Bello Vicio I
Por Edgardo Ovando
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En Bello Vicio, Primera Parte, se nos presenta la historia de Noelia, la cual sufre algunos problemas extremos de doble personalidad (Contadora de día, stripper de noche). Eso la lleva a concluir que las relaciones de pareja, pueden llegar a ser lo suficientemente difíciles como para sobrellevarlas.
Por otra parte, Mayadevi una chica transexual scort, ha finalizado su transición de chico a chica y se infiltra, sin medir las consecuencias, en el centro de operaciones de la mafia rusa que controla el Club la Gárgola.
Su objetivo sigue siendo obtener más información acerca de la desaparición de su entrañable amiga, la D.J. Laura.
Edgardo Ovando
Edgardo Ovando es un escritor, compositor, mezclador, remezclador y productor musical. Se licenció en Literatura y a publicado más de cuarenta y cinco libros, ya sea: Novelas, relatos cortos, nouvelles, cuentos o textos de poesías como también 20 (EPs y LPs, distribuidos, tanto en trabajos individuales y como miembro de los grupos: Killantú y Mitote) producciones musicales las cuales suman en total 150 canciones.Como consecuencia de su trabajo literario a recibido el reconocimiento, mediante tres importantes premios otorgados en su país de origen.
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Bello Vicio I - Edgardo Ovando
Primera Parte
(Zorras y Cabrones)
Capítulo Uno
Manotazos de ahogados
El detective Brandon Cortés, humedeció un pañuelo y lo puso contra su boca y nariz para evitar así, respirar el hedor a: Explosivos, pólvora y otros productos químicos que no podía identificar, los cuales, por momentos, se tornaban, penetrantemente, insoportables.
Era la segunda explosión a sólo metros de la anterior en el, hasta ese entonces, tranquilo vecindario del pueblo de León. El incesante sonido de las sirenas de ambulancias era ensordecedor y los paramédicos realizaban su trabajo de trasladar heridos por esquirlas o traumas acústicos, con una generosidad que era y es de aplaudir.
Un policía del departamento, se acercó al detective y le señaló a priori que: Los peritos de la policía científica encontraron, bajo la camioneta que voló, literalmente por el aire, partes del artefacto explosivo causante de la detonación. Incluido, el pequeño engranaje de un reloj despertador utilizado como dispositivo de sincronización de la bomba. Del mismo tipo que la bomba pasada
Ambas explosiones, en el mismo sector, afortunadamente, no habían provocado muertes, pero hirieron a dos trabajadores que transitaban por la zona.
Para Cortés, ésa fue la gota que rebalsó el vaso. No permitiría que por causa ajenas a ellos, muriera gente inocente. Había que tomar el toro por las astas.
Las cosas, sin dudas, ya no eran como antes y, según la prensa local, al gobierno de turno, el tema de los atentados terroristas, se les estaba, simplemente, yendo de las manos.
Cortés se acercó a la madre de Noelia que presenciaba la situación en medio del aire apestoso a explosivos y le dijo seriamente: "¿Usted ya sabe lo que pienso? ¿No es cierto? Le preguntó clavando sus ojos marrones, en la anciana octogenaria.
La cual intentaba hacerse la fuerte y resistente en medio de otros vecinos que curioseaban el estado en que había quedado la camioneta.
Tiene que irse de acá señora, debiera buscar un lugar seguro donde no la encuentren las mafias con las que se involucró su hija. Este mensaje del atentado es para Noelia Maitasuna
Ella suspiró profundamente, miró en silencio al detective y luego recorrió con su mirada dura los alrededores de toda una vida.
Sabe inspector
respondió la anciana, Quisiera decirles que tengo noticias para esos cobardes terroristas: Seguiré defendiendo a la familia Kutuluschenko y a Noelia, mi hija, que no es una ladrona como dicen ahí, porque los conozco a todos y sé que son gente de bien. Así que se necesitarán más que dos petardos insignificantes para intimidarme y sacarme de mi departamento. Yo de aquí no me muevo
Cortés permaneció un largo momento en silencio digiriendo las palabras de la obcecada anciana. Estaba más que preocupado, angustiado, por la suerte que pudiera sufrir la madre de Noelia.
