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Cathy Merlin - 4 Temblores
Cathy Merlin - 4 Temblores
Cathy Merlin - 4 Temblores
Libro electrónico124 páginas1 hora

Cathy Merlin - 4 Temblores

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Temblores


Después de todas las emociones vividas en Canadá, Cathy y Caroline regresan a Brasil. Allí, su amistad será puesta a prueba de nuevo. Afortunadamente, nuevos hechizos poderosos están en su larga lista de aprendizaje en la escuela de los elfos. Y los chicos empiezan a fijarse cada vez más en las chicas... Cathy se prepara para partir hacia un nuevo país magnífico y aún desconocido para ella: Irlanda. Allí seguirá otras lecciones sobre la magia gaélica y conocerá criaturas extrañas como los Duendes y los Halfelinos. También será la ocasión para que finalmente aprenda más sobre su madre. ¡De hecho, va a constatar que su papá sabe muchas más cosas de las que pensaba hasta entonces!


Pero un nuevo soberano ambicioso y cruel accede al trono de los ogros. Va a querer dar una nueva dimensión a la guerra utilizando a Gwenola. Para asegurar la victoria, movilizará tropas por todo el planeta, reclutará aliados inesperados para acelerar la contaminación. ¿Podrán Cathy y sus amigos contener estos asaltos y conseguir concienciar a los humanos? ¿Serán capaces de contrarrestar todos estos Temblores?


Cathy Merlin: ¡una serie juvenil mágica y ecológica!


Contaminación, cambio climático: los desafíos actuales de nuestro mundo son numerosos. ¿Cómo explicar conceptos complejos a los más pequeños? ¿Cómo podemos hacer que nuestros hijos sean conscientes de estos problemas y que se reconecten con la naturaleza? Debemos utilizar tanto los mecanismos de los cuentos y leyendas como las duras realidades que sufre nuestro planeta. ¡Esta positiva colección de pequeñas novelas intenta ofrecer este tipo de visión a los jóvenes adolescentes que tienen los pies en la tierra pero que aún saben soñar!


"Cathy Merlin" es una serie juvenil llena de aventuras mágicas y constructivas. Cada libro combina la magia y el realismo y hábilmente hace un equilibrio entre los hechizos y las propiedades medicinales de las plantas. Con humor y sabiduría, Cristina Rebière se complace en hacernos viajar por el mundo en lugares que realmente existen y que ha visitado. ¡Prepárate para descubrir una serie original y atípica que divertirá a los lectores de todas las edades!

IdiomaEspañol
Fecha de lanzamiento15 feb 2021
Cathy Merlin - 4 Temblores
Autor

Cristina Rebiere

Courte biographie:Cristina Rebière est auteure de nombreux guides et livres. Elle a dirigé une maison d'édition, un parc d'aventures et mené à bien de nombreuses missions dans la fonction publique européenne. Elle est aussi spécialisée dans la formation continue.Ses origines:Après la Révolution roumaine, Cristina interrompt de brillantes études pour entrer à l'université en France où elle suit tout le cursus en faculté de droit et obtient une Maîtrise en Administration Économique et Sociale. D'abord chargée de communication dans un Institut Français en Allemagne, elle devient statisticienne à Bruxelles pour un bureau d'assistance de la Commission Européenne. De retour à Bucarest elle est successivement contrôleuse de gestion, directrice de maison d'édition, experte européenne puis professeure de français. En Roumanie elle fonde avec son mari une entreprise de team building puis le premier parc d'aventures jamais créé dans ce pays - construit de leurs mains - qui attirera des milliers de personnes, écoles et entreprises dans la pratique du sport et d'activités de cohésion en pleine nature. Avec son équipe, elle conçoit et construit des parcours d'escalade dans les arbres pour d'autres clients.Au rectorat de l'Académie de la Martinique, Cristina prend en charge la coordination de la Cellule Académique des Fonds Européens et de Coopération où elle accompagne les porteurs de projet dans le montage des dossiers, assure la formation en ingénierie de projet, gère un réseau de plus d'une soixantaine d'enseignants référents à l'ouverture internationale. Elle assure la gestion opérationnelle de plusieurs projets de coopération. Elle assure l'actualisation du site internet de la Délégation Académique aux Relations Internationales et à la Coopération.La pédagogie de Cristina Rebière est basée sur le pragmatisme et l'efficacité.Domaines de compétence:management de projet, voyage, marketing social de contenu, team building, formation initiale et continue, expertise en fonds européens, budgétisation, planification, productivité et stratégie, coaching, ingénierie financière, webmestre, statistiques, procédures, web intégration, conception graphique, communication, conception et construction de parcs d'aventure

