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Mi jefe ¡Me seduce!
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Mi jefe ¡Me seduce!
Libro electrónico138 páginas1 hora

Mi jefe ¡Me seduce!

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Información de este libro electrónico

Troy Hamilton es un guapo millonario que levanta pasiones allá por donde pisa, el jefe de mi hermana. Pero... nunca pensé que acabaría enamorándome del mismo hombre y... ¡acostándome con él! Por si fuera poco el lío, entró Dallas en escena, el hermano gemelo del jefe ¿Iguales? No del todo.
Los remordimientos no eran lo único que me alejaba de Troy, también estaba Bárbara, su ex, una auténtica pesadilla de mujer ¿Es un amor imposible? ¿Un hombre inalcanzable?
En este mundo, nada es imposible... ¡y menos para mí! la pasional y diablesa Elsa.

IdiomaEspañol
Fecha de lanzamiento15 dic 2018
ISBN9780463150221
Mi jefe ¡Me seduce!
Autor

Corinna Taylor

Hija de padre británico y madre española, pasó la mayor parte de su vida viviendo entre Reino Unido y España. Su primera gran debilidad es la literatura y la segunda, viajar. Siempre le apasionaron las relaciones de pareja, recrearlas, descifrarlas, idealizarlas... es creadora del subgénero Déjà vu, y además, se encuentra súper a gusto escribiendo comedias románticas contemporáneas. Hoy compagina su trabajo de profesora y psicóloga con la escritura, y también, los viajes, por supuesto. English Daughter of British parents, her first great passion is to write and the second to travel. He always liked to create romantic adventures, these made him move to other places, at other times. Today she combines her work as a teacher with writing, and also with travel, of course.

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    Mi jefe ¡Me seduce! - Corinna Taylor

    Introducción

    Nunca pensé que iba a pasarme una cosa así, acostarme con el novio de mi hermana. La peor traición que una mujer puede hacer. Es que, encima... ¡era su jefe!

    Él era un caramelo de hombre, el tipo más codiciado de la ciudad, un millonario, un adonis, el hombre perfecto, allí por donde caminaba despertaba admiración, atraía las miradas de cualquier mujer.

    Bueno, no de cualquiera, solo de las más inteligentes, las más elegantes ¡Como iba yo a imaginarme tener tanta suerte! Yo, que trabajo en una charcutería, que he tenido mil relaciones rotas y... he de reconocer que tengo un carácter muy, muy fuerte.

    Pues al final resultó que era lo que él necesitaba en su vida, una mujer de temperamento. Troy Hamilton precisaba una persona dura, por esa razón había vuelto con su ex, Bárbara Drake, conocida por los compañeros de trabajo de mi hermana como... La Siliconada Enervada.

    La exmujer de Troy fue su ruina, solo volvió para sacarle dinero, como era costumbre en ella. Bárbara conocía su debilidad... los juegos de sadomaso, sí, por extraño que parezca le gustaban ese tipo de cosas.

    Claro, no le resultó difícil quitárselo a mi hermana, aprovechó el momento en que ella se negó a seguir con el fetichismo. Tatiana le dio un ultimátum; o vamos en serio, o se acabó el cuero y todo lo demás.

    ¡Gran error dejar a un hombre sin sexo estando la víbora de su ex al acecho! Con lo primarios que son los tíos... en fin. Volvió con Bárbara y dejó a Tati, ¡El muy idiota! con lo buena chica que es y el cuerpazo que tiene, pero había una ficha más en el juego, Elsa Quinn, la hermanita de Tatiana, jejeje.

    Cuando Troy me conoció, terminó dejando a la arpía de su ex, y también los juegos de sadomaso. Pero yo me sentía culpable, Tatiana y yo habíamos hecho un pacto, olvidarnos del hombre que nos separó y nos hizo pelearnos, hasta que un día... Tatiana conoció a Dallas, el hermano gemelo del jefe.

    Dallas era un artista, un bohemio; aunque, su hermano Troy era quien dirigía los negocios. Pero este gemelo no tenía nada de desperdicio, no era mujeriego, era un apasionado de la belleza y del espíritu; escritor, pintor, escultor y hasta jardinero ¡Fue el autor del Jardín de la Fantasía! Un lugar de ensueño creado en la mansión Hamilton.

    Al igual que su hermano, era guapo, físicamente perfecto. Eran como dos gotas de agua en el plano físico, como gemelos, no así en lo intelectual y espiritual. Me dí cuenta enseguida de que era la pareja perfecta para mi hermana, de hecho, no tardaron en enamorarse.

    En cuanto a Bárbara; descubrió que estaba embarazada de Troy, y usó esta situación para intentar reconquistarlo. Esa arpía se presentó en la revista de su ex, humillando a mi hermana y a sus compañeros, como es su costumbre, pero Randy, uno de los compis y amigo gay de Tatiana, le gastó una broma a Atila, el dóberman de la Siliconada; impregnó unas galletitas de perro en éxtasis líquido, un potente estimulador sexual y se las dio.

