Descubre millones de libros electrónicos, audiolibros y mucho más con una prueba gratuita

Solo $11.99/mes después de la prueba. Puedes cancelar en cualquier momento.

Canción de Monstruo: Mis Bellos Monstruos, #2
Canción de Monstruo: Mis Bellos Monstruos, #2
Canción de Monstruo: Mis Bellos Monstruos, #2
Libro electrónico191 páginas2 horas

Canción de Monstruo: Mis Bellos Monstruos, #2

Calificación: 0 de 5 estrellas

()

Leer la vista previa

Información de este libro electrónico

Justo cuando creo que las cosas no pueden volverse más locas...

Descubrí por que puedo hablar con animales y monstruos. Conocí a mi padre y no esperaba sus respuestas. Pero él dirige varias legiones de demonios y está trabajando en conseguir más para ayudarnos a derrocar a Deméter. Vamos a necesitar toda la ayuda que podamos conseguir porque no tengo suficiente polvo de Hefesto para liberar a todos los monstruos de las fosas de estar atrapados en su forma monstruosa por esos collares.

Mis monstruos, los que he llegado a conocer, ahora pueden volver a su forma humana y quieren vengarse de Deméter. Quieren salvar a su reina, Persefone. No esperaba que me implicaran en esto, pero ahora estoy involucrada. Incluso Hefesto se ha colado en el Inframundo para ayudarnos.

Supongo que todos los Dioses y monstruos no apreciados van a tener que enfrentarse a una Diosa desquiciada con el Olimpo de su parte. No soy un monstruo ni un Dios. Solo soy mitad demonio. Pero ahora que mi padre sabe de mí, podemos tener la ayuda del Infierno de nuestro lado.

No pedí esto, pero hay algo en estos monstruos que me hace querer ayudar. No está de más que todos sean guapísimos y unos ligones horribles. Incluso puedo pasar por alto que a Pavlina y Trifón les guste comer gente.

IdiomaEspañol
EditorialBadPress
Fecha de lanzamiento17 jul 2023
ISBN9781667459967
Canción de Monstruo: Mis Bellos Monstruos, #2

Lee más de Jb Trepagnier

Relacionado con Canción de Monstruo

Títulos en esta serie (3)

Ver más

Libros electrónicos relacionados

Romance paranormal para usted

Ver más

Artículos relacionados

Categorías relacionadas

Comentarios para Canción de Monstruo

Calificación: 0 de 5 estrellas
0 calificaciones

0 clasificaciones0 comentarios

¿Qué te pareció?

Toca para calificar

Los comentarios deben tener al menos 10 palabras

    Vista previa del libro

    Canción de Monstruo - JB Trepagnier

    Justo cuando creo que las cosas no pueden volverse más locas...

    Descubrí por que puedo hablar con animales y monstruos. Conocí a mi padre, y no esperaba sus respuestas. Pero él dirige varias legiones de demonios, y está trabajando en conseguir más para ayudarnos a derrocar a Deméter. Necesitaremos toda la ayuda que podamos conseguir porque no tengo suficiente polvo de Hefesto para liberar a todos los monstruos de las fosas de estar atrapados en su forma monstruosa por esos collares.

    Mis monstruos, los que he llegado a conocer, pueden volver a su forma humana ahora, y quieren vengarse de Deméter. Quieren salvar a su reina, Perséfone. No esperaba que me metieran en esto, pero ahora estoy involucrada. Incluso Hefesto se ha colado en el Inframundo para ayudarnos.

    Supongo que todos los dioses y monstruos no amados tendrán que enfrentarse a una diosa desquiciada con el Olimpo de su parte. No soy un monstruo ni un Dios. Solo soy mitad demonio. Pero ahora que mi padre sabe de mí, podemos tener la ayuda del Infierno de nuestro lado.

    No pedí esto, pero hay algo en estos monstruos que me hace querer ayudarlos. No está de más que todos sean guapísimos y coqueteen de maravilla. Incluso puedo pasar por alto que a Pavlina y a Trifón les guste comerse a la gente.

