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¿Cómo lo vives tú?
Es muy posible que a nivel mundial muchas personas conozcan o por lo menos hallan escuchado del conflicto que se desarrolla en Colombia, más por la tragedia del narcotráfico que por las incidencias que este flagelo nos ha generado durante más de siete décadas con los grupos narcoterroristas que solo nos han dejado sangre, dolor y muerte. Tristemente, convivimos internamente con esta realidad, pero, sin lugar a duda, todos lo vivimos de manera diferente, algunos con indolencia, desconocimiento e indiferencia, otros incluso se atreven a explotar esta desdicha a su favor, mientras el sufrimiento se concentra en unos pocos de manera anónima e inmisericorde. Después de esta lectura, sería prudente cuestionar: ¿Cómo lo vives tú?
IdiomaEspañol
Fecha de lanzamiento6 sept 2023
ISBN9788419776228
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Autor

Álvaro Mauricio Rodríguez Gómez

Álvaro Rodríguez es un colombiano nacido en la ciudad de Bogotá en el año de 1975, fruto de una familia humilde y abogado de profesión, tuvo la oportunidad de vivir en carne propia la crudeza del conflicto armado, ahora en una etapa importante de su vida, ha decidido compartirla con amigos, compatriotas y el mundo en general en este escrito para aquellos que de una u otra manera deseen conocer una historia de «ficción» que puede ser de lo más cercana a la realidad.

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    Dimensiones - Álvaro Mauricio Rodríguez Gómez

    DIMENSIONES

    ¿Y cómo lo vives tú?

    Álvaro Mauricio Rodríguez Gómez

    DIMENSIONES

    ¿Y cómo lo vives tú?

    Álvaro Mauricio Rodríguez Gómez

    No se permite la reproducción total o parcial de este libro, ni su incorporación a un sistema informático, ni su transmisión en cualquier forma o por cualquier medio, sea éste electrónico, mecánico, por fotocopia, por grabación u otros métodos, sin el permiso previo y por escrito del autor. La infracción de los derechos mencionados puede ser constitutiva de delito contra la propiedad intelectual (Art. 270 y siguientes del Código Penal).

    © Álvaro Mauricio Rodríguez Gómez, 2023

    Diseño de la cubierta: Equipo de diseño de Universo de Letras

    Imagen de cubierta: Andrea Obregón Mantecón

    Obra publicada por el sello Universo de Letras

    www.universodeletras.com

    Primera edición: 2023

    ISBN: 9788419614063

    ISBN eBook: 9788419776228

    Este trabajo lo dedico especialmente a mi madre Estefanía Gómez, quien durante toda su vida solo me enseño con su ejemplo, la dedicación a la familia y el trabajo duro para salir adelante; a mi esposa Adriana Rosero quien me da todo su apoyo incondicional, amor y respaldo; a mi hija Laura Alejandra Rodriguez, inspiración de dedicación, amor y excelencia y mi hijo Daniel Felipe Rodríguez, ejemplo del amor y consagración a lo que nos hace felices y nos llena la vida de éxitos.

    Igualmente, a todas las víctimas del conflicto armado en Colombia; civiles. militares, policías y especialmente a todos los niños y niñas que fueron y siguen siendo los más afectados con las atrocidades de unos pocos, que aprovechan su posición y violencia para abusar y explotar miserablemente sus inocentes vidas… para ellos este trabajo que les recuerde que no están solos, que siempre hay esperanza y que su tragedia, así sea el interés de algunos, nunca quedara en el olvido.

