Descubre millones de libros electrónicos, audiolibros y mucho más con una prueba gratuita

Solo $11.99/mes después de la prueba. Puedes cancelar en cualquier momento.

Manual de historia del derecho. Tomo VI: De la paz firme y duradera a los esfuerzos por preservar el estado de derecho
Manual de historia del derecho. Tomo VI: De la paz firme y duradera a los esfuerzos por preservar el estado de derecho
Manual de historia del derecho. Tomo VI: De la paz firme y duradera a los esfuerzos por preservar el estado de derecho
Libro electrónico487 páginas6 horas

Manual de historia del derecho. Tomo VI: De la paz firme y duradera a los esfuerzos por preservar el estado de derecho

Calificación: 0 de 5 estrellas

()

Leer la vista previa

Información de este libro electrónico

Esta obra, dividida en seis tomos, desarrolla la historia del derecho en Guatemala desde una visión analítica del jurista, es decir, a través de una lectura crítica de las normas jurídicas decretadas en el país en relación con el contexto histórico (estructuras sociales, políticas y económicas) y los procesos específicos circundantes al momento de su emisión.

El sexto y último tomo inicia con una descripción de los sucesos representativos en torno a la firma de los Acuerdos de Paz y sus contenidos (reformas constitucionales, instituciones y normativas jurídicas), durante el Gobierno de Álvaro Arzú, en 1996. Luego, se hace una exposición de generalidades, planes de gobierno, logros, decretos y crisis de los mandatos del siglo XXI: el de Alfonso Portillo, Óscar Berger, Álvaro Colom, Otto Pérez Molina, Alejandro Maldonado y, para finalizar, Jimmy Morales.
IdiomaEspañol
Fecha de lanzamiento30 ene 2023
ISBN9789929543966
Manual de historia del derecho. Tomo VI: De la paz firme y duradera a los esfuerzos por preservar el estado de derecho

Relacionado con Manual de historia del derecho. Tomo VI

Libros electrónicos relacionados

Derecho constitucional para usted

Ver más

Artículos relacionados

Categorías relacionadas

Comentarios para Manual de historia del derecho. Tomo VI

Calificación: 0 de 5 estrellas
0 calificaciones

0 clasificaciones0 comentarios

¿Qué te pareció?

Toca para calificar

Los comentarios deben tener al menos 10 palabras

    Vista previa del libro

    Manual de historia del derecho. Tomo VI - Sandra Denisse Salguero Ruiz

    PortadaPortadilla

    Índice de contenidos

    Portadilla

    Legales

    Presentación

    Tomo VI. Capítulo I. La paz firme y duradera, gobierno de Álvaro Arzú Irigoyen

    Capítulo II. Construcción hacia una nueva democracia. Los gobiernos del siglo XXI

    MANUAL DE HISTORIA DEL DERECHO

    TOMO VI

    DE LA PAZ FIRME Y DURADERA A LOS ESFUERZOS POR PRESERVAR EL ESTADO DE DERECHO

    Edición, 2021

    Universidad Rafael Landívar, Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales.

    Universidad Rafael Landívar, Editorial Cara Parens

    Se permite la reproducción total o parcial de esta obra, siempre que se cite la fuente.

    D. R. ©

    Universidad Rafael Landívar, Editorial Cara Parens

    Vista Hermosa III, Campus Central, zona 16, Edificio G, oficina 103

    Apartado postal 39-C, ciudad de Guatemala, Guatemala 01016

    PBX: (502) 2426 2626, extensiones 3158 y 3124

    Correo electrónico: caraparens@url.edu.gt

    Sitio electrónico: www.url.edu.gt

    Revisión y diagramación por la Editorial Cara Parens.

    Las opiniones expresadas e imágenes incluidas en esta publicación son de exclusiva responsabilidad de los autores y no necesariamente compartidas por la Universidad Rafael Landívar.

    Primera edición en formato digital: marzo de 2023

    Versión 1.0

    Digitalización: Proyecto451

    Presentación

    En la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la Universidad Rafael Landívar, la investigación constituye uno de los ejes transversales de las carreras que se imparten, este se integra en el proceso de enseñanza-aprendizaje ampliando la concepción y rol pedagógico, de acuerdo con los nuevos paradigmas educativos, constituyendo un prototipo que es utilizado para enfatizar la educación. Dicho eje, como los otros tres: la ética, los derechos humanos y la responsabilidad social recorren en su totalidad el currículo y articulan en forma sistémica y holística todas las disciplinas y asignaturas de las carreras de la Facultad.