    Canción de

    Monstruo

    Mis Bellos Monstruos

    Libro 2

    JB Trepagnier

    Capítulo 1

    River

    Debía de ser la cena familiar más incómoda a la que había asistido nunca, y había salido con algunos hombres sin mascotas que conocieron a mis padres antes de darme cuenta de que no necesitaba que sus mascotas se chivaran para saber que no eran para mí. Me había preparado mentalmente para que mi padre fuera una especie de criatura del Infierno. No estaba preparada para que se pareciera a mí y para descubrir que era de la realeza del Infierno. ¿En qué me convertía eso exactamente como su hija ilegítima?

    Puso su mano sobre la mía. No lo conocía de nada, pero me tranquilizó al instante.

    - Debería explicarte algo de historia familiar y del Infierno. Difundimos toda esta desinformación sobre él en los distintos reinos por una buena razón. Aparte de esta tontería reciente de la toma del poder que unos cuantos duques intentaron orquestar, tenemos una delincuencia muy baja en comparación con los otros reinos, y solo queremos que nos dejen en paz. Las brujas y los brujos han causado todo tipo de problemas invocando demonios menores y matándolos si no cooperan. No queremos que irrumpan también en el Infierno.

    - Pero tú enviaste a Charley y a Finn aquí, - dije, parpadeando confundida.

    - Ah, sí. Charley y Finn. Aceptamos a los forasteros que han sido reclamados por un demonio o que han demostrado su valía. Hubo un trato con los Fae hace mucho tiempo en el que adquirieron propiedades del Infierno. Charley terminó en prisión con uno de nuestros duques. Amdusias podría haber salido de allí en cualquier momento, pero se enamoró de una Vampiro. Resulta que todos estaban sentados esperando a que el destino les trajera a una mujer destinada a salvar el Infierno y el reino de los Fae.

    - Charley estuvo con ellos en esa horrible prisión. Ella ayudó a eliminar terribles maldiciones, y me gusta esa bruja. Es un poco retorcida, y encaja perfectamente. Finn fue un asesino a sueldo para matar a los reyes del Infierno durante la toma del poder, pero ellos no sabían que él tenía un código de honor sobre a quien mata y a quien no. Cuando descubrió que los reyes no eran terribles y que eran los hombres que lo contrataron los que estaban equivocados, nos ayudó a acabar con la toma del poder. Algunos demonios de los árboles podrían haber ayudado con eso.

    - Hay varias brujas y aquelarres en el Infierno, pero he llegado a conocer a Charley y Finn, y son los únicos a los que confío a mi hija.

    - Bueno, lo del gran padre protector está muy bien, pero ¿dónde has estado toda mi vida?

    - Ignorante de tu existencia. Aunque soy duque, solo permiten a los demonios viajar por el reino con permiso de los reyes. Creo que has descubierto que uno de nuestros dones es hablar con los animales. A Zepar, el demonio que trató de derrocar el Infierno, se le había permitido vivir arriba porque estaba causando problemas en nuestro reino. Tu madre lo compró y pensó que era un lindo cachorro.

    - Me enviaron a recuperar ese cachorro, ya que en realidad era un Sabueso del Infierno, y los humanos no están preparados para tener uno. Fui a visitar a tu madre. El pequeño Sabueso del Infierno estaba muy enamorado de ella y no quería irse. Habría sido muy tierno si fuera un perro normal, pero tu madre le puso un collar rosa y le regaló un osito de peluche.

    - Podría haber matado al Sabueso y quemar su casa, pero yo estaba encantado de que hubiera domesticado a uno así. Nos pasamos toda la noche hablando e hicimos el amor en el sofá. Tomamos todas las precauciones necesarias para que no naciera un bebé. Tuve mucho cuidado porque sabía que por la mañana tendría que desaparecer y traer a ese Sabueso del Infierno a casa.

    Empecé a atragantarme con mi vino.

    - ¿Quieres decir que te follaste a mi madre y le robaste el perro?

