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La Llamada de Chtulhu
La Llamada de Chtulhu
La Llamada de Chtulhu
Libro electrónico73 páginas1 hora

La Llamada de Chtulhu

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La llamada de Cthulhu (The Call of Cthulhu en inglés) es un relato corto en estructura de novelette escrito por H. P. Lovecraft en el año 1926. La obra fue publicada por primera vez en febrero de 1928 por la editorial de pulp Weird Tales. Cthulhu hace su primera aparición en este relato, convirtiéndose en una figura central del ciclo literario de los Mitos de Cthulhu.

La historia está compuesta por dos narrativas principales vinculadas por una tercera, la voz del «autor». Solo el autor es capaz de interpretar correctamente lo sucedido y es consciente de la importancia de la información que tiene en su poder, y va narrándolo siguiendo el orden en que él mismo fue descubriendo la verdad.
Comienza con la muerte de un eminente profesor de la Universidad de Miskatonic y el estudio de los documentos con los que estaba trabajando. Estos incluyen un informe sobre un ataque perpetrado por una secta. Una investigación sobre los miembros de la secta saca a la luz algunas pistas sobre la horrorosa criatura que veneran, Cthulhu. Este ser, que supuestamente llegó con sus seguidores extraterrestres desde las estrellas millones de años antes de la aparición del Hombre, ahora descansa en un sueño profundo en su ciudad sumergida, R'lyeh.
La segunda parte de la historia empieza con el cuaderno de bitácora del primer oficial de un barco que descubre la ciudad hundida, pues esta ha emergido a la superficie en el Océano Pacífico. La ciudad emergió porque «las estrellas eran propicias» y el tiempo para el despertar de Cthulhu y sus engendros había llegado.
IdiomaEspañol
Fecha de lanzamiento17 feb 2014
ISBN9788898006434
La Llamada de Chtulhu
Autor

H. P. Lovecraft

Renowned as one of the great horror-writers of all time, H.P. Lovecraft was born in 1890 and lived most of his life in Providence, Rhode Island. Among his many classic horror stories, many of which were published in book form only after his death in 1937, are ‘At the Mountains of Madness and Other Novels of Terror’ (1964), ‘Dagon and Other Macabre Tales’ (1965), and ‘The Horror in the Museum and Other Revisions’ (1970).

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Comentarios para La Llamada de Chtulhu

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4.5/5

70 clasificaciones5 comentarios

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  • Calificación: 5 de 5 estrellas
    5/5
    Increíble!! Una obra de arte y terror donde me enganche con la historia
  • Calificación: 5 de 5 estrellas
    5/5
    Me encanto, te atrapa desde el comienzo y es genial todo lo que envuelve a cthulu!
  • Calificación: 4 de 5 estrellas
    4/5
    La historia me parece muy interesante y misteriosa, pero no me gusta demasiado la forma en que está redactado. En ocasiones es complicado seguir la historia. Este ha sido el primer relato de de HP Lovecraft que he leído.
  • Calificación: 1 de 5 estrellas
    1/5
    Son solo 70 páginas y el libro se me hizo eterno. La verdad es que no me pareció para nada entretenido ni mucho menos misterioso. La forma en la que está escrito parecería que el autor sacó un libro de sinónimos y buscó las palabras más rebuscadas para insertarlas todas juntas .. Esto último podría entenderlo considerando que fue escrito en los años 20s .. Sin embargo he leído otro libros también de muchos años atrás bastante brillantes. Entonces la verdad no, no me gustó para nada .

    A 1 persona le pareció útil

  • Calificación: 4 de 5 estrellas
    4/5
    Esta es la primera historia de H.P Lovecraft que me eh leído, así que no tengo mucha experiencia sobre el terror cósmico, en mi opinión esta muy bueno, es muy entretenido y bastante absorbente aunque un poco corto para mi gusto, Lo recomiendo bastante.

    A 1 persona le pareció útil

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La Llamada de Chtulhu - H. P. Lovecraft

H. P. Lovecraft

La llamada de Chtulhu

Collana

Ficciòn

Titulo e-book

La Llamada de Chtulhu

Autore

H. P. LOVECRAFT

Codice ISBN

978-88-98006-43-4

Editore

GREENBOOKS EDITORE

www.greenbooks-editore.com

Edicciòn digital 2014

ISBN: 978-88-98006-43-4

edition info

toc

Prologo

Autobiografía

I

II

III

Prologo

La Llamada de Cthulhu

por H. P. Lovecraft

(Encontrado entre los papeles del difunto Francis Wayland Thurston, de Boston)

"Resulta concebible pensar en la supervivencia de tales poderes y criaturas [...] una supervivencia de una época inmensamente remota en la que [...] la consciencia estaba manifestada. quizá, en formas y figuras que desaparecieron hace mucho ante el avance de la humanidad [...] formas de las que sólo la poesía y la leyenda captaron un fugaz recuerdo llamándolas dioses, monstruos, y criaturas míticas de todo tipo y especie…"

-Algernon Blackwood

Autobiografía

ALGUNAS NOTAS SOBRE ALGO QUE NO EXISTE

por H. P. Lovecraft (1890-1937).