    Considerando el enfoque de la educación por competencias que aplicamos en la Facultad, la competencia investigativa para nosotros constituye la integración de saberes: conocimientos, habilidades, valores y actitudes para la solución de los problemas del entorno, en nuestro caso, mediante la aplicación del proceso de investigación formativa con enfoque cualitativo.

    La investigación formativa es una dinámica de la enseñanza-aprendizaje en la Facultad, que permite la formación y el desarrollo desde el inicio de nuestras carreras de esa competencia investigativa, buscando brindar respuestas a los problemas que se afrontan, dado que la formación en ese aspecto es de vital importancia en los aprendizajes de las profesiones, tanto en las ciencias jurídicas y sociales como en la investigación criminal y forense, cuyas carreras se ofrecen en esta unidad académica de la Universidad.

    Como resultado de todo este proceso formativo, se presenta el Manual de historia del derecho, en seis tomos, que son escritos por los propios estudiantes, cuyas autorías se citan en estos; editados y publicados sobre diferentes temáticas que abordan la realidad desde diversas perspectivas para explicarla, describirla, comprenderla e interpretarla y posteriormente transformarla; todos bajo la asesoría de profesionales conocedores de la temática. Lo anterior, dentro del contexto de la línea de investigación de la Facultad, cuyo título genérico es: «Derecho, desarrollo e innovación», que incluye elementos tanto de las áreas de derecho público, derecho privado, como del área de ejes transversales y en la cual se trabaja la citada competencia investigativa en el estudiante. Constituye, por lo tanto, una forma de procurar en ellos y ellas inquietudes, plantear interrogantes, tratando de resolverlas y aportar soluciones que generen desarrollo en las ciencias sociales que, sin lugar a duda, producen en los autores un impacto para su futuro quehacer profesional.

    Ejemplo de ello lo tenemos con el Manual de historia del derecho que presentamos, constituido por seis tomos con aproximadamente más de dos mil páginas; cada tomo es una progresión de periodos de la historia universal del derecho, que culminan con la historia del derecho guatemalteco. Para logarlo, se seleccionaron a estudiantes destacados del curso de Tesis I, quienes durante los años 2019 y 2020 desarrollaron el tema que les fue designado.

    El presente Manual de historia del derecho explica la realidad de las fases institucionales a través de las cuales ha transitado el derecho, especialmente en nuestro país. La historia del derecho, como lo definen algunos autores, es la disciplina destinada a estudiar los sistemas jurídicos del pasado y su evolución respectiva. Se propone conocer las estructuras políticas, sociales y económicas que cada comunidad ha tenido en las distintas etapas de la existencia, tal como lo indica Ricardo Zorraquín Beccú, es: «Saber cómo eran los sistemas, cómo funcionaban, sus transformaciones y de qué manera resolvían sus problemas», (1) definición que describe muy bien el presente manual, que es una combinación de dos ciencias: la historia y el derecho. La primera, que se integra por el conjunto de hechos, acontecimientos, eventos y sucesos vividos desde los orígenes hasta determinado momento y el segundo, constituye el ordenamiento jurídico que regula las relaciones establecidas en el Estado o entre estos; procura por regular la convivencia social, por lo tanto, es el instrumento que norma la vida de la colectividad. Las dos materias se integran recíprocamente, permiten conocer el pasado, analizarlo y reflexionar sobre aspectos positivos y negativos; destacando los hechos jurídicos sobresalientes en cada etapa histórica, para encontrar siempre áreas de oportunidad que beneficien a la colectividad. Al dar lectura al manual, podemos establecer que ni el derecho ni la sociedad han sido iguales a través del tiempo, siempre han estado sujetos a los cambios, a las transformaciones y a la evolución, elementos que, por consiguiente, configuran la historia.

    Sabemos que todos los criterios de división de la historia son relativos, en función del enfoque metodológico que sustente la discusión; para el desarrollo del presente manual, se inicia con la historia del derecho en la antigüedad y el derecho prehispánico, la preindependencia, la Independencia y la Revolución de 1871, el constitucionalismo social, el proyecto liberal, los gobiernos liberales y el Régimen Conservador (1885-1920), el constitucionalismo social, el período revolucionario; el período contrarrevolucionario y los gobiernos dictatoriales, el proceso de restauración del sistema democrático, hasta la construcción de una nueva democracia y los gobiernos del siglo XXI, los aspectos específicos y en detalle los encontramos en el índice y en el desarrollo de cada capítulo.

