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Cómo Hablarle a tus Hijos para que estos te Escuchen: Métodos Efectivos para Crecer Hijos Emocionalmente Inteligentes que Escuchan a sus Padres
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Cómo Hablarle a tus Hijos para que estos te Escuchen: Métodos Efectivos para Crecer Hijos Emocionalmente Inteligentes que Escuchan a sus Padres
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Cómo Hablarle a tus Hijos para que estos te Escuchen: Métodos Efectivos para Crecer Hijos Emocionalmente Inteligentes que Escuchan a sus Padres

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¿Te has preguntado si estás utilizando los métodos correctos al crecer a tus hijos? ¿Te gustaría saber de qué manera puedes ayudar a tus hijos a tomar las mejores decisiones posibles? ¿Te preocupa el no saber cómo será el futuro de tu hijo o hija? Entonces necesitas seguir leyendo...



"Cada día de nuestra vida hacemos depósitos en los bancos de memoria de nuestros hijos." - Charles R. Swindoll



Desafortunadamente, los hijos nunca vienen con manuales de usuario que nos puedan guiar durante sus etapas de crecimiento. La mayoría de la responsabilidad recae en los guardianes de los hijos. Normalmente estos son los padres, otros familiares o maestros en las escuelas.



Las primeras etapas del desarrollo de nuestros hijos son de las más importantes, ya que suelen tener un impacto grande sobre el comportamiento y manera de pensar que tendrán durante la pubertad, adolescencia y adultez. 



Crecer a un hijo correctamente y ayudarlo a tomar decisiones positivas durante sus vidas puede sonar bastante complejo para muchos padres y guardianes. ¿Pero qué tan cierto es esto y que es lo que podemos hacer para ayudarlo de manera positiva?



En este libro descubrirás:



-Cómo enseñarles valores que les serán útiles durante toda la vida: independencia, empatía, asertividad y autoconfianza.


-La importancia de ser el primer mentor de tu hijo.


-Cómo ayudarlos a realizar decisiones sanas e inteligentes. Una habilidad que les será muy útil en todas las etapas de sus vidas.


-Hábitos indispensables para ayudar a sembrar un sentido de responsabilidad y empatía.


-Cómo convertirte en el mejor amigo de tus hijos, manteniendo el respeto entre ambos.


-Los beneficios de incrementar el coeficiente emocional en tus hijos.


-Y mucho más...



Cualquier padre puede ayudar al desarrollo de la inteligencia emocional de sus hijos con tan solo implementar algunos sencillos cambios.



Siéntete más seguro al crecer a tus hijos y ayúdalos a construir un mejor futuro. ¡Da el primer paso para cambiar sus vida y haz clic en el botón "Añadir al carrito" ahora!

IdiomaEspañol
EditorialPublishdrive
Fecha de lanzamiento16 feb 2021
Cómo Hablarle a tus Hijos para que estos te Escuchen: Métodos Efectivos para Crecer Hijos Emocionalmente Inteligentes que Escuchan a sus Padres

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    Cómo Hablarle a tus Hijos para que estos te Escuchen - Keith Dolton

    padres.

    1

    El coeficiente emocional y su importancia

    En pocas palabras, la inteligencia emocional involucra una serie de habilidades que le permiten a usted y a su hijo comprender y aprovechar las emociones de maneras que conducen a una conciencia más precisa de sí mismo, una mayor confianza, un afrontamiento más eficaz, relaciones más sólidas, una mejor toma de decisiones y más éxito académico y laboral.


    La inteligencia emocional no significa que su hijo sea emocional o deba decirle a los demás todo lo que siente. Más bien, las habilidades de inteligencia emocional le permitirán a su hijo enfrentarse a los acosadores, manejar la presión o motivarse para rendir al máximo, entre muchas otras cosas.


    ¿Es la inteligencia emocional sólo una tendencia?


    La inteligencia emocional ha existido durante mucho tiempo. Los primeros filósofos notaron la importancia de los aspectos de la inteligencia emocional, aunque no usaban este término.


    En la década de 1920, los psicólogos estadounidenses discutían sobre la inteligencia social y qué factores no intelectuales podían predecir el éxito. En 1983, el psicólogo Howard Garner presentó la idea de inteligencias múltiples que incluían habilidades verbales y matemáticas, pero también efectividad interpersonal e intrapersonal. El término cociente emocional fue introducido por Reuven Baron en la década de 1980 cuando desarrolló una herramienta de evaluación para medir el cociente emocional.


    Y, a finales de la década de 1990, el término inteligencia emocional había sido definido formalmente por muchos profesionales. Entonces, ¿la inteligencia emocional es una tendencia que de pronto desaparecerá? Muy difícilmente. ¿Conoce alguna tendencia que comenzó con los primeros filósofos, que el día de hoy aún existe y todavía está ganando impulso?


    Un modelo de inteligencia emocional


    El modelo de inteligencia emocional que se muestra aquí contiene cinco áreas principales de inteligencia emocional y dieciséis áreas de habilidades separadas. Si desea que su hijo desarrolle confianza, establezca y alcance metas, se enfrente a los demás cuando sea necesario, formar relaciones sólidas y significativas, tome buenas decisiones, maneje el estrés de manera efectiva y sea feliz, ¡este libro es para usted!


    Autoconciencia emocional


    La autoconciencia emocional implica la capacidad de reconocer las emociones a medida ocurren y saber que las causa. La capacidad del niño para leer las reacciones de los demás a sus emociones es para de la autoconciencia emocional. La autoconciencia emocional permite al niño responder la pregunta ¿qué pasa? cuando está molesto y para decirle la causa de la angustia. Irónicamente, muchos niños son efectivos en esta habilidad y es solo cuando escuchan cosas como pero no debes sentirte así porque… o no seas tan sensible que dejan de contarte sus sentimientos y lo que les molesta.


