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La Era de los Espíritus. Libro 1: Alteración: La era de los espíritus, #1
La Era de los Espíritus. Libro 1: Alteración: La era de los espíritus, #1
La Era de los Espíritus. Libro 1: Alteración: La era de los espíritus, #1
Libro electrónico367 páginas5 horas

La Era de los Espíritus. Libro 1: Alteración: La era de los espíritus, #1

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Una batalla se entrelaza bajo las sombras de una nueva demanda. Ángeles y demonios se enfrentarán entre sí para sacar a la luz un misterio oculto incluso para ellos mismos. El mundo será alterado y lo que vendrá pondrá en riesgo la vida de todo el planeta tierra. 

IdiomaEspañol
Fecha de lanzamiento6 jun 2020
ISBN9781393687603
La Era de los Espíritus. Libro 1: Alteración: La era de los espíritus, #1

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    La Era de los Espíritus. Libro 1 - D. S. Drwinland

    D. S. Drwinland

    La Era

    De los Espíritus

    ––––––––

    Libro 1

    Alteración

    Indice

    Observación...................................................5

    Comienzo......................................................11

    El origen de los ángeles.....................................14

    Otras divinidades............................................18

    Posible después de

    Almas del infierno

    Carta del diario de un poseída............................23

    Historia comentada.........................................28

    Testimonio.....................................................31

    Tratado sobre la religión y la fe...........................35

    Registro de un archivo alemán secreto...................38

    Centro de salud mental.....................................40

    Laboratorios Shutter.......................................43

    El silencio del cielo...........................................46

    Acontecimientos presentes

    Emoción invisible.............................................62

    Abriendo los ojos del alma.................................77

    Trucos bajo la manga.......................................96

    Resonancia angelical.......................................114

    Intuición mental.............................................126

    Batalla interior..............................................135

    Valor y amistad..............................................148

    Hileras.........................................................158

    Lágrimas de poder..........................................179

    Aviso...........................................................185

    El veneno de la culpa........................................191

    Desilusión.......................................................198

    Visión espiritual..............................................210

    Conmoción.....................................................222

    Espectros de la desgracia...................................228

    Despliegue......................................................254

    Diferentes convicciones.....................................265

    Imparable—....................................................276

    La vida y el amor.............................................286

    Sigilo.............................................................301

    Ritual demoníaco.............................................311

    Intensa oscuridad.............................................317

    Oscura senda o verde llama................................321

    Funesta confusión............................................337

    Hazañas del espíritu.........................................347

    Ilusiones de un mundo mejor.............................352

    Grito de guerra..............................................364

    Vórtice.........................................................385

    Maldita bendición............................................400

    Técnica: Uno, dos y tres....................................420

    Felicidad........................................................428

    Tiempo sin vernos.............................................438

    Trabajo, tráuma y hechicería..............................445

    Descubrimiento...............................................456

    OBSERVACIÓN

    Con dificultad, quien quiera que seas ahora evitarás el modo de abrirte sinceramente a esta tormentosa, insistente, divertida e impactante aventura que tienes en tus manos. El libro completo es en sí una curación que abarca la psicología, el crecimiento espiritual y físico de las enfermedades actuales y el destino final al que la tierra se encamina. La disciplina requiere de motivación, he aquí cuando comienza la transformación, el redescubrirse, el abrir las puertas, el despejar las dudas, el saber quiénes somos y de qué o por quién estamos hechos. Cuando descubro esta verdad, entonces es cuando me abro a la creación y la entiendo.

    Los personajes de este libro (en su mayoría) son reales, al igual que ciertos acontecimientos, lugares, visiones, sueños y experiencias. Todas están conectadas y convertidas en metáforas, revueltos por mi imaginación para una mejor comprensión de nuestra naturaleza humana y el respeto a sus identidades solapadas bajo códigos, habilidades, poderes y un toque de afinación a sus personalidades para ahuyentar al original de cualquier conocido por ti. Por tanto, si tienes alguna relación con una persona descrita en esta novela, piensa que es una coincidencia.

    El lenguaje escondido es otro aspecto chillante de mi mente, porque me encanta crear cosas nuevas.  