    Como puede notarse, aporta conocimientos sobre los acontecimientos sociales, económicos, políticos, culturales y religiosos de la historia, y su incidencia en el sistema jurídico nacional, para que podamos comprender lo que ocurre en el presente, y como indicáramos, buscar cómo mejorar el sistema jurídico guatemalteco para que sea justo, equitativo e independiente, a efecto que se constituya en un instrumento para los cambios que la sociedad requiere; teniendo presente siempre, que el derecho representa el mecanismo óptimo para el ordenamiento social que garantice la democracia en el país.

    No podemos dejar de mencionar, que si el derecho es la vida humana objetivada y un producto cultural; además, evidencia un hito histórico, considerándose también todo lo relativo a la influencia del poder del derecho en una época y en sociedad; asimismo del poder que se ejerce muchas veces sobre el derecho; sin dejar de destacar que este es un instrumento básico de los Estados; es un mecanismo autónomo del poder mismo, que como veremos, está presente en las distintas etapas de la historia jurídico-política de Guatemala, elementos que se desarrollan en las investigaciones que forman el corpus del presente manual.

    Respetamos el criterio de cada uno de los autores de los temas abordados en el manual que, en la fase formal correspondiente, fueron revisados por los asesores asignados. Les agradecemos a ellas y ellos y a todos los profesionales que intervinieron en la obra, en particular a la Mgtr. Elizabeth García-Bauer, coordinadora de este y al Mgtr. Francisco Golom Nova, director del Área de Ejes Transversales de la Facultad, por la dedicación, entrega y responsabilidad en la coordinación de la investigación realizada y sobre los criterios que sentaron la disposición de los hechos ocurridos, con lo cual se logró se hiciera realidad este manual y fuera presentado, precisamente, en la conmemoración de los 200 años de Independencia de nuestro país, acontecimiento emancipador que marcó el rumbo de una nueva nación y, por lo tanto, tuvo una incidencia destacada en el sistema jurídico.

    Agradecemos también el especial apoyo de la Editorial Cara Parens de nuestra Universidad, que asumió el reto editorial de acompañar esta obra; también deseamos patentizar nuestro reconocimiento al generoso apoyo de Prensa Libre, quien nos facilitó acceso a consultas de su archivo hemerográfico y el uso de algunas fotografías que consideramos referentes de la memoria nacional.

    Esperamos que el resultado de la investigación formativa de nuestros estudiantes cumpla su objetivo, que las y los lectores tengan una visión retrospectiva de la historia del derecho de nuestro país y que ese esfuerzo contribuya a que todos esos hechos del pasado encuentren un camino y un sentido, que la utilicemos para discernir sobre la realidad actual en Guatemala y mejorar su futuro.

    Dr. Rolando Escobar Menaldo, decano

    Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales

    Guatemala, 2021

    1. Zorraquín Becú, Ricardo. Historia del derecho argentino, tomo I. Buenos Aires, Argentina, Editorial Perrot, 1978.

    TOMO VI

    Capítulo I

    LA PAZ FIRME Y DURADERA, GOBIERNO DE ÁLVARO ARZÚ IRIGOYEN

    Sandra Denisse Salguero Ruiz
    Carmen María Gutiérrez de Colmenares (asesora)

    Sumario

    1. GOBIERNO DEMOCRÁTICO DE ÁLVARO ARZÚ IRIGOYEN

    1.1 Antecedentes 1.1.1 Fin del gobierno transitorio 1.1.2 Elecciones generales 1995-1996 1.2 Partido de Avanzada Nacional (PAN) 1.2.1 El PAN desde sus inicios 1.2.2 Principios e ideología 1.3. Programa de gobierno

    2. CONSTRUCCIÓN DE LA PAZ FIRME Y DURADERA

    2.1 Generalidades 2.1.1 Proceso de paz 2.1.1.a Prenegociación 2.1.1.b Negociación 2.1.1.c Llegada a un acuerdo 2.1.1.d Implementación efectiva 2.2 Antecedentes 2.2.1 Conflicto armado interno 2.3 El proceso de paz guatemalteco 2.3.1 Marco regional: Procedimiento regional en Centroamérica (1983-1987) 2.3.2 Etapa preparatoria o de prenegociación: Establecimiento del diálogo nacional y el diálogo con diversos sectores (1989-1991) 2.3.3 Negociación: URNG, ejército y gobierno de Guatemala (1991-1996) 2.4 Proceso de paz durante el gobierno de Álvaro Arzú 2.4.1. La crisis en la URNG y la firma de la paz firme y duradera

