Al Filo De La Muerte

Por Manuel Cervera Sosa

Y vi un gran trono blanco y al que estaba sentado en l, de delante del cual huyeron la tierra y el cielo, y ningn lugar se encontr para ellos.

Y vi a los muertos, grandes y pequeos, de pie ante Dios; y los libros fueron abiertos, y otro libro fue abierto, el cual es el libro de la vida; y fueron juzgados los muertos por las cosas que estaban escritas en los libros, segn sus obras.

Y el mar entreg los muertos que haba en l; y la muerte y el Hades entregaron los muertos que haba en ellos; y fueron juzgados cada uno segn sus obras.

Y la muerte y el Hades fueron lanzados al lago de fuego. Esta es la muerte segunda.

Y el que no se hall inscrito en el libro de la vida fue lanzado al lago de fuego.

APOCALIPSIS 20:11-15

• Idioma: Español
• Editorial: Palibrio
• Fecha de lanzamiento: 10 mar 2011
• ISBN: 9781617646171

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Copyright © 2011 por Manuel Cervera Sosa.

Número de Control de la Biblioteca del Congreso:   2011921603

ISBN:                      Tapa Dura                       978-1-6176-4619-5

                                Tapa Blanda                    978-1-6176-4618-8

                                Libro Electrónico            978-1-6176-4617-1

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Esta es una obra de ficción. Los nombres, personajes, lugares e incidentes son producto de la imaginación del autor o son usados de manera ficticia, y cualquier parecido con personas reales, vivas o muertas, acontecimientos, o lugares es pura coincidencia.

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Contents

CAPITULO 1

CRUDO DESPERTAR

CAPITULO 2

MALA NOTICIA

CAPITULO 3

VIDA ¿DESPUES DE LA MUERTE?

CAPITULO 4

EL DESDOBLAMIENTO

CAPITULO 5

EL VIAJE ASTRAL

CAPITULO 6

SOLO UN SUEÑO O

UNA REALIDAD

CAPITULO 7

EL ENCUENTRO

CAPITULO 8

EL LUGAR DE LOS MUERTOS

CAPITULO 9

LAS 3 PREGUNTAS

CAPITULO 10

EL GRAN SEGADOR DE ALMAS

CAPITULO 11

EL ESCRITO DE LA VERDAD SUPREMA (PRIMERA PARTE)

CAPITULO 12

EL ESCRITO DE LA VERDAD SUPREMA SEGUNDA PARTE

CAPITULO 13

EL VIAJE DE ABNER

CAPITULO 14

EL SUPREMO PROTECTOR (PRIMERA PARTE)

CAPITULO 15

EL SUPREMO PROTECTOR SEGUNDA PARTE

CAPITULO 16

EL NUEVO NACIMIENTO

CAPITULO 17

YO SOY

CAPITULO 18

LA RESTAURACIÓN

CAPITULO 1

CRUDO DESPERTAR

Otro día más ha pasado y continuo postrado en esta cama de hospital, he perdido la noción del tiempo, ya no sé cuantos días llevo en este lugar, me parece una eternidad; Pero creo que apenas ha pasado un mes. Pareciera como si viviera de nuevo toda mi vida todos los días, veo lo que he sido y lo que hice una y otra vez. Es una experiencia tan extraña, tan surrealista, que no se si estoy despierto o soñando; lo que si se es que estoy vivo, no sé cómo, pero puedo saberlo.

Toda mi familia está conmigo, mi esposa Martha, mis hijos Juan y Beto, mi madre y mis hermanos están con migo. Ellos creen que no puedo sentir nada ni darme cuenta del mundo que me rodea, que no oigo, ni tengo conciencia: como solía decir estoy en estado vegetal. Pero de una forma muy extraña puedo percibir todo lo que me rodea, oigo las pláticas a mi alrededor; aunque no puedo abrir los ojos puedo darme cuenta de la gente que me rodea, es como si pudiera ver el aura de la gente, o algo parecido. Pero no puedo moverme ni manifestarle a los míos que estoy vivo. Es desesperante esta situación, mi propio cuerpo se ha convertido en mi prisión.

Claramente oigo al doctor López, conocido como chato, el neurólogo de turno; le dice a mi familia que mi función ventilatoria está deteriorada, que ya no estoy oxigenando de manera adecuada y retengo dióxido de carbono, presentando cuadro de acidosis respiratoria, presento periodos de apnea peligrosos; por tal motivo voy a requerir ventilación asistida para aminorar el daño cerebral que ya tengo.

