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Airawnk: Las Capas de la Simulación
Airawnk: Las Capas de la Simulación
Airawnk: Las Capas de la Simulación
Libro electrónico230 páginas3 horas

Airawnk: Las Capas de la Simulación

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Información de este libro electrónico

En una historia estimulante y llena de giros, un grupo de científicos unidos por una aterradora estructura alienígena se convierten en la única esperanza de supervivencia para la humanidad.

Mientras Sydney intenta descifrar el código sagrado, el llamado "código de los códigos," puede aparentar ser el mayor descubrimiento de la historia. ¿Se encontrará con la verdad en las mentiras?

Mientras era un joven científico, prosperaba en sus investigaciones hasta que su vida amorosa se torció. Vive con la sensación de estar en una simulación. Todos sus esfuerzos se desviarán para exponer las diferentes capas de la simulación. Con sólo recuerdos borrosos del pasado, empieza a concienciar a los demás y a aportarles pruebas.

Personas de todos los ámbitos de la vida se han reunido en la cumbre para planificar que hacer con la estructura alienígena que se aproxima. Están condenados, huyendo, obsesionados y buscando respuestas a la mayor amenaza a la que se ha enfrentado la humanidad. Airawnk está al acecho, y nosotros somos los siguientes. ¿Puede nuestra visión salvar el futuro? La extinción masiva es el resultado si no logramos detenerlo.

A través de un extraño giro de circunstancias aparentemente coincidentes, patrones y doppelgängers, se encuentran bajo una gigantesca nube de partículas radiactivas, luchando contra un ser alienígena y siendo perseguidos por un ejército robótico que anda suelto. Con sus vidas entrelazadas, se enfrentan a un horror inminente. A menos que puedan derrotar esta amenaza, significará el fin de la humanidad.

 

IdiomaEspañol
Fecha de lanzamiento27 ago 2022
ISBN9798201802776
Airawnk: Las Capas de la Simulación

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    Airawnk - Fernando Fernandez

    Airawnk:

    Las Capas de la  Simulación

    Ciencia ficción

    Fernando Fernández

    Este libro está especialmente dedicado a mi madre, a mi familia y a todos mis fieles lectores por su apoyo incondicional.

    Copyright © 2022 Fernando Fernández

    Todos los derechos reservados.

    TABLA DE CONTENIDOS

    I. Los Fallos en la Realidad........................5

    II. Los Metamorfos..............................38

    III. Los Simetrones..............................59

    IV. El Código Secreto............................92

    V. La Conciencia y los Fractales..................116

    VI. Los Tuneles Cuánticos.......................140

    VII. Alerta Roja................................165

    VIII. El Código de todos los Códigos...............179

    IX. Airawnk...................................187

    X. La Apocalipsis de la Inteligencia Artificial.........212

    XI. Las Capas de la Simulación...................217

    Sobre el autor.................................223

    I.  Los Fallos en  la Realidad

    ¿Por qué la gente sigue con su vida como si no pasara nada? Parece que están insensibilizados. ¿No se han dado cuenta? ¿De qué, Stephen? ¡El mundo ha cambiado! Está gobernado por un sistema, y todos estamos programados para hacer nuestras cosas de una manera determinada. ¡Oh, vamos! No eres un programa en tu cabeza.  Deja de estresarte por eso. ¡Diviértete! Sí, claro. ¡También parece que no entiendes lo que está pasando! Megan, ¿no te has dado cuenta? ¿Ahora qué? ¡Un salto en el tiempo! ¿Un terremoto? No, eso no. ¡Es un salto dimensional! ¿Estás delirando? Por supuesto que no. Soy el único consciente de estos cambios tan sutiles.

    Un salto cuántico es quizás el mejor término para describir este crecimiento desproporcionado con respecto a lo que hemos hecho hasta ahora. La sociedad de posguerra ha dado saltos tecnológicos extraordinarios. Después de los trabajos de ingeniería inversa, el mundo entero cambió de repente, y no hubo una explicación clara de la procedencia de este conocimiento inesperado. Se ha convertido en una existencia en la sociedad. No es tan fácil de creer. Incluso nuestros científicos más brillantes admiten que obtienen sus ideas de sueños lúcidos, de fantásticos viajes astrales a la luz, de conversaciones en cuevas y montañas con ángeles y seres extraterrestres... Estamos en constante crecimiento y nos esforzamos por acercarnos al éxito. Para ello, debemos tener en cuenta que lo más difícil es superar nuestra propia programación y la del sistema.