    3. CONTENIDO DE LOS ACUERDOS DE PAZ FIRMADOS DURANTE EL GOBIERNO DE ÁLVARO ARZÚ IRIGOYEN

    3.1 Acuerdos sustantivos 3.1.1 Acuerdo sobre aspectos socioeconómicos y situación agraria 3.1.1.a Contenido del acuerdo i. Democratización y desarrollo participativo ii. Desarrollo social iii. Situación agraria y desarrollo rural iv. Modernización de la administración pública y política tributaria 3.1.2 Acuerdo sobre el fortalecimiento del poder civil y la función del ejército en una sociedad democrática 3.1.2.a Contenido del acuerdo i. Sobre los compromisos legales y constitucionales adquiridos por el Estado 3.2 Acuerdos operativos 3.2.1 Acuerdos sobre el definitivo cese al fuego 3.2.2 Acuerdo sobre reformas constitucionales y régimen electoral 3.2.3 Acuerdo sobre las bases para la incorporación de la URNG a la legalidad 3.2.4 Acuerdo sobre cronograma para la implementación, cumplimiento y verificación de Acuerdos de Paz 3.2.5 Acuerdo de Paz Firme y Duradera 3.3. Comisiones derivadas de los Acuerdos de Paz firmados en 1996

    4. LAS REFORMAS CONSTITUCIONALES, INSTITUCIONES Y NORMATIVAS JURÍDICAS DESTACABLES

    4.1 Generalidades 4.2 Sobre las reformas constitucionales 4.2.1 Iniciativas de propuestas de reformas constitucionales 4.2.1.a Organismo Ejecutivo 4.2.1.b Saqb’ichil-COPMAGUA 4.2.1.c Comisión Multipartidaria de Reforma Constitucional (IM) 4.2.2 Sobre la aprobación de las propuestas en el Congreso 4.2.3 Sobre los temas abordados por la reforma constitucional 4.2.3.a Nación y derechos sociales 4.2.3.b Reformas al Organismo Legislativo 4.2.3.c Reformas al Organismo Ejecutivo 4.2.3.d Reformas al Organismo Judicial 4.2.4 Proceso de consulta popular 4.3 Instituciones y normativas jurídicas destacables 4.3.1 Sobre la creación de la Ley General de Telecomunicaciones, Decreto Número 94-96 del Congreso de la República 4.3.1.a Contexto de su creación 4.3.2 Ley General de Electricidad, Decreto Número 93-96 del Congreso de la República de Guatemala 4.3.2.a Contexto de su creación 4.3.3 Normativas e instituciones derivadas de la reforma tributaria 4.3.3.a Generalidades 4.3.3.b Sobre la reforma tributaria 4.3.3.c Sobre la creación de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) 4.4 Principales decretos emitidos por el Congreso de la República

    5. Colofón

    Anexos

    Referencias

    Capítulo 1

    Gobierno democrático de Álvaro Arzú Irigoyen

    1.1 Antecedentes

    1.1.1 Fin del gobierno transitorio

    Después de la renuncia del presidente Jorge Serrano Elías y del vicepresidente Gustavo Adolfo Espina Salguero, consecuencia de diversos sucesos inconstitucionales, el 4 de junio de 1993, la Corte de Constitucional convocó al Congreso de la República, concediéndole un plazo de veinticuatro horas para elegir al nuevo presidente y vicepresidente de la República. Derivado de ello, fue Ramiro de León Carpio quien quedó electo y juramentado como presidente constitucional. (2)

    El papel desempañado como procurador de los Derechos Humanos y la imagen que proyectaba a la sociedad como un hombre honrado y capaz de ejercer el cargo de presidente y liderar al país fueron las razones principales de su elección. (3) Fue, pues, un presidente que contó con alto nivel de aceptación por parte de la población al tomar posesión; no obstante, diversos analistas señalaron que unas de las principales fallas de su gobierno fue la ausencia de experiencia en el manejo de los asuntos de Estado y de apoyo partidista de carácter oficial, pues no contaba con un equipo propio que le permitiera realizar su labor de forma eficiente. (4)