    Autoestima


    La autoestima implica comprender las fortalezas y limitaciones, y respetarse y aceptarse a sí mismo a pesar de sus limitaciones. El tercer elemento de la autoestima es el nivel de confianza de su hijo, que surge principalmente de la autoaceptación y el respeto. Los niños con alta autoestima no se jactan ni son egoístas, sino que poseen una comprensión precisa de las fortalezas y limitaciones (ej. soy muy bueno en matemáticas, pero no tan bueno en ortografía) se aceptan a sí mismos, ya que no son demasiado autocríticos ni defensivos cuando otros señalan sus limitaciones, se esfuerzan por mejorar y tienen confianza debido a su clara comprensión de sus fortalezas y limitaciones.


    Autorrealización


    La autorrealización comprende esforzarse por darse cuenta del potencial, establecer metas apropiadas y alcanzarlas, y recibir satisfacción y significado de las actividades. Los comportamientos evidentes en los niños pueden incluir formar parte de un equipo, decidir buscar un talento y luchar por mejorar en la escuela o en alguna actividad que realizan.


    Los niños deben experimentar alegría y el significado de sus búsquedas para poseer la autorrealización; de lo contrario, si están haciendo algo para mantener felices a los padres o porque creen que algo se espera de ellos, la alegría se desvanecerá y, en algunos casos, el resentimiento aparecerá.


    Autoexpresión emocional


    La autoexpresión emocional incluye la capacidad de expresar las emociones apropiadas de manera verbal y no verbal para que esa expresión sea congruente. Los niños que pueden participar en una expresión emocional saludable usarán palabras como enojado, triste, feliz o asustado y sus acciones no verbales coincidirá con sus palabras.


    Independencia


    La independencia es la capacidad de ser auto dirigido y funcionar sin demasiada dependencia de los demás o una necesidad indebida de apoyo o tranquilidad.


    Los comportamientos que pueden ver en los niños incluyen todo, desde un niño de dos años que dice Lo haré yo mismo hasta un niño de siete años que se siente cómodo pasando la noche en la casa de un amigo, hasta un preadolescente que no pide ayuda en la tarea hasta que realmente se atasca.


    Asertividad


    La asertividad implica la capacidad de expresar opiniones, creencias y pensamientos y de defenderse de una manera apropiada y constructiva. Los niños de tan solo quince o dieciséis meses demuestran asertividad cuando dicen no o se niegan a comer un determinado alimento que no les gusta como sabe. Es importante que los niños practiquen el compartir opiniones o defenderse (ej. expresar una preferencia por un abrigo ligero sobre uno más pesado) si espera que lo hagan cuando realmente importa, como cuando se enfrentan a un acosador o son presionados por amigos para hacer algo que saben que está mal.


    Relaciones interpersonales


    La relación interpersonal implica el desarrollo de relaciones con otros que implican reciprocidad, confianza y compartir. Incluye la habilidad para entablar amistades y sentirse cómodo con otras personas, como abuelos o maestros. Los comportamientos que los niños pueden exhibir incluyen todo, desde jugar cómodamente con otros niños, acercarse a los amigos o poder decirte algo importante ya sea algo malo que pasó en la escuela o querer dejar una actividad que usted valora mucho.


    Empatía


    La empatía implica desarrollar la conciencia de que otros pueden tener una perspectiva diferente y luego tratar de comprender su perspectiva y las razones para ello. Apreciar los sentimientos que otros pueden estar experimentando es una parte clave de la empatía. Las conductas que los niños pueden tener incluyen la voluntad de compartir un juguete sin persuadirlos porque entienden que un amigo quiere jugar con él, preguntarle a alguien que está llorando ¿qué pasa? O, a una edad avanzada, poder hacer preguntas apropiadas para ayudarlos a comprender los sentimientos o comportamientos de otra persona. Empatía no significa sentir lástima por alguien o que tienes que estar de acuerdo con su perspectiva.


    Responsabilidad social


    La responsabilidad social implica la capacidad de ser un miembro colaborador y constructivo de su grupo. Comportamientos cooperativos que puede ver en su niño incluyen hacer sus quehaceres sin recordatorios constantes, disposición para compartir con sus compañeros o hermanos que quieren pedir algo prestado, amabilidad cuando se les pide e incluso cuando no se les pide, y a medida que crecen, la voluntad de ofrecer su tiempo como voluntarios para ayudar a otra persona.


    Habilidad para resolver problemas y generar solución


    La solución de problemas implica la capacidad de identificar y definir problemas y luego generar ideas para soluciones efectivas.


    Los comportamientos que puede ver en los niños incluyen decirle cuando están luchando con algo en la escuela, en un equipo deportivo o con un amigo y luego estar dispuesto a generar una lista de posibles soluciones (con la ayuda de usted).


    También es importante el compromiso de resolver el problema implementando al menos una de las soluciones.


    Prueba de la realidad


    La prueba de la realidad implica la capacidad de distinguir entre la fantasía o las esperanzas de lo que es real. La prueba de la realidad implica una lectura precisa del entorno y los hechos sin reaccionar de forma exagerada o insuficiente. Los comportamientos en los que los niños pueden participar incluyen seguir las reglas familiares incluso cuando no quieren (ej. hacer la tarea antes de ver la televisión) porque entienden las consecuencias de no hacerlo o de no negar cosas que son fácticas (ej. creer que un siete de calificación fue bueno

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