    Las fórmulas de hechizos, los condensados fenómenos raros y malignos, ciertas ideas, sugerencias religiosas, políticas, sociales y psicológicas, así como las historias sobre lugares sagrados y temas controversiales, forman parte del principio novelístico para encausar a mi querido lector hacia una más entretenida misión que tendrá como objetivo despertar la consciencia hacia la vida, a sus maravillosas y trágicas escenas que se disipan constantemente sobre nosotros mismos, el firmamento, la tierra, los ríos, el aire, el fuego, la conducta y las emociones humanas a modo de un plan perfecto que encaja verosímilmente en una sabiduría única y, fascinantemente, en una mayor potencia a la nuestra.

    Buscando no espantarte con este libro que empecé a escribir desde el 2004 y espero sirva para la humanidad como un recordatorio imprescindible de sus acciones, anhelo como tú la tarea del despertar: El Amor a través de una hermosa sonrisa.

    Deseo que te atrevas a entrar en este recorrido que es tuyo y que recreará tu alma hasta lo más noble de ella por medio de estas tres etapas que inicias con emoción: Alteración, Apertura y Ascensión.

    Que el mensaje de amor de este libro se extienda a todas las Iglesias, pues más vale la realidad que nace del cielo, quien deja caer lluvias de ángeles hacia el atardecer de tantas oraciones santas, que la ilusión de pensar que todo lo que vemos humanamente es eterno.

    LA ERA DE LOS ESPÍRITUS

    ALTERACION

    COMIENZO

    Cada evento es un presente leído, está planeado y siendo escrito en el instante. Nadie escapa de este plan. Las puertas del inframundo se han abierto. Vientos silentes, lóbregos y despiadados amenazan el equilibrio de la vida existente.

    ¿Quién ha dispuesto las llaves para abrir estas puertas infernales? Rumores se esparcen sobre descabellados espíritus que rondan por las noches, escondidos en lugares abandonados, basureros, objetos antiguos y malditos, corazones llenos de odio, envidia y venganza, resentimientos y penas, dolores y amarguras, pasiones carnales, euforias, conductas neuróticas, infieles, almas que vagan en pena por las calles del eterno sufrimiento por tantos pecados cometidos contra la vida misma y el cielo.

    Las bisagras han sido despedazadas. La voluntad firme del amor está constreñida. Miles de espíritus rastreros, infernales, demonios ansiosos de almas han emergido para devastar lo creado. Los profetas se congregarán, los exorcistas se alzarán, los intercesores auxiliarán junto con los ángeles de la guarda, la Iglesia entera se conmoverá y la verdad resurgirá a la luz para dejar a todos atónitos ante lo insospechado.  

    La secreta gracia brillará una vez más y la verdad de Dios será definitiva. El caos volverá a ser reestablecido. Una nueva demanda cambiará los senderos de la creación. La decisión caprichosa de uno solo involucrará a todo ser viviente en el universo. La última copa se romperá.

    La sinceridad brillará con eterno fulgor, la historia será justificada, el caos será propiciado por todo un comienzo enlazado. Nada escapará a los ojos del Creador. Su voluntad, su amor, su misericordia conocen hasta la última cosa que se piensa sin romper nunca su propio mandato del libre albedrío.   

    EL ORIGEN DE LOS ÁNGELES

    Dios, en su inconmensurable amor, y ya que no es palabra vacía de sustancia, quiso ejecutar creaciones derivadas de su luz. La infinita sapiencia que alcanzó las más ínfimas proporciones de su naturaleza desbordó en incontables luces que distribuyéndose fueron consiguiendo orden allí donde degustarse podían con grata armonía la gracia de su Creador inteligente, y donde el caos antes imperaba.

    De su primera inspiración quizo hacer nacer de suspiros condensados de su aliento, cinco grandes pliegues de su fuerza dotándolos de encanto, belleza, fulgor, sapiencia y armonía. Estos cinco dirigirían un grupo de luces en lo adelante. Después, El Creador forjó al resto de las criaturas, voldeando dimensiones indescriptibles de espíritus halados, luminosos y de incontanbles falanges en niveles distintos de su gloria.

    Alimentadas por su luz original, vivían y alababan con eterna gratitud la consciencia que les permitió tener para reconocerle con libertad en su inmensurable grandeza y generosidad, por ellos tener sentido de utilidad ante la existencia eterna que se les dio de la nada. Y Dios así estableció reglas para mermar todo posible caos ante tantos que ahora habitaban el cielo.