Este chato siempre con sus tecnicismos, por eso los pacientes no le entienden, parece que no le he dicho que se ponga al nivel de los pacientes. A pesar de que no puedo ver, percibo que ni mi mujer ni mi madre entienden una palabra de lo que dice: solo tiene que decir que ya no puedo respirar y necesito que me conecten a un respirador para que no me ahogue. Pero todo lo complica.

¡Necesito ventilación mecánica! Tan mal estoy… no puedo creerlo. Que rápido me estoy deteriorando, quien hubiera imaginado que yo, uno de los neurocirujanos más prestigiados del país, estaba al borde de la muerte.

Parece que fue ayer cuando estaba en la escuela, recuerdo mi boda, mi primera cirugía, ¡Por Dios ¿qué me está pasando?! ¡Por qué me está pasando esto a mí! Todo fue tan repentino.

Recuerdo cuando comenzó esta pesadilla. Estaba en quirófano realizando una cirugía magistral cuando sucedió; estaba de pie cuando súbitamente sentí una descarga eléctrica desde mi cerebro hasta mis pies, una corriente que corrió por toda mi médula espinal, perdí las fuerzas y me desvanecí. Cuando desperté estaba en esta cama, postrado, débil, no sentía las piernas; apenas sentía los brazos, los cuales casi no podía mover. ¡Estoy cuadripléjico!(pensé) Pero qué carajo pasó; no me pudo dar una embolia, me cuido mucho, hago ejercicio y como saludable; además tengo cincuenta y dos años, no soy un joven, pero nunca he tenido problemas cardíacos, no padezco de colesterol alto. ¡No, embolia no fue! ¡Una hemorragia cerebral! No puede ser, nunca he padecido de presión alta, ni tengo problemas de coagulación… no, hemorragia no es.

Será que padezco de epilepsia. No… Me di un golpe en la cabeza, seguramente es una contusión; si eso es. En unos días estaré como nuevo, listo para seguir adelante, unos meses de rehabilitación y listo. Chispas tendré que mover todas mis citas; rayos las cirugías pendientes, le diré a mi secretaria que me las reprograme; yo digo que en un mes ya estoy al cien. Voy a tener que trabajar marchas forzadas para reponer el tiempo perdido.

Pensaba ingenuamente, pero después Carlo me puso al tanto de mi situación. Al recordarlo es como si lo viviera de nuevo.

— Buenas tardes Raúl qué bueno que ya despertaste,—Carlo ¿qué paso? creo que me pegué duro en la cabeza, no pude terminar la cirugía.—No te preocupes Raúl; Chatito me ayudo, todo salió bien.—Que pena con la señora Lukester. ¿No hubo problemas con los familiares?—No, ellos entendieron lo que te pasó. La señora Lukester paso a verte antes de darla de alta.—¿Qué dijiste Carlo? ¡Si ella iba a estar un varios días ingresada! ¿Cuánto tiempo llevo postrado?—Pasaste una semana inconsciente.—¿Qué? ¡Una semana! no es posible, si fue como un segundo; ¿qué me paso? Carlo, ¿qué tengo? !Siempre he sido una persona sana¡ ¿cómo es posible?.

— Doctor Toraines que bueno que despertó, ya hasta estábamos pensando que se nos había ido, pero yo sabía que iba a regresar.—Chavelita, que gusto me da verte—Ay doctor, todo el personal de enfermería lo hemos cuidado muy bien, que bueno que despertó, le doy mil gracias a Dios que nos lo devolvió—gracias Chave, solo estaba cansado y me eche una siestecita es todo—pues a que siestecita doctor; pero qué bueno que ya está mejor. Ahora regreso, le voy a marcar a doña Marthita para decirle que ya despertó; se va a poner contentísima, la pobre esta acá todo el día, ella y los muchachos. Bueno ahorita regreso.—Gracias Chave. Carlo ¿qué me paso? ¿Qué tengo? Dime la verdad.

