Álex de la Iglesia
Mar 25, 2022
3 minutos
Texto ANA TRASOBARES
Soy un ejemplo de letrado de mentiras o iletrado de verdad [risas]. Al menos tengo la decencia de decirloÓ
Recuerdo que en el colegio Divino Infante los chavales me rifaban para no quedarse conmigo. Y al final no jugaba porque encontraban a otro tan inútil como yo y nos quedábamos junto a la tapia. Así me hice amigo de todos los . Un día me dijeron que mi amigo no iba a volver más porque se lo llevaban a un colegio de niños difíciles. Y yo pensé: "Si se lo llevan Y eso que en el colegio nadie hacía regalos y menos aún tan caros. Me quedé fascinado... Y cuando se marchó, parecía como si se fuera a Auschwitz. Y todo porque no jugábamos al fútbol.
Estás leyendo una previsualización, suscríbete para leer más.
Comienza tus 30 días gratuitos