    No obstante, una de sus consciencias primeras tuvo una extraña cualidad, desconcertante a su género y de la cual, la chispa divina no era aceptable una vez manchada, pues no abarcaba su oscura densidad; estaba fuera de los márgenes de su comprensión, no tenía vida y no se podía leer. No era parte de las inspiraciones otorgadas por el creador. Así que, esta consciencia fue declarada rebelde, por crear niveles de pensamientos tan bajos como la envidia, el orgullo, la soberbia y el egoísmo frente a las demandas de su Creador querer elegir al más humilde hijo que tenía.

    Esta consciencia aferraba su anhelado placer al poder. Cada momento en el cielo se nutría de su belleza, calculaba facciones de los territorios celestiales y era muy estricto con sus demandas ajustándose  a las normas establecidas. Deseaba incontrolablemente ganar toda la atención de su Creador y ser otro con Él, sino que Él mismo. Pero El Creador tenía otros planes. El derivado del Espíritu que forjó a todas las criaturas y que ya era antes como lo era Dios, decidió tomar una parte de sí e implementar uno más en el dúo. Ahora la historia reconocería a la trinidad como un solo Dios, pues estas tres consciencias de eterna existencia lograron separarse sin dejar de ser uno. Grato misterio que pocos logran alcanzar desde el cielo hasta los más bajos cimientos de su gloria.  

    Hubo una batalla a caso de esto. Dicha consciencia, ahora de naturaleza oscura, dominaba sin piedad ambas propiedades y llegó a conquistar una tercera parte del lugar donde habían nacido todas, llevándolas a tropel a una batalla épica y de la que todavía hoy se habla.

    Sin embargo, niveles de consciencia con prolongados poderes de evolución fueron adquiridos de un futuro sector de la biblioteca de Dios y se colocaron como guardianes del Reino a raíz de la insurrección. Ellos fueron bautizados como arcángeles, que significa: Guardianes de Dios. Un experto de la lanza y la espada conocido como Miguel, consiguió enfrentar al revelado y domando su condición de sustancia etérea, lo lanzó al hueco profundo que yacía ahora bajo ellos y ante la caída, la distancia entre la presencia de Dios y la bienvenida de aquella oscuridad llamada materia negra, su rostro y el de todos los echados fuera, junto con el provocador, fueron tornándose decrépitos. Sus alas adquirieron tristeza y puntiagudas fibras que antes eran plumíferas y de suaves contornos, flamante aspecto, ahora eran rígidas como el acero y les pesaban toneladas. Una cola con punta de flecha aleteó desde su espalda baja y queriendo maldecir a Dios, su lengua se embrolló, sus ojos dieron la bienvenida a las tinieblas y cuernos de enorme atributo levantaron sobre su frente surcos de rabia. Toda su expresión cambió. Sólo disparaba insultos contra su creador en una lengua inextricable como su figura. Así nació el tártaro, hoy conocido como infierno.

    La oscuridad no era mala hasta que descubrió su primera sensación de placer en la envidia de una criatura celeste y fue sustraída por ella conformando el compuesto conocido como Tinieblas, de la cual un residuo perverso comenzó a dar sus frutos formando una bacteria plagada del caos original y que sería conocida más tarde como la Muerte.

    Los arcángeles protegen el reino de Dios ante cualquier magistral plan del revelado y con ello se aseguran de no quitar vida a criaturas de entera pertenencia de Dios, sino aprisionándolas en calabozos de ciega neblina, donde quizás un día su arrepentimiento los vuelva una vez más hijos piadosos del altísimo como lo fueron al ser creados.

    OTRAS DIVINIDADES

    Al comienzo del orden material ya existían influencias que aportaban beneficios como si agricultores del universo fueran. Actuaban en gracia por la existencia colaborando en favor de su creador. Grupos de formas constantes que dibujaban encantadores carrozas donde montaba el Señor Dios, usaban sus fuerzas de belleza encantada y transportaban a tropel al Rey de los Cielos sobre sus lomos de caballos voladores con cabezas y alas de rocío metálico. Algunos de ellos de fascinante e inocente aspecto, risueños, con dos pequeñas alas alrededor de su inacabado cuello, escondidas tras sus cabezas y a quienes Dios llamaba Querubines, formaban obras maestras para consentir la mirada y el aprecio de Dios.

