Descubre millones de libros electrónicos, audiolibros y mucho más con una prueba gratuita

Solo $11.99/mes después de la prueba. Puedes cancelar en cualquier momento.

Por entre el arpa y la saudade
Por entre el arpa y la saudade
Por entre el arpa y la saudade
Libro electrónico225 páginas3 horas

Por entre el arpa y la saudade

Calificación: 0 de 5 estrellas

()

Leer la vista previa

Información de este libro electrónico

Por entre el arpa y la saudade es un retrato poético de las gentes de Galicia, el retrato de un pueblo y una época. La Galicia rural y la urbana aparecen retratadas, no sin cierta crítica, por un viajero que es ante todo poeta. Y como poeta recorre la tierra de Bradomín en un homenaje a Valle-Inclán, los caminos del Ulla, Pontevedra o los caminos, tierras y paisajes que pisara Rosalía de Castro. Más que un libro de viajes, Gonzále-Alegre lo consideró un «libro de apuntes sobre hombres, tierras, paisajes y caminos gallegos». Este, como reconoce González-Alegre, no es un viaje al uso. Es su viaje, el de una persona vitalista que ama la tierra que describe y que se deja llevar para pisar caminos poco transitados. Su viaje es un periplo interior. El lector reconocerá a través de sus textos una Galicia casi olvidada. Posiblemente nadie ha descrito y cantado a esta tierra del modo en el que lo hace González-Alegre en esta obra llena de poesía, de fácil lectura. El lector no tendrá problemas en dejarse llevar por la prosa lírica del autor, por su cultura, por su vitalidad y por su ironía. «Mi querido amigo: Acabo de cerrar tu libro Por entre el arpa y la saudade… Te ha salido un hermosísimo libro, de prosa muy limpia, profunda y de andadura noble. [...] Por entre el arpa y la saudade es uno de los más hermosos libros de viajes que he leído en muchos años sobre España...» (Ramón de Garciasol)
IdiomaEspañol
EditorialAlhenamedia
Fecha de lanzamiento28 sept 2023
ISBN9788418086441
Por entre el arpa y la saudade

Relacionado con Por entre el arpa y la saudade

Libros electrónicos relacionados

Viajes para usted

Ver más

Artículos relacionados

Comentarios para Por entre el arpa y la saudade

Calificación: 0 de 5 estrellas
0 calificaciones

0 clasificaciones0 comentarios

¿Qué te pareció?

Toca para calificar

Los comentarios deben tener al menos 10 palabras

    Vista previa del libro

    Por entre el arpa y la saudade - Ramón González-Alegre Bágoma

    cover.jpg

    alhena literaria

    Por entre el arpa

    y la saudade

    (Hombres y tierras de Galicia)

    Ramón González-Alegre

    Por entre el arpa y la saudade

    (Hombres y tierras de Galicia)

    PRÓLOGO DE Francisco Bargiela Fernández

    © del texto, 2023 by Herederos de Ramón González-Alegre

    © del prólogo, 2023 by Francisco Bargiela Fernández

    © de la imagen de cubierta, 2023 by Herederos de Ramón González-Alegre

    © de esta edición, 2023 by Alhenamedia

    Edición a cargo de Francisco Bargiela

    Director de la colección: Víctor Bargiela

    Diseño: Juan Bonamusa y Sónia Castro (actualización)

    Composición: Alhenamedia

    ISBN: 978-84-18086-44-1

    Publicado por:

    Alhenamedia

    Rabassa, 54, local 1

    08024 Barcelona

    Tel.: 934 518 437

    alhenamedia@alhenamedia.info

    www.alhenamedia.info

    Primera edición: octubre de 2023

    Reservados todos los derechos.

    Ningún contenido de este libro podrá ser reproducido,

    ni total ni parcialmente, sin la autorización previa

    y por escrito de los titulares del copyright.