    La popularidad del nuevo presidente descendió de forma drástica al considerar que su administración era ineficiente en la práctica y no mostraba resultados concretos. Como consecuencia del descontento popular, la presión de diversos sectores y la mediación de la Iglesia católica, se llegó a un acuerdo en el Congreso de la República, en el cual se definió un paquete de reformas constitucionales. Dentro de dichas reformas, se incluyeron varias disposiciones transitorias, las cuales obligaban a la elección de un nuevo Congreso de naturaleza transitoria. (5)

    Como resultado de las elecciones del congreso, el Movimiento de Acción Solidaria (6) (MAS) quedó sin representación; la Democracia Cristiana Guatemalteca (DCG) obtuvo trece curules y queda Alfonso Portillo como jefe de bancada. Si bien estos partidos obtuvieron resultados adversos, fueron otros dos partidos que salieron favorecidos, al ser estos los nuevos favoritos del electorado, modificando así el balance de fuerzas dentro del Congreso: el Frente Republicano Guatemalteco (FRG) obtuvo treinta y tres curules, ocupando uno de ellos Efraín Ríos Montt. Por otro lado, el Partido de Avanzada Nacional (PAN) logró un total de veinticuatro bancas. (7)

    Fueron, pues, estos dos partidos quienes se vislumbraban como fuertes contendientes para las elecciones siguientes. Según afirma la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (Asíes), durante el período de Ramiro de León Carpio, los partidos políticos aprovecharon el carácter transitorio del gobierno para prepararse para las elecciones generales de 1995, dejando a un lado sus responsabilidades legislativas (8), lo cual repercutió de forma negativa en dicha administración.

    Durante este gobierno, la cúpula de la Unidad Revolucionaria Nacional Guatemalteca (URNG) tomó la decisión de no firmar ningún acuerdo más, debido a que se trataba de un gobierno de transición, considerado débil y con poca legitimidad política. (9)

    1.1.2 Elecciones generales 1995-1996

    El 20 de mayo de 1995, el Tribunal Supremo Electoral (TSE), a través del Decreto 1-95, convocó a los ciudadanos guatemaltecos a elecciones generales para elegir presidente y vicepresidente de la República para el período de 1996 a 2000, ochenta diputados al Congreso de la República por el sistema de distritos electorales y lista nacional, veinte diputados titulares y suplentes al Parlamento Centroamericano, alcaldes y demás miembros propietarios y suplentes de todas las corporaciones municipales del país, en trescientos municipios. (10) Las elecciones se fijaron para el 12 de noviembre de 1995 y, en caso que ninguno de los candidatos presidenciales obtuviera la mayoría absoluta, la segunda vuelta se previó para el 7 de enero de 1996. (11)

    Para dichas elecciones, se presentaron diecinueve candidatos a la presidencia y a la vicepresidencia, 150 candidatos a diputados para ocupar ochenta curules del Congreso de la República y 225 corporaciones municipales. (12) Según Iximulew Abya Yala, el incremento inusual de candidaturas presidenciales y de partidos políticos, así como de comités cívicos, puede interpretarse de dos formas. La primera, como el recelo de los ciudadanos hacia los partidos políticos que usualmente eran apoyados por la mayoría de la población; y la segunda, como la apertura de espacios de participación política a grupos que habían sido excluidos anteriormente. (13)

    De acuerdo con Sussane Jones, el proceso de paz empezó a sufrir el impacto directo de la dinámica de la campaña electoral. Ese año se caracterizó por la lucha política entre los partidos contrincantes, quienes emprendieron una intensa campaña electoral. Durante este año, si bien la Organización de las Naciones Unidas (ONU) siguió moderando las negociaciones de los Acuerdos de Paz, estas pasaron a segundo plano ante las elecciones de noviembre. No obstante, a mediados de 1995 se evidenció un mayor compromiso de ambas partes con la continuación del proceso de paz. (14)

    De las diecinueve candidaturas a la presidencia y vicepresidencia, destacaron las de Álvaro Arzú Irigoyen y Luis Alberto Flores Asturias, candidatos del Partido de Avanzada Nacional; las de Alfonso Portillo y Carlos Aníbal Méndez, del Frente Republicano Guatemalteco, así como las de Jorge Luis González del Valle y Juan León Arévalo, del partido Frente Democrático Nueva Guatemala (FDNG).