    Imaginaros ese enorme animal fuera de control, en el apartamento de Bárbara... la cosa no terminó ahí, Randy, sabiendo lo del embarazo de Bárbara, le dejó una falsa carta del hospital en el buzón...

    Cuando mi hermana salió de trabajar en la revista Generations, se dirigió a mi casa y me contó la noticia del embarazo de Bárbara.

    —Troy… va a ser padre. —Al oírla me atraganté con el café, comencé a toser nerviosa.

    —¿Estás bien Elsa? —Tatiana se levantó y me dio algunas palmaditas en la espalda.

    —Tranquila, toma asiento. ¿Cómo es eso?

    —Bárbara vino a la oficina y se lo dijo, lo escuchamos todo, parece que es cierto. —Dijo con pesar, menudo problema para Troy.

    —Por tu expresión, crees que me importa, ¿verdad? —Le dije.

    —Sé que te afecta Elsa, siento lo sucedido. —Dijo sirviéndose una infusión.

    —Qué mala suerte tengo con los tíos. —Manifesté, negando con la cabeza.

    —No te desesperes, no permitas que algo así que afecte, al fin y al cabo es problema de él, no tuyo.

    —Cierto.

    Cuando Tatiana se marchó, me quedé sola con mis pensamientos, maldiciendo ni mala fortuna. Al cabo de unos minutos sonó el teléfono ¡era Troy!

    —¿Cómo estás? He pensado en ti. —Comentó con su voz honda y varonil.

    —Lógico, si me has llamado, será por eso ¿Qué quieres?

    —¿Te gustaría que quedáramos mañana? —Preguntó, me puse las manos en la cara y resoplé, no me apetecía tener más problemas.

    —No creo que sea buena idea Troy, es mejor que no volvamos a quedar.

    —¿Seguro que encontrarás otro mejor que yo?

    —¡Qué prepotente eres! Deberías pensar en tus problemas. —Dije enfadada.

    —¿A qué te refieres? Tengo un buen trabajo, la vida solucionada.

    —Si… y un bebé que viene de camino. —Hay que ir al grano.

    —¡¿Cómo es posible?! Las noticias vuelan, seguro que han sido Randy y compañía, voy a ponerme serio con ellos.

    —Qué más da, Troy, ¿no estás nervioso?

    —Qué le voy a hacer, habrá que asumir la situación. Pelearé por la custodia de mi hijo, o hija. —Dijo mientras caminaba por su enorme salón.

    —Me parece bien, veo que te estás tomando la vida de otra forma, tal y como me dijiste.

    —Entonces… ¿declinas mi invitación? He pensado que quizás podríamos cenar juntos, en algún restaurante bueno.

    —¡Ay Troy! cómo voy a negarme a un caramelo como tú. —Exclamé sonriendo.

    —Eso mismo pensaba yo de ti. No vamos a permitir que la arpía de mi ex fastidie a todo el mundo, por muy embarazada que la haya dejado.

    —Jajaja, te veré mañana.

    Al día siguiente Bárbara Drake se levantó temprano, debía presentarse en el hospital para qué le hicieran una extracción de sangre. También, llevó un recipiente con su orina. Al terminar le dijeron que tendría los resultados en menos de una semana.

    Dos días después, fue a revisar los buzones por si había alguna carta, en efecto, encontró una proveniente del hospital, abrió el sobre y lo leyó con tranquilidad:

    "Estimada señora:

    Hemos estudiado su caso, la razón es que se ha encontrado algo inusual. No debe preocuparse por la criatura, nacerá sin problemas, sana y salva. Pero los investigadores y genetistas están haciendo pruebas todavía, no se angustie por lo que hemos de decirle.

    Nuestros médicos han llegado a la conclusión de que se trata de un caso de hibridación o cruce entre especies. No hay ninguna ley que prohíba seguir adelante con su embarazo, podrá usted tener a su bebé sin problemas, pero los biólogos deberán hacer un seguimiento estricto sobre el desarrollo de la criatura que hay en su útero.

    Hasta ahora no se conoce ningún ejemplo de cruce entre humano y perro. Creemos que el resultado será otra nueva raza de cánido.

    Sin más, le agradecemos su atención y esperamos que su embarazo se desarrolle sin complicaciones y pueda convertirse en una feliz mamá.

    Atentamente:

    El equipo de investigaciones genéticas y control de especies exóticas."

    Al leer la carta se desmayó. Atila, ladrando, acudió en su ayuda y empezó a lamerle la cara; Bárbara despertó y dijo:

    —¡¡Tú, maldito!! ¡Tienes toda la culpa! ¿Qué vamos a hacer ahora? ¡Uff! —Se recostó mientras Atila seguía lamiéndole y se llevó las manos a la frente.

    Capítulo 1.3

    Bárbara se levantó, se metió en la ducha se

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