    Otros de mas grueso aspecto, con seis alas gigantes y de vastas plumas firmes, portaban una armadura y un semblante raras veces visto. Tenían ojos en sus alas y por ello no necesitaban mostrar sus figuras. Dos alas cubrían sus rostros, dos más les permitían volar y dos más cubrían sus pies. Actuaban como columnas del templo sagrado donde Dios le placiera descansar y el aleteo de aquellos seres a quienes El Señor quiso llamar Serafines. Sus intrépidos celajes y formidables compendios de movimientos estructurados que envueltos del misterio que ocultaban sus alas envolviendo sus rostros y pies nunca expuestos, le daban la afinación perfecta a la inescrutable presencia de Dios. Por ello se dice que nadie ha visto nunca al Creador y que su siervo Moisés, pudo contemplar sus espaldas, puesto que eran muchas y no una. Ellos son la causa de que Dios no sea visto por nadie.

    Y luego fueron acercándose las potestades o seres de clamores celestiales, que al unísono flameaban llamas de dulzura y poder con sus voces. Cantaban al creador inspirados sonidos del alma iluminada y componían sinfonías de súbito momento que subían entonando de grupos de dos hasta cien, mil, cinco mil, millones, billones, trillones y hasta donde alcanzaba el último de ellos. El coro más implacable de toda la creación en un sondeo imparable de voces agudas, graves, fulminantes, puras, lisas, tenues, jadeantes, estupefactas, oníricas e invaluables.

    Y los amantes del cortejo de las carrozas, y los vestuarios de los arcángeles, serafines y querubines, eran las Virtudes. Impactantes pensamientos delineaban con sus alas esculturas y diseños de impensable forma. Retocaban las aberturas con objetiva observación y visualizando los redondos contornos y las estrechas líneas, los rectangulares, triangulares, verticales, horizontales, rombos, estridentes, pentágonos, retorcidos con delicadeza en pinceladas con monturas orientadas hasta las mas inteligentes de las decoraciones, conquistando la atención del Todopoderoso con sus trabajos de exquisita belleza y humildad.

    Las dominaciones eran las encargadas del destello divino y recreaban variaciones incontenibles de luces fulminantes, rayos oblicuos, condensados, protuberantes, bondadosos, de líneas voluminosas, finas, impredecibles, coordinadas. Dotaban de intensos colores cada cosa luminosa que rellenaban con sustancia de etéreo amor y formaban sensaciones de múltiples luces cambiantes forjando una tremenda fiesta de efectos imparables.

    Cerca del Creador habitaban también unos seres de gran misterio: los veinticuatro ancianos. El ropaje alucinójeno destellante de blancura los camuflajeaba al paisaje hasta sólo percibirse sus cabezas ataviadas de doradas coronas con esmeraldas y demás piedras divinas forjadas sobre sus coronas, pues eran reyes. Se sentaban doce a ambos lados del trono y siempre tenían una postura de respeto y humildad haciendo las veces de un consejo y cantando por su Gloria Eterna: Santo, Santo, Santo es El Señor, Dios del universo. Hosanna, Hosanna al Nombre Majestuoso sobre todo nombre.  

    Próximo a los ancianos habitaban las cuatro criaturas celestes. Género conformado por cuatro animales con alas que escribían día y noche lo que el Espíritu les concedía: el león, el toro, el águila y el hombre. Hacían las veces de escribas. Otras criaturas se escabullían alrededor de las extensas e ilimitadas etáreas del cielo, donde el tiempo no tiene poder y el gozo es para siempre. 

    POSIBLE

    DESPUÉS DE

    ALMAS DEL INFIERNO

    Milán, Italia, 1877

    11:59 p.m.

    CARTA DEL DIARIO DE UNA POSEÍDA

    El aroma desconocido y perverso se escabulle cauteloso hasta mi recámara. Se acopla de forma brusca sobre mi cuerpo. Envuelve mis cabellos con caricias sucias, igual mis oídos en susurros desgarradores y sensuales, perpetrando también infinidad de sabores amargos en mis mejillas, mi boca, mi lengua.