Escrito publicado de forma póstuma.

Título original en inglés: «Some Notes On A Nonentity»

Para mí, la principal dificultad al escribir una autobiografía es encontrar algo importante que contar. Mi existencia ha sido reservada, poco agitada y nada sobresaliente; y en el mejor de los casos sonaría tristemente monótona y aburrida sobre el papel.

Nací en Providence, R.I. -donde he vivido siempre, excepto por dos pequeñas interrupciones- el 20 de agosto de 1890; de vieja estirpe de Rhode Island por parte de mi madre, y de una línea paterna de Devonshire domiciliada en el estado de Nueva York desde 1827.

Los intereses que me llevaron a la literatura fantástica aparecieron muy temprano, pues hasta donde puedo recordar claramente me encantaban las ideas e historias extrañas, y los escenarios y objetos antiguos. Nada ha parecido fascinarme tanto como el pensamiento de alguna curiosa interrupción de las prosaicas leyes de la Naturaleza, o alguna intrusión monstruosa en nuestro mundo familiar por parte de cosas desconocidas de los ilimitados abismos exteriores.

Cuando tenía tres años o menos escuchaba ávidamente los típicos cuentos de hadas, y los cuentos de los hermanos Grimm están entre las primeras cosas que leí, a la edad de cuatro años. A los cinco me reclamaron Las mil y una noches, y pasé horas jugando a los árabes, llamándome «Abdul Alhazred», lo que algún amable anciano me había sugerido como típico nombre sarraceno. Fue muchos años más tarde, sin embargo, cuando pensé en darle a Abdul un puesto en el sigloVIII y atribuirle el temido e inmencionable Necronomicon!

Pero para mí los libros y las leyendas no detentaron el monopolio de la fantasía. En las pintorescas calles y colinas de mi ciudad nativa, donde los tragaluces de las puertas coloniales, los pequeños ventanales y los graciosos campanarios georgianos todavía mantienen vivo el encanto del siglo XVIII, sentía una magia entonces y ahora difícil de explicar. Los atardeceres sobre los tejados extendidos por la ciudad, tal como se ven desde ciertos miradores de la gran colina, me conmovían con un patetismo especial. Antes de darme cuenta, el siglo XVIII me había capturado más completamente que al héroe de Berkeley Square; de manera que pasaba horas en el ático abismado en los grandes libros desterrados de la biblioteca de abajo y absorbiendo inconscientemente el estilo de Pope y del Dr. Johnson como un modo de expresión natural. 

Esta absorción era doblemente fuerte debido a mi frágil salud, que provocó que mi asistencia a la escuela fuera poco frecuente e irregular. Uno de sus efectos fue hacerme sentir sutilmente fuera de lugar en el período moderno, y pensar por lo tanto en el tiempo como algo místico y portentoso donde todo tipo de maravillas inesperadas podrían ser descubiertas.

También la naturaleza tocó intensamente mi sentido de lo fantástico. Mi hogar no estaba lejos de lo que por entonces era el límite del distrito residencial, de manera que estaba tan acostumbrado a los prados ondulantes, a las paredes de piedra, a los olmos gigantes, a las granjas abandonadas y a los espesos bosques de la Nueva Inglaterra rural como al antiguo escenario urbano. Este paisaje melancólico y primitivo me parecía que encerraba algún significado vasto pero desconocido, y ciertas hondonadas selváticas y oscuras cerca del río Seekonk adquirieron una aureola de irrealidad no sin mezcla de un vago horror. Aparecían en mis sueños, especialmente en aquellas pesadillas que contenían las entidades negras, aladas y gomosas que denominé «night-gaunts» [espectros nocturnos o alimañas descarnadas].

Cuando tenía seis años conocí la mitología griega y romana a través de varias publicaciones populares juveniles, y fui profundamente influido por ella. Dejé de ser un árabe y me transformé en romano, adquiriendo de paso una rara sensación de familiaridad y de identificación con la antigua Roma sólo menos poderosa que la sensación correspondiente hacia el siglo XVIII. En un sentido, las

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