Cobe II

Por Greg Alldredge

El inmortal infeliz trabaja para descubrir cómo otros seres eternos están haciendo lo imposible ... muriendo.

Viviendo la vida de un perro.

Arregladores, así se llaman, un grupo de seres sobrenaturales que mantienen funcionando el mundo en el que viven. Las cosas se rompen, las arreglan.

Lucky es un arreglador inmortal, pero ¿qué sucede cuando los inmortales comienzan a aparecer muertos?

Lucky y Muerte necesitan descubrir qué les está sucediendo a los Fixers antes de que el mundo, tal como lo conocen, termine en el caos.

Sin cielo ni infierno del que hablar, ¿quién podría estar detrás de este último lío?

Lea Cobe II: El camino ligeramente torcido hacia Ninguno para conocer el destino de Lucky

• Idioma: Español
• Editorial: BadPress
• Fecha de lanzamiento: 6 oct 2020
• ISBN: 9781071568224

Vista previa del libro

Capítulo 1:

Hola, soy Cobe, o al menos una vez fui conocido como Cobe, luego comencé a llamarme Jinx, y ahora a través de una serie de eventos desafortunados, mi nombre es Lucky. No puedes ver esto, pero soy un perro. No, no me refiero a que persigo a todas las mujeres que puedo encontrar en busca de sexo... lo cual hago, pero eso no viene al caso. Soy un perro de verdad, con pulgas y todo. Un perro de un solo ojo, una oreja y una bola llamado Lucky. ¿Puedes ver la ironía?

Ves a esa mujer caminando delante de mí... por supuesto que no puedes. Este es un libro, pero créeme, ella es el amor de mi vida. Los perros generalmente caminan de frente... Yo prefiero la vista desde atrás. La vigilo literalmente desde atrás siempre que puedo.

Por ella, o a pesar de ella, fui salvado de una eternidad de Tormento para seguir viviendo después de la muerte. Sirvo a Potente, el dios durmiente de mi mundo, o como me gusta pensar en él, a Im-Potent. No puedo llamarlo así en voz alta, estoy en libertad condicional. Pueden suceder cosas malas cuando haces enfadas a los seres a cargo.

En este mundo, después de la muerte eres recibido por una línea interminable, al menos para los humanos. Im-Potent nos concedió almas con las que puede jugar. Los dragones no las tienen. Los dragones odian que les recuerden que fueron creados como el primer error, para ser reemplazados por humanos, el segundo error. Si realmente quieres meterte debajo de la piel de un dragón, recuérdales eso.

La mayoría de los mortales no conocen esta información ni ninguna información. Están demasiado ocupados tratando de ganarse la vida del polvo. Verás, muchas cosas aquí en la tierra de Im-Potent están rotas, y esto dificulta la supervivencia de los hombres del mundo.

Lo primero que se rompe, o al menos se dobla: nuestro dios masculino ha decidido en su infinita sabiduría hacer que la riqueza y el poder pasen de madre a hija. Los hombres se quedan sin... bueno, sin poder. Como hombre, lo encuentro de muy mal gusto. Quiero decir, si Im-Potent fuera una mujer, lo esperarías, pero como es un hombre, que favorezca a las mujeres sobre los hombres me hace creer que tiene serios problemas con la mamá. No puedo confirmar ni negar el rumor, pero tal vez nuestro Señor camina como una Dama.

Todo esto me impactó mucho. No fue hasta después de mi muerte que supe esta información. Soy un reparador, así que mi trabajo es arreglar las cosas. Viajo sobre seres humanos y dragones arreglando las cosas... como un perro. Entiendo que todo parece extraño, pero supongo que los poderes que se deciden sería más fácil para un perro moverse y corregir errores más que...

He dedicado demasiado tiempo a pensar en esto, pero siento que una criatura, de diez pies de alto con alas correosas hechas de hierro, que volara y detuviera todo tipo de desacuerdos sería lo mejor. Si alguien discutía con la criatura, podía disparar rayos de su ojo para golpear cualquier tipo desagradable. Esa es mi idea de un reparador... pero nadie me pidió mi opinión. Lo sugerí, pero fui ignorado.

Estoy divagando... Nuestro mundo doblado/roto tiene un número significativo de reparadores y otros niveles de criaturas que se dedican a arreglar todas las partes mal hechas y a medio cocinar de nuestro mundo.

Tengo un amigo vulpino llamado Smigget; parece un perro rojo bajito con el pelo descuidado. Su trabajo es simple, orinar sobre hongos. Esa es toda su existencia en la otra vida. Orinar hongos con su orina que huele a repollo podrido. Eso, amigos míos, es un mundo roto según los estándares de cualquiera.