    Apenas logro ver la hora en el reloj de plata que posa su tic tac como una canción de muerte. Tiene su tapa abierta, como si me observara, tirada su cadenilla por sobre la mesita de estar, abrazándola, protegiéndola. Mi esposo duerme profundamente. No se percata aún de la trama. La extraña sensación que me aborda con exorbitante e ignominiosa maldad, seduce con infamia y pasión arrebatadora cada corpúsculo profundo de mi ser. Lo peor de todo es que...quiero que prosiga.

    Hace unos años que no tengo ningún contacto sexual con mi esposo. Me vuelve loca la situación. Esto no era lo que esperaba para satisfacerme, pero de igual manera, llena todas mis expectativas del placer: al sacudirme por los cabellos de nuevo y sostenerme de espalda mientras estoy desnuda encima de la cama. Mi marido se levanta espantado, pero no porque una fuerza aterradora me tomara mientras levitaba, sino porque yo lo estaba disfrutando con todas las ganas reprimidas de varios años sin hacerlo, y lo peor de todo, consciente de que tenía marido.  

    El espíritu me eleva todavía sin mostrar siquiera cansancio, sin dejar su inquietud al hacerme el amor con verdadera pasión infernal. Parecía una especie de hombre invisible determinado en su actividad, sin culpa, sin vergüenza, sin modales ni tino, aportando treinta minutos de puro placer que jamás había experimentado. Mi esposo está atontado, al borde de la desesperación. Nervioso por el espectáculo lamentable, empieza a orar con ímpetu al darse cuenta de las numerosas veces que conseguí un orgasmo:

    —¡Padre del cielo, ayúdala! Te ofrezco mi vida, mi alma con tal de que la salves. Reprendo esta asquerosa bestia, este inmundo animal, este demonio maldito en tu santísimo nombre que es Jesús, el Hijo Santo y amoroso de mi Señor!

    La furia se detuvo. Mi esposo con la cabeza entre las piernas respira aliviado. La oración no sirvió de nada, pues fue hecha más con celos que con el corazón. El demonio ya había conquistado su noche, logró su cometido hasta donde quería. Los treinta minutos transcurrieron victoriosamente para el espíritu maligno sin esperanza en la ofuscada mirada de mi esposo.

    Entonces, la fuerza espiritual descomunal que me sujetaba contra el techo me deslizó suavemente por entre las paredes como araña que camina sobre ella, descendiendo cándida y dulcemente desmayada e inconsciente hasta la vieja cama matrimonial. Al abrir los ojos, mi marido esperaba ansioso una respuesta. Notó sin reserva que el improperio sodomita se plantaba bajo mis ojos. 

    —¿Qué? ¿Vas a reprocharme por creer que planeaba engañarte de este modo? —Le aclaré al despertar de tal paraíso infernal—.

    —¿No lo disfrutabas? ¿Qué acaso estoy ciego? —Insinuó rencoroso y molesto—.

    —Por Dios, tus celos van más allá de esta vida. Dios te perdone —Y me dormí—.

    Su rostro manchado de la ojera, inundado del solsticio de aquella temporada majestuosa, nublado, inquieto, desesperado, se recostó de medio lado y...aparentó dormirse tranquilo, aunque sabía que no lo estaba, pues no hablamos del incidente real. Las posesiones diabólicas no ocurrían con frecuencia y menos a la esposa de un célebre político religioso, lo que dificultaba poder comunicárselo a cualquiera para que nos prestara ayuda.  

    Kalabey, África, 1893

    11:59 p.m.

    HISTORIA COMENTADA

    —Nadie le cree. Ella siempre está inventando rumores para que las personas tengan miedo y no quieran avanzar en conocer el verdadero trasfondo de las cosas. —Asiente la voz con tono secreto y prosigue con cautela la charla—. Según parece, Danaby, creo que nos quiere traer problemas.  

    —Kalu, entiende, Doña Kambucha es una espiritista muy especial. Ha sido la curandera de esta tribu por largos años. Ella tiene una sensibilidad para detectar las cosas que no vemos. Es un don único. Que tú no lo veas como ella, no significa que ella esté mal.

    Era una noche sombría. Tan espesa como el pantano Qüanchi: Apestoso, cubierto de larvas peligrosas, pegajosas, disfrazadas de verdes coralitos sobre su superficie con ranas de gruesas pieles embotadas alertas a los peligros. La hora es accidental. La curandera Kambucha abre sus ojos con velocidad incalculable, cual un rayo, avanza quieta para no ser detectada. Presiente que algo se abalanza tras su espalda.