    El FRG giraba en torno a la figura del general Efraín Ríos Montt, quien era considerado como líder, inspirador y fundador de dicho partido. (15) En 1982, el general asumió la jefatura de Estado luego de haber provocado un golpe de Estado, lo que le impedía participar como candidato a la presidencia, pues el artículo 186 de la Constitución Política de la República de Guatemala establece claramente que «no podrán optar al cargo de Presidente o Vicepresidente de la República: a) El caudillo ni los jefes de un golpe de Estado, revolución armada o movimiento similar, que haya alterado el orden constitucional, ni quienes como consecuencia de tales hechos asuman la Jefatura de Gobierno». (16)

    No obstante, el FRG realizó varias maniobras para lograr la inscripción del general Ríos Montt, las cuales fracasaron a pesar de contar con el apoyo popular. (17) Como consecuencia de estas acciones, se generaron fuertes reacciones en diversos sectores del país. (18) Para calmar el ambiente político y legal de ese entonces, se publicó el 1 de febrero de 1995, en el Diario La Hora, el dictamen de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, con el objetivo de reforzar y recordar la sentencia de la Corte de Constitucionalidad de 1990, en la que se le denegó al general Ríos Montt el derecho a ser inscrito como candidato a la presidencia. (19)

    Debido a la situación complicada en la que se encontraba el partido, se decidió, cuando faltaba poco para cerrar el proceso de inscripción de candidaturas, designar a Alfonso Portillo, exdiputado de la Democracia Cristiana, como sucesor del general Ríos Montt. (20)

    Al igual que en el FRG, en el PAN había una figura sobre la cual se centraba el partido, la del exalcalde Álvaro Enrique Arzú Irigoyen. Esta organización se encontraba conformada en gran parte por empresarios, profesionales y diversas expresiones de las clases medias. (21) Según Carlos Sabino, al igual que el FRG, el PAN tenía una orientación de centro derecha, con la diferencia que no se encontraba ligado a los gobiernos militares pasados. (22)

    Por otro lado, el FDNG postuló como candidato a la presidencia a Jorge González del Valle, economista y presidente del Banco de Guatemala durante el gobierno de Ríos Montt, y a la vicepresidencia a Juan León Alvarado. Con ello, según señala Francisco Villagrán Kramer, «se abrió el espectro ideológico a la vieja izquierda, generando la creencia de que la participación política de la URNG ya era un hecho». (23) De tal manera que la participación de dicho partido político representó un factor importante, ya que por primera vez en cuarenta años, concurrió un partido que reunió a sectores de la izquierda que tenían vínculos con las organizaciones revolucionarias; adeptos y seguidores de la URNG, que habían pertenecido al viejo Partido Revolucionario y dirigentes de organizaciones populares. (24) Si bien el FDNG se encontraba implícitamente vinculado con la URNG, este era independiente, aunque con una fuerte influencia de esta. (25)

    El candidato a la presidencia del FDNG, según encuestas realizadas, aparecía en una quinta y novena posición; solamente pronosticaban un 1 % de intención de voto. Sin embargo, varios analistas señalaban que los resultados de las encuestas podían dar un giro inesperado, dado que el partido contaba con el apoyo del sector popular y simpatizantes de las organizaciones mayas, ya que su programa se encontraba destinado a esos sectores. (26)

    Villagrán Kramer afirma que el proceso electoral se polarizó. Tanto los candidatos del PAN como del FRG captaron la atención de los ciudadanos, teniendo que luchar en ese ambiente los otros aspirantes. (27) Las encuestas publicadas en el transcurso del año presagiaban el triunfo de Álvaro Arzú, candidato presidencial del PAN, a quien se le asignó un porcentaje tan alto de intención de voto que se consideró que no iba a ser necesaria una segunda vuelta. En segunda posición se encontraba Alfonso Portillo Cabrera, del FRG, pero siempre con una notable diferencia respecto al PAN. El resto de los candidatos no superaban más allá del 10 %. (28)

    Los autores Mayra Palencia y Fernando Valdez indican que en los últimos meses de 1995, se vivió un ambiente de tensión, dado que prácticamente todas las organizaciones empresariales del sector agrícola denunciaron un incremento en las invasiones de tierra. Ese ambiente llegó a preocupar y a generar dudas en cuanto a la celebración de las elecciones generales previstas para noviembre; no obstante, las mismas se llevaron a cabo de acuerdo a lo establecido. Asimismo, durante esta época se evidenció una proliferación de la actividad de las organizaciones sociales y de los partidos políticos, todos con el objetivo de influir en la agenda social y gubernamental. (29)