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    Cathy Merlin - 4 Temblores - Cristina Rebiere

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    Regreso a Brasil

    illustration

    El regreso a Brasil se desarrolló sin problemas, pero en el avión, Cathy y Caroline discutieron mucho sobre lo que acababa de pasar en Canadá. Aunque estaban muy contentas de haber conocido a los Canadelfos, e incluso de haber tenido la suerte de participar en algunas clases, una tensión evidente siempre permanecía en la superficie... Tenían dificultad para olvidar la tragedia vivida por Caroline, y, sobre todo, el hecho de que la terrible amenaza aún se cernía sobre su cabeza.

    Charles vino a sentarse con ellas en la cabina del avión para hablar. Decidieron juntos que Caroline no debía decir nada a sus padres sobre lo que había sucedido en Mauricie. Charles se encargaría de eso. La niña se sintió aliviada porque realmente no sabía cómo abordar todo esto con sus padres. Charles les informó que no hablaría en absoluto de los elfos a los Jacquet, ni de los ogros, sino más bien del jefe de una organización secreta que había secuestrado a Caroline debido a una visión que había tenido y de la que estaba convencido que la niña era su única esperanza de supervivencia.

    Mathilde no fue informada de nada, pero comprendió fácilmente que algo estaba pasando. Charles había sido muy impreciso con ella cuando Caroline regresó con ellas, pero siempre había sido muy discreta y sabía que sería informada a su debido tiempo si resultaba necesario. Lo único que Charles le había enseñado esa mañana, justo antes de subir al avión, fue que había recibido un mensaje de su trabajo y que se iban a mudar a Irlanda antes del comienzo del año escolar. La noticia la sorprendió bastante, y más aún por el hecho de que Charles le pidió que no hablara con las chicas. Sin embargo, pronto se dio cuenta de que no quería hablar de eso con ellas de inmediato, ya que estaban lo suficientemente traumatizadas por lo que había sucedido en Canadá. Una separación próxima y tan rápida realmente les causaría un gran dolor... Mathilde ya simpatizaba con ellas porque sentía la fuerte amistad que se había creado entre las dos chicas.

    André y Alexandra, los padres de Caroline, los recibieron en el aeropuerto y estaban muy contentos de volver a ver a su hija. Alexandra notó rápidamente que su hija no estaba en su estado normal, a pesar de los esfuerzos de Caroline por ocultar su malestar. Su madre le preguntó si todo estaba bien y ella le confirmó diciendo que habían tenido unas vacaciones estupendas y que Canadá es un país magnífico, el cual había adorado.

    Charles propuso a los Jacquet venir a almorzar en casa al día siguiente para contarles sus aventuras en Canadá. Aceptaron con alegría y se separaron después de haber dejado a los Merlin y Mathilde en su domicilio.

    Al día siguiente al mediodía, Cathy fue la que acogió a los Jacquet. Abrazó a su amiga, muy feliz de encontrarla de nuevo, como si no la hubiera visto desde hace una eternidad.

    — ¡Me alegro de verte Caroline!

    — Verdad, es que no la has visto en tanto tiempo... —se burló amablemente Alexandra––. ¡Debieron haber sido casi 24 horas!