    Proemio

    Existe un cordón umbilical que ata la historia con el universo, las civilizaciones, los países, los pueblos y, por supuesto, las personas, pueden ser visibles o invisibles dependiendo de los mismos seres humanos y, en muchas ocasiones, este importantísimo lazo puede ser modificado por intereses de varios sectores o, incluso, de un pequeño puñado de individuos que, bajo argumentos, ideologías o intereses de poder, lo manipulan. Considero que uno de los errores más comunes independiente de nuestra posición social o política es emitir juicios de valor sin la adecuada y suficiente información al respecto, estos pronunciamientos superfluos pueden aportar regularmente consideraciones o reflexiones de bajo impacto, sobre todo, porque el emisor no tiene un interés genuino de generar algún efecto sustancial sobre esa realidad, otras acotaciones pueden, además, ayudar a destruir o distorsionar aún más aquellas situaciones que encarnan la desdicha de otros que consideramos ajenos y desconocidos, pero que ciertamente se encuentran en tan minúscula cercanía a tal punto que, a veces, logramos percibir esa inmisericorde barbarie en hechos aislados explotados por los medios. Sin embargo, es indudable que el factor predominante para escribir la historia es la experiencia, de modo infortunado, dependiendo de la posición del protagonista, esta puede ser expresada y compartida o, simplemente, reprimida porque su eco ante la indiferencia se diluye con rapidez.

    Yo identifico estas experiencias como dimensiones porque tan solo quien las vive las percibe y convive íntimamente con sus efectos personales y, como consecuencia, con las injerencias sobre su familia y comunidad. De esta manera, genera elementos esenciales en el desarrollo de su existencia, tenemos tantos hechos que son directos e indirectos, que nos tocan o que nos generan una reacción y, por demás, un comentario, pero que están muy lejos de marcar nuestras vidas. He querido interpretar la realidad personal e íntima de los protagonistas de esta historia, de esta realidad o, mejor dicho, de esta tragedia que al final nos afecta a todos y procurar exponer esa Dimensión que solo ellos viven y que es esquiva para la mayoría, pues su publicidad pareciera ser inconveniente para muchas personas que, sin escrúpulos, por el contrario, las explotan y aprovechan.

    Los hechos y personajes son traídos de la imaginación y fueron concebidos como tal, la forma como los miren o los traduzcan en nuestra realidad dependerá de cada uno de ustedes…

    Agradecimientos

    En su inmensa sabiduría, Dios nos da oportunidades para disfrutar de su creación, además, como actos de gentileza, de vez en cuando nos permite cumplir retos y sueños para demostrarnos a nosotros mismos que tenemos la capacidad de crear, de compartir, de trasmitir todo aquello que rebosa en nuestros corazones; gracias a él por darme la oportunidad de lograr esta meta personal y gracias a mi familia, de quien recibo amor y apoyo incondicional y que me alentó para este proyecto; ellos fueron y son los primeros en leerlo, en darme sus opiniones, comentarios y, para todo lo que venga en adelante, como siempre, serán los primeros en mi vida.

    Es mi interés hacer un reconocimiento y conmemorar todo el sufrimiento de familias enteras que soportan en carne propia nuestra tragedia nacional, está dedicada para los huérfanos, viudas, hermanos y madres que perdieron a sus hijos, muchos de ellos civiles, pero también para los militares y policías que entregaron sus vidas con vocación, totalmente convencidos de que su sacrificio aportaría a la justicia y protección de la democracia, con amor a su país y a la patria querida.

    De igual manera, un profundo agradecimiento a Andrea Obregón Mantecón, ilustradora, diseñadora y colorista española, quien consiguió plasmar con su admirable arte todo aquello que quise transmitir en este libro.

    ¡Infinitas Gracias!

    Álvaro M. Rodríguez G.

    Dimensión I

    Rosa es una pequeña y delgada niña de trece años, de cabellos negros rebeldemente ensortijados que caen sobre sus mejillas rojizas con suavidad y que, a su vez, dan un toque de color a su piel blanca. Toma con su tierna mano la perilla de una humilde puerta casi desbaratada hecha de retazos de madera, por donde se filtran las primeras luces del nuevo día que asoma entre las lejanas y profundas montañas del sur de Colombia, la empuja y se va abriendo despacio mientras los rechinos rompen mansamente el silencio de la mañana.

    Sus pies descalzos se humedecen con el rocío que aún permanece en el pasto de la pradera, perezosa, pero disfrutando la salida del sol, camina hacia sus padres, que se encuentran ordeñando una envejecida vaca que los acompaña desde hace algunos años, el balde casi lleno de leche es retirado por su padre a la vez que la madre acaricia devotamente la cabeza del animal.

    —¡Buenos días! Qué juiciosos amanecieron

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