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GuíaBurros La sabiduría del Sufísmo: Su enseñanza espiritual
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Libro electrónico117 páginas2 horas

GuíaBurros La sabiduría del Sufísmo: Su enseñanza espiritual

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Sinopsis

En esta recopilación se recogen algunas de las sentencias de sabiduría más célebres del sufismo seleccionadas de los más grandes maestros de la tradición sufí, tales como Sidi Abu Mayan, Ibn Ata Allah o Al Alawi entre otros.Estas sentencias reflejan una experiencia espiritual y ofrecen un apropiado soporte de meditación y reflexión. Traducidas directamente del árabe, esperamos que estas enseñanzas puedan hacer llegar al lector algo del perfume de sabiduría de estos maestros representantes de una tradición espiritual aún viva y presente.

IdiomaEspañol
EditorialEditatum
Fecha de lanzamiento1 oct 2020
ISBN9788418429989
GuíaBurros La sabiduría del Sufísmo: Su enseñanza espiritual

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    GuíaBurros La sabiduría del Sufísmo - Andrés Guijarro

    La sabiduría del sufísmo

    Andrés Guijarro

    Agradecimientos

    A mi querido hijo Jesús, que a sus ocho años de edad de mayor quiere ser granjero, restaurador de libros antiguos, soldado en las fuerzas especiales y muchas cosas más, y que será, como su hermano, un futuro capitán de la guerra del tiempo.

    Qué capitán es este, qué soldado / de la guerra del tiempo...

    Lope de Vega

    Sobre el autor

    Andrés Guijarro nació en Madrid en 1972. Es licenciado en Filología Árabe por el Departamento de Estudios Árabes e Islámicos de la Universidad Complutense de Madrid. Es especialista en sufismo y tradiciones esotéricas del islam. Ha residido en varios países del mundo árabe-islámico y desde hace años compagina su labor de traductor con la de profesor de lengua árabe. Colabora con el músico y musicólogo Eduardo Paniagua, especialista en música arábigo-andaluza, en la traducción de los poemas que aparecen en los discos publicados por Pneuma. Es autor de las obras: Los signos del fin de los tiempos según el islam (Edaf, 2007), La constitución invisible del ser humano según el sufismo, (Los Libros del Olivo, 2013) y Sentencias de sabiduría de los maestros sufíes (Los Libros del Olivo, 2014). Ha traducido también varias obras clásicas de la espiritualidad y la mística islámica. Entre ellas: Textos sobre la caballería espiritual, de Ibn Arabi (Edaf, 2005), El libro de la extinción en la contemplación, de Ibn Arabi (Sirio, 2007), Destellos de la divinidad, de Fajr al-Din Iraqi (Edaf, 2008), El libro de la interpretación de los sueños de Ibn Sirín (Sirio, 2008), Los engarces de las sabidurías de Ibn Arabi (Edaf, 2009) y el Tratado sobre el amor de Avicena (Tritemio, 2017). Es también responsable de una traducción de El Corán (Edaf, 2010).

    Introducción

    La tradición de hikam (pl. de hikma, lit. sabiduría), aforismos o sentencias de sabiduría, es larga en el sufismo, remontándose hasta los mismos orígenes de esta tradición espiritual. Compuestas por los maestros sufíes y recogidas, memorizadas y en ocasiones comentadas por sus discípulos o por otros maestros, las hikam suelen condensar lo más profundo y esencial de la enseñanza de ese maestro en particular, y de las doctrinas del sufismo en general.