    — El tiempo me ha parecido mucho más largo... —afirmó Cathy, seria, pensando en su noche agitada por las pesadillas donde su mejor amiga estaba siendo nuevamente secuestrada por Vandorf, el hijo del jefe de los ogros.

    — Para mí es lo mismo —replicó Caroline, que tampoco había tenido una noche muy descansada.

    — Pero entrad, no os quedéis en la puerta —continuó Cathy––. Mi padre os espera en el salón. Me llevaré a Caroline un momento porque todavía tenemos que ordenar y nombrar todas las fotos que hemos tomados en Canadá.

    — ¿No puedo ir con vosotras? Me gustaría ver vuestras fotos —preguntó Alexandra.

    — No te preocupes, ese es el plan, te los enseñaremos e incluso los copiaremos en un CD para que puedas conservarlos. Pero preferimos que la sorpresa del descubrimiento sea completa, así que hay que tener un poco más de paciencia —respondió Cathy quien había imaginado bien la reacción de la madre de su amiga.

    Las chicas fueron al dormitorio de Cathy, mientras los adultos se dirigían al salón donde Charles hablaba por teléfono. Cortó la conversación, que parecía importante, y se disculpó con los Jacquet.

    — Siento mucho no haber ido a recibirlos, pero fue una llamada importante del trabajo. Este es un tema del que además me gustaría hablaros porque nos concierne a todos más o menos... Pero antes de eso, tengo el deber de hablaros de algo mucho más serio.

    — ¿A qué te refieres, Charles? —se asustó  Alexandra que enseguida comprendió que se trataba de su hija—. ¿Le ha pasado algo grave a Caroline durante su estancia? —preguntó conteniendo la respiración.

    — De hecho, sí, se trata de vuestra hija.

    — Lo sabía, lo había sentido en carne propia e incluso se lo había dicho a André, que me había vuelto a tomar por loca.

    — Pero no querida, nunca te he considerado así. Solo dije que estabas demasiado preocupada y que si tenías razón, Charles nos habría advertido seguramente...

    — Lo siento mucho no haberlo hecho, pero dadas las circunstancias, la urgencia estaba en otra parte. Ahora puedo contarles lo que ha pasado, pero tendrán que ser comprensivos y no pedirme más detalles de los que puedo darles.

    — Venga, Charles, deja de tenernos en suspenso, dinos qué pasó —replicó André, que comenzaba a impacientarse.

    — Para ser honesto, realmente no sé por dónde empezar, porque no es un caso tan simple.

    — Empieza por donde quieras, pero dinos qué le pasó a Caroline —Alexandra alzó el tono y a la vez había empezado temblar al sentir que lo que Charles tenía que decirles era mucho más grave de lo que dejaba parecer.

    — Para resumir, comenzaré diciéndoles que Caroline está en grave peligro y que deben considerar mudarse lo antes posible.

    — ¿Pero qué nos estás contando? ¿De qué peligro estás hablando? ¿Mudarse dónde y por qué? —las preguntas de André cayeron de repente y Charles se vio obligado a interrumpirlo.

    — Caroline fue secuestrada en Mauricie y no fue casualidad que fuera la única víctima, mientras que Cathy estaba con ella y Mathilde también.

    — ¡¿Qué?! —gritó francamente Alexandra, palideciendo al escuchar esas palabras—. ¿Otra vez? Después de Lençois, ¡esto no puede ser una coincidencia! —añadió enseguida.

    — Tienes razón Alexandra, no es en absoluto una coincidencia. Es la misma persona que la secuestró.

    — Pero, ¿cómo es eso posible? ¿Le siguió hasta allí? ¿Y por qué Caroline? ¿Qué quiere de ella?

    — Tranquilízate Alexandra, Charles va a explicarnos todo —intentó André tranquilizar a su esposa, cuando estaba tan atónito como ella.

    — Sí, este hombre nos ha seguido y se ha disfrazado de guía forestal. Ha seguido a las chicas en sus caminatas con Mathilde y, a pesar de su prudencia, ha logrado secuestrar a Caroline. Logramos movilizar

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