    Cabe destacar que, en la Declaración de Contadora, celebrada en Panamá el 22 de agosto de 1995, la URNG, como gesto de buena voluntad, prometió suspender unilateralmente las acciones militares durante las últimas dos semanas de la campaña electoral, con el fin de celebrar las elecciones generales de forma pacífica y facilitar el ejercicio de los derechos políticos a los ciudadanos guatemaltecos. Esto, a cambio de que los partidos políticos de más importancia se comprometieran a continuar las negociaciones de paz bajo un nuevo gobierno y a respetar los acuerdos ya firmados. Conforme a Jones, esto marcó un precedente, puesto que la clase política guatemalteca reconoció que los acuerdos negociados constituían acuerdos de Estado y que, por lo tanto, no podían ser desechados por ningún gobierno. (30)

    La Asociación de Investigación y Estudios Sociales expone que la campaña electoral fue intensa y prolongada; los partidos políticos, al no tener un oficialismo al cual dirigir sus críticas (dado que, como se menciona anteriormente, una de las principales fallas del gobierno de Ramiro De León Carpio fue la ausencia política como del apoyo partidista de carácter oficial), entablaron más bien una batalla de «todos contra todos». (31)

    Según confirmaron los medios de comunicación y reafirmaron los observadores internacionales, las elecciones generales se celebraron con normalidad, sin alteración de resultados, pese a haberse producido un corte de energía eléctrica en los primeros minutos del día siguiente. (32)

    Los resultados de la elección presidencial fueron los siguientes: 585 393 votos (36.50 %) para Álvaro Arzú Irigoyen y Luis Alberto Flores Asturias, porcentaje inferior a los pronósticos e insuficiente para ser declarados presidente y vicepresidente de la República. Un total de 341 364 votos (22.04 %) para Alfonso Portillo Cabrera y Carlos Aníbal Méndez Cabrera; 200 393 votos (12.94 %) para Fernando Andrade Díaz-Durán y Lizardo Arturo Sosa, y 119 305 (7.70 %) para Jorge Luis González del Valle y Juan León Alvarado. Luego, 80 761 (5.21 %) para Acisclo Valladares Molina y Daniel Agustín González Estrada. Finalmente, con una cifra menor a sesenta mil votos, se encontraban los otros catorce candidatos. (33)

    Los resultados obtenidos evidenciaron que la población guatemalteca favorecía a los candidatos civiles sobre los militares, con excepción de Alfonso Portillo, quien era públicamente apoyado y respaldado por Efraín Ríos Montt, exgobernante militar. (34)

    El resultado electoral confirmó, posteriormente, las sospechas suscitadas con base en los datos arrojados por las encuestas. Una vez realizada la primera vuelta, se determinó que únicamente el PAN y el FRG podían disputarse la presidencia de la República. Durante esta nueva contienda, el candidato del PAN, Álvaro Arzú Irigoyen, mantuvo una ventaja sobre el candidato del FRG, Alfonso Portillo. (35)

    Manuel Villacorta afirma que entre ambos partidos no existen grandes diferencias ideológicas, puesto que los dos «se ubican dentro de una concepción ideológica que puede oscilar entre un conservadurismo (36) hasta un liberalismo restringido, para el léxico periodístico, ambas instancias, tanto el PAN como el FRG, se ubican en la derecha guatemalteca». (37)

    Como ninguno de los candidatos obtuvo mayoría absoluta, la segunda vuelta tuvo lugar el 7 de enero de 1996, tal y como se había previsto, en la que obtuvo Álvaro Arzú 671 354 votos y Alfonso Portillo, 639 404 votos. Además, se contabilizaron 52 647 votos nulos y 5423 en blanco, sobre un total de 1 368 828 sufragios, es decir, 36.88 % de asistencia de los ciudadanos guatemaltecos. (38)

    De acuerdo con los datos obtenidos por el Tribunal Supremo Electoral, Alfonso Portillo triunfó en casi todos los departamentos del país, a excepción de Guatemala, El Progreso y Jalapa. Sin lugar a duda, fue el departamento de Guatemala el que le dio la victoria a Álvaro Arzú, con un total de 282 840 votos, mientras que Portillo obtuvo 151 382, existiendo una gran diferencia entre ambos. Es por ello que el candidato a la presidencia del FRG afirmaba que «Arzú era Presidente de Capital y él, del resto del país». (39)