— Raúl, tienes un tumor en el tallo cerebral que esta comprimiendo a nivel del mesencéfalo; es una variedad rara, Ya que está haciendo metástasis por toda la corteza y el cerebelo.—Pero ¿cómo es posible? !nunca tuve molestias! han de estar equivocados, no es posible.—Lo sé Raúl, pero así es. Ya te hicimos miles de pruebas y es verdad; el tumor es maligno, de rápida metástasis; y el problema es que es inoperable. Esta ampliamente arraigado al tallo cerebral, esta comprimiendo todas las estructuras mesencefalicas y del bulbo. Operarte seria matarte; es un milagro de Dios que hayas despertado. Ya vino el oncólogo a valorarte, pero como pensamos que no ibas a despertar no se te aplico quimioterapia. Perdón Raúl, pero no sabíamos si ibas a despertar. Ayer tuvimos reunión para valorar tu caso, Juan dijo que no tiene objeto darte quimioterapia; la metástasis es amplia, ya invadió toda la corteza cerebral y algunas áreas del tálamo, hipotálamo y las cortezas cerebelosas están completamente invadidas. La probabilidad de que despertaras era mínima, ya no se te iba a dar reanimación en caso de que cayeras en paro respiratorio. Tu esposa y tus hijos ya estaban preparados. Incluso se estuvo valorando la posibilidad de donar tus órganos, ya que la metástasis está localizada solo en el cerebro y no ha afectado ningún otro órgano.—¡Hooo por Dios! ¿Cuánto tiempo me pronostican de vida?—Pues si iniciamos la quimioterapia y la radioterapia intensiva, unos ocho meses a un año y medio; pero lo más seguro es que quedes en estado vegetal en menos de un mes. La verdad es un milagro que estés despierto de nuevo.—¡Hooo por Dios! Carlo ¡dime que es una broma, dime que no es cierto, es una broma pesada de los muchachos!¡ verdad!. Voy a quedar bien, todavía tengo mucho que vivir.—Raúl esto es muy difícil para mí, tú siempre fuiste un gran amigo y mi colega, esto me ha caído como un balde de agua fría; tú eres como mi hermano, quisiera poder decirte que todo está bien, pero no es así.—¡Hooo nooo, nooooo! ¡Voy a morir Carlo, voy a morir!—Raúl no te pongas así, vamos a reunir al comité médico nuevamente; vamos hacer hasta lo imposible, vas a vivir, te lo juro por mi vida.

— ¡Raúl, mi amor despertaste, no puedo creerlo!—¡Martha! Que gusto me da verte.—¡Papa despertaste, es increíble¡ pensamos que no ibas a despertar ¡es un milagro!—¡Betoo, hijo déjame te abrazo! Te extrañe mucho. ¿Dónde está Juacho?—Esta trabajando, ya le dijimos y viene en camino.—Flaco, que susto nos pusiste mi vida; pensamos que te nos ibas a ir, pero yo sabía que regresarías; no me podías dejar amor, recuerdas que estaríamos juntos hasta el fin del mundo. Carlo te dije que iba a quedar bien, te dije que se iba a recuperar, despertó; seguramente Dios destruyo el tumor. Ves Carlo, Dios existe, curo a mi marido.—Si Martha es un milagro; tenemos que iniciar las pruebas de nuevo para ver si se deshizo el tumor. Con su permiso los dejo, voy a decirle al director para reunir al consejo médico y revalorar tu caso, tenemos que hacer nuevas pruebas e iniciar el tratamiento. Te vas a poner bien Raúl, te lo prometo.—Ves Raúl, Dios existe y hace milagros te lo dije.

Si claro, Dios existe. Pobre Martha, siempre creyendo en fantasías; si Dios existiera no hubiera permitido que me pasara esto. Pero cómo le decía a mi mujer que iba a morir de todas maneras y que no había ningún milagro; solo fue casualidad que despertara, una casualidad medica. Así como aquel hombre que sobrevivió después de un balazo en la cabeza sin ninguna secuela y le dio el crédito a Dios, en vez de agradecerme a mí, que yo lo opere y le salve la vida; claro cómo si Dios hubiera bajado a operarlo. Y al niño que le pegó la pelota de base ball y se le hizo una hemorragia cerebral, murió con solo cinco años: Si Dios existiera no hubiera salvado a un maleante drogadicto y dejado morir a un pequeño niño de cinco años. Por eso, Dios no existe, solo las cosas pasan. Pero no podía desalentar a Martha la cual tenía mucha fe en Dios. Además no fue necesario demostrarle la verdad a mi esposa, los resultados de los nuevos estudios hablaron por si solos.

Todavía recuerdo la cara de frustración de Carlo cuando tuvo los resultados de los nuevos estudios.

CAPITULO 2

MALA NOTICIA

Ese día estaba con toda mi familia, estaba cansado, pues al día siguiente de mi despertar se me realizaron muchos análisis; fue un martirio ya que los medios de contraste para los estudios son muy dolorosos y molestos, pero en fin, eran necesario; pues como había despertado, lo más seguro es que los estudios anteriores estaban errados o por azares del destino la tumoración estaba cediendo terreno. Lo que importaba es que, aunque estaba muy agotado de los procedimientos, me sentía un poco mejor. Estaba con mi familia en espera de una respuesta favorable, pues a pesar de los pronósticos ya me estaba sintiendo un poco mejor; aunque la movilidad no había mejorado. Me sorprendió mucho que Carlo llegara en presencia de Ignacio, el director del hospital, y mas me sorprendió la noticia.