"Señora Marlene, todo indica que los mercenarios que detonaron los artefactos explosivos fueron contratados, supuestamente, por los mafiosos italianos de la antigua red que operaba desde la Gárgola. Ellos, no se resignaron a entregar sus dominios logísticos de tráfico de: drogas, sexo, dinero y armas a sus antiguos propietarios y financistas la familia Kutuluschenko. Legendarios integrantes, por décadas, de la mafia rusa.
— Ya, si lo entiendo, pero no lo creo y si llegara a ser cierto: Es labor del gobierno y del estado que yo viva tranquila, donde quiera hacerlo —añadió la anciana que pese a sus años, estaba bastante lúcida— Esos señoritos políticos tienen que mover sus culitos de sus escritorios y salir a trabajar por el bien de la sociedad.
El cuerpo policial, sospechó, inmediatamente que las bombas instaladas tanto en las fachada del edificio de la madre como en la antigua camioneta de Noelia que permanecía estacionada durante dos años en la calle, buscaban intimidarla. Eran maniobras intimidatorias.
El mensaje enviado por los terroristas era que no se rendirían fácilmente, ante la sempiterna organización rusa y que darían la lucha por recuperar lo que según ellos, les había costado sangre sudor y lágrimas. Además de: tres millones de euros, supuestamente, robados por la vasca Noelia Maitasuna: Contadora de día, stripper y go-go dancer, viernes y sábados por la noche.
Según los italianos, ellos, habían realizado todo el trabajo sucio durante décadas y los rusos, aparte de financiar y permanecer en las sombras: Muy bien, gracias!
Afortunadamente, días mas tarde la madre de Noelia, a pesar de toda su valentía, esgrimida en primera instancia para negarse a dar a conocer detalles del lugar donde se encontraba su hija desaparecida de la justicia, terminó por rendirse al terrorismo y escapar, anónimamente, de la Comunidad y acogerse a protección policial.
Seguramente, en estos días, con otra identidad, en algún pueblo de España está llevando su día a día. Siendo una inubicable testigo protegida.
Capítulo Dos
La Gárgola
Son las 5:40 de la madrugada en Ibiza y Dimitriv Kutuluschenko, pese a no estar presente en su Club La Gárgola de la ciudad de León, organiza una fiesta privada, para, en esta oportunidad, un grupo de miembros Vip de la elite europea.
(Dinero, drogas autos lujosos y sexo desenfrenado siempre han sido su predilección)
Así que, no es de extrañar que en el club, ubicado en la afueras de la ciudad, todo sea, desenfreno, diversión, alegría, risas y principalmente excitación sexual.
La música de las DJs se escuchaba, estrepitosamente, en el húmedo interior de un, muy especial, viernes de diversión.
Locura, drogas, enlazada con erotismo se agitaban a gritos de placer incontenibles. Todo un mundo de libertinaje sexual aumentado la fiebre con el alcohol, surtido en oleajes a destajo, lo cual acrecienta las revoluciones hormonales, en hombres y mujeres hambrient@s de satisfacción sexual.
Inmersa en esa atmósfera, pero totalmente ajena a lo que ocurría a su alrededor, suavemente, Noelia, una de aquellas deseadas mujeres, vestida especialmente, con botas negras de altos tacones (Es la característica y requisito fundamental del local) baila, fuera de sí llenándose de caluroso glamour. En su baile, pareciera que sus pechos reventarán el sexy sostén negro en tono con su tanga y botas Jimmy Choo del mismo color. En esos momentos, su delicado cuerpo se torna vigoroso, en otras lento y sensual.