    Stephen agarra el brazo de Megan y le dice: ¿Qué estás mirando? Todo está delante de ti. No puedo ver nada. Lo mismo ocurre con las simulaciones. La empuja contra la pared. Puede que vuelva a estar un poco loco. Sin embargo, son los algoritmos los que te hacen repetir las mismas acciones y rutinas. ¡Suéltame, suéltame ya! ¡Déjame ir! Me estás haciendo daño. Lo siento. No me di cuenta de la presión que estaba ejerciendo sobre ti. Estás loco.

    ¿Qué pasa cuando aceptamos que el cambio es real? De hecho, lo que ha ocurrido en las décadas de nuestra civilización ha avanzado poco en los milenios de existencia humana. Algo sucederá pronto si se hacen comparaciones. De acuerdo entonces. Espero la fusión cuántica en cualquier momento. ¿De qué estás hablando? Si fueras la Megan original, ¿me entenderías? Solamente digo que has cambiado. La evolución aleatoria y no determinista que sufre un sistema cuántico cuando se hacen mediciones esporádicas debe ser el resultado de una intervención. ¿Qué tipo de intervención? Deberíamos averiguarlo. Sin embargo, la pregunta debería ser: ¿cómo se produce este colapso y cómo medirlo?

    El término salto cuántico alude a la constatación cuando la naturaleza parece violar principios formulados de manera informal. ¿De qué se trata? La naturaleza no crea grietas ni discontinuidades. ¿Quién es el responsable de los cambios previstos? Alguien de arriba debe estar moviendo los hilos. Puede ser la explicación más plausible. ¿Para qué? Esta sensación sin sentido, que forma parte de una realidad diferente, quizás de otra dimensión. Es como una vibración cambiante o una actualización de nuestro ADN. No, no lo he percibido.  Por supuesto, ella no ha percibido nada en absoluto. Ella es parte de esta mascarada. Por eso es muy diferente en esta dimensión. Antes era tan tímida, con una personalidad encantadora y tan cariñosa. Ahora, es extrovertida, disruptiva y absolutamente descuidada.

    ¡Por favor, déjalo, Stephen! ¡Eres un tipo tan preocupante! Tienes que aprender a relajarte. Lo hago siempre que puedo. De hecho, hago ejercicio y medito todos los días. ¿De verdad? ¡Sí, Megan! Se ríe en voz alta. Parece que no sabe lo que me gusta o lo que hago. Esto es extraño. Megan responde: Yo también. Hago yoga. Si quieres, puedes acompañarme, Stephen. Gracias, es muy amable. Aunque no me gusta agacharme como un contorsionista. Deberías recordarlo. ¡No seas tonto, Steph! ¿Cómo me llamaste? ¡Te llamé Steph! Nadie hace eso, excepto mi mamá. Seguramente no soy tu mamá. ¡Muy graciosa! Su sentido del humor me está matando. Odio cuando trata de hacer un chiste de todo. No me gusta estar cerca de los payasos, especialmente cuando se ríen de nada realmente gracioso. ¿Qué has dicho? Nada, cariño. Ella me devolvió la sonrisa. Al menos la hice feliz. La quería en el universo anterior. Sin embargo, aquí es todo lo contrario. Mis sentimientos no son tan claros. A veces, incluso pienso que no me gusta en absoluto. Esto debe haber sido hecho a propósito para volverme loco. Sin embargo, esos recuerdos se suceden, como un torbellino que me lleva arriba y abajo.