— Buenas tardes. Raúl es un gusto tenerte despierto. Carlo y yo estuvimos analizando los resultados junto con el equipo de neurología y llegamos a una conclusión; pero creo que es mejor que Carlo te de la noticia.—Ignacio un gusto en saludarte también. ¿qué buenas me traes Carlo? Espero que esa cara sea porque estas estreñido y no por los resultados.—Mira Raúl no sé cómo decirte esto, pero los resultados no fueron alentadores. Bueno… El tumor no disminuyó, al contrario, ha ganado terreno se ha extendido más, de una manera extraña el tumor ha invadido áreas selectivas del cerebro que te producen un estado de bienestar; la zona epéndimaria ha aumentado su actividad por lo tanto el bienestar es engañoso. Las funciones motoras y sensitivas se continuarán deteriorando; pero no vas a tener muchas molestias. Aunque el pronóstico es el mismo que te había comentado.—Raúl iniciaremos la quimioterapia hoy mismo, atacaremos con todo esa tumoración, haremos todo lo posible.—Gracias Ignacio. Carlo ¿cuánto tiempo tengo de vida?—pues a cinco años: es del cinco por ciento y a un año del veinte por ciento.—¿cuánto esperas que viva?—Pues con la quimioterapia y radioterapia, unos trece meses pueden ser mas o pueden ser menos; lo malo es que también iras perdiendo las funciones corticales progresivamente hasta quedar en estado de coma en unas tres a cuatro semanas. Lo siento mucho Raúl.

— Raúl, señora Toraines, aunque el pronóstico sea desfavorable hay que tener fe, los milagro suceden; el que hayas despertado es uno de ellos. Así que hay que esperar lo mejor.—Gracias doctor Ruiz, yo se que Dios va ha hacer el milagro. Carlo yo se tu y tu equipo harán lo mejor que puedan.—Claro Martha, de eso no tengas duda. Con su permiso voy a hacer los preparativos para iniciar la quimioterapia.—Yo también los dejo, con su permiso.—Propio, Ignacio gracias por todo.—Mi amor no te preocupes, vas a ver que Dios no va a permitir que quedes en coma, vas a estar con nosotros consiente por muchos años.

Pobre Marta tantas ilusiones que tenía, solo pude estar consiente unos días y después caí en este terrible estado. Hubiera sido mejor no haber despertado, que haber estado consiente unos días y después quedar en coma, al menos puedo agradecerle a su Dios que fue como caer en un sueño, no hay dolor. Me he desmejorado más rápido de lo previsto; creo que ha sido por las quimioterapias. Quisiera que ya no me las pusieran, no sirven de nada y siento que me estoy degenerando a paso acelerado; pero no tengo manera de decirles que ya no me las pongan. No puedo hacer nada, no pudo hablar, no puedo moverme, ni siquiera puedo abrir los ojos. Es extraño, la sensibilidad vuelve a mí poco a poco; pero de una manera extraña, es como si sintiera nuevamente, pero de forma distinta. Es como si toda mi vida hubiera estado en un traje espacial o de buzo y apenas ahora pudiera empezar a sentir de verdad y que comienzo a sentir fuera de este traje; como si mi cuerpo fuera un traje viejo, pero no puedo moverlo. Creo que el tumor está afectado mi sensibilidad, ha de ser algo como el síndrome de enclaustramiento. Pero no es solo la sensibilidad, también puedo oír las conversaciones a mi alrededor, aunque de una forma extraña. No oigo con mis oídos sino con la mente, es como si pensara las conversaciones externas en mi mente; lo más seguro es que sea el tumor que está afectando mi corteza y por tal motivo todo lo que siento son alucinaciones.

Pero ¿cómo es posible? Puedo escuchar claramente las conversaciones del exterior, distinguir las voces; es más oigo como se están preparando para colocarme una cánula traqueal y conectarme a un respirador artificial. El doctor Reyes, encargado de terapia intensiva, está preparando todo. ¿Cómo es posible que yo este alucinando eso? está pasando, me van a conectar a una máquina para que continúe con vida.

Están metiendo el laringoscopio en mi boca, hasta puedo sentir el sabor del metal. ¡hhhggggrrr! La cánula, la están introduciendo en mi tráquea es muy doloroso, lo bueno es que el doctor Reyes es un experto en este procedimiento, casi no me dio molestias. ¡Pero que estoy diciendo! ¡Soy un vegetal, se supone que no debo de sentir nada de esto! ¡Es mas, no debería de estar consiente! ¿Por qué? Puedo sentir todo esto. Algo anda mal, el tumor no puede hacerme alucinar cosa semejante.