    Pavlina se metió delicadamente un trozo de filete en la boca.

    - No has visto a la mascota de Deméter en acción. Hizo un bien llevándose a ese perro. Si hubiera sido un cachorro normal, me lo comería por ti.

    - Zepar era una mierda total, River, - dijo Barbatos. - Ese Sabueso del Infierno era demasiado joven para estar lejos de su madre. Cuando llegó a la etapa adolescente de ser un Sabueso del Infierno, habría tenido rabietas y quemado cosas. Cogí al cachorro y llamé a gritos a Zepar. Le dejé una nota con mi número de teléfono porque me caía muy bien. Supongo que estaba tan enfadada porque le quité el cachorro que no me llamó cuando se enteró de que estaba embarazada. Nunca volví a saber de ella.

    - Entiendo que puedo hablar con los animales gracias a ti. ¿Por qué puedo hablar con Kimon, Trifón, Pavlina y Demos cuando están atrapados en sus formas monstruosas?

    - Muy sencillo. Hay varios reinos, River. Los olímpicos son poderosos, pero ni siquiera ellos pueden crear algo de la nada. Ellos crearon todos los monstruos presentes a partir de algo. No puedes hablar con todos los monstruos. Solo con los que fueron creados de animales.

    - Yo no soy tan básico, y tuve padres, - gruñó Demos.

    - Todos los tenemos, - dijo Kimon.

    - Yo no, - señaló Trifón.

    - Los originales de tu línea se crearon fusionando un animal con un humano y usando uno de los elementos, - dijo Hades.

    Cerbero estaba sentado a mis pies. Le había estado dando sobras de la mesa. Acaricié una de sus cabezas.

    - ¿Qué pasa con él?

    - Cerbero era un perro normal. Yo solo lo mejoré.

    - Ahora soy el mejor perro del mundo, - dijo Cerbero.

    - Sí, lo eres, - dije, rascándole detrás de la oreja.

    Barbatos enarcó una ceja.

    - Tienes algo más en común con tus monstruos de lo que crees. Mi forma demoníaca es solo un hombre. Tú también deberías tener una, y podría ser cualquier cosa, ya que nací del fuego.

    - Explícate.

    - La mayoría de los demonios nacen, pero a veces, los demonios son escupidos de los fuegos del Infierno. Nos llaman nacidos del fuego, y siempre somos de la realeza del Infierno. Todos los nacidos del fuego tienen una forma demoníaca. Tú también deberías tener una.

    Pavlina movió sus pestañas hacia mí.

    - Muéstranos tu monstruo, hermosa.

    - Me gustaría verlo también, pajarito.

    - Fuera con eso, mi mascota.

    Incluso Demos, que había parecido tan temeroso de mi fuego, parecía intrigado.

    - A mí tampoco me importaría verlo.

    - ¿Cuáles son las posibilidades y cómo accedo a ella?

    Mi padre se limitó a sonreírme.

    - Las posibilidades son infinitas. Tendré que trabajar contigo para acceder a ella. Mis legiones están esperando para venir a ayudar a liberar el Inframundo de la influencia de Deméter. Mi general está intentando que los reyes permitan la participación de más duques. Amdusias quiere venir. Ahora que estoy aquí, te cubro las espaldas, River.

    Eso fue extrañamente reconfortante.

    Capítulo 2

    Kimon

    Puede que mi pajarito tenga una forma un poco monstruosa como el resto de nosotros. Creo que eso hizo que me gustara más. No me gustaba sentarme tan lejos de ella en la mesa, pero habíamos tomado nuestros asientos habituales de cuando cenábamos con Hades y Perséfone. A veces, comíamos con ellos, y otras, nos quedábamos en la puerta vigilándolos.

    Siempre era agradable que nos invitaran, y tenía la sensación de que River no habría aceptado un no por respuesta si Hades hubiera intentado dejarnos fuera. Su padre parecía agradable. No era un esnob que exigía que nos levantáramos de la mesa. No lo habría culpado si lo hubiera hecho. Estaba conociendo a su hija por primera vez. Creo que si hubiera descubierto que tenía una hija secreta, no habría querido tener nuestro primer encuentro con público.