    Se detiene sin la más remota preocupación. Expide unas palabras en el antiguo lenguaje de sus antepasados y gira con prontitud al saber lo que es.

    —¡Sucalé, sucalé. Osetalé, lamatú bedra, crasto tu dio bedra; osetalé, osetalé!

    En otras ocasiones, estas mismas palabras habrían causado un espantoso exorcismo de cualquier demonio común al que ya estaba acostumbrada. Algo fue diferente con esta entidad espiritual que parecía no entender el ritual antiguo africano: ¡Aléjate, aléjate. Vete, perdida sombra, al rastrero mundo de la noche. Vete, vete!

    Media hora más tarde, unas palabras resonaron hasta los más recónditos nervios del flácido cuerpo de Doña Kambucha y en medio de una vibración desesperante decía una y otra vez: "Camaleón, reptiles, murciélagos". Habiéndose desmayado entre las yerbas secas que ella pisaba desde el comienzo de este suceso. Murió, según el diagnóstico de los habitantes de Kalabey por picaduras de animales venenosos y endemoniados que la anestesiaron temporalmente hasta consumir su esencia espiritual.

    Ahora la tribu aclama por su alma y temen por ellos mismos. Han procedido a bautizar dicha fuerza o demonio con el nombre de: Cumbé, el señor de los miedos. Algunos creen, otros no se explican por qué a ella en especial. Muchos hasta piensan que ella misma los ha invocado y la condenan aún después de muerta por imprudente, mientras que quienes tenían fe, rezaban por su alma.

    Calcuta, India. 1909.

    11:59 p.m.

    TESTIMONIO

    —Buenas noches a todos. Mi nombre es Rannah. Sé que no es tal vez el momento preciso. Ustedes están cansados y agobiados también. Otro día de trabajo duro. Pero necesito desahogar esta pena que me hiere. Quiero decirles que nosotros somos culpables. Son tantos crímenes los que cometemos que, a veces creemos que no nos merecemos los castigos que nos afectan. Y sí, es cierto que sufrimos dolor cuando alguien se nos va, cuando alguien se muere, pero en cierto modo, es justo que suceda así.

    Nos merecemos ser culpables, somos culpables desde que Adán cometió el pecado original. Nadie está a salvo hoy día. El pecado nos ha hundido demasiado. No tenemos oportunidad alguna en esta batalla. Hay que centrarnos en la culpa, morir en ella. Somos malas personas o como ya las he denominado: Tangro. Hay guerras por todas partes. No se puede creer en el amor de un Dios compasivo. Su furia es más fuerte que nosotros. Los niños mueren de hambre, hay desgracias naturales por todos lados, enfermedades y corazones hipócritas sobretodo. La vida se vuelve muerte por donde quiera que vemos.

    Las personas Tangro son personas reales que no viven en un mundo de felicidad, sino que aceptan el sacrificio de la culpa, lo que estamos destinados a recibir, el suculento manjar de la cruz y sus tormentos, la esclavitud. Estén alerta al sufrimiento. Vamos a probarnos que estamos hechos para la desgracia, para el castigo, para el destierro. Aquí en la India la pobreza es inmensa. Podemos cambiar nuestra mentalidad.

    Somos un pueblo sin ninguna ayuda y el cielo clama por nuestras vidas nefastas día tras día. Sólo nos queda la muerte como única salida. Morir y luego vivir por todo esto que ahora quisiéramos, pero que no está a nuestro alcance. Vivimos en un valle de lágrimas. Damos pena. La felicidad es temporal o por momentos y es posible que ni siquiera exista, pero el sufrimiento es eterno, es real y esta es nuestra realidad. No la podemos cambiar. Las personas se suicidan a diario y se matan entre sí. Así es como debe ser. No hay esperanzas en nada.  