Sus movimiento, desatan el clima propicio para despertar sensaciones de piel en interminable excitación mientras sus delicados dedos se mueven dibujando las curvas de su silueta al ritmo de la música.
Noelia liberando sus hormonas en ebullición danza, mientras el sudor escurría, con todo el tiempo del mundo, por la curvatura de su cuerpo que bailaba a la intemperie de las emociones.
En un momento la música calma la intensidad y ella se detiene junto al cromado caño. Camina alrededor del tubo haciendo contacto visual con algunos clientes VIP mientras contonea sus caderas. Hay alrededor de una docena de hombres por lo general cuarentones y de más edad. Con fuerzas se tomó del tubo de acero con su mano derecha, balanceo su cuerpo alrededor de él, impresionantemente, camina con elegancia divina. Su presencia indómita, destrozaba la quietud del ambiente. Abría, por sí misma, una grieta que alteraba los nervios.
Ella ha sido y es una de las mujeres más hot que la mente humana y ojos en este planeta hayan visto e imaginado. Y digo ha sido porque, en el ambiente LGBTQ+ es ya una leyenda viviente, pese a sus escasos 27 años es una de las mujeres más influyentes en su medio.
Tod@s al verla quedaban impresionad@s y en estado de shock al ver sus gestos, su mirada, su forma de caminar y esa atmósfera que la rodeaba quieta, pero intensamente carnal.
Siendo su único comentario al exhalar en un suspiro "Cómo puede existir alguien tan hot" de tal manera, que se tejió el rumor que el diablo le entregó, a ella y solamente a ella, el poder de la lujuria.
Al interior de esa noche, cargada de electricidad zen, todos los invitados seducidos y ansiosos de espectáculo eran esclavos subordinados a la voluntad de los cuerpos de cada una, de las más suaves, strippers y go-go girls.
La ansiedad generada en los clientes, adquirían ilimitados nuevos espacios en los ambientes donde las modelos era apetecidas como saborizada miel para abejas.
Si bien es cierto, las nuevas dijeis tenían bastante talento para despertar su lado sensual; nada era comparable a la habilidad innata, de la desparecida pincha discos Laura. Ella sí sabía cómo explotar el espectáculo y llevarlo a su máxima expresión.
Suspirando, alteradas, las sombras de cada uno de los hombres, elegantemente vestidos, de aquella fiesta privada, como la mayoría de las veces en ese local caían de rodillas, tratando de, refinadamente, traspasar los vidrios irrompibles que los separaban de las chicas. Eran gritos desquiciados de sus mandíbulas apretadas.
A medianoche, el primer grupo de cinco muchachas se intercambiaban por las siguientes y se tomaban un descanso de un par de horas; después, cuando regresaban se unían a las otras en un espectáculo restregados de gemidos.
Al retirarse, absolutamente segura, dueña de todo el espacio y de lo que ocurre a su alrededor, Noelia está consciente que hay mucho dinero en juego y que una veintena de hombre la están observando y , al mismo tiempo, evaluando su cuerpo. Así que antes del último adiós, se revisa a sí misma, realizando un último chequeo en los vidrios de los cubos. Acomoda sus tetas y escote en su sostén y sigue su camino y lanza un beso extendiendo sus dos manos.
Todo el mundo de la alta sociedad europea y, principalmente, española, sabía de estas privadas y elegantes fiestas clandesttinas; sin embargo, algunos asistentes más ancianos, entregados a su resignada lujuria, se conformaban sólo con mirar y poseer las más extrañas clases de sensaciones, despojándose de ellas, al otro lado de los cristales. Otros luchaban contra sus más bellas monstruosidades sexuales, lejos del encanto retórico de quienes las deseaban quietamente.
Deseaban más, a cada instante, esperaban con los nervios, tensamente preparados, el golpe eléctrico del sonido emanado de las mezcladoras. Ciertamente, era un espectáculo fascinante, mujeres que voluptuosamente modelaban y representaban el