    ¿Y cómo sabes que existes, Megan? ¿Cómo sé que existo? ¿Por qué me pides algo tan obvio? Si es tan obvio, seguro que puedes responderlo. Sé de mi existencia porque te estoy viendo y estoy respirando. En resumen, tengo mil sensaciones como consecuencia de estar aquí ahora. Parece un buen argumento. Sin embargo, en un sueño, también puedes respirar y ver a tu alrededor. Por lo tanto, tienes todas las mismas sensaciones que al despertar. Aunque ninguna de ellas sea real. En consecuencia, no puedes confiar en tus sentidos, ya que podrían estar engañándote, puesto que en un sueño no puedes apoyar tu existencia en las sensaciones que percibes con tu cuerpo. Imagina Stephen que te caes al agua de un barco. No sabes nadar. Te sumerges una vez, dos veces, y siempre pataleas y sales a la superficie por instinto para buscar una bocanada de aire. No lo ves. Sin embargo, está ahí y es lo que respiramos. No me digas que no existe. Si el sol no existe, vete al desierto, o vete al ártico; tus sentidos no te engañarán. Sabemos lo que amenaza nuestra existencia y reaccionamos instintivamente ante ello. Programado o no, el riesgo está ahí.

    ¿Y si no se puede dar un argumento con base empírica, tiene que ser un argumento racional? Sí, efectivamente. Sin embargo, vamos a hacerlo más interesante. Ahora, Megan, imagina que hay un genio del mal, una divinidad, un alienígena superavanzado o un ser de otra dimensión. Como prefieras, este ser nos hace creer que todos los argumentos racionales son verdaderos, aunque no lo sean. Por ejemplo, convencernos como unas simples operaciones matemáticas son incorrectas cuando no lo son. Es decir, no puedo hacer un argumento empírico porque mis sentidos me engañarán, pero tampoco puedo hacer un argumento racional porque el genio también me engañará. ¿Por qué supones que alguien se va a tomar la molestia de controlar a más de siete mil millones de seres humanos extremadamente complicados? Es realmente absurdo y contraproducente. Un ser con semejante desarrollo mental y tecnología diseñaría un programa, un algoritmo con inteligencia artificial o algo más avanzado para tales fines y se limitaría a observar cómo nos destruimos o construimos algo mejor como civilización.

    Con las manos atadas, ¿cómo crees que voy a resolver la cuestión de si existo? ¿Qué estás buscando, Stephen? Busco un primer principio inamovible para mi filosofía, y creo que lo tengo. Ahora seguiré con mi argumentación; como bien dices, no puedo hacer una argumentación empírica, puesto que dudaría de si mis sentidos me engañan, ni tampoco puedo hacer una argumentación racional, ya que dudaría de si un genio del mal o alguna divinidad me engaña. Parecería que no podría estar seguro de nada con esas restricciones. Sin embargo, si hay algo de lo que no puedo dudar es simplemente que estoy dudando. Por tanto, si estoy dudando, estoy pensando, y si estoy pensando, como resultado, existo.

    Este razonamiento también puede utilizarse a la inversa. Tú no existes, Stephen. Demuéstramelo. Ya ves que todos tus argumentos son inútiles y únicamente  quieres acorralarme con silogismos y frases tan rancias como la ciencia oficial, así que déjate de peroratas filosóficas tan antiguas, con una lógica algo superada por la ciencia. Las limitaciones de nuestros sentidos han sido compensadas por nuestra tecnología. ¿Estamos más cerca de demostrar si existe o no la simulación? Es posible, más que nunca, en la historia de la humanidad. Ya me has dado la razón. Te reto a golpear esa pared. Si esto es una simulación y tú no existes, ¡no te dolerá! Sin embargo, Megan, eso es irracional. Claro, como todos tus argumentos, y si te doliese, será solamente una percepción de tu tacto y tu sistema nervioso. El dolor existe. Sin embargo, el sufrimiento no. ¿Cómo es eso? El sufrimiento es una creación de nuestra mente.

    La simulación puede existir en entornos concretos tan reales como la pared, Stephen. Por ejemplo, el sol, la luna y otros. No implica la eliminación de las estructuras de hormigón. Imprimimos en 3D con materiales concretos para convertir algo abstracto de nuestra pantalla, un concepto o una idea en una realidad alternativa, diferente. Incluso hemos impreso órganos y partes funcionales para nuestro cuerpo. Lo único que se necesita es el material genético para tales fines. Pasan de la ilusión o la mente a la creación. Lo mismo ocurre con la fabricación de cíborgs, robots, androides, mascotas robóticas e inteligencia artificial. Hay una fina línea entre la simulación y la realidad, los videojuegos y los entornos virtuales; lo abstracto y lo concreto están más allá de la percepción humana.