    Los dos partidos que quedaron validados para participar en la segunda vuelta electoral utilizaron distintas estrategias. Por un lado, el PAN centró su estrategia en la búsqueda de alianzas en diversos sectores, lográndose así un contacto directo entre el candidato del PAN y la URNG; hasta cierto punto, existió una especie de negociación entre ambos. Esto generó resultados positivos, ya que se creó un clima de confianza, con la que el PAN obtuvo una imagen de apertura e inclusión. Por otro lado, el FRG buscó gestar alianzas con los otros partidos políticos. Además, hizo uso del discurso populista para ganar simpatizantes y atraer votantes. (40)

    De esta forma finalizó el período extraordinario y transitorio de Ramiro de León Carpio, cuyo gobierno recibió un país que había sido azotado por las repetidas crisis económicas y de seguridad pública. (41)

    De manera sintetizada, en dada elección, la ciudadanía eligió a cuarenta y tres diputados del PAN, veintiuno de FRG, seis del FDNG (42), cuatro de la DCG, tres de la UCN, dos de la Unión Democrática y uno del MLN. Los candidatos a la presidencia y vicepresidencia, Arzú y Flores, contarían, según los resultados obtenidos, con un gran apoyo por parte del Congreso, lo que les permitiría gobernar con tranquilidad. (43)

    En la segunda vuelta, según afirma Villacorta, se evidenció un alto porcentaje de abstencionismo (63.12 %) y pudo observarse una diferencia mínima entre los dos partidos contrincantes. Asimismo, señala que el partido ganador se constituyó como la primera fuerza política nacional al poseer la mayoría de las alcaldías municipales, la mayoría de diputados en el Congreso de la República, así como en el Parlamento Centroamericano. (44) Esto, además de contar con una excelente relación con el poder económico, representado por el Comité Coordinador de Asociaciones Agrícolas, Comerciales, Industriales y Financieras (Cacif). (45)

    Por lo tanto, según lo manifestado por varios analistas políticos, la victoria del PAN representó un precedente en la historia contemporánea guatemalteca (46), ya que se presentó la primera oportunidad política para los empresarios de participar abiertamente en la dirección del Estado. Esto quedó evidenciado en los nombramientos de funcionarios vinculados con el Cacif y corrientes de pensamiento empresarial, que apostaban por la modernización de la economía del país. (47)

    Villacorta manifiesta que, por fortuna, las elecciones generales se celebraron de forma pacífica, puesto que estas presentaron bajos niveles de violencia, tanto ideológica como física, lo cual fue inesperado, tomando en consideración la historia que había vivido el país desde 1960. Asimismo, indica que otro aspecto significativo de las elecciones lo constituye la presencia de la izquierda en los procesos electorales, sin hacer uso de violencia. Esto se interpreta como la buena voluntad de adaptarse a los cambios contemporáneos y la flexibilidad del sistema de los actores tradicionales que históricamente han sido intolerantes. (48)

    1.2 Partido de Avanzada Nacional (PAN)

    1.2.1 El PAN desde sus inicios

    El antecedente del Partido de Avanzada Nacional (PAN) es el Comité Cívico Electoral «Plan de Avanzada Nacional», formado en 1985 para participar en la elección de la alcaldía del municipio de Guatemala. El comité cívico participó en las elecciones municipales en dicho año: Álvaro Arzú fue el candidato a la alcaldía, quien obtuvo el triunfo para el período de 1986-1991. Por lo tanto, se puede afirmar que este partido surge sobre una plataforma municipalista. (49)

    Es indudable que el núcleo del PAN lo constituyó Arzú desde sus inicios, quien se dio a conocer como director general del Instituto Guatemalteco de Turismo (Inguat) a finales de la década de los setenta y posteriormente como candidato a la alcaldía del municipio de Guatemala. Así lo dejó ver Luis Flores Asturias al afirmar que: «al hablar del PAN, podemos decir que creció alrededor de una figura carismática como Álvaro Arzú, que por la confianza y credibilidad que generaba como joven personalidad pública, produjo la entrada a la política partidista de muchos profesionales de clase media». (50)

    Este partido se creó por un grupo de empresarios y profesionales que decidieron involucrarse en la actividad política, asumiendo un compromiso político partidista ante el deterioro que el sistema político había sufrido Guatemala en los años setenta. (51) No obstante, Flores Asturias señala que el partido se conformó principalmente por profesionales de clase media, y no por empresarios. La extracción empresarial de Álvaro Arzú fue utilizada por los opositores de forma malintencionada, con el fin de difundir la idea de que el PAN era manejado por el

    ¿Disfrutas la vista previa?
    Página 1 de 1