O alomejor no he perdido la sensibilidad del todo, posiblemente algunas funciones sensitivas están conservadas, quizá no se han dañado del todo mis cortezas asociativas. Lo más seguro es que tengo un síndrome de enclaustramiento. Puedo oír como platican Carlo y el doctor Reyes.

— No se Suárez, Toraines está muy mal, para que le hacen al cuento si ya tiene muerte cerebral, es por de mas tenerlo acá.—Lo sé Reyes, pero la vez pasada despertó y si hubiéramos hecho algo desde el principio ahora ya estaría mejor. Si se le hubiera dado la quimioterapia a tiempo tal vez se hubiera podido resecar el tumor.—Pues si Suárez, pero antes no tenía el daño que tiene ahora, el tumor ya le comió el cerebro, ya no tiene remedio.—Hay que hacer todo lo posible, te imaginas que fueras tú, Toraines no te hubiera dejado morir.—Eso sí, el siempre fue un buen colega y amigo, es lo menos que se merece; además no tenemos la vida comprada, a cualquiera nos puede pasar algo así.—Y ¿cómo se encuentra de la función respiratoria?—Bien, ha tolerado bien el ventilador y los patrones cardiacos están excelentes. Si la falta de oxigenación es por falla de los movimientos torácicos; seguramente por lesión en los núcleos respiratorios cerebrales. Porque con el ventilador los patrones hemodinámicos están normales, el era una persona muy sana, es una verdadera tragedia lo que le pasó.—Crees que sea candidato para donación de órganos.—Pues hay si tiene que decir Juanito el onco, por los riesgo de metástasis extra cerebrales.—El dijo que los órganos están íntegros, la metástasis está limitada al sistema nervioso central, ya que ni la médula, ni el sistema nervioso periférico tiene metástasis.—Es cuestión de que traigas al transplantólogo y le quitamos todos los órganos, ni anestesia va a necesitar, el hombre es un vegetal.

¿Qué dijo? Que soy un vegetal, como es atreve a decir eso, estoy acá, estoy vivo, hasta puedo oír todo lo que dicen; como se atreve a decir que soy un vegetal, el hecho que no pueda moverme, ni hablar, no significa que esté en estado vegetativo. Pero que estoy diciendo, no puedo moverme, no puedo abrir los ojos, no puedo hablar; Dios mío verdaderamente soy un vegetal… pero ¿cómo puedo enterarme de todo lo que pasa en el exterior? de una manera distinta, pero puedo oír y sentir todo. Por todos los Cielos, no existe el estado vegetativo, que equivocado he estado. Cuantos errores he cometido con tantos familiares. Lo que más siento es el error que cometí con aquel pequeñín, no lo puedo olvidar; destruí una familia por mi ignorancia.

CAPITULO 3

VIDA ¿DESPUES DE LA MUERTE?

— Doctor ¿cómo esta mi papá?—¿En qué cama esta tu papá?—En la cuarenta y cinco A.—Ay hijito, tu papá está muy mal, el padecía de presión alta y no se cuidaba, por eso tuvo un sangrado dentro de su cerebro y el sangrado le destruyó parte importante de su cerebro; por lo que tu papi está en coma.—Pero ¿se va a recuperar?—No lo sé hijo, hay que esperar a ver como evoluciona, pero puede ser que sí.—Y ¿cuándo va a despertar?—No lo sé hijo, puede ser hoy o puede ser en uno o dos años, o a lo mejor nunca despierte.—¿Nunca va a despertar?—Pues no lo sé, es una posibilidad, hay que esperar.—Y ¿qué pasa con su espíritu?—Jajaja, pero hijo, el espíritu no existe, es solo un invento de los supersticiosos. He operado a muchas personas y jamás he encontrado un espíritu, por eso te digo que son puros cuentos.—Entonces ¿qué pasa con la gente cuando se muere?—Pues dejan de existir, así como los árboles o los animales.—Y ¿cómo dice en la Biblia, que cuando mueres te vas al cielo si eres bueno o al infierno si eres malo?—Jajaja, hijito eso es mentira; es algo que inventan los religiosos para asustar a las personas, para que vayan a misa y den sus limosnas. Es lo que inventa la gente ignorante acerca de un mundo que no comprende.—Entonces una vez que se ha muerto uno se acabo todo.—Así es amiguito, es