    A veces solo hay que hacer creer a los demás que uno sigue con su programación y que la monotonía y el aburrimiento no le alteran; al contrario, son sus compañeros habituales que no le distraen del trabajo y los asuntos familiares. Estas historias de gente común pueden seguir haciéndoles pensar que eres un ciudadano respetuoso de la ley y parte de la población ordinaria. Eso les entretiene mientras consigues tus verdaderos objetivos, desenmascarar el sistema de este mundo falso. Cuando no estamos durmiendo, vivimos en modo de estrés o supervivencia. Esto representa aproximadamente dos tercios de nuestra vida. Cuando estamos dormidos, que es un tercio de nuestra vida, estamos tranquilos y en una vibración muy diferente. Podemos reprogramarnos minutos antes de dormirnos por la noche y por la mañana temprano, unos minutos después de despertarnos. Nuestro subconsciente puede ayudarnos a reprogramarnos de una manera mejor. ¿Ha oído hablar alguna vez del efecto Mándela? No, no lo he hecho. ¿Por qué? Algunos creen que este efecto es una prueba de la existencia de múltiples dimensiones en el universo. ¿Cómo ha cambiado todo? La situación actual es muy diferente. Desde hace tiempo, cada vez más personas viven experiencias similares en varios continentes. Es más, están ocurriendo muchas cosas extrañas, especialmente en todo el mundo. ¡Nuestra situación personal es falsa! ¡Esto es infalible! Esta evidencia está inmersa en otra dimensión. Hay múltiples casos que validan mis premisas. Tenemos que comunicarnos con los Saltadores dimensionales a través de videollamadas. Nuestro primer caso está listo. Aquí está Alex. Hola, ¿cómo estás? Bien, gracias por dejarme compartir mi experiencia. No diré más. ¿Qué pasó? Estaba en un supermercado cuando un hombre que quería vender billetes de lotería se me acercó y me dijo: ¡Tengo su número de matrícula, el 8! Sin embargo, mi número de matrícula es el 20. Llevo mucho tiempo con ese número. ¿Es este su vehículo? Sí, justo delante de usted. Es un todoterreno azul metálico. ¿Cómo pude olvidarlo? Se me hizo raro ir hasta allí y asegurarme que el tipo tenía razón. ¡Esto es una barbaridad! ¡Cálmate! Me dijo: ¿Me compras un billete?" No le contesté y me alejé aturdida. Era como si alguien hubiera tocado mi tesoro más preciado, algo muy privado que ahora no recordaba. Miré el documento de registro y efectivamente era un número nuevo. ¿Cómo había cambiado? Era como estar en una dimensión desconocida. El segundo caso es más extraño. Hola, ¡bienvenida Adria! Hola, gracias por la consideración de mi caso. ¿Qué te ha pasado? Después de comer, me eché una siesta. Fue un fin de semana ajetreado y estaba un poco cansada del trabajo. ¿A qué te dedicas? Soy modelo y actriz. ¡Qué bien! Lo que pasó después me desconcertó. Me desperté un poco tarde, miré el reloj y vi eran 30 minutos antes de ir a dormirme. Comprobé la hora en otros relojes, e incluso en Internet. Y no entendía cómo era posible. ¿Cómo se puede saber la hora cuando uno se ha quedado dormido? Así pues, me fui a descansar al final de una llamada, y la hora quedó registrada en mi teléfono. Se puede ver aquí. No puedo cambiar eso. Por supuesto que no. Todos en la casa estaban tan asustados como yo.

    Hace unos años, un gigantesco acelerador de partículas abrió un agujero negro, activó el correspondiente agujero de gusano y planetas enteros fueron succionados a otra dimensión, provocando que el tiempo pase más rápido y los días sean más cortos cada año. Todo esto es el centro de todo tipo de especulaciones inimaginables.