    Admitamos que la culpa está enlazada con nuestro deseo de hacer el mal. Nadie está libre aquí. Todos estamos llamados a un lado oscuro y es ahí donde el que viola, mata, roba, practica la violencia, chismea, es cruel, odia, envidia, no perdona y hace algo que no es propio de sí mismo, tiene derecho a sentirse mal, a no levantarse para volver a caer, a no asistir a más Iglesias y creer en Dios, porque, ¿Para qué? No tiene sentido vivir como hipócritas, no tiene sentido estar yendo a las Iglesias y continuar pecando contra Dios, no tiene sentido que sigamos luchando por mantenernos de pie. Es mejor rendirnos a la maldad, dejarnos vencer y así evitamos ofender a Dios. Si conozco lo que vendrá después, ¿Para qué arrepentirme? De nada me valdría.

    Debo vivir con la culpa clavada en mi pecho, con el Tangro metido hasta los tuétanos de mis huesos. No debo reparar donde ya sé que caeré de nuevo.

    Debo vivir en el fango de la culpa. Digamos que sí a Tangro, dueño nuestro y real de todo cuanto acontece. Solo su nombre debe liberarnos aceptando vivir en la culpa y realidad que nos rodea. Ahora sí pueden descansar tranquilos en su desesperación.

    La multitud aplaudió el descarado sermón de la muerte. La sangre fluía a borbotones de quienes se quitaban la vida sin pensarlo. Las motivacionales e inspiradoras palabras han calado los corazones débiles y cobardes de los presentes. El suicidio colectivo sería una respuesta inminentemente concreta.  

    Atenas, Grecia. 1925.

    11:59 pm

    TRATADO SOBRE LA RELIGIÓN Y LA FE

    Art. 1: Está prohibido mantener la seguridad de nuestras creencias en cosas cristianas. Nada que no esté al alcance de nuestra mente, nuestros sentidos y nuestra cultura religiosa podrá ser juzgado como real.

    Art. 2: No estará permitida la promoción de ninguna creencia abstracta, sólo la visión plenamente científica y politeísta de nuestra sociedad. Se constituye como delito grave el uso monetario para dichas promociones.

    Art. 3: Se afirma radicalmente la No existencia de Dios. Solo existe la materia, la creación del universo por medio del polvo de plasma y la evolución de todos estos recursos a lo largo del cosmos.

    Art. 4: Nuestras creencias deberán estar fundamentadas en nuestros dioses reales, que sí existieron. Nuestros antepasados nos dejaron un legado concreto de todo cuanto se ejercía en la práctica religiosa confiable con cada uno de nuestros dioses sabios.

    Art. 5: Toda Biblia será quemada. Todo aquél que practique alguna actividad sobre esos temas de fe, será encarcelado y si es magno el agravante de sus actos, como la promoción de dicha religión, podrá ser ejecutado.

    Art. 6: Se creará un templo en honor de Hollows y Atenas, hijos de Zeus, nuestro único y auténtico dios verdadero. Todo aquel que se oponga, morirá.

    Art. 7: La duda será nuestro único mecanismo para la confirmación de nuestros actos.

    Art. 8: Solo existirá el politeísmo griego, respetando así nuestros valores y promoviendo de tal modo la cultura que nos ha salvado. Cualquier otra idea religiosa fuera de esta será considerada hereje y anatema.

    Art.9: Cualquier violación incurrida hacia estas leyes, deberá pagarse con la misma muerte, en la horca, torturado con clavos o flechas, ahogado, quemado en la hoguera o fusilado.

    Cualquier otra cosa opuesta a mi promulgación establecida en mi persona, será considerada igual de reo de muerte. 

    Atentamente,

    Coxtland Eltradus

    Aspirante a Gobernador de Grecia

    Chausting, Alemania. 1941.

    11:59 PM.

    REGISTRO DE UN ARCHIVO ALEMÁN SECRETO

    Excelso, admirable y honorable Fuhrer, Hitler:

    Su respetable majestad, sepa por este encargo que morir es vivir y que nada cuanto respire que no tenga tan voluptuosa perfección divina, como los de su raza, deberá seguir con vida. Usted los purificará de todo pecado y los hará entrar al gozo eterno.

    La sangre no será sangre, sino el vino que alegrará al más grande dios, a su Cristo resucitado. Salve pues todas sus almas y envíelas hasta aquí, por medio de flagelos y torturas, muertas y arrepentidas ante los pies del que todo lo puede. Tú eres ahora su mano izquierda. Te hace saber que enaltece a los más pequeños para avergonzar a los grandes.

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