    Prólogo

    Apuntes biográficos sobre

    Ramón González-Alegre Bálgoma¹

    Ramón González-Alegre nació

    en la señorial Villafranca del Bierzo el 30 de noviembre de 1919, en la famosa calle del Agua. Aunque sus padres tenían su residencia habitual en A Coruña, llegado el momento del parto, su madre, doña Julia Bálgoma Carbajal, ante los continuos viajes de su esposo (era capitán de la marina mercante), decidió trasladarse al Bierzo para ser atendida por su padre, médico de profesión.

    Pasó los primeros cuatro años de su vida y parte de su juventud en Villafranca del Bierzo, donde nacieron y vivieron Gil y Carrasco, Ramón Carnicer, Antonio Pereira, Dalmiro de la Bálgoma, Cristóbal Halfter... Fue el tiempo suficiente para que esta ciudad se le clavara en el alma. Al Bierzo y a Villafranca dedica el primero de sus libros de poemas, Clamor de Tierra, y uno de los más logrados, Los Manantiales. Villafranca es la «Zarandona» descrita en La cabeza; aquí se desarrolla toda la acción de Las arañas, de La ciega de Carucedo y casi toda su obra teatral. En El Bierzo se refugiaría los últimos años de su vida.

    «Desde niño, tiempo de mi infancia,

    cuando la impronta del Bierzo se me clavó

    ya para siempre, tengo el sabor de mi calle

    en el sereno gozo de vivir, en el afán de

    existir, en el anhelo de retornar.»²

    En 1924 Ramón se traslada junto con su hermano y su madre a A Coruña. Entra por primera vez en contacto con el mar y, de una forma permanente, con su padre, ausente en los momentos más importantes de los primeros años.

    Dos años más tarde, la familia se muda debido al trabajo de su padre a Vilagarcía de Arousa. Allí comienza sus estudios primarios en compañía de su hermano Manolo; allí pasa sus años mozos, y allí inicia los primeros cursos de bachillerato.

    Si la etapa coruñesa no es de mucha transcendencia en la vida y obra de Ramón, Vilagarcía dejará una gran huella, llegando a confesarse en varias ocasiones «arosano de nacimiento». El Auto do virapé (1953) está dedicado por completo a esta tierra.

    Corre el año 1933 y la familia González-Alegre-Bálgoma se traslada de nuevo. Esta vez a Vigo, donde Ramón acabará el bachillerato. En 1935 comienza el primero y único año de Filosofía y Letras en la Universidad de Santiago de Compostela, que abandona para iniciar Derecho presionado por la familia. Tiempo suficiente para entrar en contacto con jóvenes escritores y realizar sus primeros pinitos literarios.

    Iniciada la Guerra Civil, se alista como voluntario en el cuerpo de Aviación de La Virgen del Camino (León). El intenso frío leonés le obliga a abandonar el ejército y regresar a la casa familiar en Villafranca del Bierzo.

    Terminada la guerra, retoma sus estudios de Derecho en Santiago, que compagina con la escritura de sus primeras obras extensas y algunos cuentos: La cabeza, Las arañas…

    En 1943 se traslada a Madrid para realizar el doctorado y aspirar a la cátedra de Historia de Derecho. Durante estos años colabora con el Consejo Superior de Investigaciones Científicas, escribe los poemas narrativos Los breves años y La tierra de Arosa, y publica algunos textos de carácter jurídico. Y surge el amor. Aprovechando que su hermano Manolo debe acabar el último curso de Derecho en Valladolid, en una de sus visitas reconoció a María de los Ángeles Burgueño Cela, quien pasaba sus veranos infantiles en Villafranca del Bierzo. Se casan el 4 de julio de 1947 en Valladolid.

    Pasada la luna de miel, instalan su domicilio en A Coruña, donde Ramón trabajaría para alguna compañía aseguradora recomendada por su padre y ejercería la abogacía. Dedicación que apenas le dura año y medio, aunque perteneció al Colegio de Abogados hasta 1967. Gana la Literatura, lo que creó ciertas tensiones en el seno de la familia, pero siempre contó con la ayuda de su familia y de María de los Ángeles, su gran soporte.