    Por otra parte, yo no iba por ahí acostándome con mujeres y robándoles sus mascotas. Entendía por que se había llevado al Sabueso del Infierno después de ver a Lis en acción, pero si Barbatos y River podían hablar con ella y hacerle la promesa de llevarla a casa, tenía la sensación de que se volvería contra Deméter en un santiamén.

    No entendía mucho sobre nacer del fuego o la política del Infierno. Intenté prestar atención porque era parte de ella. Habíamos pasado a algo de lo que quería y no quería hablar. Barbatos prometió sus legiones y la promesa de ayuda del Infierno. Una vez que tuviéramos eso, podríamos atrapar a Deméter en las fosas del Tártaro, y River no tendría motivos para quedarse aquí. Si ella era una especie de realeza en el Infierno, ¿por qué se quedaría en el Inframundo con nosotros?

    Tenía la idea de cortejarla hasta que fuera mía. No la mantendría en el Inframundo si ella no quería quedarse. Pensé que tal vez Hades me concedería la habilidad de volver a casa con ella. Amaba a mi minotauro, y creía que ella también, pero podía mantenerlo a raya si eso significaba estar con ella.

    Probablemente ahora todo eso se había esfumado. River era una mujer poderosa y no temía enfrentarse a Hades y Deméter. No me pareció una mujer materialista. Aun así, la atracción de la familia y de estar con los que son como tú era fuerte.

    Mi padre fue el primer minotauro. Tomó una esposa humana que murió en el parto conmigo. Como todos los monstruos, semidioses tratando de probarse a sí mismos cazaron a mi padre. Él me enseñó todo lo que sé, pero lo mataron cuando yo solo tenía quince años.

    Yo era el único minotauro vivo después de eso, y fui capturado y arrojado al laberinto antes de que pudiera enamorarme. Allí encontré la muerte antes de poder tener un hijo o experimentar el amor. En el Inframundo tampoco sucedió. Me dediqué a proteger a Perséfone de su madre.

    Ahora me estaba dando cuenta. River era alguien a quien podía amar. No se apartó de mí cuando vio a mi monstruo. De hecho, parecía sentirse atraída por él. No nos juzgaba a ninguno de nosotros. Sabía que tenía competencia, pero pensé que todos íbamos a tener que acostumbrarnos a que se fuera con su padre cuando esto terminara. Quizá al Infierno le vendría bien un minotauro.

    Por fin volví en mí y empecé a prestar atención a la conversación. Ante todo, tenía un trabajo: salvar a mi reina. El padre de River estaba aquí para reunirse con ella y darle respuestas, pero también prometió su ayuda.

    - Solron se muere por que Bael la deje salir y jugar. Es un demonio de las sombras, y probablemente termine siendo reina del Infierno. ¿Dices que tiene a tu esposa en un templo? ¿Está bien iluminado? No sé nada de sus templos. Encontramos ese tipo de cosas raras en el Infierno.

    - He visto el templo, - dijo Demos. - Es de la vieja escuela, como los griegos solían construir, aparte de la vidriera en la parte de atrás. Eso era pura vanidad. No hay electricidad. Solo luz natural, velas, una enorme estatua de Deméter y un montón de gasas rosas. Pensé que podríamos atravesar la vidriera.

    - Y tu reina podría ser asesinada. No es necesario, - dijo Barbatos. - Todo lo que necesitas es un demonio de las sombras, y tenemos uno al que le gusta salir a jugar. Ahora, sus métodos pueden ser un poco retorcidos para el Inframundo, pero...

    - Ya me cae bien. Invitémosla, - dijo Pavlina.

    Trifón se limitó a dar un sorbo a su vino.

    - Uno de los olímpicos maldijo a una mujer inocente con serpientes por pelo y una mirada que convierte cualquier

    ¿Disfrutas la vista previa?
    Página 1 de 1