Descubre millones de libros electrónicos, audiolibros y mucho más con una prueba gratuita

Solo $11.99/mes después de la prueba. Puedes cancelar en cualquier momento.

Un destino común
Un destino común
Un destino común
Libro electrónico108 páginas32 minutos

Un destino común

Calificación: 0 de 5 estrellas

()

Leer la vista previa

Información de este libro electrónico

En las intenciones más inocentes, la poesía es una averiguación, un viaje, una celebración, una aventura, un descubrimiento; al mismo tiempo que ello, cuando miramos desde algún reverso, la poesía es un camino para regresar, pero… ¿de dónde se regresa y qué hay allí? La mejor sustancia en la poesía de Hugo Hodelín responde ambas preguntas. El tono calmado, la distancia emocional, la ironía, el lenguaje propio de conversación corresponden al acto de regresar, cuando ya muchas construcciones frágiles han quedado detrás. Lo imagino con las manos en los bolsillos, viene silbando, como un muchacho. Si tiene sed, bebe (hay un río cerca). Si tiene hambre, come (de los árboles rodeantes cuelgan frutas). Si tiene sueño, se tiende a descansar y luego continúa: escribiendo, haciendo incisiones, raspando la piel a las cosas, la gente, la época, el país, a sí mismo. ¿Qué es lo que se deja detrás? ¿Qué es la poesía? Escribir, silbar, leámoslo.
IdiomaEspañol
EditorialRUTH
Fecha de lanzamiento30 abr 2024
ISBN9789591023285
Un destino común

Relacionado con Un destino común

Libros electrónicos relacionados

Poesía para usted

Ver más

Artículos relacionados

Categorías relacionadas

Comentarios para Un destino común

Calificación: 0 de 5 estrellas
0 calificaciones

0 clasificaciones0 comentarios

¿Qué te pareció?

Toca para calificar

Los comentarios deben tener al menos 10 palabras

    Vista previa del libro

    Un destino común - Hugo Hodelín Santana

    Sortilegios nominativos

    Quisiera llamarme

    William Carlos Williams

    o

    Langston Hughes

    o

    Fernando Pessoa

    pero me llamo Hugo Hodelín

    lo que me hace llano y tributable

    de la manera que se hace todo

    lo llano y tributable.

    Ese es mi blasón

    mi complicidad

    mi estandarte

    mi escudo familiar.

    Pude haberme llamado Pepe

    o no haberme llamado

    y en mi glosario nocturnal

    me repito una y mil veces

    Alberto, Románico, Saúl, Francisco, Bruto, Antonio,

    Gilberto, Ricardo, Paúl, Enrique, Carlos, Wenceslao,

    Arquímedes y etc.,

    los etcéteras de nombres

    que pude haber o no haberme llamado

    y a la hora de firmar lo que escribo

    escribo sin falta ortográfica Hugo Hodelín (aclaro con H)

    aunque

    una vez soñé

    llamarme

    sencillamente

    William Carlos Williams

    o

    Langston Hughes

    o

    Fernando Pessoa.

    Una reflexión mientras asciendo de manera sinuosa la calle contreras

    Las democráticas luces de la calle Contreras

    iluminan por igual

    a la viciosa y a la moralista

    al cuerdo y al loco

    a los ilustrados y los analfabetos

    al corrupto y al honesto

    al ladrón y al policía

    al solvente y al desarrapado

    al disoluto y al virtuoso

    al albañil y al arquitecto

    al niño y al anciano

    a la puta y a la anciana virgen

    al basurero y al funcionario

    al de derecha y al de izquierda

    a los asesinos y a los inocentes

    al extranjero y al nacional.

    Las democráticas luces de la calle Contreras

    donde existe un farol disidente que siempre está apagado

    me hacen ver en las noches de lunas vacías

    el ojo de

    ¿Disfrutas la vista previa?
    Página 1 de 1