    «¡Abogado!, Sí, soy abogado

    en la ciudad de las oscuras leyes. ¡Bello título!

    ¿Pero sabes, amor, a cuánto asciende mi ruina?

    ¡Al odio de las leyes de los hombres! […]»³

    En A Coruña, en la calle Picabia, 31, aparecería en 1948 el primer número de la revista Alba. La revista y la familia se mudarían a Vigo ese mismo año. Vigo era por aquel entonces la ciudad con mayor movimiento literario de toda la región gallega. Aquí, Ramón González-Alegre entra a formar parte de la élite y de la nueva generación de poetas gallegos. La revista Alba, uno de los principales vehículos de difusión de la literatura gallega en los años posteriores a la guerra, alcanza aquí su madurez y etapa más floreciente. González-Alegre ingresa en la Academia Gallega como Miembro Correspondiente el 26 de marzo de 1949.

    Entre 1950 y 1951, González-Alegre publica sus dos primeros libros de poesía: Clamor de tierra y Raíz de las horas. Si bien el primero pasó casi desapercibido para la crítica, no así el segundo, editado por la revista Espadaña, que recibió elogios, entre otros, de Gerardo Diego y Dámaso Alonso.

    Su labor creativa ya no se detendría hasta su prematura muerte en 1968, pero su vida cambiaría en 1954 con la publicación de Poesía gallega contemporánea, una obra imprescindible en la literatura gallega del momento, pero que le supuso recibir un anónimo casi diario. González-Alegre ya no se encuentra a gusto en Galicia. Viaja continuamente para refugiarse en Madrid o El Bierzo.

    «Cuando tuve que hacer una antología poética de un país que amo entrañablemente, me hube de echar las manos a la cabeza ante la poca, escasa renovación, la poquísima adhesión de los poetas al tiempo nuevo. El fenómeno no debe extrañar a los átonos hierofantes del regodeo literario que se titulan críticos. Lo que más me dolió no fueron sus críticas, sino las enhorabuenas de los jóvenes por haber puesto al descubierto una poesía que, salvo excepciones estupendas, no había evolucionado.»

    Los años 1960 son años de mucho trabajo y de constante movimiento. El autor, desahuciado por los médicos, tiene prisa por vivir. A esta etapa pertenecen sus libros de viajes y la considerada como antología de la poesía de Ramón: El ágape de Dios. Sus tres últimos años de vida son muy penosos desde el punto de vista económico, pues la enfermedad apenas le deja escribir. En abril de 1968 realiza su último viaje, a Roma. Su hermano Manolo, en charla amistosa, comentaba que «Moncho murió realmente en la plaza de San Pedro, y su mujer le prohibió que se muriera en aquel lugar. ¡Cómo le iba a hacer eso! ¡Cómo la iba a dejar sola en Roma!».

    González-Alegre falleció el 14 de septiembre de 1968, el día que debía acudir como invitado al Primer Congreso de Escritores Españoles, que se celebraba en San Sebastián.

    Luís Barbeito definió a Ramón como «un hombre extraordinariamente cordial, tan cordial como su ancha humanidad, conversador afable, hombre culto y un tanto propicio a la evasión emocional e imaginativa. Poeta indisputable, y sin duda uno de los más significativos en el instante actual de la poesía española».

    La obra literaria de Ramón González-Alegre

    La obra de González-Alegre es bastante extensa, especialmente si se tiene en cuenta que murió muy joven, con apenas 49 años. Desde sus primeros poemas de juventud, publicó más de una veintena de libros, numerosos poemas, cuentos, artículos, obras de teatro y ensayo en revistas y prensa de la época. La muerte lo encontró preparando otro libro de poemas (Baladas liberales y otros poemas); dejó escritos dos libros de viajes (Memorias de un viaje a la Maragatería y Viaje al Bierzo Bajo); estaba inmerso en varios proyectos, uno de ellos junto con Antonio Pereira y Ramón Carnicer, y dejó inacabada una adaptación al teatro de La familia de Pascual Duarte.

