siguen brindando la posibilidad de mantener despiertas mis fibras sensibles, más tarde empecé a orientarme hacia el saber que, cosa extraña, deleita más a los hombres que a las mujeres: la ciencia y la filosofía. No las consideré como una profesión, sino como esas actividades laterales que despiertan nuestro interés por mera curiosidad y deleite, para saber cómo somos, de dónde venimos y hacia dónde vamos.

    Por circunstancias especiales, me tocó conocer a Guillermo Reinoso, un hombre encantador con quien no compartí una vida de pareja, aun cuando disfrutamos de momentos de bella cercanía, pues mientras estuvo junto a mí me brindó luces que ayudaron a valorarme como persona y a armonizar mi camino de mujer inconforme y soñadora, enseñándome el potencial inmenso que se anida en el valor de las experiencias compartidas.

    ¡No! Guillermo no fue mi marido, ni siquiera llegamos a pensar que eso fuera posible. Tampoco puedo decir que haya llegado a ser mi amante, aunque lo quise y aún lo quiero con todo mi ser; pero sí fuimos muy buenos amigos: ¡amigos de verdad! entre quienes no existía el egoísmo ni las presiones por dominar o poseer al otro, sino simplemente las ganas y el valor de experimentar, disfrutar y compartir las cosas bellas de la vida, esas que tienen la extraña particularidad de durar poco y ser irrepetibles. Por eso no lo extraño, aunque a veces me parece que debería hacerlo. ¡Pero no! Así como no lo extrañaba cuando dejaba de verlo por un tiempo y me sentía muy feliz cuando disfrutábamos de algún momento juntos, lo mismo pasa ahora, pero un poco distinto, porque nunca más volveré a encontrarlo. Ojalá no hubiese muerto tan temprano. Guillermo fue una de esas personas que llegan a quererse por lo que son y que nos siguen acompañando aun después de muertas.

    No espero hallar a otro hombre como él, pero su presencia o ausencia no me han impedido querer a Reinaldo, mi marido, como a ese ser especial en quien casi siempre he encontrado lo esencial para vivir con la felicidad que nos da la vida. En él he visto con claridad que no existen seres humanos capaces de satisfacer completamente las necesidades de otro, pero también que es posible aceptar que eso sea así, sin lastimarnos ni querer monopolizar o ahogar a los demás. Reinaldo ha sabido mantener su espacio sin vulnerar el mío, sin dañarme y sin dañarse, creciendo como ser humano y facilitando para mí un camino similar al suyo. Por eso lo admiro y lo quiero, y no tengo ningún interés en renunciar a su amor y a su compañía. Con hombres de su estatura o de la de Guillermo, la vida se torna más amable y fácil, y las mujeres tenemos posibilidades reales de caminar hombro a hombro con ellos para mejorar todos. Desafortunadamente el camino aún es largo. Todavía son muchos los que piensan que las pretensiones de las mujeres para alcanzar la plenitud de sus derechos son una utopía, como también existen movimientos feministas que predican que la liberación se logrará gracias a su beligerancia y firme rechazo a las actitudes machistas; incluso hay quienes dicen que las cosas están bien como se encuentran y que no es necesario cambiar nada.

    Yo creo que una auténtica participación de los hombres en las responsabilidades hogareñas y una clara toma de conciencia para ponerse del lado de las mujeres, como también deben hacerlo con todos los menores o personas discriminadas, aportaría más a la causa de la mujer que todos los atrincheramientos para mantener unas ventajas que deben ser compartidas o para destronar al hombre y usurpar parte de sus cuestionables derechos.

    Pienso que es una dicha enorme para mis hijos poder disfrutar del influjo de una madre liberada como yo, que ha facilitado que su compañero se involucre en un permanente contacto tierno y responsable con ellos y no se ha contentado solo con la función tradicional de velar por el hogar; por el contrario, se ha arriesgado a tener una vida con sentido individual, sacrificando su comodidad y aceptando los riesgos del chisme, la calumnia y la maledicencia, para dejar su huella en un entorno que muchas veces le ha sido hostil.

    Ya murió la madre tradicional que había en mí: aquella que en muchas mujeres ha renunciado a su desarrollo humano en favor del egoísmo de unos hombres que, al amparo de la exaltación del bello sexo, las ha conservado durante siglos sometidas a una esclavitud injusta, a la vez que han propiciado con su comportamiento el ejercicio de una venganza inconsciente; en virtud de ella, la mujer ha mantenido alejado al hombre de la fuente de ternura que brinda una verdadera cercanía con los hijos.

    Gracias a los conocimientos y experiencias que enriquecieron mi vida durante los ocasionales encuentros que sostuve con Guillermo Reinoso

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