    Un experimento de física de partículas que parecía ir bien en 2012 coincide con el final del calendario maya, cuando el cataclismo apocalíptico se convierte en una simple transición a otra dimensión, un salto cuántico sin terremotos ni groserías. Algo ha cambiado. Pensé que eran puras teorías conspirativas y que no tenían ningún valor científico. Los matices de ambos mundos se desarrollan y aumentan día a día. De hecho, provocaron cambios significativos en nuestro universo, inclinando el eje planetario y acelerando la sensación de calor global más de lo previsto", dijo. Usted no lo notará. Sin embargo, su trabajo depende de ello. Se basa en el estudio de la materia cuántica y subatómica; en consecuencia, se centra en observar cómo los astrónomos ven las estrellas. La existencia de subpartículas atómicas facilita la exploración del multiverso, los agujeros negros, la materia oscura, la energía oscura, las dimensiones alternativas, los reinos espirituales o los mundos desconocidos.  Son libres de fantasear hasta donde nos lleve la imaginación. Este deseo de alcanzar otras realidades no tiene por qué estar asociado a lo espiritual, ya que está entrelazado con la materia. Un salto en la ciencia más allá del simple reconocimiento de la realidad física alterada o distorsionada. Acceder y experimentar el mundo físico real directamente a través de un cuerpo físico es simplemente un ejemplo de lo inmersivas que pueden ser las interfaces de simulación. Si es así, ¿cuál es la diferencia entre creer en algo y vivirlo? ¿Qué te impide cambiar tu situación actual? Bienvenida al Salto Cuántico, Megan.

    Quizá lo más inquietante de esta revolución científica cuántica no sea su comportamiento caótico y casi imprevisible. Si no su deseo de romper con la simulación haciendo algo tan simple como el efecto Mándela: es un sentimiento. El cambio. Es la separación personal y emocional de lo que nos rodea. Porque lo que se percibe como realidad es únicamente  una estructura mental. Ese salto a otro nivel es para aquellos que quieren llegar a un mundo más inteligente, más libre y más completo, para poder hablar con los animales, mejorar su físico, mejorar su salud, y más.

    Megan pregunta: ¿Qué sabes de la técnica del espejo? Consiste en mirarse reflejado en una superficie hasta cruzar el umbral y comenzar a verse al otro lado del espejo. ¿Es posible? No lo sé. Nunca lo he probado. No des por sentado que lo que publica la gente al azar en las redes sociales es cierto. Tiene razón. Aunque puede ser factible. También hay una manera de transferir líquidos entre dos contenedores. Pasas de la ciencia a la magia. Sí. Creo que sí. ¿Han cambiado tus puntos de vista subjetivos? No estás cambiando tu cuerpo físico por otro. Sin embargo, el cambio dimensional ha alterado tus genes y ha modificado algunos de tus rasgos físicos y cognitivos. Es como si muchos humanos fueran réplicas vacías de los que existían en dimensiones anteriores.

    El tercer saltador dimensional ya está con nosotros. ¿Cómo estás, Tony? Muchas gracias. Soy una persona consciente de la transición a otra dimensión. ¿Qué ha pasado? No pude encontrar la medicina que necesitaba. Mi esposa me dijo que llamara a la farmacia. Sin embargo, se habían agotado. Más tarde, fui al aeropuerto. Subí a un avión para ir a una reunión de negocios en el extranjero. Sentí como si me hubiera caído un rayo cuando estaba en el avión. La azafata me dijo: No te preocupes, todo irá bien. Me levanté temprano en casa. Entonces abrí el cajón de las medicinas en mi habitación y saqué las pastillas. No tengo esposa en esta dimensión. La busqué  por todas partes. Nadie la conoce. Es como si nunca hubiera existido. Desde entonces, siempre ha habido pruebas del efecto Mándela: falsos recuerdos de eventos familiares o citas de películas. ¿Las películas también son diferentes aquí? Sí, incluso la música. Otro cambio que he experimentado es que al día siguiente, en esta dimensión, ya no necesitaba estas pastillas.

    Una cuarta saltadora está encantada de compartir los detalles de su caso. ¡Adelante, Vanna! Hola! Estuve a punto de tener un accidente cuando un coche que venía hacia mí a gran velocidad y sin frenos amenazó con atropellarme. Cerré los ojos y no me pasó nada. Me salvé por poco. El otro vehículo se había salido de la carretera por una colina. Todo el mundo dijo que era genial. Una mujer me dijo: Hoy no te tocaba morir. Pensé que no

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