    Si traducir un texto desde el árabe siempre es tarea ardua para un occidental, lo es mucho más aún en el caso de un texto de sufismo, en el que los matices se multiplican y los diferentes grados de interpretación (parejos siempre a la capacidad de comprensión del lector), dan lugar a otras tantas posibilidades de traducción de una expresión o de un término. En el caso concreto de las hikam, estas dificultades aumentan de forma exponencial. Su estilo aforístico, consistente en frases aisladas, sintéticas, a menudo con presencia de términos técnicos propios de esta tradición espiritual, y en muchos casos con un elemento paradójico que las aproxima al koan del zen, convierten la labor del traductor en algo especialmente difícil. Naturalmente, en muchos casos las sentencias que en esta edición he traducido de una determinada manera podrían haberse traducido de otra. De hecho, yo mismo he barajado en varias ocasiones diversas posibilidades para una misma hikma, optando en la mayoría de los casos por la solución que, sin forzar demasiado la estructura de la frase en árabe —algo que no siempre se ha conseguido—, pudiera transmitir a la vez la idea que encerraba la expresión del maestro, o la pobre comprensión que de la misma haya podido alcanzar este traductor.

    La literatura de hikam es, junto con el Corán y los hadices (frases de Muhammad, el profeta del islam, recogidas en las compilaciones tradicionales), el mejor ejemplo de las características de la lengua árabe, esa lengua que, en palabras del arabista e islamólogo francés Louis Massignon, coagula y condensa, con un endurecimiento metálico, y por veces con una refulgencia cristalina, la idea que se quiere expresar, sin ceder a la presión del sujeto hablante. Elíptica y gnómica, discontinua y entrecortada, la idea brota de la ganga de la frase como la chispa del sílex. La forma de expresión árabe favorece los giros sintéticos e indirectos, así como las elipsis. Es dada a distinguir siempre entre una esencia y una forma, y no duda en sacrificar la homogeneidad de la segunda a la veracidad de la primera. En palabras de Frithjof Schuon, el árabe ve el lenguaje casi como un fin en sí mismo, una substancia autónoma, que preexiste con respecto a sus contenidos; como la existencia universal, que es su prototipo, el lenguaje nos encierra ontológicamente en la verdad, queramos o no.

    En resumen, la experiencia espiritual en general, y muy especialmente en el marco islámico, se ha venido transmitiendo de forma privilegiada mediante estas fórmulas breves y sentencias alusivas. Este tipo de formulación expresa mejor la instantaneidad de la experiencia que una prosa que intente desarrollar de forma racional la traducción de esta experiencia a nivel mental. En la mayoría de los casos, una experiencia de esta naturaleza es inefable, y únicamente la formas poéticas y sapienciales pueden ser soporte de la misma. Y es necesario recordar que la enseñanza espiritual de tipo iniciático nunca se dirige al plano mental, sino al trasfondo del alma.

    Este conocimiento del que hablamos no se puede alcanzar por medio de ninguna búsqueda, y sin embargo solo los buscadores lo alcanzan.

    Abû Yazîd al-Bastamî

    Sentencias de Sidi Hamza Al-Qâdirî Al -Boutchichî

    El maestro

    Hamza al-Qâdiri al-Boutchichi (1922 – 2017) fue el shayj (maestro y guía espiritual) de la tarîqa (orden sufí) qadiriyya boutchichiyya. La rama Boutchichi de la orden qadiriyya nació en el siglo XVIII en el noroeste del actual Marruecos. Su casa madre se encuentra en la ciudad de Meddagh, cerca de Berkane, a escasa distancia de la frontera con Argelia.

    Sidî (mi señor) Hamza está considerado como uno de los revitalizadores del sufismo en el Marruecos de la segunda mitad del siglo XX, y entre sus discípulos se cuentan numerosos intelectuales, tanto marroquíes como occidentales, así como importantes personalidades próximas a la Corte marroquí.

    Sentencias

    El verdadero conocimiento solamente se obtiene con humildad. La manera de dirigirse hacia él es parecida a la de una persona que quiere beber el agua de un arroyo: deberá inclinarse para beber. El agua está siempre situada en el lugar más bajo; nos es necesario ser como el agua.

    El conocimiento de Dios no tiene fin. Cada etapa del viaje es por lo tanto más hermosa y más maravillosa que la precedente.

    Procedemos todos de la misma luz. No hay distinción, no hay más que reunión. Hacemos distinción entre unos y

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