Seguirles la pista a todos estos reparadores es una gran burocracia para garantizar que el mundo que protegemos no se desmorone por completo. Capa tras capa de supervisores. Trabajo para una perra llamada Kampot. No es un perro, sino una vieja loca que me engañó para que fuera un perro. Como puedes adivinar, no me gusta mucho. Pensando en retrospectiva, tuve pocas opciones en mi decisión de convertirme en un reparador, pero podría haber sido reclutado por cualquiera que no fuera Kampot la Loca.

Entiendo que podrías pensar que un paraíso espera a todos aquellos que sirven al dios dormido, como se establece en los sagrados rollos y se transmite por la sacerdotisa de la fe.

Créame, todo es mentira; toda la historia es un gran plan de marketing contado por los templos para extraer la mayor cantidad de dinero posible de los fieles. Yo no era uno de los fieles, pero si uno de los blasfemos, los mal hablados y los irrespetables. Estaba destinado a esperar en la fila sobre el piso de Tormento por un cuerpo. Mi alma nunca se reencarnaría, un cuerpo nunca se abriría para mí. Podría haber manifestado mi disgusto por el estado actual de las cosas más de una vez... De acuerdo, fue miles de veces en mi corta vida. (Créame, vi la lista. Encontré el pergamino impresionante.)

Escuche, podría continuar con lo que sucedió en el primer libro, pero ¿es realmente necesario? Estoy seguro de que lo terminó, hace solo unos momentos, y desde entonces ha comenzado este libro... Si no, ¿qué está pasando contigo?

Te perderás el lindo encuentro entre Adriana y yo. La muerte y la destrucción que ocurren en el camino, además de cómo me convertí en el perro de un solo ojo, una oreja y una bola. ¿Quién querría perderse eso?

Algunas cosas que necesitas saber:

Im-Potent duerme durante miles de años a la vez.

Nadie sabe de dónde vino y no está todo aquí en el cerebro.

Nuestro mundo colapsará algún día debido a los errores heredados integrados en el sistema.

Las cosas deben arreglarse, pero sólo mantenemos los sistemas juntos envolviéndolos con un cordel... hablando metafóricamente.

No todos los reparadores se llevan bien. Hay un rumor que solo se puede susurrar en los rincones más oscuros del mundo de que un grupo de arregladores se está rebelando, pero no escuchaste eso de mí.

Estoy seguro de que dejé algo fuera. En este mundo, los detalles importantes parecen pasar continuamente desapercibidos o quedar fuera.

Puedes adivinar que no soy uno de los seguidores leales de Im-Potent, y estarías en lo cierto, pero no soy lo suficientemente estúpido como para caer en una rebelión contra un dios. La insurrección es un camino que solo conducirá a que me sucedan cosas realmente malas.

Ahora necesito seguir a Adriana. Ella se dirige al desierto y yo necesito ir a buscar estos horribles calamares de arena que te tirarán del trasero y te tomarán como su desayuno. Encuentro un placer seguir a esta mujer. Tiene problemas para hablar con los demás, pero el movimiento de sus caderas es suficiente para que incluso un perro viejo se ponga de pie y se dé cuenta.

Capítulo 2:

Adriana se apartó de las rocas que caían y cubrían el suelo del cañón. En algún lugar bajo esa caída de escombros yacía Jinx. No estaba segura de qué tan atrás el edificio cortaba la pared del cañón, estaba segura de que Jinx estaba muerto. No había forma... ella se estiró y sintió una lágrima correr parcialmente por su mejilla. Extraño, ella nunca lloró ni cuando murió su madre. Esto debe ser algo nuevo. Quizás la sequedad del desierto le hizo llorar los ojos. Debe ser eso.

El perro se sentó entre ella y el estrecho desfiladero lleno de rocas. Era solo un perro, pero Adriana sintió que la miraba con una extraña mirada de animal.

El muchacho adolescente que ella y Jinx habían recibido el encargo de rescatar estaba hundido en una grieta de piedras. El alcalde se ofreció a pagarle bien si lo devolvía a salvo. Se necesitaría una gran suma de dinero para comenzar un nuevo taller en reemplazo del de su madre, el que los hombres malos habían quemado.

Quería desesperadamente volver a su vida sencilla como caldeadora. Viajando por las carreteras secundarias de estas montañas, se sentía muy desorganizada y sucia.