    González-Alegre, una de las principales figuras de la denominada Generación de enlace, escribió principalmente en castellano, aunque ha dejado un libro de poemas en gallego, Os namoros, diversos poemas en este idioma dispersos por diferentes revistas y antologías (Alba, Papeles de Son Armadans, Escolma de poesía galega…), y varias obras de teatro en un intento por experimentar en un género poco utilizado en la literatura en gallego.

    Revista Alba

    Nace en 1948 en A Coruña, donde permanece hasta el número 3, que se publica en 1949 a caballo entre A Coruña y Vigo, su sede definitiva. Alba pretende desde sus inicios ser la revista de todos los poetas gallegos, independientemente del idioma empleado. Como se expresa en la introducción a la edición facsímil editada por el Centro de Investigacións Lingüísticas e Literarias Ramón Piñeiro, «Aceptouse o bilingüismo sen cuestiona-las súas circunstancias contextuais e, sen máis, a poesía en galego apareceu como integrante da poesía gallega e os escritores de expresión galega foron incorporados sen reticencias nin exclusivismos».⁶ Publicaron en ella un total de 117 escritores, 68 de ellos gallegos.

    Alba es hoy imprescindible para conocer la poesía gallega contemporánea, pues González-Alegre logró reunir en torno a ella a muchos de los grandes escritores gallegos: Xosé Luís Méndez Ferrín, Miguel González Garcés, Bernadino Graña, Fermín Bouza Brey, Álvaro Cunqueiro, Aquilino Iglesia Alvariño, Luís Pimentel, Xosé María Díaz Castro, José Díaz Jácome, Xosé María y Emilio Álvarez Blázquez, Celso Emilio Ferreiro, Pura Vázquez, Luz Pozo Garza, Ramón Otero Pedrayo, Ricardo Carballo Calero, Emilio Negreira, Manuel María, Pilar García de Fresco, Carme Kruckenberg, Antonio Rey Soto, Luís Amado Carballo, Eduardo Blanco Amor, Faustino Rey Romero, Manuel Cuña Novás… Su corpus poético de lírica gallega es la base de la Escolma de poesía galega de Fernández del Riego⁷ y de la Antología de la poesía gallega contemporánea de González-Alegre.

    «A verdade é que Galicia, a Galicia actual, débelle varias cousas importantes a Ramón González-Alegre Bálgoma. A parte dos seus propios poemas (os millores son sobre o Bierzo) e de algunhas páxinas en galego e en castelán (hai un libro seu, ben característico: Poesía gallega contemporánea) sobre Galicia e os seus escritores, debémoslle a revista Alba, revista onde se ven os nosos «pecados de xuventude», os nosos primeiros atoutiñamentos, os encollementos e medos cos que fomos renacendo galegos.»

    Poesía

    González-Alegre fue, ante todo, un poeta en constante estado de exaltación poética, como lo definió Antonio Pereira, y un gran poeta. Y como él mismo explicaría: «toda mi obra responde a etapas vitales, entendiendo por tales los momentos que causaron mayor impronta en el discurrir cotidiano de la vida».⁹ Así, encontramos una poesía llena de lirismo y color, ágil en sus primeros poemas dedicados al Bierzo, que transmuta hacia una poesía de corte existencialista.

    González-Alegre dio a la imprenta siete libros de poemas. El primero, Clamor de tierra: Poemas al Bierzo, publicado en 1950 en la colección Alba de poesía, es una invocación, un canto juvenil y sereno a su tierra berciana. Esa frescura lírica aparece de nuevo en Los Manantiales (1958), donde los paisajes del Bierzo adquieren la dimensión de lo universal. Es este un libro de madurez, de poesía pura «al estilo de Juan Ramón Jiménez»,¹⁰, nacida de la frescura de las montañas del propio poeta.

    «Los Manantiales lo mejor que conozco de usted. Manantiales con gran frescura de agua. […] Se siente a Garcilaso...» (Jorge Guillén en carta dirigida a Ramón González-Alegre, fechada en 1958.)

