Descubre millones de libros electrónicos, audiolibros y mucho más con una prueba gratuita

Solo $11.99/mes después de la prueba. Puedes cancelar en cualquier momento.

La clave Ishtar I. Overture
La clave Ishtar I. Overture
La clave Ishtar I. Overture
Libro electrónico445 páginas6 horas

La clave Ishtar I. Overture

Calificación: 0 de 5 estrellas

()

Leer la vista previa

Información de este libro electrónico

        
Año 2014. Majestic Warrior, el hotel de mayor prestigio de Washington DC. Su club nocturno alberga prostitución de lujo, clientes de altas esferas..., y un enigma con el suficiente poder para desestabilizar el orden mundial.
 
      Una conspiración gubernamental. Una mujer infiltrada como prostituta para salvar la vida de un hombre con pasado amenazador... Una mujer inocente, perseguida por todo el sistema de Inteligencia de Estados Unidos. Y solo 72 horas para salvar su vida.
 
       La clave Ishtar es un thriller de ritmo trepidante, narrado con pulso firme, y que arrastra al lector a las más secretas artimañas de quienes sostienen la batuta del Gobierno en Occidente. Adéntrate en los Secretos de Estado más oscuros, en la aventura literaria de la que ya habla todo el mundo.
 
       La clave Ishtar marca un antes y después en la literatura de aventura y thriller, ahondando en una realidad incómoda para algunos, reveladora para muchos. Metódicamente documentada, la trilogía te propone un viaje de giros inesperados y suspense infernal, cuyos protagonistas vivirán una historia de amor que pondrá en riesgo sus vidas..., y la estabilidad de toda una nación. Madison Greenwood y Cameron Collins, dos comunes mortales capaces de poner en jaque a la más poderosa red criminal que jamás haya amenazado al planeta.
 
Nota del editor: Hemos decidido no ampliar sinopsis por respeto a los detalles reveladores de la trama. El autor, Alexander Hawks, agradece la comprensión del lector/a. 
 
 Una aventura reveladora e impactante... La clave Ishtar pondrá a prueba tus nervios.
 
 

 
Contacta con Alexander Hawks:
Páginas en Facebook: 

La clave Ishtar 

Alexander Hawks Author

Páginas Oficiales: 

www.laclaveishtar.com 

www.alexanderhawks.com 

Página Twitter: Hashtag: #laclaveishtar 
Twitter Autor: @alexanderhawks
IdiomaEspañol
Fecha de lanzamiento6 may 2014
ISBN9788408130222
La clave Ishtar I. Overture
Autor

Alexander Hawks

          Alexander Hawks nació en Madrid en abril de 1979. Sus estudios vinculados a la literatura, dramaturgia y guión cinematográfico, le confieren un estilo propio para el género que él mismo cataloga como “thriller épico”. Desde 2006 ha trabajado como redactor para distintos medios, especializándose en el periodismo de investigación. En agosto de 2009, y junto a su socio, afronta la autonomía empresarial como responsable de Comunicación y Marketing ofreciéndose el tiempo y disponibilidad suficientes para enfrascarse, un año después, en la escritura de la trilogía “La clave Ishtar”. Estas tres novelas han significado para Hawks una intensa etapa en su experiencia literaria, pues la temática afrontada le ha colocado en el ojo del huracán de algunos gobiernos que censuran la controversia que su ficción ha generado.   Contacta con Alexander Hawks: Páginas en Facebook: La clave Ishtar Alexander Hawks Author Páginas Oficiales: www.laclaveishtar.com www.alexanderhawks.com  Página Twitter: Hashtag: #laclaveishtar Twitter Autor: @alexanderhawks

Lee más de Alexander Hawks

Relacionado con La clave Ishtar I. Overture

Libros electrónicos relacionados

Ficción de acción y aventura para usted

Ver más

Artículos relacionados

Categorías relacionadas

Comentarios para La clave Ishtar I. Overture

Calificación: 0 de 5 estrellas
0 calificaciones

0 clasificaciones0 comentarios

¿Qué te pareció?

Toca para calificar

Los comentarios deben tener al menos 10 palabras

    Vista previa del libro

    La clave Ishtar I. Overture - Alexander Hawks

    1

    Diecisiete años después

    Miércoles, 19 de marzo de 2014

    8.32 p. m., Washington

    —¿Puede escucharme? —una voz. Un hombre de bata blanca. Insistía en estrellarme la luz de su puntero contra mis pupilas—. Dígame su nombre…

    Me dolía el cuerpo entero. La cabeza a punto de estallarme. A mi izquierda, mis constantes vitales habían adquirido un sonido electrónico. A mi derecha, una sonda pendía mordiendo con su aguja una vena en el reverso de mi mano.

    —Dígame su nombre, señorita…

    —Ma… Madison —articulé como pude. La boca seca como el esparto.

    —Bien, Madison…, ¿sabe qué le ha ocurrido?

    Negué con la cabeza sintiendo poco a poco el aterrizaje de mi conciencia en la realidad que la suerte de aquel día me impusiera.

    Inexorable, una luz cegadora encima de mi cabeza evitaba que abriera los ojos.

    Al paladear el primer vocablo me sobrevino una incipiente gana de vomitar.

    —¿Qué…? ¿Quién es usted?

    —¿Se acuerda de dónde viene? ¿Se acuerda de qué le ha pasado?

    —No… —repuse nerviosa—. Quiero irme a casa, por favor.

    —No va a poder ser —vaticinó el médico—. Ha estado en coma tres días. Sufrió un atropello a dos calles de su casa. Debe calmarse. Ha tenido suerte. Mucha suerte.

    —No…, por favor… Quiero… Quiero ver a mi hermana… —le ordené. Me asusté ante lo desconocido. Aquel hombre. Aquel lugar con hedor a enfermedad y muerte—. Tengo que regresar a casa.

    —Cálmese, señorita Greenwood. —Su mano me acarició los cabellos—. Confíe en mí. Está en buenas manos. Se lo aseguro.

    La voz del hombre se alejó, sutil. Ínfima. No volví a oír nada más.

    Nada.

    2

    Seis meses después

    Miércoles, 3 de septiembre de 2014

    3.12 p. m., Washington

    La psicóloga, de nombre Georgette, analizó nuestra mutua desconfianza al otro lado de la mesa de resplandeciente caoba. Esa tarde finalizaría como se había iniciado: nublada y triste. Una horrible lamparita de mesa dejaba entrever con su tenue luz lo siniestro de un despacho de tapizado oscuro, más cercano a la idiosincrasia de un notario que a la de una psicóloga de la era new age. Las estanterías, arrimadas a las paredes, se hacinaban de libros viejos y a su vez escoltaban a un destartalado sofá de cuero negro y capitoné que bien podría haber dado acomodo al trasero de cuatro

    ¿Disfrutas la vista previa?
    Página 1 de 1