El perro ladró y movió la cola. Qué criatura más extraña, nunca pareció estar del todo bien en la cabeza. En un momento se sentaba y la miraba fijamente, al siguiente ladraba y salía corriendo detrás de Potent, sólo sabía eso.

Vamos, muchacho, le dijo Adriana al joven que estaba arrastrando a casa de su madre, la alcaldesa. El animal respondió con un ladrido y corrió por el camino, pero no el adolescente drogado.

Adriana quería volver a la ciudad. En cambio, habían viajado a través de un vasto desierto hasta las montañas, a través de una cueva y un sistema de minas para llegar al camino en el que ella estaba ahora, y en realidad, no estaba segura de dónde estaba en relación con la ciudad.

Pensando en el pasado, ni siquiera podía recordar el nombre de la ciudad. No había sido una visita particularmente agradable, un templo incendiado y un comerciante de piedras muertas. Jinx perdió un ojo en un ataque y escaparon de la ciudad por la carretera.

Jinx había sido quien se había encargado de los pequeños detalles como nombres y personas. Prefería permanecer en su mente, pensando en cómo hacer la vida más fácil a quienes la rodeaban. Una cosa que le proporcionaron sus viajes fue mucha materia prima para que su mente trabajara en nuevos inventos.

Ahora había pocas opciones. Escalar por las paredes verticales del acantilado o seguir el camino. Solo había una opción viable, el camino. Con el brazo del joven en la mano, comenzó a caminar, pegándose a la sombra tanto como pudo.

El perro había vuelto a desaparecer. Ella no se preocupó mucho por eso; el animal tenía la habilidad de aparecer cuando llegaba el momento de comer. Por lo que Adriana sabía, ese pulgoso aún no se había perdido una comida.

<= OO =>

Jinx había estado sentado allí esperando que Adriana llorara, se derrumbara por su heroicidad y el último sacrificio que acababa de hacer. Por lo que él supo, ella derramó una sola lágrima. Tendría que conformarse con eso. Había seguido a la mujer dos veces ahora, unos meses como Jinx y ahora como Lucky... Era complicado, el no entendía completamente todo el asunto del retroceso en el tiempo, así que decidió no pensar en el tema. Muchas cosas que no entendía, decidió no pensar en ellas, así le resultaba la vida más fácil. Su lema debería ser, no pienses, actúa.

Él podría haberse sentado allí esperando a que ella llorara hasta que el mundo dejara de girar o fuera ascendido a supervisor, era una carrera para ver qué pasaba primero. Más de unas pocas personas apostaron por el resultado. Encontró toda la idea bastante grosera. Sin embargo, captó un olor, un olor felino, que en su mundo solo significaba una cosa: Dacca.

La criatura Dacca era una especie de mensajero. Los supervisores o tal vez el propio Potent crearon las criaturas felinas de Dacca como mensajeros del dios, o al menos los supervisores. Lucky pensó en ellos como un gran dolor en el trasero. Irrespetuosos y molestos, caminaban como si gobernaran el mundo, cuando en realidad eran poco más que mensajeros, uno de los trabajos más bajos en la oficina, pero se pavoneaban como si fueran Portent.

Había pocas opciones, necesitaba alejarse de Adriana para reunirse con la loca gata y averiguar qué mensaje podría tener. Cuanto antes se reuniera con ella, más rápido podría ignorar las órdenes de quien las envió.

El hedor a felino se hizo insoportable, pero no pudo encontrar a la temida criatura. Un siseo desde arriba envió un escalofrío por su espalda.

¿Debes ser tan estúpido todo el tiempo? El desprecio llenó el siseo cuando Dacca habló. Lucky miró hacia arriba y allí estaba sentada una mujer.

Esto era lo más extraño de las criaturas sobrenaturales que realmente hacían que el mundo funcionara. Los mortales veían a los reparadores como animales mientras realizaban sus tareas. Las criaturas sobrenaturales se veían unas a otras como seres humanos con extraños rasgos animales. Dacca parecía un gato a cualquier mortal que la viera. Para Lucky, parecía una mujer alta y delgada con rasgos felinos. Encontró su apariencia atractiva pero su personalidad repugnante.

Escucha, criatura repugnante, dame tu mensaje y lárgate. Tengo poco tiempo para tus juegos, ladró Lucky.

Dacca se limpió la mano derecha, burlándose de Lucky. Kampot da este mensaje: deja de perder el tiempo con esa mujer. Hay una serie de elementos en su lista de soluciones. Tu tarea con ella ha terminado. Vuelve al trabajo.

Lucky gruñó en respuesta, "No puedo