    Los libros de poemas anteriores contrastan con la que es considerada su primera obra de madurez y uno de los mejores libros de poesía del momento: Raíz de las horas (1951). Ramón concibe la obra como un diario íntimo, relato de momentos vividos. Asistimos a una poesía vitalista e intimista en la que el autor se encierra en sí mismo para hablar de la muerte, la guerra, la soledad, el hombre, la familia…

    «Puede considerarse que este libro es la mejor cosa que he leído últimamente, con la revelación de una poesía fantásticamente clara, y un poeta de primera condición». (Gabriel Celaya)

    «He leído y releído mil veces este libro. Su poesía interesa. Y ello le da un fuerte valor de permanencia». (Blas de Otero)

    «Es un libro de muy buena poesía apretado, metido en este momento, pero con claridad, con sencillez, con elementos poéticos puros». (Ramón Otero Pedrayo)

    «Magnífico libro, cuyos efectos en la lectura del mismo me han proporcionado horas inolvidables». (V. Aleixandre)¹¹

    Su último libro de poemas, El ágape de Dios (1964), fue considerado por la crítica del momento una antología vital, en la que queda patente la evolución poética de González-Alegre. Su hijo Alberto consideraba El ágape de Dios como una antología necesaria, urgente ante la cercanía de la muerte.

    «¡Primorísimo libro, un dos mais fermosos que tiven nas miñas mans, é o que acabo de recibir: El ágape de Dios! Non penses que fixeche nunca cousa semellante, nin é doado que a volvas a facer...»¹²

    Como afirma Xosé María Álvarez Cáccamo, la obra poética de Ramón González-Alegre necesita de una lectura y estudio minuciosos por su alta ambición e importantes resultados.¹³

    Teatro

    Ramón González-Alegre cultivó el teatro en gallego y castellano y, aunque su principal obra publicada es el Teatro galego, posiblemente su pieza más lograda sea Alda y Rosina. Como curiosidad, hay que mencionar que trabajó en una versión para el teatro de La familia de Pascual Duarte que tenía el beneplácito de Camilo José Cela, pero que quedó inacabada.

    Su teatro es, posiblemente, un intento de iniciar un camino poco transitado en lengua gallega, y menos aún, en el dialecto berciano que él utilizaba. No se puede afirmar que sea un teatro muy conseguido, quitando algunas excepciones.

    Salvo Xandra y el Retablo del mocito barbero, publicadas en Papeles de Son Armadans, la publicación del Teatro galego y Noticias de Indias fue sufragada por el propio autor.

    Su obra más importante, Teatro galego, se publicó en 1968 y consta de cinco obras. Solo una, el Auto do Virapé, fue representada. El libro fue reeditado por la Xunta de Galicia en 1993.

    Ensayo

    La revista Alba, creada y dirigida por González-Alegre hasta su desaparición en 1956, facilitó al autor el conocimiento necesario para escribir dos libros imprescindibles de la literatura gallega: Poesía gallega contemporánea. Ensayo sobre literatura gallega (1954) y Antología de la poesía gallega contemporánea (1959).

    Como explicaría Ricardo Gullón, «González-Alegre es el mejor conocedor de este instante poético a través de cuatro años de intenso batallar al frente de su revista Alba, único y bravo portavoz lírico gallego en estos años».¹⁴

    En Poesía gallega contemporánea, González-Alegre pasa revista al conjunto de poetas gallegos contemporáneos, entendiendo como tales todos aquellos poetas del siglo

    XX

    , sin ningún orden especial. Se trata de un ensayo personal, ausente de casi todo dato bibliográfico. Son conversaciones de González-Alegre con los diferentes autores, donde versa su crítica y opiniones sobre su obra.

    Esta fue, sin lugar a duda, la obra más leída y criticada del autor, especialmente en Galicia, aunque mejor valorada en el resto del país. A decir de Ramón, el

    ¿Disfrutas la vista previa?
    Página 1 de 1